Quem me dera que eu fosse o burro do moleiro e que ele me batesse e me estimasse... Alberto Caeiro
Si no tomamos las medidas adecuadas, también al burro doméstico, le pasará lo mismo que a su antepasado asno salvaje, no nos acompañará más como especie sobre nuestro planeta, se extinguirá. Si antiguamente era corriente encontrarnos con un burrito de carga por el camino rural, ahora cada vez se hace más difícil darnos cara a cara con uno de estos amigos de las orejas largas. La modernización del campo y el abandono de nuestro mundo tradicional traen consigo la progresiva desaparición de este equino doméstico que tanto ayudó al hombre a facilitarle el trabajo sin pedirle casi nada, y por el contrario se ganó una tan injusta mala reputación, producto de la ignorancia y de los maltratos que sufrió por parte de sus abusivos propietarios. Preocupados por la situación actual del burro en Portugal y en el Mundo, decidimos ir a buscarlos y hablar un poco con algunos propietarios de burros que se puedan enorgullecer de eso.
En Vila Nova de Gaia, en Canidelo, nos informan que hay una burrita en un terreno donde crían y enseñan a montar caballos, un centro hípico más o menos espontáneo.
- Nosotros vinimos aquí de Amarante. Hace más de tres años que le prestaron a mi marido este terreno para que pudiese continuar criando caballos. El es loco por caballos.
Don Antonio está ocupado con algunos de sus alumnos de equitación. No nos puede atender. Su esposa nos guía hasta la burrita Matilde que está al otro lado del terreno junto a otros caballos que están pastando tranquilamente. Nos quedamos observándola a cierta distancia. Hay mucha neblina y la poca luz no nos ayuda a tomar fotos.
.- Matildeeee, pão, Matilde. Vá láaaa... Matildeeeeeee....vem Matilde!
La burrita ni se mueve.
.- Una vez se presentó un domador de circo y le dijo a mi marido que estaba interesado en comprar la burrita. żY para qué es que la quiere? le preguntó Antonio. Pues, para darle de comer a mis leones, le respondió el domador. Ah, no. Para eso no vendo a mi burrita. Y le dijo adiós.
La burrita es muy graciosa y no se mueve de donde está. Su pelaje es de color ceniza y no debe de medir ni un metro de altura. La señora la llama con cariño:
.- Matilde, Matilde, żno vienes?, żno quieres papar?
La burrita continúa echada sobre el pasto. La señora nos advierte:
.- Que no me vean ni me escuchen los caballos, porque sino vienen todos detrás de mí. Piensan que les voy a dar de comer.
.-Matilde es una burrita muy solicitada y la buscan para diferentes eventos sociales, principalmente para ir a los cortejos. A veces vienen de las escuelas y la arreglan como una burrita de carga, o como burrita del molinero, y yo tengo que ir con ella porque no le hace caso a cualquier persona. Tengo que ser yo a darle las órdenes, entonces obedece.
Entretanto la señora otra vez llama a su burrita para que venga y nos haga alguna gracia, pero Matilde simplemente inmutable sigue mirando el horizonte sin dar indicios de querer levantarse.
.-Ella ya trabajó en una quinta durante algunos años. La pusieron a abrir surcos. Después la devolvieron y la prestamos otra vez, pero se fue preñada. Ahora su hija, una mulita tan bonita, ya fue vendida y se la llevaron a Vila Real. Matilde aquí está ahora y muchos la buscan para dar un paseíto, porque es muy fácil de ser montada. Matildeee! Matildeee, venga! No, no quiere, hoy no quiere.
Nos despedimos felices de haber encontrado una burrita en muy buen estado.
.- Chau, Matilde. Hasta la próxima. Cúidate mucho.
O resmungão! Que barbas! Que sacolas! Cheirava a migas, a bafio, a arrotos; Dormía as noutes por telheiros rotos, E sustentava o burro a pão de esmolas. Cesário Verde
De la misma orden de los mamíferos perisodáctilos como los rinocerontes y los tapires, proviene la familia equina formada por los caballos, las cebras y los asnos o burros. Los perisodáctilos son ungulados y asientan en el suelo un número impar de dedos, y en el caso de los equinos un solo dedo. Los burros pastan y poseen como los demás equinos un sistema digestivo capaz de asimilar grandes cantidades de pienso con poco valor proteínico y además tienen una dentadura adaptada para triturar eficientemente los pastos duros, las malezas, arbustos y hasta cortezas, especialmente los burros.
El burro doméstico desciende del asno salvaje africano ya extinto (Equus asinus). Desde África del Norte fue introducido en la península ibérica y de allí pasó al resto de Europa.
Se supone que desde hace más de 6,000 años el burro fue domesticado, usándosele como bestia de carga.
El tamaño del burro varía según las razas y así puede tener desde 60 cm. hasta casi 2 m. de altura, midiéndosele desde los hombros. El burro siciliano es de los más pequeños y el burro de Poitou, de Francia, uno de los más altos.
El color del burro doméstico va del casi blanco hasta el casi negro. Sus características largas orejas y su cola con un penacho sólo al final lo diferencian de los caballos. Otras diferencias importantes con estos últimos son el periodo de gestación y el número de cromosomas. Las burras demoran de 365 a 370 días para dar a luz un burrito, las yeguas demoran entre 334 y 346 días. Los burros tienen 31 pares cromosomáticos, los caballos 32 pares y los onagros de 27 a 28 pares.
En varias partes del mundo se habla de burros salvajes, pero estos son burros domesticos que fueron abandonados o que se escaparon de sus amos y que se reprodujeron en libertad. Los asnos salvajes puros ya sea asiáticos o africanos si no se extinguieron ya, probablemente existan sólo en algunas zonas protegidas, como es el caso de los onagros readaptados en Israel.
Adeus ó Penafiel Ó feira de S. Martinho Pro ano se cá voltar Virei comprar um burrinho. De Aguçadoura - Monografia: J.A. Borges
Antiguamente el burro también era conocido por sus atributos medicinales y cosmetológicos. Se decía que Cleopatra se bañaba en leche de burra para cuidar su piel y que otros la bebían para curarse la tuberculosis. Con un polvo de huesos de burro hacían un caldo que servía como antídoto contra los envenenamientos. Se creía que el que había sido picado por un escorpión debería de mirar dentro de la oreja de un burro para curarse.
Según Teófilo Braga (1843-1924): "Nas crenças populares, o burro tem grandes poderes mágicos: para as pessoas que dormem muito serem mais espertas devem abraçar um burro recém-nascido (Lisboa) Para que o burrinho novo não seja enfeitiçado põe-se ao pescoço uma coleira encarnada com uma bolsinha cheia de alhos e arruda. Nas Ilhas dos Açores, dá-se a comer miolos de burro como um poderoso filtro para querer bem".
El burro ha adquirido también una simbología sexual en casi todas las culturas del mundo. Por el tamaño de su sexo se han creado muchas fantasías y se han vuelto míticas las historias de los burros en época de celo.
Después de haber preguntado a muchas personas por si conocen algún burro con paradero conocido y exacto, ya nos han respondido que hay en Barcelos, en Penafiel, en Entre-Rios, en Alentejo, en el Algarve, pero nosotros queremos información completa. Un amigo nos dice, que ya nos consiguió el dato.
En Labruge, en una playa al norte de Porto está "el burro del Socialista", como así lo conocen. Con muchas expectativas llegamos al café que está al lado de la casa del "Socialista". Aprovechamos en beber unas cervecitas antes del ansiado encuentro. El encargado del café nos avisa que el Sr. Luis ya está regresando con su burro. Con miedo a que el cielo oscurezca interrumpimos la tertulia y nos dirigimos directamente a la casa del Sr. Luis, el llamado Socialista. Nos encontramos con la sorpresa de que se trataba de un mulo y no de un burro.
.- Oye, Chico, levanta la patita.
Y Chico levantaba la pata delantera.
.- Vamos chico levanta la otra patita.
Y Chico levantaba la pata trasera.
.- Qué gracioso, Chico.
.- Pues, él me ayuda en el trabajo del campo y se porta muy bien. Lo compré por 60 contos hace varios años, un gitano quería que se lo vendiese por treinta y yo no quise. Chico vale mucho más. No es verdad, Chico? (Acaricia el lomo del mulito) Vamos, Chico, levanta la pata.
El mulo la levantaba obediente y recibía con mucho gusto el cariño que todos le hacíamos en la cabeza.
.-Ahora ya tiene que dormir, porque mañana comenzaremos muy temprano, así que ya lo voy a guardar.
.- Adiós, Chico.
Regresamos al café y le dijimos al amigo.
.- żY entonces?, żno nos dijiste que había un burro aquí?. Pues para que te enteres, se trata de un mulo.
Eran otros los tiempos en que se sabía diferenciar el burro de la mula. Del cruzamiento de burro con yegua sale la mula y del caballo con burra sale el bordégano. Dicen que las mulas son más trabajadoras y más resistentes, y que se adaptan más a cualquier tipo de geografía, incluyendo países tropicales. Pero son estériles y nunca podrían dar mulitas, aunque algunos afirman que ha habido excepciones.
Se escribe con b de burro Dictado popular
Los burros domésticos forman parte de la historia de la sociedad desde tiempos inmemoriables. Desde que los hombres prefirieron otro tipo de carnes para alimentarse, dejaron al burro como un animal de ayuda múltiple. Lo usaban como bestia de carga, como animal de tiro, para hacer girar las ruedas de los molinos, para el transporte de personas, para el simple paseo y hasta para las guerras.
En Australia, en la batalla de Gallipoli, durante la primera guerra mundial, un burrito llamado Murphy se hizo famoso y hasta recibió una condecoración póstuma por ayudar a evacuar soldados heridos. Del frente de batalla los llevaba a la enfermería de campaña e inmediatamente después emprendía el mismo camino de regreso evitando ser alcanzado por los cañones enemigos, y así logró recoger muchos heridos.
También es conocido el caso de las mulas empleadas para arrastrar carros de transporte y artillería ligera durante la primera guerra mundial. Los británicos las llamaban "amigos de la cara larga" porque decían que nada era igual a la terquedad de una mula. Pero la terquedad no era en vano. Las mulas de una columna inglesa que transitaba por la carretera durante el verano de 1918 se detuvieron de súbito y nadie fue capaz de hacerlas avanzar ni un solo centímetro. Mil metros al frente de la columna de transporte, una batería de campaña comenzaba a abrir fuego. Las mulas continuaron a andar ni bien el fuego hubo cesado. Ocurrió que la batería enemiga había tomado posiciones durante la noche, ocultándose tan bien, que los conductores de las mulas ni se habían percatado de su presencia. La "terquedad" de las mulas los salvó de morir.
A quien vive pobre por morir rico, llámale borrico. Dictado popular espa–ol
La cultura universal está llena de proverbios con referencia al burro o asno, lo que indica su importancia en la historia de la sociedad. Si no hacemos nada para evitar la extinción del burro doméstico como especie sólo nos quedaremos con su presencia en el arte, la literatura y en los refranes que en la mayoría de los casos guardan una injusta y falsa imagen de tan noble animal, aquí una muestra conseguida a través de la Internet:
Burro velho não aprende línguas. Burro velho não ganha andadura. Burro velho não tem mandadura e se tem pouco dura. Ele a dar-lhe e a burra a fugir Não alimentes burros a pão-de-ló O mel não é para a boca do asno Come mais uma lebre de um ano que um burro de vinte Foi o mal dos meus burrinhos que me fez alveitar Para trás mija a burra Um asno aguenta a carga mas não a sobrecarga Quem nasceu burro nunca chega a cavalo Se muita palha come o burro mais burro é quem lh'a dá Albarda-se o burro à vontade do dono Quando un burro fala o outro baixa as orelhas Quem tem burro e anda a pé mais burro é Quer queira quer não queira o burro há-de ir à feira Todo o burro come palha, a questão é saber dar-lha Um burro carregado de livros é um doutor Um olho no burro e outro no cigano Vozes de burro não chegam aos céus. Del refranero español sacamos: Burro que tan grande hambre siente a todo le mete diente A borrico desconocido, no le toques la oreja. Al asno, el palo, y a la mujer, el regalo. Aunque las sillas hayan cambiado, los asnos siguen siendo los mismos. A falta de caballos, troten los asnos. Bien sabe el asno en qué casa rebuzna. El que dé rosas de comer al burro, cobrará con un rebuzno. Ignorante y burro todo es uno. Quien a burros favorece, coces merece. Rebuzné una vez, y como burro quedé Si entre burros te ves, rebuzna alguna vez. Vivir sin pena ni gloria, como el burro de Vitoria. El trabajo mata al asno, pero no mata al amo. Ir en borrico, a todos nos gusta un poquito. Más vale callar que con borrico hablar. Para que no se espante, el borrico por delante.
Cal e cal ié Quem isto non adivinha Bem burro ié Adivinanza de Rio -de-Onor - Jorge Dias
Si bien nosotros empleamos las palabras burro, burrada, asnada cuando queremos insultarnos o insultar a alguien que no hace bien las cosas como por ejemplo:
.-Pero qué burro que fui?
.- Ahora qué burrada hiciste?
.- Eres un tremendo burro!
.- Burro, eres un burro, cómo se te ocurrió decir eso!
.- Eso te pasa por asno.
Lo hacemos del mismo modo que usamos las otras malas palabras que ya ni sabemos lo que significan, pero sabemos que tienen una carga negativa y ofensiva.
Hace poco en la escuela a los que no sabían la lección los castigaban colocándolos en un rincón del salón de clases con un letrero que decía burro o un sombrero con un par de orejas largas.
Nos dirigimos a Santa Eugénia, una aldea al Norte de Alijó, allí con seguridad vamos a encontrar un burro. Ya nos lo han confirmado por teléfono. Un amigo nos ha invitado a pasar un fin de semana a la quinta de su familia, em Sande, cerca de Lamego y aprovecharemos para visitar a un burro. Nos ha dicho que un casero nos va a llevar a conocer el burro de unos vecinos. Después de un buen paseo desde Oporto, recorriendo el paisaje característico de la región del Duero portugués, donde están sembradas las vides con que se hace el tradicional vino de Oporto, llegamos a Santa Eugenia. Una simpática señora nos guía hasta la casa de la familia propietaria del burro. La familia entera sale orgullosa a presentarnos su animal. Se llama Russa. Es una burrita, muy bonita y bien alimentada, diríamos que un poco gorda. Patricia, una extrovertida y amable chiquilla de 13 años, nos acompaña llevando la burra a un lugar más iluminado para poder tomarle fotos a la burrita que no deja de comer en ningún momento. La han comprado hace un año. La usan para trabajar en el campo y principalmente uno de los hijos, que salió con algún problema de retraso mental. Se llevan de maravillas, nos dice Patricia. Mi hermano nos ayuda a fumigar y en todo lo que puede.
-żY tú Patricia qué haces? żNo estudias?
-No yo ya dejé la Escuela hace unos años. Aquí hay mucho para trabajar. Además no podía continuar estudiando porque necesitaba de unos tratamientos de fisioterapia para poder recuperar totalmente los movimientos de mi pierna y brazo izquierdos. Estoy así porque a mi madre le pusieron mal una inyección antes de que yo naciera.
Patricia conduce muy bien a la burrita Russa, le tiene que jalar el pescuezo para que yo pueda tomarle una foto. Las retamas y hierbabuenas que abundan por todos lados se deshacen rápidamente entre los dientes de la burra. Patricia, que luce un T-shirt con la figura de Prince, nos dice que conoce el paradero de otro burro, pero burro mismo. Nos dirigimos donde otra vecina que desde la puerta de su casa nos señala la ubicación del burro. Está metido en un lavadero público que ya no utilizan. El burro no tiene nombre. Nosotros lo bautizamos y lo llamamos Prince. Se deja acariciar y tomar fotos. Lo han comprado hace pocos meses. También lo utilizan para arar la tierra. Patricia y su sobrinita Claudia, una chiquilla de siete a–os, nos acompañan de regreso al carro. Les prometemos enviarles unas fotos.
-También tengo un caballo, nos informa Patricia.
-No gracias, Patricia, ya te hicimos perder mucho tiempo.
-Ta«bien, nos responde ella.
-Adiós y gracias. Chau, Patricia.
En esta zona abunda la vegetación silvestre, Russa y Prince no pasaran hambre. Esperemos que los traten bien siempre.
En el Antiguo Testamento figura el número de burros como uno de los indicadores de riqueza de quien los poseía. Job murió dejando mil asnos entre su herencia. A Saúl, mientras buscaba unos burros que su padre había perdido, le llegó el momento de ser el elegido por Dios para convertirse en el primer rey de Israel.
José, María y Jesús llegaron con un burrito a Belén y en un burro Cristo entró en Jerusalem para ser burlado antes de su camino al calvario.
Petronio en alguna escena de su Satyricón (I Siglo a. C.) utiliza en un banquete un burro asado servido en una fuente para burlarse de los nuevos ricos.
Se encontraron monedas provenientes de Sicilia (461 d. C.) grabadas en un lado con la imagen del dios Dionisios sentado de espaldas sobre un burro.
Esopo divulga la presencia del burro en la cultura popular a través de sus fábulas como El león, la zorra y el asno o el león y el asno presuntuoso o Piel de asno en las que el burro representa al ignorante, al torpe, al poco inteligente, del que los demás se sirven para no cometer sus mismos errores. Plauto escribe Asinaria, la comedia de los asnos.
A Apuleyo (114 d.d.C.), un autor latino nacido en África, se le atribuye El asno de oro, texto que anticipa la novela moderna y que trata de la metamorfosis de un joven apasionado que recurre a la magia para conseguir alcanzar su objetivo amoroso, pero algo le sale mal y se convierte en un burro. Después de soportar tanto sufrimiento en su vida de borrico, la diosa Isis apiadándose de él le devuelve la imagen humana.
El Inca Garcilazo de la Vega en sus Comentarios Reales deja constancia del primer burro que viera en el Cuzco en 1557. Era de propiedad de sus padre que lo había comprado para poder tener mulas de sus yeguas. Las mulas eran muy habilidosas para andar por los difíciles caminos de la Cordillera de los Andes.
Sancho Panza viaja sobre su asno al lado de Don Quijote que va montado en su flaco caballo Rocinante.
La Fontaine tiene innumerables fábulas con referencia al burro, siendo una de las más famosas El viejo, el niño y el burro.
Goya en sus Caprichos del Nş37 al Nş42 se burla de los médicos y otros personajes de la época representándolos como burros.
Stevenson escribió Travel with a donkey (1879), producto de su travesía sobre un borrico cuando estaba convaleciente en Cévennes.
Juan Ramón Jiménez publica su inolvidable Platero y yo, la más tierna y agradecida historia que se haya podido escribir como homenaje a un asno.
Podríamos hacer innumerables citas de obras literarias, artísticas, musicales y de dibujos animados en las que el burro sea motivo, tema o personaje.
- Quando eu morrer batam em latas Rompam aos saltos e aos pinotes- Façam estalar no ar chicotes, Chamem palhaços e acrobatas. Que o meu caixão vá sobre um burro Ajaezado à andaluza: A um morto nada se recusa, E eu quero por força ir de burro... Mário de Sá-Carneiro
Hace más de una década comenzaron a crearse en Norteamérica y Europa instituciones locales e internacionales cuyos objetivos principales han sido el rescate, la rehabilitación y la preservación de los burros salvajes (descendientes de los burros domésticos que fueron abandonados o que se escaparon de sus amos). Estas asociaciones protectoras del burro se han manifestado contra la matanza oficial de burros salvajes en algunas partes de Estados Unidos. Están logrando cambiar mediante una serie de campañas, la política estatal de querer reducir a cero el número de asnos salvajes en por ejemplo, el Death Valley National Park. Las autoridades de este Parque Nacional ponen como argumento, para defender la matanza del burro salvaje a bala limpia, el hecho de que los burros estén atentando contra el hábitat de una especie protegida que está en peligro de extinción: las ovejas de cuerno grande. Parece que algunos americanos se olvidan de que el símbolo tradicional del partido demócrata es curiosamente el burro.
En Inglaterra existe un santuario de burros en el que más de 6000 ejemplares son cuidados. Y desde allí opera el International Donkey Protection Trust cuyos propósitos son el de mejorar la salud de los burros de trabajo de todo el mundo y estimular a sus propietarios a proporcionarles mejor cuidado.
En Irlanda, Francia, Suecia, Espa–a, Italia, Alemania, Canadá, Australia, y muchos otros países más surgen grupos protectores de burros y que publicitan sus objetivos a través de la Internet.
Innumerables burros en abandono son encontrados por todo el mundo y ha llegado la hora de rescatar a ese bondadoso animal que ve así pagado sus servicios con desprecio.
La comunidad europea se preocupa para crear una legislación más adecuada para la protección y defensa de los animales domésticos. En Irlanda hubo un caso en que un hombre abandonó a sus 20 asnos y estos fueron encontrados en estado de hueso y pellejo, famélicos, a tal punto de comerse sus propias heces, tal como lo relataba la persona que los descubriera. El propietario fue punido con dos meses de prisión y 500 libras de multa. En Portugal en la sierra de Sintra fue encontrado un burro abandonado, ahora no sabemos si continúa guardado en la perrera de Las Furnas, propiedad de la União Zóofila, uma institución protectora de animales, que se ve en apuros por poder conseguir alimentos para las centenas de perros que alberga y que está en espera de recibir la ayuda necesaria tanto de las autoridades oficiales como de las entidades particulares y público en general.
En el Reino Unido, el Slade Center del Elisabeth Svendsen Trust for Children and Donkeys ofrece lecciones para montar burros especialmente a niños con problemas para ayudarles a mejorar la calidad de vida. El contacto con los burritos es muy importante. Estos animales tienen una afinidad con los niños más severamente incapacitados.
Como lo resalta la Asociacion para la Defensa del borrico de Andalucía, hay que crear una conciencia sobre la importancia del burro y dignificar la figura del burro que injustamente ganó la leyenda de ser terco y poco amistoso. Ya lo decía Ramalho Ortigão:
" O burro doméstico é um animal atrofiado pela dureza e pela crueldade humana. Estudos de zoologistas demonstram que o burro selvagem é muito mais belo, mais corpulento e mais forte do que o burro doméstico. Como esse prestante quadrúpede era sóbrio e bom, nós abusámos dele, sobrecarregãmo-lo de trabalho, pusemo-lo em dieta permanente e enchemo-lo de pancadas. Com esse regime, o burro degenerou, cresceu-lhe o pêlo, estreitaram-se-lhe os ossos, alongou-se-lhe a orelha, fez-se melancólico e casmurro" "É preciso proteger o burro. A espécie asinina é susceptível de grandes progresos."
Um domador brasileiro se–alaba en "O Estado de São Paulo":
"O burro e a mula gostam de carinho e o amansador não pode usar chicote ou espora" " Se o burro é maltratado durante a doma, será nervoso, empacador e desobediente e jamais esquecerá quem o castigou" "Ele jamais esquece por onde passa, mesmo que ande 50 quilómetros" "não atravessa córrego ou rio se verificar que pode atolar"
Si los burros fueron utilizados hasta hace algunas décadas en el campo y fueron substituídos por máquinas y vehículos, esperemos que nunca lleguemos a explicar a nuestros hijos sólo a traves de imágenes gráficas y literatura lo que es un burro. Esperemos que el futuro de la humanidad por el resto de los siglos se encargue de pagar com un trato especial y generoso la gran deuda que tenemos con este tan servicial animal, "tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por dentro, como de piedra", como describía muy bien el premio Nóbel Juan Ramón Jiménez a su burrito Platero. V