Signos de dólar

EL DIEZMO NO ES UNA
DOCTRINA CRISTIANA

Ensayo por Russell Earl Kelly, Ph. D.

 

Actualizado el 4 de marzo de 2007


Introducción:

El siguiente ensayo es un resumen de mi libro "¿Debe la iglesia enseñar el diezmo? Conclusiones de un teólogo acerca de una doctrina tabú". El libro mismo es una versión muy ampliada de mi tesis de Ph. D. Insto a los instructores bíblicos a atreverse a abrir sus investigaciones a nivel de seminario y a estimular estudios sobre este tema en los niveles de maestría, doctorado, y Ph. D. Simplemente, esta doctrina es demasiado importante para ser pasada por alto.

En muchas iglesias actuales, la doctrina del diezmo ha alcanzado el nivel de escándalo moderno. Mientras que, por una parte, la mayoría de los libros de texto a nivel de seminario sobre teología sistemática y hermenéutica, escritos por teólogos bien preparados, omiten el diezmo, por la otra esta práctica se está convirtiendo rápidamente en un requisito para la aceptación en la membresía de la iglesia en las mismas denominaciones que insisten en doctrinas sólidamente basadas en la Biblia.

Hay también más y más evidencia de que los laicos que cuestionan la legitimidad del diezmo en el nuevo pacto por lo general son criticados e ignorados como cristianos problemáticos o débiles. Los líderes cristianos sinceros deben siempre estar abiertos y disponibles para discutir la palabra de Dios. No hacerlo indica debilidad e inseguridad. Se necesita más "audacia santa".

El diezmo moderno se basa en muchas suposiciones falsas

La declaración de una denominación sobre mayordomía es típica de lo que muchas otras enseñan sobre el diezmo. Dice que "el diezmo es el mínimo modelo bíblico y el punto de arranque, establecido por Dios, que no debe ser reemplazado por ningún otro modelo". Añade que el diezmo al que la iglesia tiene derecho se calcula según el ingreso bruto antes de impuestos.

Los siguientes puntos de este ensayo contrastan las falsas enseñanzas usadas para sustentar el diezmo con lo que la palabra de Dios dice realmente.

Punto#1: Los principios sobre dar en el Nuevo Testamento, en 2 Corintios 8 y 9, son superiores al diezmo.


La falsa enseñanza es que el diezmo es una expectativa obligatoria que siempre debe preceder el dar voluntariamente.

Las donaciones voluntarias existían antes del diezmo. Los siguientes principios sobre la voluntariedad del dar en el nuevo pacto se encuentran en 2 Corintios, capítulos 8 y 9:

(1) Dar es una "gracia". Estos capítulos usan la palabra griega para "gracia" ocho veces para referirse a la ayuda para los santos pobres.


(2) Darse uno mismo a Dios primero (8:5).


(3) Darse al conocimiento de la voluntad de Dios (8:5).


(4) Dar en respuesta al don de Cristo (8:9; 9:15).


(5) Dar por un sincero deseo de dar (8:8, 10, 12; 9:7).


(6) No dar a causa de ningún mandamiento (8:8, 10; 9:7).


(7) Dar más allá de nuestra capacidad (8:3,11, 12).


(8) Dar para producir igualdad. Esto significa que los que más tienen deberían dar más para compensar la incapacidad de los que no pueden dar tanto (8:12-14).


(9) Dar gozosamente (8:2).


(10) Dar porque se está creciendo espiritualmente (8:3, 4, 7).


(11) Dar porque se desea continuar creciendo espiritualmente (9:8, 10, 11).


(12) Dar porque se oye decir que el evangelio está siendo predicado (9:13).


Punto #2: En la palabra de Dios, ¡el diezmo siempre fue en forma de alimentos!


La falsa enseñanza es que los diezmos bíblicos incluyen TODAS las fuentes de ingreso.

Use la palabra de Dios para definir el "diezmo". ¡No use un diccionario secular! Abra una concordancia bíblica completa, y descubrirá que la definición usada por los defensores del diezmo es errónea. En la palabra de Dios, el "diezmo" no está solo. Aunque el dinero existía antes del diezmo, la fuente original del "diezmo" de Dios nunca fue dinero. Era el "diezmo de los alimentos". Esto es muy importante: Los verdaderos diezmos bíblicos consistieron siempre sólo de alimentos de las granjas y los rebaños sólo de los israelitas que vivían solamente dentro de la Tierra Santa de Dios, los linderos nacionales de Israel. Los aumentos se recogían de lo que Dios había hecho producir, no lo que era el resultado de las artes o la capacidad del hombre.

Hay 15 versículos en 11 capítulos y 8 libros, desde Levítico 27 hasta Lucas 22, que describen el contenido del diezmo. ¡Y el contenido nunca (repetimos) nunca incluía dinero, plata, ni ninguna cosa aparte de alimentos procedentes de dentro de Israel! Sin embargo, ¡la incorrecta definición de "diezmo" es el mayor error que se predica sobre el diezmo en la actualidad! (Véase Lev. 27:30, 32; Núm. 18:27, 28; Deut. 12:17; 14:22, 23; 26:12; 2 Crón. 31:5, 6; Neh. 10:37; 13:5; Mal. 3:10; Mat. 23:23; Luc. 11:42).

Punto 3: El dinero era un ítem esencial que no estaba sujeto al diezmo.


La falsa suposición es que el intercambio de alimentos
generalmente reemplazaba el dinero.

Un argumento para sustentar el diezmo en forma diferente que la de alimentos es que el dinero no estaba disponible universalmente, y que el intercambio de alimentos dsebe haber sido usado en la mayoría de las transacciones. Este argumento no es bíblico. Génesis solo contiene el "dinero" en 32 textos y la palabra ocurre 44 veces antes de que se mencione el diezmo por primera vez en Levítico 27. La palabra shekel también aparece a menudo desde Génesis hasta Deuteronomio.

En realidad, muchos siglos antes de que Israel entrara en Canaán y comenzara a diezmar en alimentos de la Tierra Santa de Dios, el dinero ya era un artículo esencial de uso diario. Por ejemplo, dinero en forma de siclos de plata pagaba por la compra de esclavos (Gén. 17:12+); tierra (Gén. 23:9+); libertad (Éx. 23:11); multas en los tribunales (todo Éx. 21; todo el cap. 22); multas en el santuario (Éx. 30:12+); votos (Lev. 27:3-7); impuestos por censos (Núm. 3:47+); bebidas alcohólicas (Deut. 14:26) y dotes matrimoniales (Deut. 22:29).

Según Génesis 47:15-17, el alimento se usaba para intercambio sólo después de que el dinero se había gastado. Leyes bancarias y de usura existen en la palabra de Dios, en Levítico, aun antes del diezmo. Por consiguiente, el argumento de que el dinero no prevalecía lo suficiente para el uso diario es falso. Pero el contenido del diezmo jamás incluye dinero de productos que no son alimentos y el resultado del comercio.

Punto #4: El diezmo de Abraham a Melquisedec reflejaba la tradición pagana.

La falsa enseñanza es que Abraham dio diezmos libremente porque era la voluntad de Dios.

Por las siguientes razones, Génesis 14:20 no puede ser usado como ejemplo para que los cristianos diezmen:

(1) La Biblia no dice que Abraham dio este diezmo "libremente".

(2) La donación de Abraham NO era un diezmo santo de la tierra santa de Dios recogido por el pueblo santo de Dios bajo el santo pacto antiguo de Dios.

(3) El diezmo de Abraham fue sólo de los despojos de guerra paganos y era requerido por muchas naciones.

(4) En Números 31, Dios sólo requería el 1% del botín de guerra.

(5) El diezmo de Abraham a Melquisedec fue un incidente que se registró una sola vez.
(6) El diezmo de Abraham no fue de su propia propiedad personal.

(7) Abraham no retuvo nada; devolvió todo.

(8) El diezmo de Abraham no se cita en ninguna parte de la Biblia para sustentar el diezmo para Israel ni para la iglesia.

(9) Génesis 14:21 es el texto clave. Puesto que la mayoría de los comentarios explica el versículo 21 como ejemplo de tradición árabe pagana, es contradictorio explicar el 90% del versículo 21 como pagano al mismo tiempo que se insiste que el 10% del versículo 20 era la voluntad de Dios.

(10) Si Abraham es ejemplo para que los cristianos den el 10% a Dios, ¡entonces también debe ser ejemplo para que los cristianos den el otro 90% a Satanás o al rey de Sodoma!

(11) Como sacerdotes ellos también, ni Abraham ni Jacob tenían que sostener un sacerdocio levítico; probablemente dejaban alimentos para los pobres en sus altares.

Punto #5: El diezmo no era el mínimo requerido de todos los israelitas del pacto antiguo.

La falsa enseñanza es que las donaciones de todo el mundo tienen que
comenzar en el nivel del diez por ciento.


Sólo a los israelitas que se ganaban la vida con la agricultura y la crianza de ganado dentro de Israel se les exigía diezmar bajo la ley mosaica. Sus aumentos procedían de la mano de Dios. A aquéllos cuyas ganancias procedían de sus propios oficios y habilidades no se les exigía que diezmaran productos y dinero. Los pobres y los necesitados, que no diezmaban y recibían beneficios del diezmo, daban ofrendas voluntarias.

Punto #6: Los primeros diezmos eran recibidos por los sirvientes de los sacerdotes.


La falsa enseñanza es que los sacerdotes del Antiguo Testamento
recibían la totalidad del primer diezmo.

La "totalidad" del diezmo, el primer diezmo, no era recibido por los sacerdotes en absoluto. Según números 18:21-24 y Nehemías 10:37b, este diezmoera recibido por los sirvientes de los sacerdotes, los levitas. Y de acuerdo con Números 18:25-28 y Nehemías 10:38, los levitas daban el mejor "diezmo del diezmo" (1%), que recibían para los sacerdotes que ministraban los sacrificios por el pecado y servían dentro de los lugares santos. Los sacerdotes no diezmaban.

También es importante saber que, a cambio de recibir estos diezmos, tanto los levitas como los sacerdotes renunciaban a todo derecho a la herencia permanente de tierras dentro de Israel (Núm. 18:20-26; Deut. 12:12; 14:27, 29; 18:1, 2; Josué 13:14, 33; 13:3; 18:7; Eze. 44:28). Aun si los diezmos pertenecieran al nuevo pacto, primero serían recibidos por los diáconos (levitas) para ayudar a los predicadores y mantener los edificios.

Punto #7: "Es santo al Señor" no hace que el diezmo sea un principio moral eterno.

La falsa enseñanza es que Levítico 27:30-33 prueba que el diezmo es un
"principio moral eterno" porque es "santo al Señor".


Las frases "es SANTO al Señor" y "es MUY SANTO al Señor" son muy comunes en Levítico. Sin embargo, casi todos los otros usos de estas mismas dos frases en Levítico han sido descartadas hace mucho tiempo por los cristianos. Estas frases se usan para describir todas las fiestas, las ofrendas por los sacrificios, los alimentos limpios, los sacerdotes del pacto antiguo y el santuario del pacto antiguo. Léanse especialmente los versículos 28 y 29 en el mismo capítulo.

Aunque el "diezmo del diezmo" (1%), que era entregado a los sacerdotes, era lo "mejor" de lo que recibían los levitas, el diezmo que recibían los levitas era sólo "un décimo" y no "lo mejor" (Lev. 27:32, 33).

Punto #8: Las primicias no son lo mismo que los diezmos.

La falsa suposición es que los diezmos son las primicias.


La primicia era una cantidad muy pequeña de la primera cosecha y el primogénito era el primer nacido de los animales. La primicia era lo bastante pequeña para que cupiese en una canasta de mano. (Deut. 26:1-4, 10; Lev. 23:17, Núm. 18:13-17; 2 Crón. 31:5a).
Las primicias y los primogénitos iban directamente para el templo y se requería que fuesen consumidos totalmente por los sacerdotes que ministraban sólo dentro del templo (Neh. 10:35-37a; Éx. 23:19; 34.26; Deut. 18:4).

Las totalidad del diezmo levítico iba primero para las ciudades levitas, y ciertas porciones iban para el templo, para alimentar tanto a los levitas como a los sacerdotes que ministraban allí por turnos rotativos (Neh. 10:37b-39;12:27-29; 44-47; Núm. 18:21-28; 2 Crón. 31:5b). Aunque los levitas comían del diezmo, los sacerdotes también comían de las primicias, los primogénitos y otras ofrendas.

Punto #9: Hay cuatro diferentes diezmos descritos en la Biblia.


La falsa enseñanza pasa por alto todos los otros diezmos y se centra en
una errónea interpretación del primer diezmo religioso.

El primer diezmo religioso, llamado el "diezmo levítico", tenía dos partes. Repetimos, la totalidad del primer diezmo se les daba a los levitas, que sólo eran los siervos de los sacerdotes (Núm. 18:21-24; Neh. 10.37). A su vez, los levitas daban un décimo de la totalidad del diezmo a los sacerdotes (Núm. 18:25-28; Neh. 10:38). Según Deuteronomio 12 y 14, el segundo diezmo religioso, llamado el "diezmo de la fiesta", era comido por los adoradores en en las calles de Jerusalén durante las tres festividades anuales (Deut. 12:1-19; 14:22-26). Y, según Deuteronomio 14 y 26, un tercer diezmo, llamado el "diezmo de los pobres", era guardado en los hogares cada tercer año para alimentar a los pobres (Deut. 14:28, 29; 26:12, 13). Además, según 1 Samuel 8:14-17, el rey recogía el primer y mejor diez por ciento para fines políticos. Durante el tiempo de Jesús, Roma recogía el primer diez por ciento (10%) de la mayor parte de los alimentos y el 20% de las cosechas de frutales como despojos de guerra. Uno se pregunta qué están tratando de ocultar las "iglesias" cuando se centran en el único diezmo religioso que sirve a sus propósitos y pasan por alto los otros dos importantes diezmos religiosos.

Punto #10: Jesús, Pedro, Pablo y los pobres no diezmaban.

La falsa enseñanza es que, en el Antiguo Testamento, se le exigía a todo el mundo
que comenzara a dar para Dios dando el diez por ciento.

¡A los pobres no se les exigía diezmar en absoluto! Además, el diezmo no procedía de los resultados de las artes, las manos y las habilidades humanas. Sólo los agricultores y criadores de ganado recogían como ganancia sujeta a diezmos lo que Dios hacía producir. Jesús era carpintero; Pablo era fabricante de tiendas y Pedro era pescador. Los que tenían todas estas ocupaciones no calificaban como diezmadores porque no se ganaban la vida ni como agricultores ni como criadores de animales. Por consiguiente, es incorrecto enseñar que todo el mundo pagaba un mínimo requerido de diezmo y que, por tanto, a los cristianos del nuevo pacto se les debe obligar a comenzar a diezmar por lo menos en el mismo nivel mínimo que los israelitas del pacto antiguo. Esta falsa suposición común se repite a menudo y pasa por alto completamente la muy clara definición de diezmo como alimento recogido del producto de la tierra o del aumento de los rebaños.

Es también erróneo enseñar que los pobres de Israel tenían que pagar diezmos. En realidad, ¡de hecho recibían diezmos! ¡Gran parte del diezmo de las fiestas y la totalidad del diezmo especial del tercer año iba para los pobres!  Muchas leyes protegían a los pobres contra el abuso y los costosos sacrificios que ellos no podían costear (véase Lev. 14:21; 25:6, 25-28, 35, 36; 27:8; Deut. 12:1-19, 14:23, 28, 29; 15:7, 8, 11, 24:12, 14, 15, 19, 20; 26:11-13; Mal. 3:5; Mat. 12:1, 2; Mar. 2:23, 24; Luc. 2:22-24; 6:1, 2; 2 Cor. 8:12-14; 1 Tim. 5:8; Sant. 1:27).

Punto #11: Los diezmos se usaban a menudo como impuestos políticos.

La falsa enseñanza es que los diezmos nunca son
comparables con los impuestos.


En la economía hebrea, el diezmo se usaba de manera totalmente diferente a lo que se predica hoy día. Repetimos, los levitas que recibían la totalidad del diezmo no eran ni siquiera ministros ni sacerdotes -- ¡eran sólo siervos de los sacerdotes! Números capítulo 3 describe a los levitas como carpinteros, obreros metalúrgicos, artesanos del cuero y artistas que le daban mantenimiento al pequeño santuario. Y, de acuerdo con 1 Crónicas, capítulos 23-26, durante el reinado del rey David y del rey Salomón, los levitas eran todavía hábiles artesanos que inspeccionaban y aprobaban toda la obra del templo: 24,000 trabajaban en el templo como constructores y supervisores, 6,000 eran oficiales y jueces; 4,000 eran guardias y 4,000 eran músicos. Como representantes del rey, los levitas usaban su ingreso de los diezmos para servir como oficiales, jueces, colectores de impuestos, tesoreros, guardias del templo, músicos, panaderos, cantores y soldados profesionales (1 Crón. 12:23, 26; 23:2-5, 26:29-32; 27:5). Es obvio por qué estos ejemplos del uso de ingresos en forma de diezmo bíblico nunca son usados como ejemplos en la iglesia en la actualidad.

Es también importante saber que los diezmos del pacto antiguo nunca se usaron para evangelismo de los que no eran israelitas. ¡El diezmo fracasó! Véase Hebreos 7:12-19. Los diezmos nunca estimularon a los levitas ni a los sacerdotes del pacto antiguo a establecer una sola misión evangelizadora ni animaron a un solo gentil a convertirse en israelita (Éx. 23:32; 34:12, 15; Deut. 7:2). El diezmo del pacto antiguo estaba motivado y ordenado por la ley, no por el amor. En realidad, durante la mayor parte de la historia de Israel, los profetas fueron los principales voceros de Dios - no los levitas y sacerdotes que recib&ían los diezmos.

Punto #12: Por lo general, los diezmos levíticos eran llevados a las ciudades levitas.

Los falsos maestros quieren que creamos que, así como todos los diezmos eran llevadosal templo anteriormente, ahora deben ser llevados al "alfolí" en el edificio de la iglesia.

¡El diezmo "entero" NUNCA entraba al templo! En realidad, ¡la abrumadora mayoría de los diezmos levíticos jamás entraba al templo! Los que enseñan lo contrario pasan por alto las ciudades levitas y los 24 turnos de levitas y scerdotes. Según Números 35, Josué 20, 21 y 1 Crónicas 6, los levitas y los sacerdotes vivían en tierras prestadas, como Jericó y Hebrón, alrededor de las ciudades levitas, donde cultivaban la tierra y criaban los animales (diezmados). Y queda claro, por 2 Crónicas 31:15-19 y Nehemías 10:37, que se esperaba que el pueblo ordinario llevara sus diezmos a las ciudades levitas. ¿Por qué? Porque allí era donde el 98% de los levitas y sacerdotes vivía con sus familias la mayor parte del tiempo. Véase también Josué 20, 21; Núm. 35; 1 Crón. 6:48-80; 2 Crón. 22:13-14; Neh. 12:27-29, 13:10 y Mal.1:14 para las ciudades levitas.

Punto #13: Malaquías 3 es el texto bíblico sobre diezmos
más abusado.

La falsa enseñanza sobre los diezmos en Malaquías ignora cinco hechos importantes en la Biblia.

(1) Malaquías es contexto del pacto antiguo, y nunca es citado en el nuevo pacto para validar el diezmo (Lev. 27:34; Neh. 10:28, 29; Mal. 3:7; 4:4).

(2) En 1:6; 2:1 y 3:1-5, Malaquías se dirige muy claramente a los sacerdotes deshonestos que son maldecidos porque habían robado a Dios las mejores ofrendas.


(3) Las ciudades levitas deben ser consideradas, y Jerusalén no era una ciudad levita (Josué 20, 21). No tiene ningún sentido enseñar que el 100% del diezmo se llevaba al templo cuando la mayor parte de los levitas y sacerdotes no vivían en Jerusalén.


(4) En Malaquías 3:10-11, los diezmos todavía consisten sólo de alimentos (Lev. 27:30-33).


(5) Los 24 turnos de levitas y sacerdotes también deben ser tenidos en cuenta. Comenzando con el rey David y el rey Salomón, estaban divididos en 24 familias. Estas divisiones también puestas en su lugar en tiempos de Malaquías por Esdras y Nehemías. Puesto que, normalmente, sólo una familia servía en el templo durante sólo una semana cada vez, no había absolutamente ninguna razón para enviar TODO el diezmo al templo cuando el 98% de aquellos a los cuales el diezmo iba a alimentar estaban todavía en las ciudades levitas. (Para los turnos, véase 1 Crón. 23-26; 28:13, 21; 2 Crón. 8:14; 23:8; 31:2, 15-19; 35:4, 5, 10; Esdras 6:18, neh. 11:19, 30; 12:24; 13:9, 10; Luc. 1:5).

 
Por consiguiente, cuando el contexto de las ciudades levitas, las 24 familias de sacerdotes, niños menores de edad, esposas, Números 18:20-28, 2 Crón. 31:15-19, Nehemías 10-13, y todo Malaquías son evaluados, sólo como el 2% del total del primer diezmo se requería normalmente en el templo de Jerusalén.

Tanto la bendición como la maldición de Malaquías 3:9-11 duraron para los israelitas sólo hasta que terminó el pacto antiguo en la cruz. El auditorio de Malaquías había reafirmado voluntariamente el pacto antiguo (Neh. 10:28-29). "Maldito el que no confirmare las palabras de esta ley para hacerlas. Y dirá todo el pueblo: Amén" (Deut. 27:26, citado en Gál. 3:10). Y Jesus puso fin a la maldición: "Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero" (Gál. 3:13).

En la actualidad, la clase que devenga los ingresos más bajos paga la mayor parte de la caridad. Pero la mayoría continúa en la pobreza. Ni la lotería ni el diezmo son una respuesta mágica para hacerse rico rápidamente. No pueden reemplazar la educación, la decisión y el trabajo duro. Si Malaquías 3:10 realmente funcionara para los cristianos del nuevo pacto, entonces millones de cristianos diezmadores habrían escapado a la pobreza y se habrían convertido en el grupo de personas más rico en el mundo, en vez de seguir siendo el grupo más pobre. No hay ninguna evidencia de que la vasta mayoría de "diezmadores" pobres son jamás bendecidos financieramente sólo porque diezman. Las bendiciones del pacto antiguo no son las bendiciones del nuevo pacto (Heb. 7:18, 19; 8:6-8, 13).

Punto #14: El Nuevo Testamento no enseña el diezmo.


La falsa enseñanza es que Jesús enseñó el diezmo en Mateo 23:23 que, dicen, aparece claramente en el Nuevo Testamento.

El nuevo pacto no comenzó con el nacimiento de Jesús, sino con su muerte (gál. 3:19, 24, 25; 4:4, 5). ¡El diezmo no se enseña en la iglesia después de la cruz! Cuando Jesús discutió el diezmo en Mateo 23:23, "vosotros" se refería a la obediencia de los judíos a la ley del pacto antiguo, que él patrocinó y sostuvo hasta la cruz (nota "de la ley" en Mateo 23:23). En Mateo 23:2 y 3 (el contexto de de 23:23) Jesús les dice a sus seguidores judíos que obedezcan a los escribas y fariseos "porque ellos se sientan en la silla de Moisés". Pero no mandó a los gentiles a los cuales había sanado que se presentaran a los sacerdotes y obedecieran la ley de Moisés (compárese con Mat. 5:23, 24 y 8:4). Y las iglesias no recogen diezmos de las plantas de jardín, como Jesús mandó.

¡No hay ni un solo texto bíblico en el Nuevo Testamento que enseñe el diezmo después de la cruz - punto! Hechos 2:42-47 y 4:32-35 no son ejemplos de diezmar para sostener a los líderes de la iglesia. Según 2:46, los cristianos judíos continuaron adorando en el templo. Y de acuerdo con 2:44 y 4:33, 34, los líderes de la iglesia compartían lo que recibían a partes iguales con todos los miembros de la iglesia. (Esto no se hace hoy día). Finalmente, Hechos 21:20-25 prueba que los cristianos judíos todavía observaban celosamente toda la ley mosaica 30 años más tarde - y esa observancia tiene que incluir el diezmo - porque de lo contrario no se les habría permitido entrar al templo para adorar. Por consiguiente, cualesquiera diezmos recogidos por los primeros cristianos judíos eran entregados al sistema del templo, no para sostener la iglesia.

Punto #15: Los limitados sacerdotes del pacto antiguo fueron reemplazados por todos los creyentes-sacerdotes.


La falsa enseñanza es que los ancianos y pastores del nuevo pacto simplemente
continuaron en el punto en que los sacerdotes del pacto antiguo se detuvieron, y que, por consiguiente, tienen derecho al diezmo.

Compárese a Éxodo 19:5, 6 con 1 Pedro 2:9, 10. Antes del incidente del becerro de oro, era el propósito de Dios que cada israelita se convirtiese en sacerdote. El diezmo jamás se habría puesto en vigor. Los sacerdotes no diezmaban, pero recibían un décimo del primer diezmo (Núm. 18:26-28; Neh. 10:37-38).

La función y el propósito de los sacerdotes del pacto antiguo fueron reemplazados, no por los ancianos y pastores, sino por el sacerdocio de cada creyente. Como otras ordenanzas de la ley, el diezmo era sólo una sombra temporal hasta Cristo (Efe. 2:14-16; Col. 2:13-17; Heb.10:1). En el nuevo pacto, cada creyente es un sacerdote para Dios (1 Ped. 2:9, 10; Apoc. 1:6; 5:10). Y, como sacerdote, cada creyente ofrece sacrificios a Dios (Heb. 4:16; 10:19-22; 13:15, 16). Por consiguiente, cada una de las ordenanzas que anteriormente se habían aplicado al antiguo sacerdocio fue borrada en la cruz. Puesto que Jesús no era de la tribu de Leví, aun él fue descalificado. Por esto, el propósito temporal original del diezmo ya no existe (Heb. 7:12-19; Gál. 3:19, 24, 25; 2 Cor. 3:10-18).

Punto #16: La iglesia del nuevo pacto no es ni un edificio ni un almacén.

La falsa enseñanza es que los edificios cristianos llamados "iglesias", "tabernáculos",
o "templos" reemplazaron el templo del AT como morada de Dios.

¡La palabra de Dios nunca describe las iglesias del nuevo pacto como "tabernáculos", "templos" o "edificios" en los cuales mora Dios! La iglesia de Dios, la morada de Dios, está dentro de los creyentes. Los creyentes no "van a la iglesia" - los creyentes "se reúnen para adorar a Dios". Además, puesto que los sacerdotes del AT no diezmaban, es lógico que los diezmos ya no continúen. Por consiguiente, es erróneo llamar a un edificio "el almacén de Dios" para depositar los diezmos. (1 Cor. 3:16, 17; 6:19,20; Efe. 1:22, 23; 2:21; 4:12-16: Apoc. 3:12). Para "almacén", compárese a 1 Corintios 16:2 con 2 Corintios 12:14 y Hechos 20:17, 32-35). Durante varios siglos después del Calvario, los cristianos ni siquiera tuvieron sus propios edificios (para llamarlos almacenes) porque el cristianismo era una religión ilegal.

Punto #17: La iglesia crece al usar mejores principios del nuevo pacto.

La falsa enseñanza dice implícitamente que los principios de dar de gracia
no son tan buenos como los principios de dar del pacto antiguo.

Bajo el nuevo pacto:

(1) Según Gálatas 5:16-23, no hay ninguna ley física que controle los frutos del Espíritu Santo.


(2) 2 Corintios 3:10 dice que el pacto antiguo no tiene "ninguna gloria" cuando se lo compara con la gloria "más excelente" y la libertad del Espíritu Santo.


(3) Hebreos 7 es la única mención del diezmo después del Calvario, y explica por qué el sacerdocio levítico debe ser reemplazado por el sacerdocio de Cristo porque el primero era débil e inútil. Estudie Hebreos 7 y siga el progreso desde el versículo 5 hasta el versículo 12 y después hasta el 19.


(4) La manera en que el diezmo se enseña hoy día refleja el fracaso de la iglesia al no creer ni actuar según los principios mucho mejores de amor, gracia y fe. Los principios de dar por obligación no pueden hacer, no han hecho, ni harán prosperar la iglesia más que los principios guiados por el amor a Cristo y a las almas perdidas (2 Cor. 8:7, 8).


Punto #18: El apóstol Pablo prefería que los líderes de la iglesia se sostuvieran a sí mismos.

La falsa enseñanza es que Pablo enseñaba y practicaba el diezmo.


Como rabino judío, Pablo se contaba entre los que insistían en tabajar para sostenerse a sí mismo (Hechos 18:3; 1 Tes. 2:9, 10; 2 Tes. 3:8-14). Aunque Pablo no condena a los que pueden recibir sostenimiento a tiempo completo, tampoco enseña que el sostenimiento a tiempo completo es la voluntad de Dios obligatoria para hacer avanzar el evangelio (1 Cor. 9:12). En realidad, dos veces, en Hechos 20:29-35 y también en 2 Corintios 12:14, Pablo de hecho instó a los ancianos de iglesia a trabajar para sostener a los creyentes necesitados dentro de la iglesia.

Para Pablo, "vivir del evangelio" significaba "vivir según los principios evangélicos de fe, amor y gracia" (1 Cor. 9:14). Aunque Pablo reconocía que tenía "derecho" a algún sostenimiento, llegó a la conclusión de que su "libertad" para predicar sin estorbos era más importante para cumplir su llamado de parte de Dios (1 Cor. 9:12, 15; 2 Cor. 11:7-13; 12:13, 14; 1 Tes. 2:5, 6). Mientras trabajaba como fabricante de tiendas, Pablo aceptaba sostenimiento limitado pero se ufanaba de que su paga, o salario, era el que pudiera predicar el evangelio sin cobrar, sin ser una carga para los demás (1 Cor. 9:16-19).

Punto #19: El diezmo no se convirtió en ley en la iglesia sino hasta el 777 D. C.

La falsa enseñanza es que la iglesia histórica siempre ha enseñado el diezmo.


Las primeras asambleas cristianas se modelaron según el patrón de las sinagogas judías, que eran dirigidas por rabinos que, como Pablo, rehusaban aprovecharse de predicar y enseñar la palabra de Dios. Hay muchos libros sobre la vida social judía que explican esto con gran detalle.

Desde la muerte de Cristo hasta que el cristianismo se convirtió en una religión legalmente reconocida casi 300 años más tarde, la mayoría de los grandes líderes de la iglesia hicieron volutariamente votos de pobreza. ¡Esto está documentado históricamente! Tomaron al pie de la letra las palabras de Jesús al joven rico en Lucas 18:22: "Vende todo lo que tienes y dalo a los pobres, y sígueme". La mayoría de los historiadores de la iglesia concuerdan en que, por lo menos durante los primeros 200 años, estos líderes de la iglesia primitiva trabajaban para ganarse la vida y se sostenían a sí mismos. Un líder cristiano no podía decirle a un censor romano que era predicador a tiempo completo de una religión "proscrita".

Clemente de Roma (c. 95), Justino Mártir (c. 150), Ireneo (c. 150-200) y Tertuliano (c. 150-220), todos ellos se oponían al diezmo pues lo consideraban una tradición estrictamente judía. El Didache (c. 150-200) condena a los apóstoles viajeros que permanecen más de tres días en un lugar y piden dinero. Ya  los viajeros que decidían permanecer con ellos se les requería que aprendieran un oficio. Estos primitivos opositores del diezmo no son citados por los que enseñan el diezmo.

Cipriano (200-258) trató sin éxito de imponer el diezmo en Cartago, Norte de África, alrededor del 250 D. C. Sin embargo, cuando Cipriano se convirtió, regaló gran riqueza personal a los pobres y vivió bajo un voto de pobreza. Su idea del diezmo incluía una redistribución a los pobres por partes iguales. Y - debemos recordar - sus ideas sobre el diezmo no se adoptaron.

Cuando los que enseñan el diezmo citan a Ambrosio, Crisóstomo y Agustín, como los llamados "padres de la iglesia", dejan fuera convenientemente los primeros 200 años de historia de la iglesia. Aun después de que el cristianismo fue legalizado en el siglo cuarto, muchos de los más grandes líderes espirituales hicieron votos de completa pobreza y prefirieron vivir solteros en monasterios. Si estos maestros del diezmo son citados, entonces se le debe decir a la iglesia qué clase de vida llevaban estos líderes.

Aunque discrepan con sus propios teólogos, la mayoría de los historiadores escribe que el diezmo no se convirtió en una doctrina aceptada en la iglesia durante más de 700 años después de la cruz. De acuerdo con los mejores historiadores y las mejores enciclopedias, se necesitaron más de 500 años antes de que el Concilio de Macon de la iglesia local en Francia, en el año 585, tratara sin éxito de imponer el diezmo a sus miembros. No fue sino hasta el año 777 cuando Carlomagno permitió legalmente que la iglesia recogiera diezmos.  Esta, mi estimado amigo, es la historia que se encuentra en la Encyclopedia Britannica, la Encyclopedia Americana y la Roman Catholic Encyclopedia para que todo el mundo pueda leerla. Estos hechos históricos deberían probar algo para alguien.

CONCLUSIÓN:

En la palabra de Dios, el "diezmo" no aparece solo. Es el "diezmo de ALIMENTOS". El diezmo bíblico fue definido muy precisamente y limitado por Dios mismo. Los verdaderos diezmos bíblicos siempre fueron:

(1) sólo en alimento;


(2) sólo de las granjas y los rebaños;


(3) sólo de los israelitas;


(4) sólo de los que vivían dentro de la Tierra Santa de Dios, el lindero nacional de Israel;


(5) sólo bajo los términos del pacto antiguo y


(6) los aumentos sólo podían recogerse de lo que Dios había producido.


Por consiguiente:

(1) los artículos que no eran alimento no podían ser diezmados;


(2) los animales silvestres limpios y los peces no podían ser diezmados;


(3) los que no eran israelitas no podían diezmar;


(4) los alimentos de fuera de la tierra santa de Dios en Israel no podían ser diezmados;


(5) los diezmos legítimos no procedían cuando no había ningún sacerdocio levítico; y


(6) los diezmos no procedían de lo que las manos del hombre creaban, producían, o atrapaban mediante la caza y la pesca.


Invito a los líderes de las iglesias a una discusión abierta sobre este tema. Un estudio de la palabra de Dios cuidadoso y con oración
es esencial para el crecimiento de la iglesia. Que Dios les bendiga en ese estudio. Para leer la versión completa del libro, haga click aquí.