La primera y más
importante regla de hermenéutica es tener en cuenta el contexto.
Pocos son conscientes del abuso, horroroso y a gran escala, de este principio de interpretación,
cometido por los fundadores del adventismo. Los métodos de
estudio bíblico y las conclusiones de William Miller recibieron
el respaldo cálido y abarcante de Ellen G. White (1). Acerca del
diagrama de Miller, que enumeraba sus quince "pruebas" de la segunda
venida, dijo ella: "He visto que el diagrama de 1843 estaba dirigido
por la mano del Señor, y que no debe ser alterado; que las
cifras eran como Él las quería" (2, 3).
Cualquiera de las quince pruebas de Miller podría usarse para
ilustrar la violación de este primer principio de
hermenéutica. Parece que Miller ignoró el contexto por
completo. He aquí su prueba número diez (4).
Diez: Esto [la segunda venida de Cristo
en 1843] puede ser probado también por medio de las palabras de
Cristo en Lucas 13:32: Y les dijo: Vayan y díganle a ese zorro:
"Mira, hoy y mañana seguiré expulsando demonios y sanando
a la gente, y al tercer día terminaré lo que debo hacer".
Estos dos días, en los que Cristo echa fuera demonios y sana
gente, son los mismos que los dos días de Oseas, al fin de los
cuales el diablo será encadenado y echado fuera de la tierra y
al abismo y encerrado. Esto requerirá 2000 años del poder
romano. Apoc. 12:9: "Así fue expulsado el gran dragón,
aquella serpiente antigua que se llama Diablo y Satanás, y que
engaña al mundo entero. Junto con sus ángeles, fue
arrojado a la tierra". Y entonces el pueblo de Dios será
perfeccionado. Apoc. 20:9: "Bienaventurado el que tiene parte en la
primera resurrección, sobre los cuales no tiene poder la segunda
muerte, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y
reinarán con él mil años".
Este período de tiempo
comenzó con el "gran dragón". Apoc. 12:3: "Y
apareció en el cielo otra señal:
un gran dragón de color rojo encendido que tenía siete
cabezas y diez cuernos, y una diadema en cada cabeza. Con la cola
arrastró la tercera parte de las estrellas dle cielo y las
arrojó sobre la tierra. Cuando la mujer estaba a punto de dar a
luz, el dragón se plantó delante de ella para devorar al
hijo tan pronto como naciera".
Este gobierno arrastrará tras
sí la tercera parte del tiempo que los hombres malvados tienen
poder en la tierra, es decir, 6000 años, y el año
número 7000, el año en que Cristo tomará
posesión y reinará con sus santos en perfecta
bienaventuranza.
Este poder en figura de
dragón inició su poder sobre los santos cuando la
liga se hizo con él, en el año 158 a. C., y
terminará en 1842. Entonces el tercer día
comenzará en 1843 (5).
¡Si la cabeza le está dando vueltas tratando de seguir la
lógica de Miller, debería! Nótese que cada uno de
los textos está separado de su contexto. Esta es la
hermenéutica en la cual se fundó el adventismo.
A menudo, Ellen White misma abusaba del contexto bíblico.
Después del chasco de 1843 y de que "se explicó el
error", ella dijo que los períodos proféticos que
apuntaban a 1843 ahora apuntaban a 1844, todavía respaldando las
quince "pruebas" de Miller (6). Luego dijo: "La luz de la Palabra de
Dios brilló sobre su posición, y descubrieron una
tardanza - "aunque [la visión] parezca tardar, espérala"
(7). Aquí Ellen White cita a Habacuc 3:3 y aplica la
visión de Habacuc a la visión de Daniel,
específicamente a la visión de Daniel 8:14 y al tiempo
entre el primer chasco de 1843 y 1844. Sin embargo, el problema es que
el contexto de la visión de Habacuc trata de la futura
invasión de los asirios y no tiene nada que ver con Daniel 8:14,
1843, 1844 ni con el chasco al que los adventistas se enfrentaron
cuando sus profecías fallaron.
Antes de interpretar un texto dado, hay que considerar todas las
dimensiones del contexto. "La primera dimensión del contexto de
cualquier versículo es la Biblia entera. Esto es lo que
significa la expresión 'la Escritura interpreta a la Escritura'"
(8). Sin embargo, esta dimensión sola, sin los otros aspectos
del contexto, puede conducir al uso de textos de prueba. El estudiante
bíblico cuidadoso tendrá en cuenta todas las dimensiones
del contexto.
La segunda dimensión del contexto es considerar el Testamento en
el que se encuentra el versículo. He aquí una regla
importante que es violada a menudo: el Nuevo Testamento interpreta al
Antiguo, y no al revés. Aunque el Antiguo Testamento apunta al
Nuevo, el Nuevo siempre debe tener prioridad sobre el Antiguo.
"Dios, que muchas veces y
de muchas maneras habló a nuestros antepasados en otras
épocas por medio de los profetas [indicando que la
revelación del AT era incompleta y fragmentaria], en estos
días finales [desde el tiempo de Cristo hasta el presente] nos
ha hablado [indicando que su revelación es final] por medio de
su Hijo [Cristo es el ápice de la revelación de Dios]. A
éste lo designó heredero de todo, y por medio de
él hizo el universo. El Hijo es el resplandor de la gloria de
Dios, la fiel imagen de lo que él es [indicando una
revelación clara, completa y límpida] y el que sostiene
todas las cosas con su palabra poderosa". Hebreos 1:1-3.
Estos versículos muestran que la revelación de Dios
en
Cristo, registrada en el Nuevo Testamento, supera con mucho a la que
fue dada en el Antiguo Testamento. Aunque el AT tiene muchas sombras y
tipos, no vamos a las sombras y los tipos para definir la realidad.
Más bien, desde la perspectiva del centro del Nuevo Testamento,
o sea Jesucristo, podemos mirar hacia atrás, hacia las sombras y
los tipos, y ver modelos y propósito en lo que antes a menudo
parecía ser al azar y oscuro. Es aquí donde muchos han
errado. No han distinguido entre los Testamentos. A menudo, no tienen
ninguna razón lúcida para aceptar y hacer cumplir ciertos
reglamentos de AT y rechazar otros. Por ejemplo, los adventistas apelan
a las leyes del AT para la observancia de su séptimo día
sábado. Pero, en la observancia de su sábado, pocos
obedecen todas las leyes sabáticas del AT - probablemente
ninguno lo hace -, aunque Ellen White dijo que deberían
obedecerlas (9). ¿Y qué del mandamiento "nadie
salga de su lugar el séptimo día" (10), del
mandamiento sobre no hornear ni hervir nada en sábado (11) , y
del que dice: "No encenderás fuego en ninguna de tus moradas en
sábado"? (12) Algunos de los que salieron de la Iglesia Mundial
de Dios y algunos grupos de adventistas independientes no sólo
observan el sábado semanal, sino también los
sábados anuales. ¿Sobre qué base acepta uno
ciertas leyes del AT y rechaza otras? Se debe tener alguna razón
de fundamento, seguir algún principio de hermenéutica. Yo
creo que el principio es la interpretación y aplicación
cristocéntrica del Nuevo Testamento. El NT debe interpretar el
AT.
La tercera dimensión del contexto es conocer el libro particular
en el que ocurre el pasaje. Se debe leer a través del
libro para descubrir el tema del libro y el propósito del autor,
y tratar de descubrir la situación histórica de la cual
está escribiendo el autor. Por ejemplo, hay ciertos autores que
tratan de oscurecer el claro mensaje de Gálatas. Mucha gente me
ha preguntado acerca de los llamados "pasajes difíciles" de
Pablo en Gálatas. He indicado a un buen número de
personas que pueden hallar la respuesta ellas mismas si leen
Gálatas en su totalidad una vez al día durante treinta
días. Todos los que yo sé que han hecho esto han
encontrado su respuesta. El estudio de este libro en su totalidad
arroja luz sobre los textos difíciles, luz que cambia la vida.
Si usted tiene preguntas sobre algunos versículos, ¡trate
de leer el libro en su totalidad y verá lo que sucede!
La cuarta dimensión del contexto es considerar el contexto
inmediato. Lea cuidadosamente el párrafo anterior y el
párrafo después del texto en cuestión. Si Miller y
los primeros adventistas hubiesen obedecido sólo esta regla de
interpretación, la iglesia ASD no estaría en el dilema al
que ahora se enfrenta. Después de un estudio diligente, cientos
de pastores y eruditos ASD han llegado a la conclusión de que
Daniel 8:14, cuando se estudia en su contexto, no sostiene la
teología adventista del santuario. Como erudito adventista, el
Dr. Raymond Cottrell, que ha dedicado años de estudio a este
tema, ha dicho que los ASD tienen que escoger la interpretación
adventista o el contexto de Daniel 8:14, pero no pueden tener a ambos
(13). Se puede ver, pues, que la teología se vuelve contra la
hermenéutica.
Hay otras dimensiones del contexto que deben ser tomadas en cuenta,
como el estilo o el género. ¿Es el pasaje poesía,
historia, enseñanza didáctica, profecía, o imagen
apocalíptica? Por encima de éstos, la buena
hermenéutica tiene prioridad. Por ejemplo, uno no debe ir a los
escritos apocalípticos, llenos de símbolos e
imágenes inciertos, para hallar los fundamentos de la fe y la
doctrina. Antes bien, todas las verdades importantes deben encontrar su
fundamento en las enseñanzas didácticas, contextuales,
como las que se encuentran en las epístolas. Contrariamente a
esto, el fundamento del adventismo se construyó sobre pasajes
apocalípticos inciertos, a menudo tomados fuera de contexto. De
alli el dilema actual.
Así, pues, ¿cuál es el fondo de esto? Dos cosas:
Primera, cuando usted busca la verdad, estudie la Biblia
contextualmente de la manera en que fue escrita y de la manera en que
debe ser interpretada. Estudie libro por libro, capítulo por
capítulo, párrafo por párrafo y texto por texto.
Tome nota del estilo y del género. Recuerde que todas las
verdades importantes se basan en el estudio contextual.
Segunda, cuando alguien trata de adoctrinarle con sus "verdades
especiales" y, al hacerlo, tienen que saltar por toda la Biblia,
leyendo un texto aquí y citando otro texto allá,
párelos. Oblíguelos a leer el contexto, y averigüe
si el contexto de un texto dado apoya claramente lo que ellos tratando
de probar con el texto. Probablemente, si no pueden demostrar
claramente sus "verdades" en un estudio contextual, sus "verdades" no
son verdad, o, a lo mucho, son de menor importancia. Tenemos que ser
tan cuidadosos en nuestra interpretación de las Escrituras como
los escribas hebreos lo eran al copiarlas.
(1) Véase de Ellen G. White, Early Writings, pp. 229-231; Spiritual Gifts, Vol. 1, pp. 128-132.
(2) Ellen G. White, Early Writings, p. 74.
(3) Los diagramas de Miller pueden verse en la obra de Kai Arasola: The End of Historicism, (Datem Publishing, Signtuna, Sweden, 1990) pp. 220, 221.
(4) Incluyo esta prueba a causa de su brevedad.
(5) Ibid., p. 224.
(6) Ellen G. White, Early Writings, p. 236.
(7) Ibid.
(8) Bernard Ramm, Protestant Biblical Interpretation (Baker Book House, Grand Rapids, Michigan, 1970), p. 138.
(9) Ellen G. White, Patriarchs and Prophets, p. 296.
(10) Éx. 16:29.
(11) Éx. 16:23.
(12) Éx. 35: 1, 3.
(13) El Dr. Cottrell ha hecho varias presentaciones sobre este tema,
cuyas cintas en cassette están disponibles en el Foro Adventista
de San Diego, P. O. Box 3148, La Mesa, CA 91944-3148.
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