El escándalo de la muestra sobre la Navidad en el Cabildo terminó con el pedido de renuncia de parte del intendente Luis Juez a dos funcionarios: el subsecretario de Educación y Cultura, Miguel Cabrera, y el director del área, Luis Gregoratti. Ambos fueron los responsables de la fallida y polémica muestra “Navidad, 10 artistas, 10 miradas” que motivó encendidas protestas de un grupo católico y de la Iglesia.

   Juez tomó la decisión de exigirles que abandonaran sus cargos el lunes a la noche en Buenos Aires, adonde había viajado para entrevistarse con el presidente Néstor Kirchner.

   “Creo en la libertad de expresión, pero no puedo permitir que en un espacio público se agravie gratuitamente. Yo también me siento agraviado”, manifestó Juez. Se refería a una imagen blasfema de la Virgen María, cuyo autor es Roque Fraticelli.

   Argumentó, en este sentido, que los funcionarios no dimensionaron las consecuencias que podría acarrear la muestra, a la que calificó de “ofensiva”, a pocos días de la Navidad.

   Agregó, además, que “las condiciones para la exhibición son las que establece el municipio y esas condiciones son hacer una muestra que tenga motivos navideños, que permita la posibilidad de expresión de un amplio marco, pero que no genere polémica, ni conflicto social”.

   Destacó que sus funcionarios deben saber que administran espacios de terceros. “El Cabildo es un espacio para el pueblo”, remarcó.

   El intendente también se manifestó molesto por la manera en que se enteró del problema en el Cabildo (una llamada telefónica de un movilero de un canal local).

   Juez explicó que intentó, infructuosamente, comunicarse a los celulares de los colaboradores desplazados de sus cargos. En la tarde de ayer los citó en su despacho y les comunicó la decisión de echarlos. Hasta anoche fue imposible entablar contacto con ellos.

   Gregoratti ya había tenido diferencias con la Iglesia en ocasión de la representación del Vía Crucis en la última Semana Santa. La escenificación de la pasión y muerte de Jesús contemplaba originariamente el emplazamiento de una de las estaciones en el Arzobispado, pero tuvo que mudarse a un edificio cercano a último momento, porque monseñor Carlos Ñáñez no autorizó la parada.

   La primera renuncia

   “Mi opinión es de total desacuerdo con la suspensión o clausura de la muestra, que no deja de ser una censura cautelar. Y como curadora de la muestra y responsable del área de artes visuales, solicitaré mi desvinculación del área quedando a disposición de la Dirección de Cultura para nuevo destino o función”, señaló Marcela Santanera a La Voz del Interior.

   Santanera fue la primera baja que se conoció ayer antes del pedido de renuncia a Gregoratti y Cabrera.

   La mujer es empleada municipal desde hace varios años, y fue quien convocó a los 10 artistas para que ellos idearan una muestra que aportara una reflexión sobre la Navidad desde una mirada no convencional.

   En estos términos se ubica la convocatoria a una muestra que se planteó con un amplio margen de libertad para los artistas y con la condición de que no fuera entendida desde el canon religioso, como podría ser una exhibición que presentara los clásicos pesebres.

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