¡SOMOS CATÓLICOS!

 
ÍNDICE NOTICIAS ARCHIVOS GALERÍA
DE FOTOS
PREGUNTAS FRECUENTES
a
 

18 de Enero de 2005

Unos 160 rabinos agradecen al Papa su lucha contra el antisemitismo*
En una audiencia en el Vaticano celebrada a los 40 años de «Nostra Aetate»

   CIUDAD DEL VATICANO, martes, 18 enero 2005 - Juan Pablo II pidió que se refuerce el compromiso a favor del diálogo entre judíos y católicos al recibir este martes a un grupo de unos 160 rabinos y cantores de Israel, Europa y Estados Unidos.

   El encuentro sin precedentes --nunca habían venido al Vaticano tantos rabinos para una audiencia privada con el Papa-- fue solicitado por la «Pave the Way Foundation» para recordar los cuarenta años de la declaración del Concilio Vaticano II «Nostra Aetate» (28 de octubre de 1965), que marcó un giro decisivo en el diálogo judeocristiano.

   Formaron parte del grupo que se entrevistó con Juan Pablo II, entre otros, Oded Ben-Hur, embajador israelí ante la Santa Sede; Amire Ofek, cónsul israelí para los Medios en Nueva York; el rabino Adam Mintz, presidente del Colegio de Rabinos de Nueva York; el rabino Shmuel Rene Sirot, ex rabino jefe en Europa y Francia; David Lincoln, rabino jefe de la Sinagoga de Park Avenue en Nueva York; el rabino Shlomo Riskin, rabino jefe de Efrat, Jerusalén; el rabino Joseph Arbib de la Gran Sinagoga de Roma y Gadi Golan, ex director de Asuntos Religiosos del Ministerio de Exteriores israelí.

   El rabino Jack Bemporad, director del Centro para el Entendimiento Interreligioso (CIU, por sus siglas en inglés) ha explicado que «es la primera vez en la historia que los rabinos, en testimonio de todas las ramas del judaísmo, se encuentran juntos en Roma para dar las gracias al pontífice Juan Pablo II y a la Iglesia, por lo que han hecho para construir puentes y respeto recíproco entre judíos y católicos».

   Bemporad considera que «en la historia del mundo, los últimos cuarenta años serán vistos como los más revolucionarios y significativos en términos de progresos en las relaciones judeocristianas».

   El director del CIU recuerda que Juan Pablo II ha sido el primer Papa que ha visitado la Sinagoga de Roma, el 13 de abril de 1986; con el que se ha publicado el documento «Nosotros recordamos: una reflexión sobre la "Shoah"» (16 de marzo de 1998); quien ha establecido relaciones diplomáticas con Israel, y quien ha pedido perdón por los actos de antijudaísmo cometidos por los católicos en la historia.

   Gary Krupp, presidente la  «Pave the Way Foundation», había propuesto el encuentro como una oportunidad para agradecer al Papa Karol Wojtyla el extraordinario esfuerzo realizado con su vida, y en particular con sus más de 26 años de pontificado, en la lucha contra el antisemitismo.

   El Papa deseó que el aniversario «sea una ocasión para un renovado compromiso que fomente el entendimiento y la cooperación al servicio de la construcción de un mundo basado cada vez más firmemente en el respeto a la imagen divina en todos los seres humanos».

   «Sobre todos vosotros, invocó las abundantes bendiciones del Todopoderoso y, en particular, el don de la paz» dijo en el breve discurso que dirigió en inglés y que concluyó en hebreo deseando: «Shalom aleichem».

   En el saludo dirigido al obispo de Roma en nombre de los presentes, el señor Krupp hizo un repaso de todos los gestos de este pontificado que han dado un histórico impulso al diálogo entre católicos y judíos.

   «Poco después de su llegada al trono de san Pedro, usted hizo un elocuente viaje a Auschwitz para rendir homenaje a las víctimas del Holocausto. Usted ha defendido al pueblo judío en cada momento, como sacerdote en Polonia y durante sus 26 años de pontificado».

   «Usted ha denunciado el antisemitismo como "pecado contra Dios y la humanidad". Este tono de reconciliación ha sido la piedra angular de su papado y de sus relaciones con el pueblo judío», aseguró.

   Como recordó el representante judío, este Papa ha sido el primero desde san Pedro en visitar una sinagoga, ha establecido relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y el Estado de Israel, y conmovió a judíos y católicos al visitar Tierra Santa, el 21 de marzo de 2000, cuando colocó una oración de petición de perdón en el Muro de las Lamentaciones de Jerusalén.

   «Por sus actos de amor a todo el género humano y por su implacable búsqueda de la paz y la reconciliación de todos los creyentes, Su Santidad es verdaderamente la personificación» del «espíritu de Aharón, el sumo sacerdote del antiguo Israel», afirmó el representante judío.

   «Mi deseo orante es que judíos, cristianos y musulmanes, los tres hijos de Abraham, se unan cuanto antes en una causa común y que eleven su voz para defender a la humanidad de todos los que difaman a Dios cometiendo inútiles actos de violencia en su santo nombre», dijo para concluir pronunciando tres veces «gracias» y «Shalom».

   En vísperas del encuentro, el señor Krupp anunció que el Vaticano ha dado permiso para prestar los manuscritos de Maimónides (1138-1204), gran filósofo y teólogo judío nacido en Córdoba (España), que serán expuestos por el Museo de Israel en la primavera de 2005.

   La delegación entregó al Papa una escultura en cristal titulada «Los ideales de Aharón».
A continuación, tres rabinos pronunciaron una bendición a Juan Pablo II.

   La audiencia concluyó con un canto entonado por cantores judíos.

a

A