La eleción del Cardenal Joseph
Ratzinger como nuevo Papa, el martes, dijeron los líderes religiosos judíos,
es señal de que los calurosos lazos entre el Vaticano y los judíos, iniciados
por Juan Pablo Ii, van a continuar.
El conservador alemán Ratzinger fue elegido como nuevo
Papa en el primer cónclave del nuevo milenio. Es el
primer Papa alemán en alrededor de unos 1000 años.
"Esta
elección es una confirmación de que los cardenales han
optado por la continuidad," declaró el martes al The
Jerusalem Post el rabino David Rosen. "No hay
ningún signo que indique que el nuevo Papa no va a estar
completamente de acuerdo con su predecesor. Después de
todo, su antecesor lo colocó en el puesto teológico más
importante de la Iglesia católica.
"Esta continuidad se verá reflejada en las
relaciones católico-judías. Tiene un profundo compromiso
con esto. Además, sus propios antecedentes nacionales lo
hacen sensible a los peligros del anti-semitismo y a la
importancia de la reconciliación judeo-católica,"
dijo Rosen, el director internacional para las relaciones
interreligiosas del Comité Judío Norteamericano.
"También fue partidario del establecimiento de
relaciones entre la Santa Sede e Israel, y se interesa
enormemente en el bienestar del Estado de Israel"
agregó Rosen.
El
Rabino Israel Singer, jefe del Congreso Mundial Judío, señaló
a Ratzinger como el arquitecto de la política llevada a
cabo por Juan Pablo con respecto a las relaciones con los
judíos.
"Es el arquitecto de la ideología política de
reconocer, de establecer relaciones con Israel," dijo
Singer.
En señal de su respeto por el judaismo, Ratzinger autorizó
en 2002 la publicación de un informe que establecía que
"la
espera judía del Mesías no es vana."Ese
documento también se lamentaba de que ciertos pasajes de
la Biblia Cristiana condenando a algunos judíos hubieran
sido usados para justificar el antisemitismo.