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El peligro de las sectas en la Argentina Una habitación a oscuras. Gente reunida. La concentración invade el ambiente. De golpe se escucha una risa macabra. La muerte se ríe y el exú ha bajado. El exú es un espíritu que invocan los que participan en los rituales de quimbanda, una rama de la macumba. Esta religión africanista junto al culto evangélico cuenta con la mayor cantidad de asociaciones religiosas registradas legalmente en nuestro país. La macumba: una secta maligna "En el registro de cultos no se inscriben sectas", dice el secretario del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, Ángel Centeno. Con respecto a los grupos africanistas afirma: "para mí estos grupos tienen características de seriedad. Esa gente cree en esas cosas y hay que respetarlas". Por otra parte, el profesor Carlos Alberto Villegas, quien lleva más de 20 años investigando el fenómeno de las sectas, dice: "La macumba es una secta maligna que se propaga por la mala prensa que ellos mismos manejan". Villegas es doctor en biología, profesor en antropología (egresado de la Universidad de Nueva York) y en parapsicología (National School, EE.UU.). Fue el primero en denunciar las actividades de la secta Los Niños de Dios en 1986. Con respecto a la macumba continúa diciendo: "Se divide en umbanda, quimbanda, catimbo, candomblé y vudú. Esta secta empezó a actuar en la Argentina en el año 1968, pero funciona legalmente desde 1978 por culpa del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto. Si hablamos en cifras, tendríamos que tener en cuenta que en 1983 había 43 'terreiros' (templos); hoy suman 7.7.00 aproximadamente". En el rito afrobrasileño de la umbanda se practica la magia blanca mientras que la quimbanda utiliza la magia negra. La diferencia que hay entre éstas radica en que la primera se usa para el bien, en cambio la segunda no distingue entre el bien o el mal. Durante mucho tiempo, incluso en la actualidad se considera que la magia blanca y la negra eran dos cosas totalmente opuestas. Sin embargo el doctor Villegas obtuvo en una de sus investigaciones en Brasil estas declaraciones de uno de los más importantes umbandistas, el pai Gerson: "Donde hay umbanda hay quimbanda (donde hay magia blanca hay magia negra). Nosotros veneramos al dios del cielo y al dios de las tinieblas". En la quimbanda se ejecutan bloqueos paranormales (nombre científico de los comunmente llamados trabajos o daños). El profesor Villegas explica que "el ser humano, tiene un campo bioelectrofactor positivo con uno negativo, hay un desfase biológico y es ahí donde se produce mayor carga de energía causal y de pronto se puede formar una disfunción fisiológica que se puede convertir en una enfermedad. El médico no encuentra una explicación y lo considera como un virus desconocido". Villegas sostiene que hay 28.176 clases de bloqueo paranormales y cuenta con 21.700 casos comprobados. Estas cifras demuestran que las sectas afrobrasileñas actúan incesantemente y que negar esta realidad facilita el crecimiento de estos grupos. Culto de la verdad Según el licenciado José María Baamonde, del Servicio Para el Esclarecimiento de las Sectas, de las 2.984 inscripciones que figuran en el Registro Nacional de Cultos, 387 corresponden a cultos de origen afrobrasileños. "En la Secretaría de Culto -explica el doctor Centeno- están inscriptos los grandes cultos o religiones que en conjunto son entre 40 y 50. Pueden mencionarse: los evangélicos, iglesias ortodoxas, comunidades judías, el espiritismo, la comunidad islámica, religiones orientales y africanistas. De estas 40 o 50 religiones figuran registradas cerca de 3.000 instituciones". Por otra parte, Centeno aclara: que de los cultos inscriptos "ninguno tiene actividad sectaria, ya que la secta es algo marginal y no se inscribe". Continúa explicando que "la secta es generalmente un grupo minoritario desprendido de otra gran religión muy exclusiva y excluyente, es decir, yo tengo la verdad y los que están afuera no la tienen". Consultado sobre los grupos umbandas responde: "los umbanda son una religión porque cumplen con los requisitos que nosotros les pedimos. Por ejemplo, nos informan sobre sus libros sagrados, cuándo fue creada su religión, dónde estudian sus ministros religiosos. Entonces, más o menos, uno se va dando cuenta de si esto tiene una cierta seriedad. Aparte yo soy muy amigo de ellos, he ido muchas veces al templo y no me parece que tengan nada raro". El secretario también se refirió a la matanza de animales durante los ritos y dijo que según la ley Sarmiento, no están prohibidos pero sí los actos de crueldad", Por otra parte, Mario Mele, director del Movimiento Argentino para la Protección del Animal, admitió que estaba al tanto de estos hechos pero reconoció que la ley vigente no sirve para evitar que se siga matando animales. Un vacío legal El 6 de junio de este año, el senador Eduardo Menem presentó un proyecto de ley para reemplazar a la vigente en lo que respecta al registro de cultos. Fue aprobada en el Senado por unanimidad y en este momento está en Diputados. Cabe recordar que la ley actual fue sancionada en el 78 y establece la obligatoriedad a todo culto de inscribirse en el registro. Sin embargo, la no inscripción no está penada quedando así un vacío legal. Amparándose en esto último, Centeno argumenta: "Es necesaria esta nueva norma porque la que ahora rige es muy discriminatoria, de contralor y represiva. La gente tiene que tener derecho no sólo a creer en lo que quiere sino también a expresar lo que considera que es cierto. Aparte, esto se va a aprobar enseguida porque lo hemos hecho con el consenso de muchos grupos religiosos que tuvieron la oportunidad de opinar al respecto. Por eso no va a dar problemas". Finalmente, el secretario de Culto dijo: "si hay una secta funcionando y no está inscripta, no podemos hacer nada. Que intervenga el juez de menores". Frente a esta realidad las sectas "siguen
absorbiendo personas que van muchas por desesperación y otras por la seducción
de lo místico. Sincretismo: gato por liebre Para proteger la identidad de sus divinidades, las religiones afrobrasileñas usan las imágenes de santos católicos. Según el profesor Villegas, investigador de las sectas, "no utilizan las verdaderas imágenes para evitar que se las relacione con lo que realmente son" y agrega "ningún delincuente dice que lo es, y de ahí la confusión entre las dos imágenes: católico-secta". Algunas de las imágenes utilizadas son el San Jorge por Ogum que es una divinidad del Candomble y representa el arquetipo del guerrero; Cristo por Oxalá que es el padre de todas sus divinidades y Stella Maris por Yemanja una de las figuras más conocidas por los cultos afrobrasileños.
Revelaciones de un miembro de la secta LUS
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