PREÁMBULO
Si nosotros creemos en Dios Padre Todopoderoso, Creador del Cielo
y de la Tierra; si estamos convencidos que por Su infinita
Misericordia e Intersección se ha creado esta Patria con el
concurso de nuestros abuelos y de nuestros muertos gloriosos; y
que nuestras familias son el único cimiento abnegado sobre el que
se apoya nuestra Nación, entonces es clara la consigna: Dios,
Patria y Hogar; y es clara la divisa: la Bandera de la Patria que
tiene los colores de la Madre de Dios.
PRIMERA VERDAD
Sabemos que si una persona no está dispuesta a arriesgarse por sus
opiniones, o cree que sus acciones y opiniones no valen nada,
resulta que esa persona es la que no vale nada: pues tiene el
alma de esclavo quien espera que otro lo libere. Nadie cosecha
sin haber sembrado. Y, si alguno lo puede hacer, es seguro que
está robando.
SEGUNDA VERDAD
El mundo actual no se rige por la Justicia, ni por la búsqueda del
Bien Común, ni por la monserga de los tratados internacionales, ni
–mucho menos- por la Etica. El Mundo se rige por el Poder,
que no está en las manos del Pueblo, sino en los empleados
vernáculos de la Sinarquía Internacional, que en
nuestro suelo se hacen llamar Clase Política: es la Nueva
Oligarquía que habrá que derrotar como aquella de la Década
Infame.
TERCERA VERDAD
La cantidad de Poder de que disponen individuos,
organizaciones y naciones es un factor clave y determinante.
Sin embargo, la calidad del Poder –dado por la creatividad,
la capacidad e idoneidad de quienes lo ejercen, o detentan
como las bandas que han asolado a la Patria- conforma un factor
aún más importante.
CUARTA VERDAD
La Ley
del Poder
es una ley de hierro; cruel y fría:
Quien tiene Poder lo utiliza para promover sus propios intereses.
Quien no tiene Poder habrá de sufrir las consecuencias de las
acciones de quienes tienen Poder para promover sus objetivos e
intereses.
QUINTA VERDAD
El Poder Real impulsa causas usualmente visibles que
generan efectos manifiestamente visibles puestos en práctica por
la dulcamara del Poder Formal.
Simétricamente, el Poder Formal manifiesta efectos
visibles que obedecen a causas usualmente no visibles emanadas
desde las instancias del Poder Real. Sin embargo este
Poder Real nunca aparecerá y si lo hace será para mostrarse
como víctima y cobrar jugosos dividendos.
SEXTA VERDAD
La gran privatización de nuestros tiempos es la
Privatización
del Poder
a escala nacional y a escala planetaria. Todo concurre y debe
concurrir hacia el dios verdadero: el Becerro de Oro.
SÉPTIMA VERDAD
Hoy tenemos un Gobierno Mundial, pero dado que el Poder
Mundial ha quedado privatizado, surge por carácter transitivo
que el Gobierno Mundial que rige al planeta es también de
naturaleza eminentemente privada.
OCTAVA VERDAD
Para que haya Paz se necesita de la voluntad de todas
las naciones para resolver sus problemas y diferencias por vías no
violentas.
Para que
haya Guerra, sin embargo, sólo se necesita que una de esas
naciones decida imponer su voluntad sobre las demás por la
violencia.
A la Argentina –nación pacífica- el Nuevo Orden Mundial la viene
agrediendo hasta la mortificación, mediante una estrategia de
Guerra Total, por cuanto nuestro vasto territorio y sus
inmensos recursos son indispensables para sus planes de dominio
mundial.
Tenemos entonces dos caminos:
¡Defensa o Claudicación! (¡Liberación o Dependencia!).
NOVENA VERDAD
La Supervivencia y Defensa en la Tenebrosa
Jungla del Nuevo Orden
Mundial exige que pensemos más con el cerebro propio y menos
con el cerebro ajeno. En lugar de copiar hay que crear; en lugar
de mirar hay que ver y en lugar de decir hay que hacer.
DÉCIMA VERDAD
El objetivo supremo de toda mafia consiste en copar los
ejes del Poder público –el Estado- a fin de imponer un sistema
jurídico afín a sus intereses. De esta forma, sus actividades
pasan a ser legales, más allá de que sean naturalmente
ilegítimas y antisociales. Por tal motivo es el Congreso de la
Nación el epicentro de la mafia.
DÉCIMA PRIMERA VERDAD
En la Argentina actual no debiera haber ya más izquierdas o
derechas. Posiciones geométricas vetustas traídas al
escenario del sainete por el personeros del Régimen Perverso para
engañar a nuestro Pueblo.
La gran divisoria ideológica se da entre quienes son
Colaboracionistas con los objetivos e intereses del Nuevo
Orden Mundial (sea por conveniencia, ignorancia, pasividad o
traición), y quienes conforman la
Resistencia Nacional ante aquellas
fuerzas que buscan debilitarnos y dañar los intereses de nuestro
Pueblo y Nación.
DÉCIMA SEGUNDA VERDAD
Fuerza
e Hipocresía: estas son las dos temibles armas del Nuevo
Orden Mundial y ejercidas por los empleados del Régimen Perverso
con santa religiosidad.
DÉCIMA TERCERA VERDAD
El Estado-nación de los Estados Unidos de Norte América ha quedado
secuestrado por operadores, instituciones y fuerzas que priorizan
el interés nacional y los objetivos del Estado de Israel y los
intereses políticos, económicos y financieros del Nuevo Orden
Mundial, presididos por Inglaterra, que no sería de extrañar que
aún decida sobre qué debe hacer y qué debe dejar de hacer su
antigua colonia.
DÉCIMA CUARTA VERDAD
Estados Unidos de Norte América gobierna al mundo, pero el Estado
de Israel gobierna a los Estados Unidos de Norte América y a
Inglaterra. Y han hecho creer al mundo que todo es al revés: que
el Estado de Israel está al servicio de los Estado Unidos e
Inglaterra.
DÉCIMA QUINTA VERDAD
El mundo se encuentra ante una grave encrucijada debido a que
Estados Unidos, Inglaterra y el Estado de Israel disponen de poder
militar formidable e irresistible, que utilizan para promover sus
intereses sin consideración alguna por los intereses del resto del
mundo.
Esto conforma una peligrosa patología geopolítica que hoy amenaza
al planeta entero.
El Desafío Mundial de nuestros tiempos es cómo harán los pueblos
del mundo para liberarse de semejante abominación.
DÉCIMA SEXTA VERDAD
No todo sionista es judío; y no todo judío es sionista. Sin
embargo a la hora de actuar pareciera que lo hacen
mancomunadamente, y que el interés judío es el sionista y
viceversa. Es al pueblo judío a quien le corresponde, si es
que puede, hacer la separación de estas aguas, poner a cada uno en
su lugar y decirnos a voz en cuello de qué lado se encuentra él.
DÉCIMA SÉPTIMA VERDAD
La búsqueda de la supuesta pista iraní en los atentados
contra la embajada israelí y la AMIA puede arrastrar a la Nación
para convertirse en parte beligerante del lado del bando
anglo-estadounidense-israelí en el creciente conflicto en Medio
Oriente.
Resulta fundamental, entonces, investigar una más verosímil
pista israelí en torno a ambos atentados (que en su momento se
siguió y fue abandonada inexplicablemente).
DÉCIMA OCTAVA VERDAD
Lo que hoy se hace pasar por Democracia es un mero
electoralismo, en el que un conjunto de partidos políticos,
férreamente controlados y subordinados al Poder del Dinero,
compiten entre sí, para determinar cuál de ellos será el sirviente
más puntilloso y fiel del poder extranjero y servirá mejor
a los designios inconfesables del Nuevo Orden Mundial.
DÉCIMA NOVENA VERDAD
La Moneda –el dinero- no debe ser otra cosa que un bono o
vale por el trabajo efectuado en el pasado (ahorro), que se
hace en el presente (salario) o que se realizará en el futuro
(crédito). La Moneda no puede ser un fin en sí misma: es sólo un
medio.
Su sola tenencia o acumulación no puede ser motivo de su
crecimiento parasitario. Por ello, el interés sobre el dinero es
fundamentalmente antinatural, amoral y antisocial. Quienes
practiquen el interés y la usura deben recibir la máxima condena
por delito tan execrable, para ejemplo y escarmiento de todas las
generaciones existentes y por venir. El principio rector debe ser:
el mejor banco para la Moneda es el bolsillo de los que trabajan.
DUODÉCIMA VERDAD
La moneda es a la economía nacional lo que la sangre es al cuerpo
humano: debe ser sana, circular con velocidad-presión correcta,
y en cantidad justa. Si una de estas partes falla, el cuerpo se
muere. Nosotros ya conocemos esto por haber muerto varias veces.
Sin moneda propia, no habrá nación Justa, ni Libre, ni Soberana.
DUODÉCIMA PRIMERA VERDAD
La Moneda es del Estado; el Estado es del Pueblo.
Luego, la moneda pertenece al Pueblo.
Entonces es ilegítimo permitir que intereses privados desvirtúen
las funciones de la moneda y distorsionen sus parámetros. Ello
comprende muy particularmente a la banca privada y a los
especuladores. Nadie puede ser libre si se ejerce sobre el
individuo la peor de todas las tiranías: la del bolsillo. Nadie
podrá realizarse en una Patria que no se realice.
DUODÉCIMA SEGUNDA VERDAD
La Deuda Externa conforma la principal Hipótesis de Conflicto de
la Argentina. Opera como instrumento primario de dominio sobre la
Nación. Sobre ella deberán trabajar nuestras Fuerzas Armadas
con el concurso decidido del Pueblo y bajo el concepto de Nación
en Armas.
El gobierno debe elegir entre dos caminos mutuamente excluyentes:
o se organiza nuestra economía para que
sirva al Bienestar del Pueblo, o se la organiza para servir al
pago de
la
Deuda Externa,
como hasta ahora lo ha hecho el Régimen Perverso. No queremos que
nos cambien de collar: queremos dejar de ser perros.
Para salir de la trampa de la Deuda Externa no existe escapatoria
sin conflicto. Y cuando la Patria está en peligro, todo está
permitido, salvo no defenderla.
DUODÉCIMA TERCERA VERDAD
No existe solución al problema de la Deuda Externa dentro del
Sistema de la Deuda, dado que el mismo ha sido diseñado de modo
que la Nación no pueda dejar de ser deudora.
Consecuentemente, queda atado a las exigencias insaciables de la
usura. Entonces aparece otra disyuntiva de acero: o nos ponemos de
pie, o cuidamos los zapatos andando de rodillas.
DUODÉCIMA CUARTA VERDAD
El Bien Común, es el bien de la Patria, y debe primar siempre
por encima de los egoísmos individuales y sectoriales.
No puede existir nada, absolutamente nada, por encima de la
Patria, con excepción de Dios que la ha creado.
DUODÉCIMA QUINTA VERDAD
Para superar la actual decadencia en que está sumida la Patria, la
Argentina debe hacer exactamente lo contrario a lo que
nuestros Enemigos quieren que hagamos. Este en sí mismo, ya es el
mejor programa de gobierno que podrían ofrecer los empleados
virreinales que pretenden ser candidatos. Ellos deberán elegir
entre estar en el Frontispicio de los Héroes de la Patria, en el
corazón del Pueblo, o recibir una medalla, aplausos y besos en
Harvard de una caterva como la que va de Nixon a Bush.
DUODÉCIMA SEXTA VERDAD
Si la ideología de la globalización, impuesta desde afuera a
través de los traidores de adentro, ha logrado debilitar a la
Nación desde arriba hacia abajo, entonces su reconstrucción y
fortalecimiento se logrará con la participación y el compromiso
popular; o sea, desde abajo hacia arriba. Porque el fuego para
calentar debe ir siempre de abajo.
En esta última instancia, sólo el Pueblo salvará al Pueblo. |