A San Isidro en sus 300 años...
San Isidro,
Pampa enamorada de río
y su caricia de selva.
Dicen por todas partes
dicen las malas lenguas
que olvidas que tu origen
es un desierto de piedra.
Usan el césped inglés
arrancando tu maleza
y no es la yerba es el té
tu única merienda.
Sólo quedan de tus huestes
los caballos de carrera,
y una flota de veleros
de tu marina de guerra.
Son tus aviones de combate
valientes aves en la reserva.
Proteja el Santo Patrono
labrador de la tierra
en tu memoria de pampa
el vigor de la huella
Recuerdos de Mariquita
los suspiros y las fiestas...
En la quinta de Pueyrredón
Juan Martín con San Martín
patios con madreselvas
y los muros encalados
con sangre de toro bravo.
Y aunque perezcan los próceres
los hombres y sus ideas
los encuentros con tu río
perduren con las mareas.
San Isidro
Pampa enamorada de río
y su caricia de selva.
Maria Dodera