... De modo parecido, también veneraron a sus antepasados
como
kami
y vivían en armonía con toda la
naturaleza. Como parte de la sociedad comunal de los pueblos, los
individuos no albergaban deseos egoístas y además
entendían bien lo que era la cortesía. Evitaban
las peleas y rechazaban acumular bienes para sí mismos.
Lo que poseían lo compartían con toda la naturaleza.
... Los ciclos regulares de los acontecimientos anuales y las prácticas
folclóricas nacieron con este ambiente comunal de fondo. La vida
se balanceaba hábilmente dividiéndose los días del
año en laborales (ke) y los que no lo eran, también conocidos
como días de la liebre, en los que se celebraban los matsuri (fiestas).
Los matsuri representaban un tiempo dedicado a despojarse de la mediocridad
de la vida diaria y simultáneamente, una oración al
kami
para que renaciera el estado de normalidad de la vida diaria.
... Incluso en estos tiempos de tecnología tan avanzada, los matsuri
y el calendario japonés de acontecimientos anuales no han perdido
su interés y se encuentran siempre presentes en los corazones
de los japoneses.
|
Farolito de festival
|
|
|
|