Los dos hermanos, Cosme y Damián, originarios de Arabia, fielmente observaron este consejo divino. Médicos, cuidaban gratuitamente a los enfermos, y su fe, mucho más aun que su ciencia, obraba curaciones maravillosas, espirituales y corporales. Cuando
estalló la persecución de Diocleciano, fue imposible para hombres tan eminentes y distinguidos escapar
a las investigaciones. Fueron detenidos por orden de Lisias, gobernador de
Cilicia, y, después de diversos tormentos, fueron decapitados, sin duda en el año 303.
MEDITACIÓN
CADA CUAL EN SU POSICIÓN
DEBE TRABAJAR POR EL CIELO
I. Cada cual quiere descollar en su posición; para lograrlo no hay trabajo que se ahorre; si no alcanza para ello el
día, se trabaja durante la noche. En cambio, en la profesión de cristiano, ¡cuán raro es este celo!
¡Cuántos hay, asimismo, que tienen miedo de parecer cristianos; que retroceden, no delante de las amenazas de un perseguidor, sino ante los
sarcasmos de cristianos como ellos! ¡Extraña ceguera! ¡El artesano ejerce públicamente su oficio por
humilde que sea, y no se avergüenza de su dignidad de cristiano! Nadie reconoce en ti a un cristiano. (Tertuliano)
II. Debes cumplir tus deberes de estado
cristianamente, es decir, de la manera como Dios lo quiere. Para esto, ofrece a Dios, por la mañana, el trabajo de todo el día, protestando que por obedecerle vas a trabajar. Si eres fiel a esta práctica, te cuidarás
durante el día de no manchar con el pecado el trabajo que has consagrado al Señor.
III. No te contentes con ofrecer tus acciones a Dios, esfuérzate por hacer todos los días alguna cosa por Él, con la única
mira de agradarle. Trabaja en la gloria de Dios o en el alivio de los pobres: no hay
profesión ni oficio que no nos brinde ocasiones para ello. Da a los pobres a fin
de darte a ti mismo: lo que les des no lo perderás, lo que les rehúses pasará a mano de otro. (San Pedro
Crisólogo). La caridad
Orad
por los pobres.
ORACIÓN
Haced, os lo suplicamos, Dios omnipotente, que honrando el nacimiento al cielo de vuestros santos mártires Cosme y Damián, nos veamos libres por su intercesión de todos los males que nos amenazan.
Por J. C. N. S. Amén. |