16 de enero
SAN HONORATO,(*)
Obispo de Arles
(429)
Honorato había nacido de una familia consular romana establecida en
la Galia, y era muy versado en las artes liberales. Siendo joven, había
renunciado a la adoración de los ídolos y había ganado a Cristo a su hermano
Venancio, a quien inspiró igualmente el desprecio del mundo. Ambos deseaban
retirarse de él, pero su padre les oponía constantes obstáculos. Finalmente,
se embarcaron en Marsella, llevando consigo como padre espiritual al
ermitaño San Caprasio, con rumbo a Grecia, donde querían vivir ignorados en
algún desierto. Venancio murió al poco tiempo, en Modón. Honorato, que había
caído enfermo también, se vio obligado a volver a la Galia con su maestro.
Primero vivió como ermitaño en las montañas próximas a Fréjus. Cerca de la
costa hay dos islitas: la de Santa Margarita, que entonces se llamaba Lero, y
otra más pequeña y lejana, que dista dos leguas de Antibes, llamada entonces Lérins
y actualmente San Honorato, en honor de nuestro santo que ahí se estableció.
Cuando se le unieron otros compañeros, hacia el año 400, fundó el famoso
monasterio de Lérins. Al gunos de sus compañeros vivían en comunidad y otros
como anacoretas en celdas aisladas. San Honorato calcó la mayor parte de sus
reglas en las de San Pacomio. Nada más atractivo que la descripción que hace
San Hilario de Arles de las virtudes de esa comunidad de hombres de Dios,
especialmente de la caridad y devoción que reinaban entre ellos. Cf. Gallia Christiana navissima, vol. III (1901), p. 26; Revue Bénédictine, vol. IV, pp. 180-184; Duchesne Fastes Episcopaux, vol. I, p. 256. Ver también el panegírico escrito por el discípulo, pariente y sucesor de San Honorato, San Hilario de Arles, y sobre todo A.C. Cooper-Marsden, The History of the lslands of the Lerins (1913), ilustrado con excelentes fotografías. B. Munke y otros editaron una biografía medieval latina de San Honorato (1911), que carece de valor histórico, así como la Vida de Sane Honorat en provenzal. F. R. Hoare, The Western Fathers (1954), traduce el panegírico de San Hilario. |
* Vidas de los Santos, de Butler. Vol. I, ed. 1964