SITIO EN CONSTRUCCIÓN
EL ORIGEN DE LA FAMILIA AUSTIN EN SUD AMÉRICA Por Tomás Ricardo Austin Millán 2005 Esta reseña familiar esta escrita para todos nuestros descendientes del siglo XXI
¿QUIÉNES
FUERON THOMAS Y ADA AUSTIN?
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Nuestra familia se origina con la llegada de Thomas (Tom) y Ada Austin a Punta Arenas, Chile, en 1920. La abuela Ada falleció en 1926, cuando mi papá tenía 6 años y el abuelo Tom le sobrevivió hasta 1952, año en que falleció en Punta Arenas, sin haber vuelto nuca a su Inglaterra de origen. Observando a mi alrededor me he dado cuenta que las generaciones jóvenes, los que viene a ser los bisnietos de los emigrantes originales, en general han perdido casi todo conocimiento de lo que fueron sus ascendientes originales. Siendo el sociólogo de la familia me propongo contarles a la generación del siglo XXI quienes fueron los que dieron origen a esta familia. Por lo que sabemos a través del Tío Ernest en una grabación que le hiciéramos en la casa de mi hermano Juan en los primeros días del año 1986, los dos, el abuelo Tom y el Tío Ernest llegaron juntos en 1909 por barco. Para ese entonces Tom habría tenido 30 años, puesto que había nacido en 1879. Al parecer y por la carta que verán a continuación, también habría llegado poco después su hermano Ernest George Austin, en el mes de agosto de 1912, porque así lo indica –manuscrito-- en la última página de su reseña del viaje de regreso a Inglaterra escrita en mayo de 1916. “El Regreso” de Ernest
George Austin (25.12.1887 -¿?)
Nada sabemos de él, excepto por esa pintoresca narración que, aunque breve, hoy tiene carácter histórico para Magallanes. Por su redacción este relato fue escrito durante el viaje y, seguramente, escrita a máquina en su casa en Cliffe-at-Hoo del Condado de Kent. El documento original, del que sólo tengo una fotocopia, eran hojas tamaño carta dobladas en dos y con dos costuras a máquina como una forma artesanal de unirlas. Como le dijo “Adiós” a su equipo de trabajadores, debemos suponer que tuvo algún cargo de responsabilidad, posiblemente Capataz de algún área de la estancia. Tiene colegas que lo visitan a diario en su casa, puesto que a continuación dice que éstos fueron a visitarlo y encontraron el fuego apagado por lo que se enojaron y se fueron diciendo que no volverían a visitarlo. En esos días, y en parajes tan aislados, en las tarde no había otra cosa que hacer que conversar alrededor de la cocina de la casa y no recibir a los amigos con un buen fuego era toda una descortesía. Sin embargo parece que finalmente fue él quien les da la sorpresa. --Me voy mañana--, les informa. Dice después que dejó la estancia en un “vagón”, que yo traduzco por un carro tirado por caballos, ya que si hubiese sido un vehículo de esos antiguos él habría usado otra palabra en inglés, como “truck” (camión) o “automóvil”, o “car” ¡Es 1916! y no habían muchos vehículos a motor, más bien deben haber sido unas rarezas. Cuando nos cuenta cómo lo atienden en el Consulado Inglés para darle su Pasaporte, no informa también de su edad, tiene 29 años, pues había nacido en 1887 en un lugar al Este de Londres. Por lo visto llevaba también cueros para vender, pero no dice de qué clase de animal. No me parece que sean cueros de oveja, más bien deben haber sido de zorros o guanacos. A continuación relata que, como no pudo venderlos de inmediato, pidió que le hicieran lo que los magallánicos llamamos “una capa” y éstas eran usualmente hechas con cueros de guanacos pequeños. Subirse a un barco desde el bote que lo llevaba desde la playa debe haber sido una tarea difícil y peligrosa. No perdió ninguno de sus bultos, pero no cuenta que otros pasajero sí los perdieron porque se cayeron por la borda. El resto de su relato de viaje es más breve y se acorta en detalles a medida que se acerca a su país, terminando casi abruptamente. Se retiró de Cerro Castillo el 15 de mayo de 1916, llegó a Punta Arenas el 18. Se embarcó el 2 de junio. El 5 participa de un baile a bordo en las Falklands (Malvinas). Arriba a Saint Vincent el 22 de ese mes, pero lamentablemente no nos da fechas para el resto de su viaje vía Lisboa en Portugal, como primer puerto de Europa, aunque sí relata las horas de arribo. |
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