Idea general sobre la corriente de los yogas Ayer concluí la explicación general de la única corriente de los yogas, que yo daba desde el primer día de las lecciones. Hoy vamos a detenernos brevemente una vez más en este tema, para pasar luego a las Cinco Acumulaciones de los Apegos. En las lecciones leídas hasta ahora les conté que el proceso de la práctica espiritual en el Gran Carro (Mahayana) es distinto al proceso en el Pequeño Carro (Hinayana). Sin embargo, el proceso de los Cuatro Caminos y Cuatro Escalones es igual para el Hinayana y el Mahayana. El primer escalón, Los que Avanzan hacia la Entrada en la Corriente de la Verdad, es un estado en que el hombre se encomienda a la corriente santa. Cuando el hombre logra entregarse enteramente a la corriente santa, entonces se hace El que Ha Entrado en la Corriente de la Verdad. Y aquellos que aún no pudieron hacerlo, pero aspiran a esa corriente, se llaman Los que Avanzan hacia la Entrada en la Corriente de la Verdad.
Quienes bajan una vez a estos Seis Mundos del Mundo de las Pasiones y luego suben al Mundo Astral se denominan Los que Avanzan hacia el Retorno de Una Vez y Los que Han Logrado el Retorno de Una Vez. Las almas que ya no tienen la necesidad de bajar del Mundo Astral a los Seis Mundos del Mundo de las Pasiones se llaman Los que Avanzan hacia el No Retorno y Los que No Vuelven a Retornar. En el estado de Los que Avanzan hacia el Estado de Arhat y Los que Han Logrado el Estado de Arhat se encuentran almas capaces de comprender las causas y efectos en el Mundo Causal.
En esta etapa los practicantes del Hinayana pueden entrar en el Nirvana, pero la práctica del Mahayana aún esta lejos de su conclusión. El hombre debe pasar al proceso del Raja-yoga. Uno logrará el Raja-yoga cuando gracias a su poderosa fuerza de voluntad, vea los Tres Gunas (41*) . Lograr el yoga siguiente, el Kundalini-yoga, significa ser capaz de realizar vuelos en el Mundo Astral o en el Mundo Causal a costa de elevar la energía vital, y conocer los tres mundos: el Mundo de los Fenómenos, el Mundo Astral y el Mundo Causal. Y ya que también podemos adquirir el Conocimiento Detallado de las Vidas Pasadas, empezamos a comprender que cualesquier relaciones en este mundo –sean relaciones entre los padres y los hijos o entre el marido y la mujer– se establecen gracias al nexo kármico. Si el hombre lo comprende, entonces en este caso ya está preparado para ver las cosas de una manera imparcial. Y cuando está listo para ver las cosas imparcialmente, él empieza la práctica del Jnana-yoga. Cuando sepa observar y analizar a la perfección las causas y efectos en este Mundo de los Fenómenos y cuando en este mundo no quede más nada que él no pueda comprender, entonces alcanzará el Jnana-yoga. Luego, el hombre pasa al Mahayana-yoga basándose en la Ecuanimidad que desarrolló en el Djnana-yoga.
El Mahayana-yoga presupone tres prácticas: el Amor, la Compasión y el Elogio. Como resultado de estas prácticas todos los enemigos del hombre desaparecen y él se vuelve amado y elogiado por todo el mundo. Gracias a estos grandes Méritos pasa al Yoga Astral. El Yoga Astral puede considerarse como Yoga de la Vacuidad (42*) .
En el Yoga Astral el hombre utiliza el Cuerpo de la Recompensa para sustituir información en el mundo de las imágenes. Esta información es originada por la información que baja del Mundo Causal. Por último, sustituye la información en el Mundo Causal, logra el estado de la transparencia absoluta y entra en el Nirvana.

Estructura del universo y el nacimiento de Quien Ha Logrado

Los que Lograron el Mahayana ya no bajan a este mundo por haberlo conocido y experimentado todo. Sin embargo, en algunos casos ellos reencarnan premeditadamente en el mundo de la dimensión burda a nivel del Cuerpo Fenomenal. Un ejemplo de ello es el de S.S. Dalai-lama (43*) . Quienes bajan en el Cuerpo Fenomenal del Mahayana, poseen naturalmente el Cuerpo de la Ley, el Cuerpo de la Recompensa y el Cuerpo de la Esencia. ¿En qué mundos actúan esos cuerpos? Primero, existe el Mundo Sin Formas a través del cual las almas llegan al Mahayana. Por favor, consideren el Mundo Sin Formas como sinónimo del Mundo Causal. En ese mundo, situado por debajo del Mahayana, existe solamente el alma. El segundo tercio del Mundo Sin Formas, situado por debajo del tercio superior, se proyecta sobre el Mundo Astral (Mundo de las Formas). Estos dos mundos se intersecan. Y el Mundo de los Fenómenos se proyecta sobre el Mundo Astral y el tercio inferior del Mundo Causal. Pues bien, ustedes deben aprender que el Mundo de los Fenómenos es una parte de una estructura triple.
El Cuerpo Fenomenal actúa en aquella parte del Mundo Astral que se interseca con el Mundo de los Fenómenos (en el Mundo Astral Inferior). El Cuerpo de la Recompensa actúa en el Mundo Astral Superior. El Cuerpo de la Recompensa aparece durante el Yoga Astral. El Cuerpo de la Ley actúa en el Mundo Causal Inferior que se interseca con el Mundo de los Fenómenos y el Mundo Astral Inferior; también en el Mundo Causal Medio que se interseca con el Mundo Astral Superior. El Cuerpo de la Esencia actúa en el Mundo Causal Superior. Y el Cuerpo del Diamante ya es el Verdadero Ego.
Si correlacionáramos esos cuerpos con los chakras, tendríamos la siguiente imagen: el Cuerpo Fenomenal se encuentra en el Manipura-chakra; el Cuerpo de la Ley, en el Anahata-chakra; el Cuerpo de la Recompensa, en el Vishuddha-chakra; el Cuerpo de la Esencia, en el Ajna-chakra y el Cuerpo del Diamante, en el Sahasrara-chakra. El logro que lleva al Mahayana es el estado en que el hombre puede utilizar simultáneamente todos los cinco cuerpos: el Cuerpo Fenomenal, el Cuerpo de la Ley, el Cuerpo de la Recompensa, el Cuerpo de la Esencia y el Cuerpo del Diamante. De manera que el Verdadero Ego que alcanzó el Mahayana puede bajar libremente a los mundos más bajos utilizando los cuerpos necesarios para este fin.
Respecto a los cuerpos se puede decir que usualmente el Cuerpo de la Esencia y el Cuerpo de la Ley son invisibles porque consisten en conciencia. Por tanto, para bajar a mundos inferiores se utiliza siempre el Cuerpo de la Recompensa. A propósito, el Altísimo Dios Shiva, al que veo en el Mundo Astral, utiliza el Cuerpo de la Recompensa. Y cuando las almas que han logrado la perfección necesitan bajar al Mundo de los Fenómenos, aprovechan el Cuerpo Fenomenal.