Tras todo fenómeno de este mundo está el sufrimiento. A lo mejor todos pueden comprenderlo. Pero para los monjes tibetanos que han alcanzado el nivel de bodhisattva, como Panchen-lama, Dalai-lama o Kalu Rimpoche y otros, o prácticos hindúes de budismo esotérico como Tilopa y Naropa, o santos famosos que Han Alcanzado el budismo originario, como el Buda Sakyamuni, Sariputta, Mahamoggallana, Anurudda, Khema y Uppalavana, para esos bodhisattvas que gobiernan su trasmigración a su libre albedrío, no existe impermanencia. Ellos han superado la impermanencia, llegando a un estado de alma que les permite renacer según deseo propio.
De "Cuatro prácticas para lograr felicidad.
El mundo de S.Asahara, parte 1".
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