LA TIARA PAPAL Y EL BICORNIO EPISCOPAL

   Tiara: Tocado alto, propio del Papa, con tres coronas que simbolizan su triple autoridad como Papa, obispo y rey, y que remata en una cruz sobre un globo. Dignidad del Sumo Pontífice. (Diccionario Enciclopédico Espasa).  

   Termina en forma de ojiva, plateado, al cual se aplicaban en la época de Bonifacio VIII dos coronas y desde 1314 en adelante, tres coronas (razón por la cual se lo denomina "trireino"), en cuya cima hay un pequeño globo con una cruz de oro.


PABLO VI ABANDONANDO EL
USO DE LA TIARA PONTIFICIA.

   El uso de la Tiara, obligatorio en las ceremonias solemnes, fue abandonado a partir del "Pontificado" de Pablo VI.  

   El rito de coronación del Papa, que se lleva a cabo precisamente por la imposición de la tiara de tres coronas, dice:

  "Recibe la tiara ornada de tres coronas y sabe que tu eres el padre de príncipes y reyes, el Vicario de Nuestro Salvador Jesucristo, al que se deben el honor y la gloria por los siglos de los siglos".

   No vemos en qué impide la tiara la pobreza y humildad del Papa; designa su función y manifiesta su autoridad, que es algo muy distinto. Llevado en la silla gestatoria, la cabeza cernida por la triple corona, San Pío X permanecía humilde y no atraía menos las almas a Nuestro Señor.


 

 

 


   La dignidad de San Pío X y de Pío XII contrasta tan rotundamente con los grotescos Montini y Wojtyla como el día de la noche, como la luz de las tinieblas. Hoy ya no hay Papa en Roma. Un "obispo" que luce el bicornio episcopal usurpa el trono pontificio. Un lobo disfrazado de oveja. ¿Es la hora y el poder de las tinieblas?

"ya no durmáis, no durmáis, pues que no hay paz en la tierra" (Sta. Teresa)