DOCTRINA CATÓLICA

Catecismo de San Pío X
De la Doctrina Cristiana
y de sus partes principales

CAPITULO X 

DEL NOVENO ARTÍCULO 

1º.- De la Iglesia en general 

144.- ¿Qué nos enseña el noveno artículo: EN LA SANTA IGLESIA CATÓLICA: LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS? - El noveno artículo del Credo nos enseña que Jesucristo fundó en la tierra una sociedad visible, que se llama Iglesia Católica, y que todos los que forman parte de esta Iglesia están en comunión entre sí. 

145.- ¿Por qué después del artículo que trata del Espíritu Santo se habla inmediatamente de la Iglesia Católica? - Después del artículo que trata del Espíritu Santo se habla inmediatamente de la Iglesia Católica, para indicar que toda la santidad de la misma Iglesia se deriva del Espíritu Santo, que es el autor de toda santidad. 

146.- ¿Que quiere decir esta palabra Iglesia? - La palabra Iglesia quiere decir convocación o reunión de muchas personas. 

147.- ¿Quién nos ha convocado o llamado a la Iglesia de Jesucristo? - Dios, por una gracia particular, nos ha llamado a la Iglesia de Jesucristo, para que con la luz de la fe y la observancia de la divina ley le demos el debido culto y lleguemos a la vida eterna. 

148.- ¿Dónde se hallan los miembros de la Iglesia? - Los miembros de la Iglesia se hallan, parte en el cielo, y forman la Iglesia triunfante; parte en el purgatorio, y forman la Iglesia purgante o paciente, y parte sobre la tierra, y forman la Iglesia militante. 

149.- ¿Constituyen una sola Iglesia estas diversas partes de la Iglesia? - Si, señor; estas diversas partes de la Iglesia constituyen una misma Iglesia y un solo cuerpo, porque tienen una misma cabeza, que es Jesucristo; un mismo espíritu, que las anima y une entre sí, un mismo fin, que es la bienaventuranza eterna, la cual unos miembros gozan ya y otros la aguardan. 

150.- ¿A qué parte de la Iglesia se refiere principalmente este noveno artículo del Credo? - Este noveno artículo del Credo se refiere principalmente a la Iglesia militante, que es la Iglesia en que estamos los presentes. 

2º.- De la Iglesia en particular 

151.- ¿Qué es la Iglesia Católica? - La Iglesia Católica es la sociedad o congregación de todos los bautizados que, viviendo en la tierra, profesan la misma fe y ley de Cristo, participan en los mismos Sacramentos y obedecen a los legítimos Pastores, principalmente al Romano Pontífice. 

152.- Decid distintamente: ¿qué es necesario para ser miembro de la Iglesia? - Para ser miembro de la Iglesia es necesario estar bautizado, creer y profesar la doctrina de Jesucristo, participar de los mismos Sacramentos, reconocer al Papa y a los otros Pastores legítimos de la Iglesia. 

153.- ¿Quienes son los Pastores legítimos de la Iglesia? - Los Pastores legítimos de la Iglesia son el Romano Pontífice, o sea, el Papa, que es el Pastor universal, y los Obispos. Además, con dependencia de los Obispos y del Papa, tienen parte en el oficio de Pastores los otros sacerdotes, y en especial los párrocos. 

154.- ¿Por qué decís que el Romano Pontífice es el Pastor universal de la Iglesia? - Porque Jesucristo dijo a San Pedro, primer Papa: “Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y te daré las llaves del reino de los cielos, y todo lo que atares en la tierra será atado en el cielo, y lo que desatares en la tierra, será desatado también en el cielo.” Y, asimismo, le dijo: “Apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas.” 

155.- ¿No pertenecen, pues, a la Iglesia de Jesucristo tantas sociedades de hombres bautizados que no reconocen al Romano Pontífice por cabeza? - No, señor; todos los que no reconocen al Romano Pontífice por cabeza no pertenecen a la Iglesia de Jesucristo. 

156.- ¿Cómo puede distinguirse la Iglesia de Jesucristo de tantas sociedades o sectas fundadas por los hombres y que se dicen cristianas? - Entre tantas sociedades o sectas fundadas por los hombres, que se dicen cristianas, puedese fácilmente distinguir la verdadera Iglesia de Jesucristo por cuatro notas, porque sólo ella es UNA, SANTA, CATÓLICA y APOSTÓLICA. 

157.- ¿Por qué la Iglesia verdadera es UNA? - La Iglesia verdadera es UNA porque sus hijos, de cualquier tiempo y lugar, están unidos entre sí en una misma fe, un mismo culto, una misma ley y en la participación de unos sacramentos bajo una misma cabeza visible, el Romano Pontífice. 

158.- ¿No podría haber más Iglesias? - No, señor; no puede haber más Iglesias, porque así como no hay más que un solo Dios, una Fe y un solo Bautismo, así no hay ni puede haber más que una sola y verdadera Iglesia. 

159.- ¿Pero no se llaman también Iglesias los fieles unidos de una nación o diócesis? - Se llaman también Iglesias los fieles unidos de una nación o diócesis, pero con todo eso no son sino partes de la Iglesia universal, con la que forman una sola Iglesia. 

160.- ¿Por qué la Iglesia verdadera es SANTA? - La Iglesia verdadera es SANTA porque santa es su cabeza invisible, que es Jesucristo, santos muchos de sus miembros, santas su fe, su ley, sus sacramentos, y fuera de ella no hay ni puede haber verdadera santidad. 

161.- ¿Por qué la Iglesia verdadera es CATÓLICA? - La Iglesia verdadera es CATÓLICA que quiere decir universal, porque abraza los fieles de todos los tiempos y lugares, de toda edad y condición, y todos los hombres del mundo son llamados a formar parte de ella. 

162.- ¿Por qué la Iglesia verdadera es, además, APOSTÓLICA? - La Iglesia verdadera es, además, APOSTÓLICA porque se remonta sin interrupción hasta los Apóstoles; porque cree y enseña todo lo que ellos creyeron y enseñaron y porque es guiada y gobernada por los Pastores que legítimamente les suceden. 

163.- ¿Y por qué la Iglesia verdadera se llama, asimismo, ROMANA? - La Iglesia verdadera se llama, asimismo, ROMANA porque los cuatro caracteres de unidad, santidad, catolicidad y apostolicidad se hallan sólo en la Iglesia que reconoce por cabeza al Obispo de Roma, sucesor de San Pedro. 

164.- ¿Cómo está constituida la Iglesia de Jesucristo? - La Iglesia de Jesucristo está constituida como una verdadera y perfecta sociedad, y en ella, como en toda persona moral, podemos distinguir alma y cuerpo. 

165.- ¿En que consiste el alma de la Iglesia? - El alma de la Iglesia consiste en lo que tiene de interno y espiritual, que es la fe, la esperanza y la caridad, los dones de la gracia y del Espíritu Santo y todos los celestiales tesoros que le provienen de los merecimientos de Cristo Redentor y de los Santos. 

166.- ¿En qué consiste el cuerpo de la Iglesia? - El cuerpo de la iglesia cosiste en lo que tiene de visible y externo, ya en la asociación de los congregados, ya en el culto y ministerio de la enseñanza, ya en su orden exterior y gobierno. 

167.- ¿Basta para salvarse ser como quiera miembro de la Iglesia Católica? - No, señor; no basta para salvarse ser como quiera miembro de la Iglesia Católica, sino que es necesario ser miembro vivo. 

168.- ¿Cuáles son los miembros vivos de la Iglesia? - Los miembros vivos de la Iglesia son todos y solamente los justos; a saber, los que están actualmente en gracia de Dios. 

169.- ¿Y cuales son los miembros muertos? - Miembros muertos de la Iglesia son los fieles que se hallan en pecado mortal. 

170.- ¿Puede alguien salvarse fuera de la Iglesia Católica, Apostólica, Romana? - No, señor; fuera de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, nadie puede salvarse, como nadie pudo salvarse del diluvio fuera del Arca de Noé, que era figura de esta Iglesia. 

171.- ¿Cómo, pues, se salvaron los antiguos Patriarcas y Profetas y todos los otros justos del Antiguo Testamento? - Todos los justos del Antiguo Testamento se salvaron en virtud de la fe que tenían en Cristo futuro, mediante la cual ya pertenecían espiritualmente a esta Iglesia. 

172.- ¿Podría salvarse quien sin culpa se hallase fuera de la Iglesia? - Quién sin culpa, es decir, de buena fe, se hallase fuera de la Iglesia y hubiese recibido el bautismo o, a lo menos, tuviese el deseo implícito de recibirlo y buscase, además, sinceramente la verdad y cumpliese la voluntad de Dios lo mejor que pudiese, este tal, aunque separado del cuerpo de la Iglesia, estaría unido al alma de ella y, por consiguiente, en camino de salvación. 

173.- ¿Se salvaría quien, siendo miembro de la Iglesia Católica, no practicase sus enseñanzas? - Quien, siendo miembro de la Iglesia Católica, no practicase sus enseñanzas, sería miembro muerto y, por tanto, no se salvaría, pues para la salvación de un adulto se requiere no sólo el bautismo y la fe, sino también obras conformes a la fe. 

174.- ¿Estamos obligados a creer todas las verdades que la Iglesia nos enseña? - Si, señor; estamos obligados a creer todas las verdades que la Iglesia nos enseña, y Jesucristo declara que el que no cree, ya está condenado. 

175.- ¿Estamos, además, obligados a cumplir todo lo que la Iglesia nos manda? - Si, señor; estamos obligados a cumplir todo lo que la Iglesia nos manda, porque Jesucristo ha dicho a los Pastores de la Iglesia: “El que a vosotros oye, a Mí me oye, y el que a vosotros desprecia, a Mí me desprecia”. 

176.- ¿Puede errar la Iglesia en los que nos propone para creer? - No, señor; en las cosas que nos propone para creer la Iglesia no puede errar, porque, según la promesa de Jesucristo, está perennemente asistida por el Espíritu Santo. 

177.- ¿Es, pues, infalible la Iglesia Católica? - Si, señor; la Iglesia católica es infalible, y a esta causa, los que rechazan sus definiciones pierden la fe y se hacen herejes. 

178.- ¿Puede la Iglesia Católica ser destruida o perecer? - No, señor; la Iglesia Católica puede ser perseguida, pero no destruida ni perecer. Durará hasta el fin del mundo, porque hasta el fin del mundo estará con ella Jesucristo, como El lo ha prometido. 

179.- ¿Por qué es tan perseguida la Iglesia Católica? - La Iglesia Católica es tan perseguida porque también fue perseguido su divino Fundador y porque reprueba los vicios, combate pasiones y condena todas las injusticias y errores. 

180.- ¿Tienen los católicos otros deberes que cumplir con la Iglesia? - Todo católico ha de profesar un amor sin límites a la Iglesia, estimarse por infinitamente honrado y feliz de pertenecer a ella, y procurar su gloria y acrecentamiento por cuantos medios pueda. 

3º.- De la Iglesia docente y de la Iglesia discente o enseñada

 181.- ¿Hay alguna distinción entre los miembros que componen la Iglesia? - Entre los miembros que componen la Iglesia hay una distinción notabilísima, porque hay en ella quien manda y quien obedece, quien enseña y quien es enseñado. 

182.- ¿Cómo se llama la parte de la Iglesia que enseña? - La parte de la Iglesia que enseña se llama docente o enseñante. 

183.- ¿Como se llama la parte de la Iglesia que aprende? - La parte de la Iglesia que aprende se llama discente o enseñada. 

184.- ¿Quien ha establecido esta distinción en la Iglesia? - Esta distinción en la Iglesia la ha establecido el mismo Jesucristo. 

185.- ¿Son, pues, dos Iglesias distintas la IGLESIA DOCENTE y la IGLESIA DISCENTE? - La Iglesia docente y la Iglesia discente son partes distintas de una misma y única Iglesia, como en el cuerpo humano la cabeza es distinta a los otros miembros, y con todo forma con ellos un solo cuerpo. 

186.- ¿Quienes componen la Iglesia DOCENTE? - Componen la Iglesia docente todos los Obispos, con el Romano Pontífice a la cabeza, ya se hallen dispersos, ya congregados en Concilio. 

187.- ¿Y quienes componen la Iglesia DISCENTE o enseñada? - Componen la Iglesia discente o enseñada todos los fieles. 

188.- ¿Quiénes, pues, tienen en la Iglesia la autoridad de enseñar? - La autoridad de enseñar la tienen en la Iglesia el Papa y los Obispos, y con dependencia de ellos, los demás sagrados Ministros. 

189.- ¿Estamos obligados a escuchar a la IGLESIA DOCENTE? - Si, por cierto; todos estamos obligados a escuchar a la Iglesia docente, so pena de eterna condenación, porque Jesucristo dijo a los Pastores de la Iglesia en la persona de los Apóstoles: “El que a vosotros oye, a Mí me oye, y el que a vosotros desprecia, a Mí me desprecia”. 

190.- ¿Tiene la Iglesia algún otro poder además de la autoridad de enseñar? - Si, señor; además de la autoridad de enseñar, tiene la Iglesia especialmente el poder de administrar las cosas santas, hacer leyes y exigir su cumplimiento. 

191.- ¿Viene del pueblo el poder que tienen los miembros de la Jerarquía eclesiástica? - El poder que tienen los miembros de la Jerarquía eclesiástica no viene del pueblo, y decir esto sería herejía, sino que viene únicamente de Dios. 

192.- ¿A quién compete el ejercicio de estos poderes? - El ejercicio de estos poderes compete exclusivamente al orden jerárquico, es decir, al Papa y a los Obispos a él subordinados. 

4º.- Del Papa y de los Obispos 

193.- ¿Quién es el Papa? - El Papa, a quien llamamos asimismo Sumo Pontífice o también Romano Pontífice, es el sucesor de San Pedro en la Cátedra de Roma, Vicario de Jesucristo y cabeza visible de la Iglesia. 

194.- ¿Por qué el Romano Pontífice es sucesor de San Pedro? - El Romano Pontífice es sucesor de San Pedro porque San Pedro unió en su persona la dignidad de Obispo de Roma y de cabeza dela Iglesia; estableció en Roma por divina disposición su sede, y allí murió; por esto, el que es elegido Obispo de Roma, es también heredero de toda su autoridad. 

195.- ¿Por qué el Romano Pontífice es Vicario de Jesucristo? - El Romano Pontífice es Vicario de Jesucristo porque le representa en la tierra y hace sus veces en el gobierno de la Iglesia. 

196.- ¿Porqué el Romano Pontífice es cabeza visible de la Iglesia? - El Romano Pontífice es cabeza visible de la Iglesia porque él la rige visiblemente con la misma autoridad de Jesucristo, que es cabeza invisible. 

197.- ¿Qué dignidad es, pues, la del Papa? - La dignidad del Papa es la mayor entre todas las dignidades de la tierra, con que ejerce supremo e inmediato poder sobre todos y cada uno de los Pastores y de los fieles. 

198.- ¿Puede errar el Papa al enseñar a la Iglesia? - El Papa no puede errar, es decir, es infalible en las definiciones que atañen a la fe y a las costumbres. 

199.- ¿Por qué motivo el Papa es infalible? - El Papa es infalible por la promesa de Jesucristo y por la continua asistencia del Espíritu Santo. 

200.- ¿Cuándo es infalible el Papa? El Papa es infalible sólo cuando, en calidad de Pastor y Maestro de todos los cristianos, en virtud de su suprema y apostólica autoridad, define que una doctrina acerca de la fe o de las costumbres debe ser abrazada por la Iglesia universal. 

201.- ¿Qué pecado cometería el que no creyese las solemnes definiciones del Papa? - El que no creyese las solemnes definiciones del Papa, o aunque sólo dudase de ellas, pecaría contra la fe, y si persistiese obstinadamente en esa incredulidad, ya no sería católico, sino hereje. 

202.- ¿A qué fin ha otorgado Dios al Papa el don de la infalibilidad? - Dios ha otorgado al Papa el don de la infalibilidad para que todos estemos ciertos y seguros de la verdad que la Iglesia nos enseña. 

203.- ¿Cuándo definió la Iglesia que el Papa es infalible? - La Iglesia definió en el Concilio Vaticano I que el Papa es infalible, y si alguien presumiese contradecir a esta definición, sería hereje y excomulgado. 

204.- ¿Ha establecido la Iglesia alguna nueva verdad de fe al definir que el Papa es infalible? - No, señor; la Iglesia no ha establecido ninguna nueva verdad de fe al definir que el Papa es infalible, sino solamente ha definido, para oponerse a los nuevos errores, que la infalibilidad del Papa, contenida ya en la Sagrada Escritura y en la Tradición, es una verdad revelada por Dios, y, por consiguiente, que ha de creerse como dogma o artículo de fe. 

205.- ¿Cómo debe portarse todo católico respecto al Papa? - Todo católico debe reconocer al Papa como Padre, Pastor y Maestro universal, y estar unido con él de entendimiento y corazón. 

206.- ¿Quienes son por institución divina los personajes más venerados de la Iglesia después del Papa? - Los personajes más venerados de la Iglesia después del Papa son, por institución divina, los Obispos. 

207.- ¿Quienes son los Obispos? - Los Obispos son los Pastores de los fieles, puestos por el Espíritu Santo para gobernar la Iglesia de Dios en las sedes que se les han encomendado, con dependencia del Romano Pontífice. 

208.- ¿Qué es el Obispo en su propia diócesis? - El Obispo en su propia diócesis es el Pastor legítimo, el Padre, el Maestro, el superior de todos los fieles, eclesiásticos y seglares, que pertenecen a la misma diócesis. 

209.- ¿Por qué llamamos al Obispo Pastor legítimo? - Llamamos al Obispo Pastor legítimo porque la jurisdicción, esto es, el poder que tiene de gobernar a los fieles de la propia diócesis, se le ha conferido según las normas y leyes de la Iglesia. 

210.- ¿De quienes son sucesores el Papa y los Obispos? - El Papa es sucesor de San Pedro, Príncipe de los Apóstoles, y los Obispos son sucesores de los Apóstoles en lo que mira al gobierno ordinario de la Iglesia. 

211.- ¿Debe el fiel estar unido a su propio Obispo? - Sí, señor; todo fiel, eclesiástico o seglar, debe estar unido de entendimiento y de corazón a su propio Obispo, en gracia y comunión con la Sede Apostólica. 

212.- ¿Cómo debe portarse todo fiel con su propio Obispo? - Todo fiel, eclesiástico o seglar, debe reverenciar, amar y honrar a su Obispo y prestarle obediencia en todo lo que se refiere a la cura de almas y al gobierno espiritual de la diócesis. 

213.- ¿De quién se ayuda el Obispo en la cura de almas? - El Obispo, en la cura de almas, se ayuda de los sacerdotes, y principalmente de los párrocos. 

214.- ¿Quién es el párroco? - El Párroco es un sacerdote designado para presidir y dirigir con dependencia del Obispo, una parte de la diócesis, que se llama parroquia.

 215.- ¿Cuáles son los deberes de los fieles para con su párroco? - Los fieles deben estar unidos con su párroco, escucharle con docilidad y profesarle respeto y sumisión en todo lo que atañe al régimen de la Parroquia. 5º.- De la Comunión de los Santos 

216.- ¿Qué nos enseña el noveno artículo del Credo con aquellas palabras: LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS? - Con las palabras: La comunión de los Santos, el noveno artículo del Credo nos enseña que en la Iglesia, por la íntima unión que existe entre todos sus miembros, son comunes los bienes espirituales que le pertenecen, así internos como externos. 

217.- ¿Cuáles son en la Iglesia los bienes comunes internos? - Los bienes comunes internos en la Iglesia son: la gracia que se recibe en los Sacramentos, la fe, la esperanza, la caridad, los méritos infinitos de Jesucristo, los merecimientos sobreabundantes de la Virgen y de los Santos y el fruto de todas las buenas obras que se hacen en la misma Iglesia. 

218.- ¿Cuáles son los bienes comunes externos en la Iglesia? - Los bienes externos comunes en la Iglesia son: los Sacramentos, el Santo Sacrificio de la Misa, las públicas oraciones, las funciones religiosas y las demás prácticas exteriores que unen a los fieles entre sí. 

219.- ¿Entran todos los hijos de la Iglesia en esta comunión de bienes? - En la comunión de los bienes internos entran los cristianos que están en gracia de Dios; pero los que están en pecado mortal no participan de estos bienes. 

220.- ¿Por qué no participan de estos bienes los que están en pecado mortal? - Porque la gracia de Dios es la que junta a los fieles con Dios y entre sí; por esto, lo que están en pecado mortal, como no tienen la gracia de Dios, son excluidos de la comunión de los bienes espirituales. 

221.- Luego, ¿no perciben ninguna utilidad de los bienes internos y espirituales de la Iglesia los cristianos que están en pecado mortal? - Los cristianos que están en pecado mortal no dejan de percibir alguna utilidad de los bienes internos y espirituales de la Iglesia de que están privados, en cuanto conservan el carácter de cristiano, que es indeleble, y son ayudados de las oraciones y buenas obras de los fieles para alcanzar la gracia de convertirse a Dios. 

222.- ¿Pueden participar de los bienes externos de la Iglesia los que están en pecado mortal? - Los que están en pecado mortal pueden participar de los bienes externos de la Iglesia, con tal que no estén separados de la Iglesia por la excomunión. 

223.- ¿Por qué los miembros de esta comunión, tomados en conjunto, se llaman santos? Los miembros de esta comunión se llaman santos, porque todos son llamados a la santidad y fueron santificados por medio del Bautismo, y muchos de ellos han llegado ya a la perfecta santidad. 

224.- ¿Se extiende también al cielo y al purgatorio la comunión de los santos? - Si, señor; la comunión de los santos se extiende también al cielo y al purgatorio, porque la caridad une las tres Iglesias: triunfante, purgante y militante; los santos ruegan a Dios por nosotros y por las almas del purgatorio, y nosotros damos honor y gloria a los santos, y podemos aliviar a las almas del purgatorio aplicándoles en sufragio misas, limosnas, indulgencias y otras buenas obras. 6º.- De los que están fuera de la Iglesia 

225.- ¿Quiénes son los que no pertenecen a la comunión de los Santos? - No pertenecen a la comunión de los santos en la otra vida los condenados, y en ésta, los que están fuera de la verdadera Iglesia. 

226.- ¿Quiénes están fuera de la verdadera Iglesia? - Está fuera de la verdadera Iglesia los infieles, los judíos, los herejes, los apóstatas, los cismáticos y los excomulgados. 

227.- ¿Quiénes son los infieles? - Infieles son los que no tienen el Bautismo ni creen en Jesucristo, o porque creen y adoran falsas divinidades, cómo los idólatras, o porque, aun admitiendo al único verdadero Dios, no creen en Cristo Mesías, ni como venido ya en la persona de Jesucristo ni como que ha de venir: tales son los mahometanos y otros semejantes. 

228.- ¿Quiénes son los judíos? - Judíos son los que profesan la ley de Moisés, no han recibido el Bautismo y no creen en Jesucristo. 

229.- ¿Quiénes son los herejes? - Herejes son los bautizados que rehúsan con pertinacia creer alguna verdad revelada por Dios y enseñada como de fe por la Iglesia Católica; por ejemplo los arrianos, los nestorianos y las varias sectas de los protestantes. 

230.- ¿Quiénes son los apóstatas? - Apóstatas son los que abjuran, esto es, niegan con acto externo la fe católica que antes profesaban. 

231.- ¿Quiénes son los cismáticos? - Cismáticos son los cristianos que, sin negar explícitamente ningún dogma, se separan voluntariamente de la Iglesia de Jesucristo, esto es, de sus legítimos Pastores. 

232.- ¿Quiénes son los excomulgados? - Los excomulgados son aquellos que por faltas gravísimas son castigados por el Papa o por el Obispo con la pena de excomunión, en cuya virtud son, como indignos, separados del cuerpo de la Iglesia, que espera y desea su conversión. 

233.- ¿Débese temer la excomunión? - La excomunión debe temer grandemente, porque es la pena más grave y más terrible que puede imponer la Iglesia a sus hijos rebeldes y obstinados. 

234.- ¿De qué bienes quedan privados los excomulgados? - Los excomulgados quedan privados de las oraciones públicas, de los sacramentos, de las indulgencias y, después de sentencia condenatoria o declaratoria, también de sepultura eclesiástica. 

235.- ¿Podemos ayudar en alguna manera a los excomulgados? - Podemos ayudar en alguna manera a los excomulgados y a todos los que están fuera de la Iglesia con saludables avisos, con oraciones y buenas obras, suplicando al Señor que por su misericordia les otorgue la gracia de convertirse a la fe y entrar en la comunión de los Santos.

CAPITULO XI

DEL DÉCIMO ARTÍCULO 

236.- ¿Qué nos enseña el décimo artículo: EL PERDÓN DE LOS PECADOS? - El décimo artículo del Credo nos enseña que Jesucristo ha dejado a su Iglesia el poder de perdonar los pecados.

237.- ¿Puede la Iglesia perdonar toda clase de pecados? - Si, señor; la Iglesia puede perdonar todos los pecados, por muchos y graves que sean, porque Jesucristo le ha dado plena potestad para atar y desatar.

238.- ¿Quiénes son los que en la Iglesia ejercen esta potestad de perdonar los pecados? - Los que en la Iglesia ejercen la potestad de perdonar los pecados son, en primer lugar, el Papa, que es el único que posee la plenitud de esta potestad; luego los Obispos y, con dependencia de los Obispos, los sacerdotes.

239.- ¿Cómo perdona la Iglesia los pecados? - La Iglesia perdona los pecados por los méritos de Jesucristo, confiriendo los sacramentos instituidos por El con este fin, principalmente el Bautismo y la Penitencia. 

CAPITULO XII

DEL UNDÉCIMO ARTÍCULO

240.- ¿Qué nos enseña el undécimo artículo: LA RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS? - El undécimo artículo del Credo nos enseña que todos los hombres resucitarán, volviendo a tomar cada alma el cuerpo que tuvo en esta vida.

241.- ¿Cómo sucederá la resurrección de los muertos? - La resurrección de los muertos sucederá por la virtud de Dios omnipotente, a quien nada es imposible.

242.- ¿Cuándo acaecerá la resurrección de los muertos? - La resurrección de los muertos acaecerá al fin del mundo, y entonces seguirá el juicio universal.

243.- ¿Por qué ha dispuesto Dios la resurrección de los cuerpos? - Dios ha dispuesto la resurrección de los cuerpos para que, habiendo el alma obrado el bien o el mal junto con el cuerpo, sea también junto con el cuerpo premiada o castigada.

244.- ¿Resucitarán todos los hombres de la misma manera? - No, señor; sino que habrá grandísima diferencia entre los cuerpos de los escogidos y los cuerpos de los condenados, porque sólo los cuerpos de los escogidos tendrán, a semejanza de Jesucristo resucitado, las dotes de los cuerpos gloriosos.

245.- ¿Cuáles son las dotes que adornarán los cuerpos de los escogidos? - Las dotes que adornarán los cuerpos gloriosos de los escogidos son: 1ª., la impasibilidad, por la que no podrán ya estar sujetos a males y dolores de ningún género, ni a la necesidad de comer, descansar o de otra cosa; 2ª., la claridad, con la que brillarán como el sol y como otras tantas estrellas; 3ª., la agilidad, con que podrán trasladarse en un momento y sin fatiga de un lugar a otro, y de la tierra al cielo; 4ª., la sutileza, con que sin obstáculo alguno podrán penetrar cualquier cuerpo, como lo hizo Jesucristo resucitado.

246.- ¿Cómo serán los cuerpos de los condenados? - Los cuerpos de los condenados estarán privados de las dotes de los cuerpos gloriosos y llevarán la horrible marca de su eterna condenación. 

CAPÍTULO XIII

DEL DUODÉCIMO ARTÍCULO 

247.- ¿Qué nos enseña el último artículo: Y LA VIDA ETERNA? - El último artículo del Credo nos enseña que, después de la vida presente, hay otra, o eternamente bienaventurada para los escogido en el cielo o eternamente infeliz para los condenados al infierno.

248.- ¿Podemos comprender la bienaventuranza del cielo? - No, señor; no podemos comprender la bienaventuranza de la gloria, porque sobrepuja nuestro limitado entendimiento y porque los bienes del cielo no pueden compararse con los bienes de este mundo.

249.- ¿En que consiste la bienaventuranza delos escogidos? - La bienaventuranza de los escogidos consiste en ver, amar y poseer por siempre a Dios, fuente de todo bien.

250.- ¿En qué consiste la infelicidad de los condenados? - La infelicidad de los condenados consiste en ser privados por siempre de la vista de Dios y castigados con eternos tormentos en el infierno.

251.- ¿Son únicamente para las almas los bienes del cielo y los males del infierno? - Los bienes del cielo y los males del infierno son ahora únicamente para las almas, porque solamente las almas está ahora en el cielo o en el infierno; pero después de la resurrección, los hombres serán o felices o atormentados para siempre en alma y cuerpo.

252.- ¿Serán iguales para los bienaventurados los bienes del cielo y para los condenados los males del infierno? - Los bienes del cielo para los bienaventurados y los males de infierno para los condenados serán iguales en la sustancia y en la duración eterna; más en la medida o en los grados serán mayores o menores, según los méritos o deméritos de cada cual.

253.- ¿Que quiere decir la palabra AMÉN al final del Credo? - La palabra Amén al fin de las oraciones significa: Así sea; al fin del Credo significa: Así es, que vale tanto como decir: Creo que es la pura verdad cuanto en estos doce artículos se contiene y estoy más cierto de ello que si lo viese con mis propios ojos.