La Madre:
La Paz de Dios Todopoderoso, esté con
todos vosotros.
PUBLICO: Y con tu Espíritu Madre.
La Madre: Ave María Purísima.
PUBLICO: Sin pecado concebida.
La Madre:
¡Oh ESPAÑA! Y ante la presencia de Dios, cierras tus ojos, lo arrinconas hacia un lado
olvidándolo, te has olvidado de
Dios, por eso has quedado atrapada en
las garras del enemigo. Te has olvidado de
Dios, y la oración se ha
olvidado.
Ya las almas no se sacrifican como algunas almas hacían
antes. ¿Qué ha sido de tí al
haberte olvidado de Dios? En tí ha entrado la maldad y
para echarla ha entrado
Dios.
Ha entrado la maldad hiriéndote en lo
más profundo y dejándote como dormida y ahí estás con tus ojos
cerrados ignorando la presencia de
Dios. Por eso
Dios
también ha
llegado hasta tí para echar la maldad que te ha herido.
Piensa que mi
Corazón también está dañado de dolor por las almas, almas que cometen
errores, errores que quedan gravados.
Tú también has cometido uno, España, y es aquél de
haberte olvidado de
Dios. Ese error es muy grave: Te has
olvidado de
Dios, pero EL no se ha olvidado de tí, y ha visto que sus
hijos necesitan ayuda; ayuda de EL y EL ha venido para ayudar a sus
hijos.
Y también ha mandado a un Guerrero para ayudarte a tí y
también a los que en tí habitan. Te has olvidado de
Dios
ignorando que el poder de
Dios
es sumamente infinito y EL ha venido
hasta tí para liberarte de esa herida tan profunda.
Por tí ha pasado el anticristo y
en tí está; y hay muchas almas que no quieren creer mi Palabra
hijo mío. Pero Yo así digo: «El día en que el anticristo sea derrotado y destruido,
su grito
se oirá en toda la tierra hijo mío. Y el día
que sea derrotado, otro grito de alabanza se oirá en toda la
Tierra, el grito que se dirige hacia Dios.»
Tú ya lo sabes hijo mío, y tú me
entiendes; también entiendes a tus hermanos de este lugar que acuden a
escuchar mi Palabra y a que Yo les ayude, pero ellos no piensan que
antes de que Yo les ayude hijo mío, tienen que pedir a
Dios
por el
alma.
Ha habido muchas almas hijo
mío, y en tí,
España, que no han escuchado mi Palabra, y por querer sanar de
cuerpo han sanado, pero mírales ahora: ¡Mira su alma! ¿Qué les
ha pasado?
Mi Palabra viene a salvaros hijos míos. Mi
Inmaculado Corazón triunfará en la Tierra hijo mío. Y no tengas miedo que Yo voy
contigo siempre: la Luz de mi Inmaculado Corazón te ilumina para que
sigas el camino que tú has escogido hijo mío.
España duerme, pero no despierta
ante la Palabra del Señor Yahvé:
«Sobre
tí vendrán cinco años de hambre, y muchas almas no lo creen, pero
cuando estén encima hijo mío, todo serán gritos de perdón...,
pero ya será demasiado tarde hijo mío.»
Pero tú
España..., te has quedado ahí; has caminado ni hacia un lado ni hacia
otro. Te han herido profundamente y ahí has quedado; no te has dado
cuenta que por tí ha pasado el anticristo, y tampoco
te has dado cuenta que por tí ha pasado y está
Dios. Y los que en
tí habitan niegan la Palabra de su
Dios.
Una Palabra que,
según ellos, jamás se
podrá oir; pero ellos no saben hijo mío y no
piensan, que
Dios
es el Señor, y es el Rey de
este Mundo. Y EL puede
venir e ir hijo mío.
Has escuchado mi palabra España: estos son los
últimos AVISOS que van hacia tí. Por eso despierta, la Mano de
Dios
te guiará, pero confía en EL. Y Yo os bendigo como
Dios-Padre os
bendice...
Padre Eterno: En Mi Nombre.
El Maestro:
En el Mío.
La Madre:
Y con la Luz
de mi amado Esposo el Espíritu Santo, ya estáis bendecidos.
PUBLICO: Gracias Madre.
La Madre:
Llegó la hora de marcharnos hijo mío,
pero tú España, recuerda que te has olvidado de Dios, EL no se ha olvidado de tí. Adiós hijos.
PUBLICO: Adiós Madre.
Padre Eterno: Adiós hijos.
PUBLICO Adiós Padre.
El Maestro: Adiós hijos.
PUBLICO: Adiós Maestro._