Mensaje especial de la
Santísima Virgen
RECIBIDO EN TALAVERA DE LA REINA, A TRAVÉS
DE JOSÉ LUÍS
MANZANO, EL 16 DE ABRIL DE 1988.
-segunda parte-
La Madre: La Paz de Dios
Todopoderoso esté con vosotros. PUBLICO: Y con tu Espíritu
Madre.
La
Madre: Ave María
Purísima. PUBLICO: Sin pecado
concebida.
La
Madre:
Hijo mío, de nuevo estoy ante tí,
una vez más. Como ves Yo cumplo mi palabra, igual que tú cumples la tuya
hijo mío.
¿Para qué mentir hijo mío?, si luego se verá. ¡Pobres almas, aquéllas que
intentan ser más que Dios! Pero no lo consiguen, porque Dios solo hay uno
hijo mío. Solo hay Uno.
Yo he venido hasta aquí hijo mío, para descubrir a aquéllos que intentan
destrozar el plan que es de Dios; pero el plan de Dios es sagrado, como Dios
hijo mío.
"Aquellas almas que intentan destruir esos planes y
llevarse a las almas con Satán son los
falsos profetas, aquéllos que
vienen de parte de Satán hijo mío". Y vienen para
equivocar a las almas, para llevarlas por el camino equivocado.
Un camino que no empieza, pero un camino que sí que acaba. Es decir hijo
mío: "Un camino que no tiene principio, pero sí tiene fin. Y el fin es el
abismo hijo mío, donde van aquellas almas que han intentado imitar a Dios.
Yno han podido porque a Dios nadie le imita hijo mío".
Dios es grande entre los hombres, por eso Dios solo hay Uno hijo mío.
Y Él es quien reina entre los humanos de este mundo y allí en el Cielo hijo
mío.
Cuando Yo miro este mundo y veo a aquéllos que se alejan por ese camino que
no tiene principio, me pongo muy triste, como ahora hijo mío. Porque
nadie hace nada por Ellos.
Hay muchas almas que así dicen, que si no hacen nada por esas almas es
porque Yo no se lo digo. Hijo mío, pues esas almas se equivocan. Esas
almas no pueden hacer nada contra esos falsos profetas.
Para eso Dios ha enviado a alguien para destruirlos. ¡Sí hijo mío!, porque
si no se les destruye acabarán con las almas, y ya son bastantes las que se
han condenado.
Yo hijo mío, le pido al Padre por mis hijos. Hazlo tú así y pide por tus
hermanos en Cristo.
Yo amo a mis hijos como una Madre ama a sus hijos. ¡Sí hijo mío! Cuando el
Padre castiga al hijo, la madre sufre. Yo también sufro hijo mío,
porque son errores pequeños, y ellos no saben rectificarlos. Por eso
es difícil hijo mío.
Que mis hijos comprendan mis palabras porque aún no han comprendido las
suyas hijo mío. Es triste, muy triste.
¡Ay hijo mío!, Yo vengo aquí, a este lugar para hablar con mis hijos, pero
tú hijo mío, me escuchas de corazón y ellos también. Y tú sigues mis
palabras y ellos lo intentan.
Pero tú enséñales. Dios te ha enviado y nada, nada ni nadie, te puede
detener hijo mío. Acuérdate que en tus manos está la salvación de
estas almas. La salvación de estas almas es muy importante hijo mío, es muy
importante para ellos, porque ellos quieren llega hasta el Padre, y por
culpa de los profetas falsos marchan con Satán hjo mío.
Pero ese momento llegó en que aquéllos que intentan imitar a Dios van a ser
descubiertos hijo mio, porque ya no pueden seguir ocultando la mentira.
¿Para qué mienten hijo mío Si la verdad se ha de ver? No piensan que cuando
ellos mueran serán juezagas sus almas, y por tantos errores, y por haber
seguido esos caminos, serán condenadas.
Yo señalo el camino hijo mío, y el camino que yo señalo tiene principio y
también tiene fin hijo mío. Yo quiero que me sigáis y améis a vuestro
Dios, como Él así también os ama.
Porque Dios es grande, muy grande hijo mío. Igual que tú, pero Dios es
mucho más. Pedidme hijos míos, pero pedidme sobre aquello que se ha hablado,
y se ha de hablar hijos míos.
PUBLICO: ¡Madre!
La Madre:
¡Dime!
PUBLICO: Yo quisiera que Tú me dijeras qué debo
hacer con los objetos que nos ha dado ese alma, y que ha venido por aquí:
unos rosarios y unas estampas. ¿Qué debemos hacer con ellas?
La Madre:
Bien hija mía, tráelos ante mi imagen, y Yo les
quitaré esa bendición que no es de Dios, y Yo les daré mi Bendición, que es
de Dios. Y así te podrá valer. ¿Algo más?
PUBLICO:
Sobre los libros que yo pregunté sobre la vidente María...,
¿son verdaderos?
La Madre:
Dime hija mía, ¿ha demostrado si ama a Dios?
PUBLICO: Sí Madre.
La Madre:
¿Ha demostrado que ha sufrido por lo que le hicieron a mi Hijo?
PUBLICO: Sí Madre.
La Madre:
Lo has visto hija mía, escucha mi palabra y
sigue mi camino. ¿Algo más?
PUBLICO: Madre, yo te pido por todas las almas del
mundo, para que no hay atantas muerts coo hay en España. Y para que acabe el
terrorismo.
La Madre:
Son almas que más les valiera no haber nacido. Dañan
así a personas, y así a Mí me dañan. ¿Algo más?
PUBLICO:
Yo quisiera saber en la parte que es falso, ese alma que Tú nos dijiste el
otro día, o sea: de MONTECRISTO, y en la parte que es celestial. Yo
creo que hay cosas que habla divinas de Dios y de Tí, y de tu Hijo, y de
todos los celestiales.
La Madre:
Lo harán tan bien que os engañarán.
Acordaos de aquella frase que Yo os dije:
"Y lo harán tan bien que os engañarán".
Acordaos de hace tiempo, mucho tiempos, os dije:
"Y el anticristo viste de blanco, y así
lleva su rosario y una cruz; él habla de mí, y así del Padre y así de mi
Hijo".
Acordados y que no se olvide nunca. Y escuchad todos mis mensajes y os
daréis cuenta. ¿Algo más?
PUBLICO: ¡Madre!
La Madre:
¡Dime!
PUBLICO:
Lo falso, creo, es haber negado aquí al gran guerrero, ¿no?, sino que no ha
dicho lo que debía de decir. ¿No, Madre?
La Madre:
Hija mía, le ha negado y ha dicho que el guerrero no existe. Pero eso está
escrito, así dije que un "guerrero" vendrá del Tajo, y del Tajo así ha
venido. Poero lo ha enviado Dios.
Ha negado así al guerrero, y ha quitado de que muchas almas vinieran a Mí, a
Mí aquí, y a Mí en Padre Nuevo. ¿Algo más?
PUBLICO: ¡Madre!
La Madre:
¡Dime!
PUBLICO:
Madre, yo quisiera darte las gracias por habérnoslo descubierto: Y
también pedir perdón a Dios Padre por si en alguna ocasión he estado guidada
un poquito por sus palabras, que Dios Padre me perdone, pero de aquí yo no
he faltado, Madre mía.
La Madre:
No te preocupes hija mía, pues Dios perdona a sus
hijos. ¿Algo más?
PUBLICO: ¡Madre!
La Madre:
¡Dime!
PUBLICO:
Madre, la vidente esa, de aquí de Talavera que se llama Leonor, ¿es
verdadera o es falsa?
La Madre:
Te digo lo de antes, ¿ha demostrado que ama a Dios?
PUBLICO:
¡Sí Madre!, porque decía que las visiones que Dios le
mostró..., estaba rezando en el prado.
La Madre:
¿Y tú lo has visto?
PUBLICO: No Madre.
La Madre:
En verdad os digo que lo harán tan bien que os
engañarán. ¿Algo más?
PUBLICO:
¡Madre!
La Madre:
¡Dime!
PUBLICO:
Quería preguntarte por una vidente de Móstoles que se llama Nati. ¿Es de
Dios o no es de Dios?
La Madre:
Lo mismo te digo hija mía, ¿ha demostrado que ama a
Dios?
PUBLICO:
Ha demostrado que ama a Dios, y también me ha dicho que os
había oido por lo menos, o visto. Ahora, si me ha engañado...
La Madre:
No sigas hija mía: es verdadera. Hijos míos,
videntes hay mcuhos en el mundo, así falsos como así verdaderos.
Pero hijo mío, tú sabes quien son los verdaderos y sabes quién son los
falsos. Por eso cuando te hablan de alguno te dejas llevar por la mano
de Dios. Y así hijo mío, no te ocurre nada.
Aún no ha acabado este mensajes porque aún queda mañana hijo mío. Las almas
no escuchan mis palabras y por eso cometen errores. Yo os bendigo como
Dios Padre Os bendice...
Padre Eterno: En mi Nombre.
El
Maestro:
En el mío.
La Madre: Y con la Luz de mi amado Esposo
el Espíritu Santo, ya estáis
bendecidos.
PUBLICO: Gracias Madre.
La
Madre:
Amaos los unos a los otros como mi Hijo os ha amado.
Hijo mío, así en Valencia hay un falso profeta. A ése sí se le conoce: es
ciego hijo mío, viste normal y no tiene brazo. Así como así hijo mío, hay
más que mañana serán descubiertos.
EL HERMANO: Adiós
hermanos. PUBLICO:
Adiós
Hermano.
La
Madre: Adiós
hijos.
PUBLICO: Adiós Madre.
Padre
Eterno: Adiós
hijos.
PUBLICO: Adiós Padre.
El
Maestro: Adiós
hijos.
PUBLICO: Adiós
Maestro.
EL HERMANO: Adiós
hermanos. PUBLICO:
Adiós
Hermano.
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