Ya nadie o casi nadie confiaba en que algún día la suerte del sorteo europeo deparase un enfrentamiento BASKONIA-FORTITUDO, ambos equipos que curiosamente son los que más partidos han disputado de la nueva era de la máxima competición europea llevaban “evitándose” de forma continuada.

El calendario colocó el partido a disputar en Gasteiz como 1ª Jornada del Top-16. Así pues sin mucho tiempo para pensar debíamos de preparar algo en menos de 10 días, por lo que la misma tarde tras conocer las fechas nos pusimos manos a la obra.

Por un lado y para la grada queríamos hacer algo a forma de saludo que reflejara la amistad de nuestros grupos. Compramos los utensilios para conseguir dar un pequeño toque especial al encuentro.

Como nuestra situación no es la idónea para “tifar”  nos decidimos por algo sencillo, un par de  estandartes de 2x2 con los símbolos de ambos grupos: proyectados, dibujados y finalmente coloreados. Además de una pancarta mensaje con el lema:

LA FORZA DEL LUPO, IL CORAGGIO DEL LEONE”
“SASKIBALOTSOREN INDARRA LEHOIAREN ADOREA”.

También y gracias a dos del grupo que ofrecieron su lonja para juntarnos, nos pudimos juntar en la previa del partido para “privar y panzar” un ratillo, la peña charlando, con música y demás pasamos la tarde, donde tampoco faltó petar alguna que otra bengala.

Ellos se desplazaron en furgonetas solo vinieron 12 pues no tuvieron margen de reacción (hubieran venido muchos más con mas tiempo para preparar la trasferta). Trajeron unas banderas a cuadros que NO les dejaron pasar (inútilmente intentamos ayudarles) y en la presentación nos sorprendieron con una pancarta que decía:

    “KAIXO NEBARREBAK EUSKALDUN”

Nosotros para completar el colorido a los estandartes y pancarta para la ocasión, sumamos el cubregradas del Demonio y las banderitas rojas y azules. Pero nuestra animación NO estuvo a la altura, además este día el pabellón registró bastante ruido, debido entre otras cosas al “caliente” partido que se jugaba en la pista con algunos enfrentamientos entre los jugadores.

Después del baloncesto con victoria baskonista (+10), nos juntamos, dándoles algo de material y les regalamos el estandarte del León. Tras comer algo partieron rumbo a Bologna.

Bologna - Paladozza 05-III-16

La cita del año es sin duda nuestra primera visita a Bologna para encontrarnos con la Fossa y su squadra la Fortitudo por primera vez tras diez años de amistad. La mejor de todas las posibilidades de llegar a la ciudad italiana era coger un vuelo Zaragoza-Bergamo y el resto del trayecto realizarlo en coches.

Los horarios quisieron que la hora de partida desde Gasteiz fuese entre trasnochadora y madrugadora y así comenzaba nuestro viaje…

Las cuatro de la mañana era la hora de quedada para los 10 miembros de INDAR que decidieron realizar este mítico desplazamiento. 

A cuentagotas fuimos llegando todos, y tras comprobar que los carnes y las hojas del vuelo estaban en regla salimos en dos coches.

 En uno, con música variada y sin ninguna conversación seria, los que nos quedábamos hasta el viernes en Italia, en el otro, hablando de todo un poco, los que se volvían tras el partido.

Un par de paradas para los chofer y los fumadores (aunque al contrario que en los bares italianos en los coches si se podía fumar) no evitaron llegar con tiempo de sobra al mostrador donde recogíamos los billetes de avión.El viaje aéreo transcurrió plácidamente: algunos en silencio, otros sin callar ¿verdad Koldo?,

 otros vigilando a un juventino, otros hablando con Biris. Total que en poco tiempo, y tras sobrevolar los espectaculares Alpes, nos plantamos en Bergamo, donde decidimos alquilar dos coches y tener así libertad de movimiento.

El cansancio ya pesaba, pero más podían las ganas de llegar a la quedada con la Fossa. A eso de las 15:30 terminaba definitivamente el viaje que había comenzado casi doce horas antes. Una decena de hintxas fortitudinos nos esperaban en las inmediaciones del Paladozza. Quedaban casi cinco horas para el comienzo del partido y comenzaba la fiesta.

Abrazos entre los ya muchos conocidos y saludos entre los nuevos amigos eran inicio de conversaciones acerca de cualquier cosa que acompañaban al alcohol y la comida. Cinco horas son muchas horas y a algunos les dio tiempo a ponerse desde bastante a muy malos. La KORRIKA caló hondo en Bolonia y con cánticos en su favor de abrió la veda de los gritos a favor de uno y otro equipo.
 

Durante la tarde llegamos a juntarnos unas 40-50 personas. A dos horas del inicio del partido algunos de la FOSSA se fueron a preparar la curva, y una hora más tarde vimos la llegada del autobús del equipo que fue recibido por cinco o seis exaltados.

Los INDAR que fueron a la entrada del pabellón fueron saludados por los jugadores que ponían gestos de estar flipando. Entramos al “palacio”  a falta de 20 minutos para el comienzo del choque.

Todo estaba a punto y el momento más emotivo del viaje era inminente; después de un fuerte cacheo y tras colocarnos en el sector “ospiti” (visitante) hasta donde nos acompañaron algunos de los capos de la FOSSA era hora de formalizar la amistad.

Tras la presentación de los equipos tres representantes de cada hintxada salían a la cancha portando sus respectivos colores y banderas en un protocolo conocido como “gemellaggio” (hermanamiento).

Un partido abierto que se decantó a favor de los italianos en la recta final gracias a las canastas imposibles de Vujanic y, sobretodo, Basile.

Dusko decidió no ir a por el partido y quedarse con un buen average en previsión de triples empates, táctica que a la larga le dio la razón.

Total que tras el partido los aficionados locales nos hacían gestos de ánimo y de estarnos agradecidos y la FOSSA volvía a corear el nombre del Baskonia.

Salimos del pabellón no sin que algunos volvieran a pisar el parquet. Y nos dirigimos a tomar un par de birras para cerrar el día.

Poco a poco, y puesto que eran días laborables, la gente fue recogiéndose y a esto de la una nuestros dos grupos de gente marchamos a nuestros destinos. Un coche volvía a Bergamo,

Que paliza!! hacia el aeropuerto, y otros a la agradable pensión de las afueras donde tomamos la última antes de dormir, gracias a los chofer que nos llevaron hasta allí. Al día siguiente, sin madrugar demasiado comenzamos un buen tour turístico por la ciudad. Esta visita nos llevó por: el pabellón de la Virtus, el estadio del Bologna F.C., el centro, la via independencia, piazza Maggiore y neptuno, las dos torres y las universidades (donde de preveía bastante ambiente visto que era San Patricio)

Comimos muy bien pese que al cocinero le diera por ponernos lo que le dio la puta gana, pasándose por el forro de los cojones las indicaciones de un atormentado Ibai. Durante el paseo vimos la luz y a instancias de nuestro Mesías formamos la “Jesús Christ fan club” que dispone de una camiseta como material (está en Bologna y no la compramos porque eran 45 € del ala).

Desde los 98 metros de altura de la torre bolognesa se oyeron cánticos en contra de la Virtus. Posteriormente y tras algún amago de aurrezku por parte del “ultrilla” cenamos para ir a la quedada que nos llevaría al concierto que cerraría nuestra estancia allí.

Ya en el lugar del concierto, el T.P.O., nos juntamos con algunos de la FOSSA y estuvimos bebiendo y charlando hasta que la música empezara. Gentuza que sobra en este mundo se acercó por allí y hubo más de un amago de enfrentamiento, pero finalmente la cosa no fue a mayores.
 

Total que del concierto vimos un grupo bastante mediocre cuyo CD en versión rayada se pillo Jon “pikolino” y unos fantásticos The Slackers venidos desde N.Y.City. De la Banda Bassotti sólo pudimos ver 20 minutos mientras nos despedíamos de la gente que nos ofreció una hospitalidad inmejorable.

No se puede decir que pasáramos desapercibidos ya que hablamos con: nigerianos, bilbaínas con acento gallego, activistas comunistas, gente que nos reconocía como baskonistas o vascos, Kaki Arkarazo… Por suerte, o por cuidarse, el chofer ese día volvía a estar en condiciones de conducir y pudimos llegar al aeropuerto de Bergamo a tiempo pese a dar algún rodeo.

Allí compartimos vuelo hacia Zaragoza con Biri´s que venían de Parma.Sólo quedaba el último tramo para llegar a Vitoria y haber pasado 2 días que dieron muchísimo de sí.