Las redes inalambricas tienen costo de implantación y servicio mucha más bajos que la redes satelitar, pero la tecnología en ambas redes tiene el gran reto de superar la barrera del ancho de banda, disponibilidad y calidad de servicio, porque debido a las ventajas que ambas ofrecen independientemente de su costo, hace que la demanda de éste servicio se incrementa y estas deben absorber la demanda sin afectar la disponibilidad y calidad de servicio. Aunque se cree que las redes inalámbricas no reemplacen las redes alambricas por lo menos en un mediano o largo plazo, por sus muchas ventajas sobre todo la movilidad y cobertura ya tienen un lugar en el mundo de las transmisiones de voz y datos que seguirán consolidando en un mundo donde las ventajas de ésta son sinónimo de eficiencia, productividad y bajos tiempos de repuesta.