Banco
Provincia, gestión y salarios
Por
Jorge Sarghini (*)
LA
PLATA, 8 JUN (Especial de AIBA). Luego de cinco meses de gestión
creo conveniente hacer un análisis, y en ese marco hacer conocer
a los verdaderos dueños del Banco, que son todos aquellos que
producen, trabajan, invierten y viven en el territorio de la Provincia
de Buenos Aires, el tratamiento que el Directorio de la institución
le está dando al tema salarial.
Hemos
superado la crisis de liquidez , la gente volvió con sus fondos
a los bancos a una velocidad mayor a la pensada, y en un claro reconocimiento
del comportamiento que los actores del sistema tuvieron en la crisis,
lo ha hecho en mayor medida a los bancos públicos.
Así,
nuestro banco tiene hoy casi el 11 % de los depósitos ($ 10.000
millones), guarismo que significa haber recuperado los mayores niveles
de participación y le permite tener una considerable capacidad
prestable.
No
obstante lo señalado, el Banco, al igual que el resto del sistema,
debe resolver problemas de solvencia y rentabilidad. Para ello, y
teniendo en cuenta la imposibilidad de contar con aportes directos
de capital por parte de la Provincia, que significarían más
impuestos a los bonaerenses, queda un solo camino, que es el de la
autocapitalización a través de la generación
de ganancias.
Nos
queda muy claro que es imposible una nueva carga tributaria sobre
los habitantes de la Provincia, ya que la misma sólo perjudicaría
el proceso de crecimiento de los productores bonaerenses, quienes
no tienen espacio para un nuevo esfuerzo en beneficio de un Banco
que debe generar sus propias ganancias.
En
tal sentido, nuestra gestión emprendió de inmediato
un plan de corto plazo orientado a revertir lo antes posible el déficit,
y otro conjunto de medidas de más largo plazo destinadas a
cumplir con los objetivos estratégicos.
Dentro
de las medidas de corto plazo se destacan: reducción de costos
financieros y gastos no salariales; y aumento de ingresos, como consecuencia
de una política comercial agresiva y una sustancial mejora
de la performance de la recuperación crediticia.
Reducción
de costos financieros: a partir de una estrategia coordinada con otros
bancos públicos, se pudo lograr una importante reducción
de tasa de interés pasiva, adicional a la que operó
en el mercado, generando un ahorro de $ 5 millones por mes.
Reducción
de gastos no salariales: mediante el mecanismo de programación
presupuestaria se realizó una economía que proyectada
para todo el año se estima en $ 250 millones, sin por ello
resentir el funcionamiento ni el proceso de modernización tecnológica
en marcha.
Política
comercial agresiva: Se lanzaron nuevas líneas de crédito,
se redujeron las tasas de interés y se está creciendo
en servicios, fundamentalmente los relacionados con la banca personal
y el sector público. Hoy la cantidad de colocaciones del conjunto
de líneas triplican a las del inicio de la gestión.
Recuperación
crediticia: se ejecutaron sentencias judiciales a través del
Banco, se realizaron miles de intimaciones, se aumentó el ritmo
de los juicios de recupero y de negociaciones extrajudiciales. A partir
de marzo, los acuerdos de cancelación o reestructuración
de deuda morosa pasaron de poco más de 100 a más de
600 por mes. Se acumularon más de $ 15 millones de recupero
y se redujeron los cargos por incobrabilidad.
Los
objetivos estratégicos son los siguientes:
Constituirse
en banco predominantemente minorista, acentuando su liderazgo regional
en banca multipropósito y multisegmento.
Fortalecer
y cumplir con mayor eficacia su rol de agente financiero de la Provincia.
Cumplir
adecuadamente con la misión social que compete a la banca pública,
atendiendo a los segmentos insuficientemente atendidos por la banca
privada, desempeñando un rol testigo en materia de tasas y
precios en el mercado y, más en general, constituyendo un útil
instrumento para la implementación de políticas públicas.
Alcanzar
un nuevo modelo de gestión, transparente y competitivo, con
un alto grado de actualización tecnológica, y con la
mayor parte de los recursos del banco volcados a la atención
del cliente.
Las
medidas de corto plazo ya han empezado a rendir sus frutos. La intermediación
financiera, luego de haber sido negativa en 2003, pasó a ser
positiva en $ 80 millones en el cuatrimestre, y el déficit
operativo se redujo un 80 %, pudiendo proyectarse equilibrio al fin
del semestre. No obstante, el resultado final sigue siendo negativo
y por lo tanto no hay margen para apartarse de la senda adoptada.
En
este contexto, y ante el conflicto salarial, el Directorio del Banco
hizo la máxima propuesta posible, porque creemos necesario
valorar el esfuerzo hecho hasta aquí por los trabajadores,
pero debemos ajustarnos a los límites que nos marca la realidad
económica y financiera, para no debilitar el despegue que hemos
iniciado.
Creemos
que el Banco debe asumir el esfuerzo de casi 5 millones de pesos por
mes que cuesta la propuesta salarial efectuada, pero no estamos dispuestos
a perder más de 1 millón de pesos por día de
paro, a no pagarle a los jubilados, ni a descuidar a los clientes,
por lo que seremos inflexibles en la posición ante el conflicto.
El
Banco es de todos los bonaerenses y debemos defender sus intereses.
El plan de negocios en ejecución muestra, con resultados concretos,
que vamos por el buen camino y no nos vamos a apartar de él,
porque no vamos a renunciar a defender la banca pública y la
fuente de trabajo, porque no nos vamos a resignar ni a dejar de trabajar
para que nuestro Banco sea eficiente, racional, moderno y transparente.
(AIBA)
(*)
Presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires