Impacto de las Decisiones de Inversión y Financiamiento en el EVA y en MVA de una empresa

 

                                                                                                                                                                                      Autores: Ing. Alexis Arias.

Ing. Freddy Morales.

Introducción

 

EVA (Economic Value Aded) es un índice financiero que incorpora el cálculo del coste de los recursos propios, proporcionando una medida de la rentabilidad de una empresa como el resultado del beneficio neto después de impuestos menos el correspondiente cargo por el coste de oportunidad de todo el capital que se encuentra invertido en la compañía. Se define el coste de los recursos propios de la empresa como el mínimo retorno exigido

por los accionistas como retribución por mantener su dinero en esa compañía y no en otra. Este índice de rentabilidad "real" se ha convertido en una pieza clave de análisis para muchos inversores, analistas financieros y grandes corporaciones, ya que proporciona un sistema de medida de la salud financiera de la empresa que tiene una alta correlación con la creación de riqueza para el accionista: su mejora implica, en un mayor o menor plazo, una subida de la cotización de las acciones de la empresa.

 

Si el EVA es positivo, la compañía crea valor (ha generado una rentabilidad mayor al costo de los recursos empleados) para los accionistas. Si el EVA es negativo (la rentabilidad de la empresa no alcanza para cubrir el costo de capital), la riqueza de los accionistas sufre un decremento, destruye valor. Al EVA se ha atado un componente para la valuación de empresas, el Valor de Mercado Agregado (MVA), el cual se puede definir como la diferencia entre el valor de mercado total de una compañía y el total de los recursos invertidos (capital) para crear ese valor a una fecha cualquiera. Si el MVA es positivo, la empresa ha creado valor, mientras que si es negativo lo ha destruido

 

El concepto EVA nació en el seno de la consultora neoyorquina Stern Stewart & Co, en 1983, en respuesta a la cuestión de cómo orientar el conjunto de una organización hacia la creación de valor añadido. Según sus creadores, con los sistemas de contabilidad tradicional muchas compañías parecen prósperas cuando en realidad no lo son, ya que su beneficio contable no supera el coste del capital invertido. De esta forma se destruye la riqueza de los inversores. El concepto EVA trata de incorporar la idea de coste de oportunidad a la noción tradicional de beneficio contable, dejando patente el hecho de que si una empresa no produce el dinero que los inversores esperan recibir se origina la llamada desintermediación económica, el camino más seguro hacia el fracaso financiero.

 

Junto con el EVA, el MVA (Market Value Added) es otra medida diseñada por Stern Stewart. Indica la diferencia entre el valor de mercado de los capitales empleados en la empresa y el valor contable de los mismos, entendiendo por capital empleado la suma de los recursos propios y la deuda bancaria. El MVA permite medir la capacidad de una organización para crear valor y acumularlo a través del tiempo. Tomando para ello la capacidad de gestión de la gerencia y el compromiso de todos los actores involucrados con dicha organización


Valor Económico Añadido y una Inversión de Capital

Cuando una persona invierte en un activo determinado, le pide una rentabilidad. Si invierte en activos sin riesgo (deuda del estado), exigirá la tasa libre de riesgo (Rf), suponga un 9%. Si invierte en activos con riesgo, por ejemplo, acciones de una empresa, exigirá una prima de riesgo por encima de la tasa libre de riesgo, dependiendo del riesgo concreto de la empresa en particular, por ejemplo un 4%. Así pues, la rentabilidad que exigirá por la compra de las acciones sería de un 13%. Es decir, si invierte $100 exigirá $113 al cabo de un año.

Si la empresa invierte ese dinero en proyectos que han generado al finalizar el año $113, no ha creado ningún valor por encima de lo esperado y exigido. Si la empresa consigue $116, entonces la empresa ha creado $3 de valor por encima del exigido por el inversor. Si consigue $110 entonces ha dado al accionista $3 pesos menos de lo que exigía (a pesar de haber obtenido renta mayor a Rf) y ha destruido valor para el accionista, ya que este habría podido conseguir los mismos $110 invirtiendo en un activo diferente con un riesgo menor (es decir, dado el riesgo que ha corrido, debería haber obtenido, para compensarlo, $113). Dicho de otra manera, para que una empresa resulte atractiva a los posibles inversionistas de ella, ha de ofrecer una rentabilidad por encima de la que ofrecerían empresas con un riesgo comparable.

Para Makeläinen (p. 7), el Valor Económico Agregado (EVA) o la Generación de Valor, es un método que sirve para medir la verdadera rentabilidad de una empresa y para dirigirla correctamente desde el punto de vista de los propietarios o accionistas. El EVA es una medida absoluta de desempeño organizacional que permite apreciar la creación de valor, que al ser implementada en una organización hace que los administradores actúen como propietarios y además permite medir la calidad de las decisiones gerenciales. (Tully, p. 45)

El Calculo del Eva

Es calculado mediante la diferencia entre la tasa de retorno del capital r y el costo del capital c*, multiplicada por el valor económico en libros del capital envuelto en el negocio:

EVA = (r - c*) x capital (1)

 

Pero, r es igual a:

r = UODI/capital (2)

Donde UODI es la utilidad operacional neta antes de gastos financieros y después de impuestos.

UODI = UON x (1 - t)

Para Stewart (p. 70) el Capital es una medida de todo el efectivo que ha sido depositado en una empresa, sin importar la fuente de financiación, el nombre contable o propósito del negocio, es como si la compañía fuera simplemente una cuenta de ahorros. No interesa si la inversión es financiada con capitalización o deuda, no interesa si el efectivo es empleado en capital de trabajo o activos fijos. Efectivo es efectivo y lo importante es qué tan bien lo manejan las directivas.

 El capital empleado puede ser estimado sumando todas las deudas (de largo y corto plazo) al patrimonio líquido de los propietarios. Una forma alternativa es sustrayendo, del activo total, todos los pasivos corrientes en los que no se paguen intereses. (Roztocky & Needy, p. 4) Para la estimación del capital algunos autores recomiendan usar el capital final del período inmediatamente anterior, como capital inicial o simplemente equiparar el patrimonio contable al capital empresarial.

La fórmula definitiva

 

Dejando de lado los ajustes y volviendo al cálculo del EVA, si se observa bien, la ecuación 1 es:

 

EVA = r x capital - c* x capital (3)

Teniendo en cuenta la ecuación (2) se tiene:

 

EVA = UODI - c* x capital (4)

 

De la fórmula expresada en la ecuación (4), se puede decir que EVA es ingreso residual o utilidad operacional menos un cargo por el uso del capital. Con EVA como medida de  desempeño, a una compañía le están cobrando sus inversores por el uso de capital a través de una línea de crédito que paga intereses a una tasa c*. EVA es la diferencia entre las utilidades que la empresa deriva de sus operaciones y el costo del capital gestionado a

través de su línea de crédito8 (Stewart, p.138).

 

Por ejemplo:

 

Una empresa tiene una UODI de $500, un c* de 12% y su capital es de $2.000, entonces se tiene:

 

EVA = UODI - c* x capital

 

EVA = $500 - (12% x $2.000)

 

EVA = $500 - $240

 

EVA = $260 Lo cual indica que ha creado valor por $260.

 

Interpretación del EVA

 

Si el EVA es positivo, la compañía crea valor (ha generado una rentabilidad mayor al costo de los recursos empleados) para los accionistas.

 

Si el EVA es negativo (la rentabilidad de la empresa no alcanza para cubrir el costo de capital), la riqueza de los accionistas sufre un decremento, destruye valor.

 

El Eva es la utilidad económica que obtienen las empresas después de la deducción de todos los costos de capital, no sólo el costo de la deuda sino también el costo de los capitales propios.

 

De tal manera que el EVA, es el ritmo a partir del cual se crea o se destruye un valor en función del capital invertido con lo cual el valor creado o destruido sería:

 

EVA = (Retorno del capital – Coste del Capital ) x Capital empleado

 

Con lo cual la decisión vendrá dada después de comparar ambos términos.

 

Impacto de las Decisiones de Inversión y Financiamiento en el EVA y en MVA de una empresa

 

Uno de los objetivos principales de los dirigentes de una empresa es la creación de valor para sus accionistas, se debe conseguir un EVA positivo. Según García (p. 21), todas las medidas que una compañía puede adoptar para crear valor se pueden encuadrar en uno de los tres conceptos siguientes:

 

Eficiencia operacional

 

Mejorar la utilidad operacional después de impuestos (UODI) sin involucrar más capital en el negocio. Retomando el ejemplo anterior:

 

UODI = $410.000; Capital = $2.000.000; CPPC = 7.864%

 

Entonces:

 

EVA = $410.000 - $2.000.000 x 11.22%

 

EVA = $185.600

 

Suponga que la administración se inclina por un aumento en la utilidad operacional de $90.000:

 

UODI = $500.000; Capital = $2.000.000; CPPC = 11.22%

 

Entonces:

 

EVA = $500.000 - $2.000.000 x 11.22%

 

EVA = $275.600

 

Un incremento de $90.000 en la UODI, conduce a un aumento del EVA de $90.000. Luego, el EVA aumenta (disminuye) en el mismo valor en que lo hace la eficiencia operativa

 

Alcanzar crecimiento rentable

 

Invertir capital nuevo en proyectos de los que se esté obteniendo una rentabilidad mayor que el costo que tiene conseguir ese nuevo capital a invertir. Un nuevo proyecto en la empresa de transporte aéreo requiere una inversión de $1.800.000 y su tasa de retorno esperada es del 12.3%, lo cual adiciona $221.400 a la UODI. Emprender el proyecto produciría un incremento en el EVA de $19.440:

 

EVA = $631.400 - ($3.800.000 x 11.22%)

 

EVA = $205.040

 

 

Racionalizar y salir de negocios improductivos

 

Desviar o desinvertir capital de aquellas líneas de negocio que no den los beneficios adecuados:

 

a) Liquidar capital improductivo: suponga que se sacan $600.000 del capital de trabajo (que renta por debajo del costo de capital), con lo cual no se afecta la UODI. Eliminar esa cantidad incrementaría el EVA en $67.320

 

EVA = $410.000 - ($1.400.000 x 11.22%)

 

EVA = $252.920

 

 

b) Recortar la inversión en proyectos no rentables: suponga otro ejemplo en el que una compañía tiene una UODI de sólo $82.000; con los mismos CPPC (11.22%) y capital ($2.000.000), con lo cual su EVA es de -$162.000. La empresa emprende un proyecto con una inversión de $1.000.000, el cual tiene una tasa de retorno del 6% lo cual incrementa la UODI en $60.000. Su EVA sería:

 

EVA = $142.000 - ($3.000.000 * 11.22%)

 

EVA = -$194.600

 

Aunque la utilidad operacional (UODI) aumenta, aceptar el proyecto empobrecería a los accionistas de la empresa (el EVA disminuye en $32.600), por lo cual debe ser rechazado.

 

El EVA como Clasificador de Empresas.

 

Stewart (p. 152) hace una analogía a la que llama The Basketball Analogy, ésta consiste en equiparar a la empresa con un jugador de baloncesto. Conforme a ella, existen los siguientes tipos de firma (jugadores de baloncesto), según su desempeño medido a través del EVA:

 

Destructoras de valor.

 

Son como un jugador que anota muchos puntos (gana muchas utilidades), sólo porque hace muchos disparos a la canasta (se le invierte mucho capital). El porcentaje de efectividad del jugador (tasa de retorno) es muy común y a su equipo le iría igual si él pasara la bola a otro jugador igualmente capaz (el inversionista decide irse para otra empresa), en lugar de intentarlo tantas veces él solo.

 

Generadoras de valor.

 

Estos jugadores anotan la misma cantidad de puntos que los anteriores (producen las mismas utilidades), pero lo hacen mientras intentan muchos menos lances a la canasta (utilizan menos capital). El porcentaje de acierto del jugador (tasa de retorno) es impresionante, pero podría mejorar su generación de valor si utilizara más capital.

 

 

Las compañías más valiosas

 

Este tipo de jugador es el Michael Jordan de las ligas empresariales. Tiene el mismo porcentaje de efectividad que la anterior, pero lanza muchas más veces que ésta (bombea más capital en el negocio). Esta clase de empresa se gana el trofeo a la compañía más valiosa, MVC (Most Valuable Company).

 

EVA como Método de Valuación

 

Una de las razones por las cuales el EVA ha tenido acogida es que a él se liga un componente para la valuación de empresas. Este componente es llamado por Stewart (p. 153), Market Value Added, en español Valor de Mercado Agregado ó MVA por sus siglas en inglés.

 

El Valor de Mercado Agregado

 

Según Stewart (p. 153), el EVA se ata directamente al valor intrínseco de mercado de una compañía. Cuando el EVA es proyectado y descontado a su valor presente, permite ver el valor de mercado que la administración ha agregado o sustraído del capital que ha empleado.

 

 

MVA = valor de mercado – capital

 

MVA = valor presente de todos los EVAs futuros

 

 

El MVA es la diferencia absoluta en pesos (dinero) entre el valor de mercado de una empresa y su capital. A diferencia de la tasa de retorno, la cual refleja el resultado de un período, el MVA es una medida acumulativa del desempeño corporativo la cual refleja qué tan exitosamente la empresa ha invertido el capital en el pasado y qué tan bien lo hará en el futuro. Maximizar el MVA debería ser el objetivo primario para las compañías que estén

interesadas en el bienestar de sus accionistas. (Stewart, p. 153)

 

La relación entre rentabilidad y MVA puede equipararse a la existente entre el rendimiento de un bono y el valor de mercado del bono. Si el cupón del bono es mayor que el interés de mercado (costo de capital), el bono podrá ser vendido con prima (cuenta con un EVA positivo y, por tanto, podrá ser vendido a un MVA positivo). Si el cupón del bono está por debajo del interés de mercado, el bono cotizará al descuento (con EVA negativo y se venderá a un MVA negativo). De este modo, lograr el objetivo interno de aumentar y maximizar el EVA, tiene como consecuencia la obtención de una prima en el valor de la empresa (MVA).

 

Para García (p. 22), el MVA es la diferencia entre el valor de mercado12 total de la empresa (suma del valor de mercado del capital y el valor de mercado de la deuda) y el total de los recursos invertidos para crear ese valor (suma del capital aportado por los accionistas y por los acreedores) en una fecha cualquiera. Si el MVA es positivo, la empresa ha creado valor para los accionistas, mientras que si es negativo, lo ha destruido.

 

MVA = valor de mercado total - capital total empleado

Donde:

 

Valor de mercado total = valor de mercado del capital + valor de mercado de la deuda

 

Capital total empleado = patrimonio + deuda financiera

 

Suponiendo que el valor de mercado de la deuda coincide con su valor contable, entonces:

 

MVA = valor de mercado del patrimonio - valor contable del patrimonio

 

La anterior expresión permite apreciar lo que significa crear o destruir valor para los accionistas. Si el MVA es positivo, cada peso que los accionistas entregaron a quienes manejan la empresa, ahora vale en el mercado más de un peso. Si el MVA es negativo, cada peso aportado por los accionistas y recibido por los administradores ahora vale menos de un peso en el mercado.

 

El índice del Valor de Mercado Agregado

 

El MVA se puede expresar de una manera relativa y en este caso se obtiene el IMVA, Indice del Valor de Mercado Agregado, el cual se debe adicionar a las ya conocidas razones financieras básicas. (García, p. 23). La fórmula de este ratio es:

 

IMVA = Valor de mercado / Valor contable

 

 

EVA frente a otras medidas tradicionales.

 

El Retorno sobre el Capital (ROC) es una medida de desempeño relativamente buena y muy común. Las empresas calculan este retorno con diferentes fórmulas y lo llaman de diferentes maneras como:

1.    Retorno sobre la Inversión (ROI)

2.    Retorno sobre el capital invertido (ROIC).

3.     Retorno sobre el capital empleado (ROCE).

4.     Retorno sobre activos netos (RONA),

5.    Retorno sobre activos (ROA), etc.

El principal defecto de todas estas tasas de retorno, es que el hecho de maximizarlas, no necesariamente maximiza el retorno para los accionistas

ROI = utilidades netas después de impuestos / Inversión

Ahora bien, el ROI ignora el requerimiento esencial, la tasa de retorno debe ser por lo menos igual al costo de capital. Además, el ROI no reconoce que la riqueza de los accionistas no es maximizada cuando la tasa de retorno lo es. Lo que desean los accionistas es que la empresa maximice el retorno absoluto sobre el costo de capital y no los porcentajes. Las compañías no deberían ignorar proyectos que renten más que el costo de capital justificándose en la disminución de su tasa de retorno. El costo de capital es el obstáculo a sobrepasar, no la tasa de retorno.

Observar la tasa de retorno y tomar decisiones, basándose únicamente en ella, es como valorar productos fundados sólo en el margen bruto de ventas. El producto con el mayor margen bruto no es necesariamente el más rentable, la rentabilidad del producto depende también de su volumen de ventas.

De la misma manera, usar solamente el ROI para tomar decisiones no es recomendable ya que, la magnitud de las operaciones (la cantidad de capital que produce dicho ROI) es importante también. Una tasa de retorno alta es más fácil de alcanzar con un bajo nivel de capital que con un gran monto. Casi cualquier empresa altamente rentable puede incrementar su tasa de retorno si disminuye su tamaño o pasa por alto buenos proyectos que pueden producir una tasa inferior a su tasa de retorno corriente.

La diferencia entre EVA y ROI es exactamente la misma que se presenta entre VPN y TIR. La TIR es una buena manera de valorar las posibilidades de inversión, pero no se debe preferir un proyecto a otro basándose en su TIR.

Vale la pena mencionar que, EVA y VPN van de la mano, así como ROI y TIR, los primeros indican la incidencia para los accionistas y los segundos proveen la tasa de retorno.

 

No hay razón para dejar de aplicar ROI y TIR, ambas son muy ilustrativas. La TIR siempre se debe usar en la evaluación de proyectos, acompañada del VPN, el ROI puede ser usado junto al EVA como índices de desempeño de la firma.

 

Lo que se debe dejar en claro, es la necesidad de no tener como objetivo la maximización del ROI o la TIR y que estos indicadores no se deben utilizar aisladamente para tomar decisiones. Ambos, proporcionan una mayor información, pero las disposiciones se podrían dictar sin ellos. Maximizar las tasas de retorno no hace la diferencia cuando lo importante es maximizar el rendimiento del capital de los accionistas, si este es el objetivo, EVA y VPN deberían estar en las posiciones de comando y, ROI y TIR deberían tener el rol de proporcionar más información.

 

Infografia

 

 

Definición del EVA  (Economic Value Aded) como un índice financiero que incorpora el cálculo del costede los recursos propios, proporcionando una medida de la rentabilidad de una empresa como el resultado del beneficio neto después de impuestos menos el correspondiente cargo por el coste de

oportunidad de todo el capital que se encuentra invertido en la compañía.

 

http://profesores.ie.edu/fllubian/documentos/eva.pdf      

 

¿Por qué apenas ahora, ya comenzando el siglo 21, se están preocupando los empresarios y ejecutivos por la creación de valor para sus empresas? ¿Qué factores han promovido el interés por el tema de la creación de valor? ¿Qué significa crear valor? ¿Qué aspectos de la vida de la empresa son los que inducen al aumento de su valor? ¿Cómo se determina el valor de una empresa? ¿Cómo se implementan procesos de creación de valor? Este links en particular tienen como propósito responder estas preguntas y proveer al lector una idea estructurada de lo que es la Gerencia del Valor (GDV).

 

http://www.oscarleongarcia.com/Archivos%20Libro%20Valoracin/CAP%201%20Valoración.pdf

 

Este documento presenta una aproximación a una herramienta gerencial de última generación, el Valor Económico Agregado (EVA) y la Gerencia Basada en Valor (GBV). Establece que el EVA es una medida de desempeño basada en valor, que surge al comparar la rentabilidad obtenida por una compañía con el costo de los recursos gestionados para conseguirla. Si el EVA es positivo, la compañía crea valor (ha generado una rentabilidad mayor al costo de los recursos empleados) para los accionistas. Si el EVA es negativo (la rentabilidad de la empresa no alcanza para cubrir el costo de capital), la riqueza de los accionistas sufre un decremento, destruye valor.

http://www.gestiopolis.com/recursos/documentos/fulldocs/ger/EVAhptdg.htm

 

 

Este trabajo trata del VPN ( Valor Presente neto), y las diferentes técnicas financieras existentes para poder estudiar el ingreso futuro a la hora de realizar una inversión en algún proyecto.

 

http://www.monografias.com/trabajos11/vepeme/vepeme.shtml

 

El entorno empresarial actual está hoy, más que nunca, enfocado a la obtención de lo que se denomina genéricamente “valor añadido”. Los inversores demandan a los gestores de sus empresas que sean capaces de aportarles valor a través de la revalorización al alza de su inversión, creando riqueza. Sigue siendo cierto, por tanto, el objetivo último de la empresa entendido como la maximización de su valor para que los accionistas obtengan la recompensa esperada a su aportación de capital y estén dispuestos a seguir manteniendo su inversión.

Pero, ¿cómo cuantificar si una empresa está creando valor o destruyéndolo?. Tradicionalmente, medidas como la Rentabilidad de Fondos Propios (ROE) o los Beneficios por Acción (EPS) han sido los ratios de gestión más utilizados por los analistas y servían, por extensión, como medidores del valor de los accionistas de la empresa. Sin embargo, como veremos no existe en la práctica una correlación inmediata entre la mejora de estos ratios y la creación de valor.

La creación de valor hay que definirla como la maximización del rendimiento de la inversión de los accionistas en el largo plazo. Y la aportación de valor debe impregnar y extenderse al mayor número de actividades posibles dentro de la organización. El EVA ha nacido como una herramienta, simple, comprensible y muy útil para extender y compartir esta filosofía entre todos los empleados y gestores.

Como todas las herramientas de gestión, no está exenta de inconvenientes y desventajas que pueden mermar su función explicativa del valor. Sin embargo, existen mecanismos que permiten adaptar el concepto para superar estas deficiencias aunque, como veremos, ello pueda perjudicar una de sus principales ventajas como es la simplicidad.

 

http://www.infoeconomicas.com.ar/evaempresa.htm

 

El EVA ha sido uno de los temas recientes que más acogida han tenido en el mercado. Se ha escrito mucho sobre el tema, a favor y en contra. Este trabajo se compone de varias partes. En la Sección 1 se presentan las ideas básicas que sustentan la creación de valor. Aquí se estudia el concepto de costo promedio de capital y el concepto de la medición de valor con el Valor Presente Neto, VPN. En la Sección 2 se estudia la idea básica del Valor

Económico Agregado, en particular el enfoque presentado por Stern Stewart & Co (EVA©). En la Sección 3 se presentan algunos problemas metodológicos percibidos en el enfoque EVA©. En la Sección 4 se plantea una alternativa de medición de valor agregado económico por medio la Inversión recuperada y Valor Agregado, IRVA. En la Sección 5 se presentan las conclusiones.

 

http://www.javeriana.edu.co/decisiones/ponenciaeva.pdf