Selección de Información Referativa y Factográfica
Servicio  personalizado de Auto-Hermes  
Número 1083  junio /2009

Nota de/para los amigos que me escriben:

De: Consulado General de Cuba
Asunto: DECLARACIÓN DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO

En acto de peculiar significado histórico, la OEA acaba de dar sepultura formal a la vergonzosa resolución que en 1962 excluyó a Cuba del Sistema Interamericano.

Aquella decisión fue infame e ilegal, contraria a los propios propósitos y principios declarados en la Carta de la OEA. Fue, a la vez, coherente con la trayectoria de esa Organización; con el motivo por el cual fue creada, promovida y defendida por los Estados Unidos. Fue consecuente con su papel de instrumento de la hegemonía estadounidense en el hemisferio, y con la capacidad de Washington de imponer su voluntad sobre América Latina en el momento histórico en que triunfa la Revolución cubana.

Hoy la región de América Latina y el Caribe vive otra realidad. La decisión adoptada en la XXXIX Asamblea General de la OEA, es fruto de la voluntad de Gobiernos más comprometidos con sus pueblos, con los problemas reales de la región y con un sentido de independencia que desafortunadamente no prevalecía en 1962. Cuba reconoce el mérito de los Gobiernos que se han empeñado en borrar formalmente aquella resolución a la que en esta reunión se le denominó “un cadáver insepulto”.

La decisión de dejar sin efecto la resolución VI de la Octava Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores de la OEA, constituye un desacato incuestionable a la política seguida por los Estados Unidos contra Cuba desde 1959. Persigue el propósito de reparar una injusticia histórica y constituye una reivindicación al pueblo de Cuba y a los pueblos de América.

A pesar del consenso alcanzado en el último minuto, esa decisión se adopta en contra de la voluntad de Washington y frente a las intensas gestiones y presiones ejercidas sobre los Gobiernos de la región. Se propina así al imperialismo una derrota utilizando su propio instrumento.

Cuba acoge con satisfacción esta expresión de soberanía y civismo, a la vez que agradece a los Gobiernos que, con espíritu de solidaridad, independencia y justicia, han defendido el derecho de Cuba a regresar a la Organización. También comprende el deseo de librar a la OEA de un estigma que había perdurado como símbolo del servilismo de la institución.

Cuba, sin embargo, ratifica una vez más que no regresará a la OEA.

Desde el triunfo de la Revolución, la Organización de Estados Americanos ha desempeñado un activo papel a favor de la política de hostilidad de Washington contra Cuba. Oficializó el bloqueo económico, dispuso el embargo de armas y productos estratégicos, y estipuló la obligatoriedad de que los países miembros rompieran relaciones diplomáticas con nuestro Estado revolucionario. Durante años pretendió, incluso y a pesar de la exclusión planteada, mantener a Cuba bajo su competencia y someterla a su jurisdicción y a la de sus órganos especializados. Se trata de una Organización con un papel y una trayectoria que Cuba repudia.

El pueblo cubano supo resistir las agresiones y el bloqueo, superar el aislamiento diplomático, político y económico, y enfrentar por sí solo, sin doblegarse, la agresividad persistente del imperio más poderoso que haya conocido el planeta.

Nuestro país hoy disfruta de relaciones diplomáticas con todos los países del hemisferio, excepto los Estados Unidos. Con la mayoría de ellos desarrolla amplios vínculos de amistad y cooperación.

Cuba, además, ha conquistado su plena independencia, y marcha indetenible hacia una sociedad cada día más justa, equitativa y solidaria.

Lo ha hecho con supremo heroísmo y sacrificio y con la solidaridad de los pueblos de América. Comparte valores que son contrarios a los del capitalismo neoliberal y egoísta que promueve la OEA y se siente con el derecho y la autoridad para decir no a la idea de incorporarse a un organismo en el que todavía los Estados Unidos ejercen un control opresivo. Los pueblos y Gobiernos de la región sabrán comprender esta justa posición.

Hoy puede entenderse con mayor claridad que en 1962, que es la OEA la que resulta incompatible con los deseos más acuciantes de los pueblos de América Latina y el Caribe, la que es incapaz de representar sus valores, sus intereses y sus verdaderas ansias de democracia; la que no ha sabido dar solución a los problemas de la desigualdad, la disparidad en la riqueza, la corrupción, la injerencia extranjera y la acción depredadora del gran capital transnacional. Es la que ha callado ante los crímenes más horrendos, la que comulga con los intereses del imperialismo, la que conspira y subvierte contra Gobiernos genuinos y legítimamente constituidos con demostrado respaldo popular.

Los discursos y pronunciamientos de San Pedro Sula han sido harto elocuentes. Las críticas fundadas al anacronismo de la organización, a su divorcio de la realidad continental y a su trayectoria infame, no pueden dejar de atenderse.

Los reclamos a que se ponga fin, de una vez y por todas, al criminal bloqueo económico de los Estados Unidos contra Cuba, reflejan el creciente e indetenible sentimiento de todo un hemisferio. El espíritu de independencia allí representado por muchos de los que hablaron, es con el que Cuba se siente identificada.

Las ansias de integración y concertación de América Latina y el Caribe son cada vez más manifiestas. Cuba participa activamente, y se propone seguir haciéndolo, en los mecanismos regionales representativos de aquella que José Martí llamó “Nuestra América”, desde el Río Bravo hasta la Patagonia, incluyendo todo el Caribe Insular.

Fortalecer, expandir y armonizar esos organismos y agrupaciones, es el camino escogido por Cuba; no la peregrina ilusión de regresar a una organización que no admite reforma y que ya ha sido condenada por la historia.

La respuesta del pueblo de Cuba a la ignominiosa Octava Reunión de Consulta de Cancilleres de la OEA, fue la Segunda Declaración de La Habana, aprobada en Asamblea Popular el 4 de febrero de 1962 por más de un millón de cubanos en la Plaza de la Revolución.

La declaración afirmaba textualmente:
“… Con lo grande que fue la epopeya de la independencia de América Latina, con lo heroica que fue aquella lucha, a la generación de latinoamericanos de hoy le ha tocado una epopeya mayor y más decisiva todavía para la humanidad. Porque aquella lucha fue para librarse del poder colonial español, de una España decadente, invadida por los ejércitos de Napoleón. Hoy le toca la lucha de liberación frente a la metrópoli imperial más poderosa del mundo, frente a la fuerza más importante del sistema imperialista mundial y para prestarle a la humanidad un servicio todavía más grande del que le prestaron nuestros antepasados.
“… Porque esta gran humanidad ha dicho: «¡Basta!» y ha echado a andar. Y su marcha de gigantes, ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia, por la que ya han muerto más de una vez inútilmente”.
Seremos leales a estas ideas, que han permitido a nuestro pueblo mantener a Cuba libre, soberana e independiente.

La Habana, 8 de junio del 2009

De: EL DUENDE
Asunto: El fracaso del “Jinetero” Chirino.
Tal como lo había dicho este Duende, el concierto político-musical del “Jinetero” Willy Chirino que se celebró el pasado sábado por la noche en la American Air Lines Arena de Biscayne Boulevard, resultó ser un rotundo fracaso. Por más que a última hora del viernes y la mañana del sábado se habían movilizado todas las organizaciones de la “Inverecundia deletérea” de Miami, comprando boletos para el concierto de Chirino, todo fue inútil porque apenas concurrieron unas cinco mil personas, aunque según una crónica generosa de El Miami Herald la cifra fue de uno 6,500 asistentes al espectáculo.
El estadium bajo techo de la American Air Lines de Miami tiene una capacidad máxima de 20 mil asientos, según dato oficial de la empresa operadora, información que aparece en la tan socorrida Wilkipedia de la Internet.
Chirino había bautizado su concierto del sábado con el sugestivo y peripatético nombre de “P´alante” pero al cantante miamense todo le salió mal como al cangrejo. “P´atrás”, y va que chifla. El Duende no estuvo allí pero se lo contó un empleado del stadium que nos agregó en son de queja, que ni propina le dieron. Tacaño también que es el “Jinetero”.

Asunto: Cascarita de plátano para Obama.
Sobre el caso del matrimonio norteamericano de Washington arrestados el pasado viernes por las autoridades federales acusados de realizar actividades de espionaje en favor del gobierno cubano, más que disputar los cargos que tendrán que ser llevados ante los tribunales, lo que se comenta en los círculos diplomáticos de la capital norteamericana y entre los corresponsales de la prensa internacional acreditados allí, es el momento en que se produce la detención de estos, lo que se llama en ingles el “Timing”.
El caso de este matrimonio espía sale a la luz precisamente después de la reunión de la OEA en Honduras donde Cuba fue reivindicada, al derogarse el acuerdo que la expulsó de ese organismo en el año 1962 y precisamente cuando el gobierno del Presidente Barack Obama anunciaba la reanudación de las conversaciones sobre inmigración entre Washington y La Habana.
No es la primera vez ni será la última que estas cosas pasan entre Cuba y Estados Unidos. Parece que al Presidente Barack Obama alguien le ha tirado una cascarita de plátano en su camino. Sabemos de su política de hablar con los adversarios y de resolver las diferencias en la mesa de las negociaciones dejando atrás las confrontaciones.
Con toda seguridad a Hillary Clinton, como Secretaria de Estado, le consultaron el caso del matrimonio espía antes de proceder al arresto. ¿Y ella lo consultó con Obama? Ahí está la clave para saber quien tiró la cascarita de plátano en el camino de Obama.

Asunto: Dinero del juego en “cartuchos”.
La corrupción política en el sur de La Florida es rampante. Por eso ya nadie confía en la honestidad de los funcionarios públicos, no importa si ocupan cargos en el Congreso Federal, Estatal o sean alcaldes o concejales. Lo cierto es que son pocos los políticos que gozan de la confianza de los electores, aunque a pesar de ello estos son electos y reelectos cada vez que se presentan a elecciones.
Para nadie es un secreto que además de las donaciones legales que reciben los aspirantes a cargos electivos, a través de los llamados “Packs” organizados por los clásicos intereses creados, también el sistema está corroído por los “cartuchos premiados”, como le llaman a las contribuciones en efectivo, que no dejan huellas, que reciben los políticos corruptos de toda laya.
Ahora, con le legalización de los Casinos, la cosa se pone peor porque el dinero de las fichas de juego, que se convierte en cash, es la manera más fácil y segura para darle dinero a un político corrupto al que se quiera comprar.
Ya tenemos los casinos de los indios Seminoles y de los Micoosukes, a lo que pronto se añadirán los de las carreras de caballos de Calder, el hipódromo de Hialeah, El Jai-Alai y el de los perros de la 37 avenida. En todos ellos se pierde y se gana en fichas, que se convierten de nuevo en cash.
Un amigo de este Duende que es asiduo visitante del Casino de los Indios Moccosukes nos contó que el pasado viernes presenció una escena que bien vale la pena relatar.
Llegó al lugar un político muy conocido en Miami. Al poco rato se le acercó un individuo, que después de un saludo más bien protocolar, le entregó un sobre en papel manila. El político tomó el sobre y se dirigió a la taquilla donde se cambian las fichas en cash. Hizo la operación rápidamente y salió del Casino con su cara tan risueña como lo vieron entrar. ¿Que como se llama el personaje de esta historia?, preguntamos al amigo, pero su nombre no me lo dijeron. Y cuando insistimos, nos dijo el amigo: “Da igual, que ese no es el único que aquí recibe fichas de juego que después cambian en cash. Allí les dan un recibo que justifica que ganaron en el póker lo que le dieron en un cartucho. ¡Y que viva la Pepa!

Asunto: El Obispo del Padre Cutié.
Si no fuera por el Obispo de la Iglesia Episcopal Leo Frade, el Padre Alberto Cutié no hubiera podido dar el paso que dio después del escándalo de las fotos en la playa con su novia secreta con la cual ahora piensa contraer matrimonio.
Del Obispo Frade se sabe que es cubano de origen y que vino a Estados Unidos en 1960 y que ya de sacerdote de la Iglesia Episcopal trajo de Cuba cuando el Puente de Mariel en 1980, a más de 400 refugiados de la isla en un viejo barco de la II Guerra Mundial comprado por él para ese fin humanitario.
También se sabe que el Obispo Frade es partidario del matrimonio entre homosexuales lo que le ha traído no pocas críticas de parte de algunos sacerdotes de esa Iglesia con posiciones más conservadoras en ese tema tan controversial.
En cuanto a su posición con respecto a Cuba, muy poco se sabe cuál es el criterio del Obispo Frade aunque es conocida de sus buenas relaciones con los que en la isla profesan y encabezan el credo Episcopal. El Padre Alberto Cutié mientras estuvo dentro de la Iglesia Católica de Miami mantuvo una posición muy similar a la de su “Padrino”, el Obispo Agustín Román, bien conocida como extremista de derecha. Ahora con el cambio de célibe para sexo con mujer, cambio de sotana católica por Episcopal y cambio de Obispo de Román por Frade, ¿habrá también un cambio del Padre Alberto con respecto a Cuba? La pregunta queda en el aire y ahí se las dejo para comentarla en otra ocasión.