EL
TABLÓN: El artículo de hoy
Navidad
Jesús versus Santa Klaus
Marcelo Colussi
Los romanos de la antigüedad clásica
edificaron un imperio de dimensiones colosales. Lujurioso y
sanguinario como todos los imperios; organizado como quizá
ninguno. Esto último, sin dudas, fue el secreto de su prolongado
esplendor. En su dilatada existencia se vio enfrentado a
innumerables fuerzas exteriores, pero la que más lo perturbó fue
un movimiento surgido en su seno.
Según cuenta la historia, hace unos dos mil años en Galilea y
Judea, colonias del Asia Menor, vivió un predicador que puso en
marcha una tremenda conmoción. Se trataba -según relata la
crónica, siempre incompleta y fragmentaria- de un carpintero judío
que por un largo período estuvo preparándose en las sombras y que
a la edad de 30 años comenzó su prédica. Prédica que consistía,
básicamente, en el llamado al amor por el prójimo. Este judío,
siempre según las historias que nos han llegado hasta el día de
hoy, fue construyendo un movimiento cultural-espiritual con su
llamado al amor, a la fraternidad y a la solidaridad que terminó
transformándose en una seria afrenta al poder imperial de Roma.
Tan grande fue la subversión que despertaron sus discursos en sus
seguidores posteriores que ese movimiento -llamado cristianismo-
se convirtió en un peligro de lo que hoy podríamos llamar
'seguridad nacional' para la Roma de aquel entonces. Así las
cosas, el César en persona, Constantino el Grande para el caso,
tomó cartas en el asunto tratando de neutralizar esa fuerza
político-cultural contestataria que venía surgiendo en el seno del
imperio. Hablar de igualdad en el medio de una sociedad esclavista
altamente segmentada, con clases sociales inamovibles, era un
agravio intolerable. Por eso los primeros seguidores de ese
'predicador loco', este judío harapiento que recorría los
desiertos llamando a 'poner la otra mejilla', fueron brutalmente
reprimidos, perseguidos, transformándose en alimento para los
leones en el circo. No hubo mejor solución para neutralizarlos que
comprar a su dirigencia. Y eso fue lo que se hizo en el Concilio
de Nicea, en el año 325.
Ahí se decidió integrar a la Iglesia Católica con la jerarquía del
poder del Imperio; a partir de entonces el espíritu contestatario
original de los tres primeros siglos de cristianismo se esfumó.
Para ello fue necesario 'desterrenalizar' todo ese movimiento
creándole un hálito mágico, sobrenatural, de fuera de este mundo a
su inspirador, ese judío subversivo muerto en la cruz y que, según
tejió la historia, revivió a los tres días saliendo volando hacia
el cielo. En otros términos: se le hizo divino, hijo de dios,
personaje inalcanzable. Jesús de Nazareth, por una terrena
decisión de muy terrenales poderes, pasó a ser deidad, y el
cristianismo se hizo parte del mecanismo del poder imperial
convirtiéndose en religión oficial del imperio. Constituida en
poder terrenal, la Iglesia siguió un curso propio, terminando de
sobrevivir al mismo Imperio Romano, siendo posteriormente el gran
poder de la Europa medieval -poniendo y quitando reyes- y llegando
a nuestros días como una institución casi inconmovible, muy
debilitada ya, pero aún con la inteligencia necesaria para seguir
acomodándose a los nuevos tiempos sin perder del todo su perfil.
Hoy, después de transcurridos dos milenios, la figura de aquel
barbado predicador que, según se nos cuenta, osaba enfrentarse a
los ricos de su momento -independientemente que haya existido o
no-, su figura, pero más aún, su mensaje, siguen despertando
polémica. La Santa Iglesia Católica, ese poder enorme que es esta
institución base del Occidente, con sede en Roma, que responde a
un jerarca que según dictamina una encíclica del siglo XIX es
¡infalible! (sic), cuenta una historia, nos habla de un Cristo Rey
-bendiciendo ejércitos y empresas privadas, avalando invasiones,
matanzas, injusticias-. Otras posiciones, que por cierto también
se dicen cristianas y que mantienen una relación de tirantez con
el Vaticano, proponen otra lectura de los hechos. Estas posiciones
hablan de un Jesús de los pobres. Al lado de la pompa y la
fastuosidad monumental de la jerarquía, de un Papa que viste ropas
de oro y piedras preciosas, también hay curas obreros, curas que,
incluso, se integraron a la lucha armada por un mundo distinto. Al
lado de la Iglesia que ayudó a masacrar a la población amerindia,
hay también una Teología de la Liberación que habla de revolución
socialista. Lo curioso es que ambos se dicen cristianos. ¿Cristo
Rey o Jesús de los pobres?
Los libros sagrados del cristianismo no fueron escritos por quien
fuera el predicador original, el que enseñó la igualdad, el que
reprobó la soberbia. ¿Qué habrá dicho en verdad Jesús de Nazareth?
Nada dejó escrito. Cuando se lo endiosó en aquel lejano concilio
de Nicea hace 1.700 años, toda su enseñanza quedó sumida en el
misterio. Y, por supuesto, con un dios nadie puede meterse.
Lo cierto es que hoy, a más de dos milenios de la celebración de
su nacimiento en un humilde establo de la aldea de Nazareth,
surgen preguntas desconcertantes. Si es cierto que ese hombre de
carne y hueso, enfrentándose a la monstruosa maquinaria
político-militar del gran imperio romano, predicó el amor
incondicional al prójimo, la solidaridad y el rechazo a la
ostentación, ¿cómo es posible que en su nombre se siga manteniendo
una institución que sistemáticamente se alineó al lado de los
grandes poderes económicos? Y más desconcertante aún, si el 24 de
diciembre se evoca su nacimiento: ¿por qué esa fecha pasó a estar
cada vez más representada por ese personaje europeo -blanco y
varonil- en cuyo nombre hay que hacer regalos y consumir? (nos
referimos a Santa Klaus, o Papá Noel). ¿Cómo, evocando el
nacimiento de quien predicó la humildad, su cumpleaños lo
festejamos con unas bacanales donde se gasta buena parte del
dinero que se acumuló durante todo el año? ¿Por qué este personaje
de raigambre nórdica llevado al paroxismo por la cultura
consumista que nos fue imponiendo el capitalismo depredador de
estos dos últimos siglos, reemplazó al predicador de Galilea?
Si la esencia del mundo moderno es el consumo (aunque no se sepa
bien para qué), consumo con ribetes casi enfermizos en muchas
ocasiones, no hay dudas que Santa Klaus es mucho más funcional que
Jesús para promocionarlo. Los centros comerciales se llenan de él
-un gordito de sonrosados cachetes y colorida vestimenta- y no de
un flaco esmirriado que llama al ascetismo.
Pero si se trata de difundir el espíritu de amor incondicional
entre todos (lo cual pudiera tener, además de una buena intención,
algo de ingenuo -la dinámica humana pareciera moverse por otros
determinantes y el amor desinteresado no existe, salvo el
establecido de padres a hijos-), si se trata de predicar y poner
en práctica ese presunto 'socialismo' original que habría traído
Jesús, el osado carpintero crucificado por el gran poder imperial
de Roma por difundir la confraternidad y la hermandad, ¿por qué
hacer esto sólo cuando se celebra su nacimiento? Si se trata de
ser 'buenos' y solidarios, ¿sólo en diciembre es posible? ¿Por qué
no durante todo el año? ¿O durante todo ese tiempo atrae más el
mensaje de Santa Klaus y su llamado al consumo? Bueno… consumir,
celebrar fiestas, parrandear, no es feo, obviamente. ¡Es
imperiosamente necesario además! Es parte de nuestra salud mental.
¿Pero por qué no hacerlo equilibradamente todo el año también?
Porque, en definitiva, de eso se trata el ideal socialista (el
moderno al menos -dejemos de lado la discusión sobre si la
enseñanza de Jesús fue 'socialismo'-): consumir responsablemente
todos los días del año (nadie debería pasar hambre ni sufrir
privaciones de necesidades elementales) y ser solidarios también
todos los días del año. Amarnos siempre… bueno, la psicología
muestra que es algo difícil (el amor sale a cuentagotas, el amor
es narcisista, es decir: egoísta). Pero sí respetarnos. Nadie está
obligado a amar a nadie, pero sí a respetarlo. Y no se necesita la
fiesta de la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo para ponerlo en
práctica. ¿O sí?
Si ese ideal no se cumple, seguiremos consumiendo según los
poderes nos lo ordenen… o nos lo permitan. Y en todo caso nos
dejarán el consuelo de un Santa Klaus una vez al año. Pero por
supuesto que nos merecemos algo mejor.
|
Nota de/para los amigos que me escriben:
De: @DIN
Agencia Digital Independiente
de Noticias
Asunto: ¿El Banco de la Nación Argentina en manos de Rockefeller?
Por José Antonio Quarraccino
[Diario de El Bolson BW]
Según datos proporcionados por el Banco Central de la
República Argentina, el Banco de la Nación Argentina es el primer
banco del país, tanto en depósitos ($ 17.093,6 millones, lo cual
significa el 14% de los depósitos totales) como en préstamos
otorgados ($ 7.623,8 millones) [1].
Lo que no informa el matutino que dio la noticia (propiedad de la
banca Goldman Sachs) es que al mismo tiempo el Banco de la Nación
Argentina , el banco estatal de la Nación, es miembro-socio del
Consejo de las Américas, es decir, el Banco propiedad de todos los
argentinos está ASOCIADO Y SUBORDINADO a una corporación de
empresas privadas estadounidenses y europeas controlada y dirigida
por David Rockefeller (J. P. Morgan Chase & Co.) y por William
Rhodes (Citigroup, Inc.) . Pareciera ser que de las «relaciones
carnales» con Estados Unidos (Guido di Tella dixit) hemos pasado a
las «relaciones sodomíticas» con la oligarquía angloamericana del
Eastern Establishment: el Banco propiedad del Estado (y de todos
los argentinos) subordinado al clan Rockefeller .
1. El Consejo de las Américas fue fundado por David Rockefeller en
1965, sobre la base de la iniciativa privada y el libre comercio:
« los mercados libres y los emprendimientos privados ofrecen los
medios más efectivos para lograr el crecimiento y la prosperidad
económicos de la región». Con esta ideología privatista y liberal,
el citado organismo nuclea actualmente a más de 200 grandes
compañías de primerísimo nivel, las cuales representan a la
mayoría de las inversiones privadas estadounidenses en América
latina» [2]. Llama la atención que el Banco estatal nacional
argentino, administrado por la reciclada «patria socialista» de
los ´70, esté asociado a lo más rancio de la plutocracia
estadounidense.
2. También llama la atención que el gobierno reivindique un
carácter pretendidamente progresista y "centro-izquierdista",
cuando ha asociado en las sombras las finanzas oficiales de la
Nación al organismo rockefelleriano. Se podría pensar que
Rockefeller y sus amigos han evolucionado y que hoy estarían
sosteniendo posturas afines y similares a la de nuestro
presidente, «promoviendo» la justicia social, la redistribución
del ingreso, el bienestar del pueblo, pero la realidad es muy
distinta: « El Consejo de la Américas es una organización de
negocios cuyos miembros comparten un compromiso común con el libre
comercio y los mercados abiertos a través de las Américas.
Nuestros programas e intermediación tienden a informar, alentar y
promover mercados libres e integrados PARA BENEFICIO DE LAS
COMPANÍAS QUE FORMAN PARTE DE NUESTRA MEMBRESÍA, así como de los
Estados Unidos y de todos los pueblos de las Américas» [3].
Como se puede apreciar, lo que el Consejo de las Américas busca
fundamentalmente es beneficiar a las compañías privadas que son
socias del organismo. ¿Cómo se entiende entonces que el BANCO DE
LA NACIÓN ARGENTINA COLABORE PARA BENEFICIAR A LAS COMPAÑÍAS
TRANSNACIONALES AMIGAS DE ROCKEFELLER Y SUS SECUACES? Ante esta
"profesión de fe" de libre comercio y de mercantilismo empresarial
privado, ¿ por qué EL DR. KIRCHNER HA ASOCIADO EL BANCO DE LA
NACIÓN ARGENTINA A LA OLIGARQUÍA ESTADOUNIDENSE, dueña del NUEVO
ORDEN MUNDIAL ? ¿POR QUÉ EL BANCO DE LA NACIÓN ARGENTINA PARTICIPA
EN UN ORGANISMO CUYA ESTRATEGIA ES IMPULSAR EL LIBRE COMERCIO EN
HISPANOAMÉRICA Y BENEFICIAR A LAS EMPRESAS PRIVADAS
ESTADOUNIDENSES?
3. Desde un punto de vista psicológico, nuestro presidente repite
el mismo cuadro esquizofrénico que experimentó con el FMI. Acusó
(y hoy todavía lo hace esporádicamente) a este organismo de ser el
culpable de todos los males experimentados por nuestro pueblo,
debido a la aplicación de sus recetas económicas. No obstante
ello, el FMI fue un acreedor privilegiadísimo y el más beneficiado
de todos los acreedores: cobró toda la deuda contraída con él y
por anticipado, sin siquiera la quita de un centavo de dólar.
Pero además, con el último pago al FMI nuestro presidente
«desendeudador» en realidad LEGALIZÓ LAS OPERACIONES FINANCIERAS
ILEGALES DEL FMI llevadas a cabo con nuestra Patria A LO LARGO DEL
AÑO 2001, tal como lo han probado Alfredo y Eric Calcagno en enero
de 2005 [4]. Pero en realidad, esta esquizofrenia psicológica no
deja de ser políticamente redituable y funcional a los intereses
de la oligarquía financiera internacional, ya que en forma por
demás paradójica, ésta última ha podido salvarse y recapitalizarse
gracias a la "izquierdista y progresista" administración
kirchnerista, cumpliendo con uno de los «deberes» estipulados por
el Grupo Bilderberg en su encuentro anual del 2003, en el que
"recomendaba" a los países deudores pagar todas sus deudas al FMI,
lo cual se cumplió a rajatabla.
4. Puede resultar sorprendente para algunos esta colaboración
mutua y recíproca entre la social-democracia vernácula y
"latinoamericana" y la oligarquía financiera-industrial del
Eastern Establishment. Pero en realidad, el capitalismo liberal
salvaje y la social-democracia son los dos brazos con los que el
verdadero poder mundial privado, nucleado entre otros organismos
en el Grupo Bilderberg y en la Comisión Trilateral, domina y
somete al mundo a su voracidad económica, social y ecológica. En
ambos organismos, además de contar como miembros a los dueños de
las grandes empresas transnacionales –industriales, bancarias,
energéticas, etc.- y a los funcionarios más poderosos del mundo
–reyes, presidentes, primeros ministros, etc., también cuenta
entre sus filas a militantes «de izquierda», «antiglobalistas» y
«socialistas» del Primer Mundo. Con el brazo «derecho» golpea y
saquea (financia golpes de Estado, promueve planes de "desarrollo"
–Consenso de Washington, Plan Baker, etc.-) y con el brazo
"izquierdo" consolida lo anterior, debilitando las bases
espirituales, antropológicas y culturales que harían posible la
resistencia a la dominación colonialista (ataque a la familia,
despolitización, "revolución cultural", promoción de "derechos
humanos", etc., debilitamiento de instituciones fundamentales).
La historia hispanoamericana es un claro ejemplo de ello. Después
de haber financiado y sostenido durante la década del 60 y del 70
las diversas dictaduras militares latinoamericanas, EL PODER
PRIVADO MUNDIAL QUE REPRESENTA LA DINASTÍA ROCKEFELLER Y PARA EL
CUAL OPERA POLÍTICAMENTE, a partir de 1982 unificó, apoyó y
promovió a la socialdemocracia latinoamericana que se hacía
presente para "enfrentar" y reemplazar a los desprestigiados
gobiernos militares en retirada .
1982 marcó un punto de inflexión en Hispanoamérica,
fundamentalmente por la guerra de Malvinas y por el default de
México, que deja de pagar su deuda externa. Anticipando los nuevos
vientos que comienzan a soplar en Latinoamérica, David
Rockefeller, Henry Kissinger y Cyrus Vance fundaron el 15 de
octubre de 1982 Interamerican Dialogue / Diálogo Interamericano,
organismo en el que se núcleo la social-democracia vernácula, que
paulatinamente comenzó a gobernar en nuestros países, al amparo
del poder brindado por la plutocracia angloamericana y los grandes
países desarrollados [5]. Ya no era la hora de las botas, sino de
los votos, pero sin cuestionar el modelo económico impuesto por
las dictaduras : desindustrialización de nuestras Patrias y
endeudamiento externo crónico. Es así que llegan a ser presidentes
de sus respectivos países Raúl Alfonsín (Argentina), Gonzalo
Sánchez de Losada (Bolivia), Violeta Chamorro (Nicaragua), Juan
María Sanguinetti (Uruguay), Fernando Henrique Cardoso (Brasil),
Ernesto Zedillo (México). Otros llegan a ocupar puestos claves en
el mundo financiero regional (Enrique Iglesias, 18 años presidente
del BID) y mundial (Claudio Loser, asesor-consultor del FMI y
David de Ferrantis, en el Banco Mundial), o en las mismas Naciones
Unidas (Javier Pérez de Cuellar, secretario general). Otros
mantienen una presencia asombrosamente permanente en la vida
política hispanoamericana, explicable sólo por este padrinazgo del
clan Rockefeller, como José Octavio Bordón, Beatriz Nofal, José
Ma. Dagnino Pastore, Mario Vargas Llosa, Lourdes Flores Nano, etc.
La experiencia y la historia reciente muestran que, a pesar de su
carácter «socialista», «progresista» y «crítico del
neoliberalismo», esta social-democracia vernácula jamás cuestionó
ni modificó el modelo económico impuesto por la Comisión
Trilateral.
En este contexto y en este marco, se explica que un presidente
«montonero» tenga una relación amical y estrecha con Susan L.
Segal (presidente del Consejo de las Américas, y mano derecha de
David Rockefeller), que en sus viajes a Estados Unidos brinde
conferencias ante el Consejo de las Américas, que haya puesto en
manos de dos bancos socios-miembros de dicho Consejo la última
re-negociación de la «deuda externa» (Unión de Bancos Suizos y
Merryl Lynch). En este contexto se entiende que quienes en su
juventud bregaban por la «patria socialista» hoy toquen la
campanita de sesiones en Wall Street u ofrezcan el petróleo a los
grandes inversores internacionales a precio de regalo y los
"premien" con la devolución de impuestos. Se entiende por qué los
que durante el Proceso de Reorganización Nacional militaron en la
usura y en la rapiña inmobiliaria, que luego depositaron sus
ingentes recursos financieros en Wall Street y en Suiza hoy
pretendan ser los líderes de una nueva fuerza política de
centroizquierda: pueden hacerlo porque han cambiado la jefatura de
Mario E. Firmenich, Roberto Quieto, Norma Arrostito y Roberto
Santucho por la de David Rockefeller, William Rhodes y Susan
Segal. Será que hoy blanquean y ponen en evidencia a los
verdaderos jefes, financistas y promotores de la guerrilla
setentista y «socialista», que con su accionar antiperonista,
antidemocrático y anticonstitucional le sirvió en bandeja de plata
el golpe de Estado de 1976 al imperialismo internacional del
dinero y a esta oligarquía mundial angloamericana, la verdadera
usufructuaria y beneficiaria de la criminal política económica del
Proceso [6].
5. A modo de síntesis, podemos afirmar que el remanido intento
contra natura de «institucionalizar» la dicotomía entre una
centro-izquierda «progre» y una centro-derecha «reaccionaria» sólo
tiene como objetivo encubrir la condición neocolonial de nuestra
Patria y nuestro sometimiento al Nuevo Orden Mundial. Con un
conflicto ideológico financiado, manipulado, controlado y
exacerbado por los dueños del poder mundial se encubre y disimula
el verdadero conflicto al que estamos enfrentados, que no es otro
que la lucha histórica del Pueblo y de la Nación argentinos contra
la secular dominación y saqueo de la oligarquía anglo-americana,
desde las Invasiones inglesas hasta nuestros días. Evidentemente,
desde 1976 hasta hoy la Argentina no es más que una granja-colonia
de la dinastía Rockefeller, tanto con la dictadura cívico-militar
del Proceso como con las «democracias» que lo sucedieron.
[1] Clarín, 20 de enero de 2007, «Depósitos y créditos: como se
reparte la torta».
[2] Council of Americas , en
http://207.21.242.176/coa/about/history.html .
[3] Council of Americas , en
http://www.counciloftheamericas.org/coa/about/mission.html.
[4] Alfredo Eric Calcagno y Eric Calcagno, «Finanzas al margen de
la ley», publicado en Le Monde diplomatique, año VI, n. 67, en
enero de 2005. Fueron los famosos fondos para el «blindaje
financiero» de José Luis Machinea y de Domingo F. Cavallo, que en
realidad sirvieron solamente para financiar la fuga de divisas en
el año 2001. Como determinó el mismo FMI, se trató de una
operatoria «realizada en violación de la Carta Constitutiva del
FMI».
[5] Quien preside el organismo es Peter Hakin, miembro de la
Fundación Ford , del CFR (Council on Foreign Relations) y de Human
Rights Watch, entre otros organismos (no hay que olvidar que la
Fundación Ford está en manos de la corporación Rockefeller desde
1996, bajo la presidencia de Susan V. Berresford, miembro del ex
Chase Manhattan Co., y de la Comisión Trilateral). Entre quienes
financian al organismo se cuentan fundaciones como la FORD, el
Open Society (George Soros), la FUNDACIÓN ROCKEFELLER, etc.;
gobiernos como los de Finlandia, Alemania, Suecia (a través de la
Agencia de Cooperación Sueca para el Desarrollo Internacional),
GRAN BRETAÑA (a través del Departamento para el Desarrollo
Internacional, que también financia a la IPPF, la red abortista
más grande del mundo), CANADA (Agencia Canadiense para el
Desarrollo Internacional); grandes corporaciones y organismos
internacionales como IBM, Banco Mundial, Banco Interamericano de
Desarrollo, Corporación Andina de Fomento, el Programa para el
Desarrollo de Naciones Unidas, etc.
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[6] ¿Será por eso que este poder privado mundial financia
actualmente, a través de diversas pseudo organizaciones
no-gubernamentales (CELS, CEDES, etc.), a los que supuestamente
combatían «revolucionariamente» contra dicho poder y que,
llamativamente sobrevivientes, cobran en dólares estadounidenses y
en libras esterlinas su actual militancia «democrática»? ¿Será por
eso que «nuestros» progresistas impulsan la ideología y los
postulados antinatalistas inventados por el clan Rockefeller?
De:
Fernando Andres Torres
Asunto: Cada semana se suicidan 120 veteranos
Veteranos: el haber realizado actos tan perturbadores a su sentido
moral propio hace que ellos mismos se sentencien a la penal capital.
Perturbadora realidad: En el 2005, hubo más de seis mil suicidios de
veteranos y alrededor de 130 suicidios de bombas humanas. Con una
proporción es de 50 a 1, ¿quién es el que esta creando una cultura
de suicidios y mártires?
Cada semana se suicidan 120 veteranos
Escrito por Penny Coleman y traducido por Fernando A. Torres desde
EE.UU.
A comienzos de año y utilizando influencias que solo los grandes
medios de comunicación poseen, la cadena CBS News contactó a los
gobiernos de los 50 Estados requiriéndoles los números oficiales de
las muertes por suicidios por los últimos 12 años. De los 50
respondieron 45.
De la gran cantidad de información obtenida, seleccionaron los
suicidios de aquellos estadounidenses que se enlistaron en las
fuerzas armadas. Se descubrió que solo en el 2005 – y recuerden que
fue en solo 45 Estados – hubo por lo menos 6.256 suicidios, de
veteranos de guerra. 120 cada semana por un año; un promedio de 17
cada día.
Como viuda de un veterano de la guerra de Vietnam que se suicidó a
su regreso y como autor de un libro para el cual entrevisté a
docenas de mujeres que también perdieron a sus esposos (o hijos, o
padres) víctimas de suicidios a consecuencia de la guerra, estoy
profundamente agradecida con CBS News por llevar adelante esta
investigación que hacia ya tiempo se necesitaba.
Tengo el corazón partido al enterarme de este, tan alto número y
tentativamente optimista que quizás ahora, debido a estas serias
estadísticas que revelan la magnitud del problema, este será
finalmente tomado en serio. Digo tentativamente porque este es un
gobierno que, como hostias de comunión, deshace en su lengua la
realidad de las estadísticas.
A pesar estos continuos y alarmantes informes y desde que estas
nuevas guerras comenzaron, el Ministerio de Defensa se las ha
arreglado – escondiendo sistemáticamente estadísticas sobre el
suicidio de soldados - para mantener fuera del radar del
conocimiento público lo que claramente se ha convertido en una
epidemia de la muerte.
Han realizado todo tipo de movidas, desde enterrar el suicidio en
una lista oficial de caídos bajo una categoría que la llaman
“muertes accidentales fuera de combate” hasta simplemente mentirle a
los padres de los soldados muertos.
Y el Departamento de Veteranos de Guerra, DVG - agencia
gubernamental - ha aprobado esta desinformación insistiendo que sus
estudios indican que los soldados se suicidan no por sus
experiencias en combate sino porque tienen “problemas personales.”
Sin embargo los soldados en servicio activo son solo parte de la
historia. Una de las características de las heridas dejadas por la
presión traumática posterior – post-traumatic stress, PTSD - es que
los síntomas se retrasan, a veces por décadas. Veteranos de la
Segunda Guerra Mundial, de Corea, de Vietnam, continúan quitándose
la vida debido a que antiguos o nuevos síntomas PTSD han sido
reactivados por hechos o imágenes de estas nuevas guerras.
Sus muertes, al igual que las de veteranos recientes, son publicadas
en los periódicos de sus pueblos natales, son conmemorados
localmente pero ignorados oficialmente.
El DVG no hace un seguimiento, no los cuenta, nunca lo ha hecho.
Tanto este, como el Pentágono niegan que el problema exista y
sagradamente apunta a una falta de evidencias que ellos mismo se han
negado a recoger.
Han elaborado este truco por décadas, en gran medida porque el
suicidio incomoda a la gente. Siempre se le ha llamado “aquella
muerte secreta” porque nadie quiere hablar al respecto. Con el
transcurso del tiempo, en diferentes partes del mundo, las actitudes
han fluctuado entre la creencia de que tal acto es un pecado, un
derecho, un crimen, un gesto romántico, un acto de valor consumado o
un síntoma de enfermedad mental. Nunca ha sido un tema emocional
neutral.
En los EE.UU. la racionalidad de nuestro sistema judicial ha
reconocido por más de 300 años de que el acto es casi siempre un
síntoma de enfermedad mental. A través de esos mismos 300 años la
religión organizada ha mantenido obstinadamente que es un pecado.
Uno de los peores pecados. Aquel que nunca es perdonado porque es
demasiado tarde para decir que lo sientes.
La contradicción entre la doctrina religiosa y la ley secular ha
dejado al suicidio en una especie de espacio inferior en el cual los
fundamentos de nuestros sistemas de justicia y creencias son
alterados. Un terrible crimen ha sido cometido, un asesinato, y no
puede haber restitución ni castigo. Como un pecado o una enfermedad
mental, los regiones del suicidio se encuentran en la mente,
elusivos, invisibles, asociados con lo misterioso, lo secreto e
indisciplinado, una especie de alerta omnipresente. Cuidado con lo
anormal, cuidado con el Otro.
A través de los años el gobierno nos ha estado bombardeando con una
postura moralista sobre los ataques suicidas - las bombas humanas -
aquellos sub-humanos que llevan acabo lo inconcebible usando sus
propios cuerpos como armas mortales. “Aquellos no son como nosotros,
no valorizan la vida como nosotros,” dice entre líneas la conocida
xenofobia. Y a veces el texto ni siquiera está entre líneas: “muchos
terroristas que matan hombres, mujeres y niños inocentes en las
calles de Bagdad, son fieles de la misma ideología asesina que acabó
con la vida de nuestros ciudadanos en Nueva York, Washington y
Pensilvana,” dijo Bush livianamente mezclando el once de septiembre,
la invasión a Irak, Islam, el fanatismo fundamentalista y las bombas
humanas.
Bush también a expresado que las bombas humanas suicidas son
motivadas por la desesperación, el abandono y la pobreza. Pero las
estadísticas demográficas demuestran que no es así necesariamente.
La mayoría de los terroristas en los ataques del once de septiembre
vinieron de la cómoda clase media y alta y tenían buena educación.
Irónicamente, la desesperación, el abandono y la pobreza puede que
sean factores más importantes en la muerte por suicidio de soldados
estadounidenses y veteranos.
Debemos de tomar en cuenta el 25% de los enlistados y el 50% de los
reservistas que regresan de la guerra con serios problemas mentales.
La desesperación parece ser una respuesta apropiada al darse cuenta
que los horribles recuerdos y pesadillas quizás nunca se vayan, que
la reincorporación a la sociedad y la habilidad de mantener
relaciones humanas, horarios de trabajo, de confrontarse a grupos de
personas, nunca será de confiar. Como no desesperarse si el
diagnóstico es “¡Aguante como pueda, soldado. Quizás esto nunca se
resuelva!”
¿Abandono? El retraso en el Departamento de Veteranos de Guerra
alcanza los 800 mil casos. Dejando a un lado las terribles
condiciones en muchos hospitales de este Departamento, en el 2004 –
cuando se revelaron las últimas estadísticas – casi 6 millones de
veteranos y sus familias no tenían ningún tipo de aseguro médico. La
mayoría son personas de la clase trabajadora, demasiado pobres para
pagar seguro privado, pero no tan pobres para los prerrequisitos
exigidos por la medicina destinada a los indigentes o a la del DVG.
Los soldados y veteranos necesitan la ayuda ahora, y el tema recién
se comienza a hablar.
¿Pobreza? Los síntomas de las heridas causadas por la presión
traumática posterior o las heridas traumáticas cerebrales hacen casi
imposible mantener un oficio o trabajo estable. El periódico The New
York Times informó (Nov. 2007) que a pesar de que los veteranos son
el 11% de la población, estos representan el 26% de los pobres e
indigentes. Si eso no significa desesperación, abandono y pobreza
entonces no estoy segura si esto vale la pena seguir discutiéndolo.
Existe una ironía horrible en la relación entre las bombas humanas y
los suicidios de soldados y veteranos estadounidenses. Exceptuando
algunos sádicos y sicópatas, los estadounidenses no se reclutan
porque quieran matar a civiles y tampoco lo hacen esperando
suicidarse. Es increíblemente triste que muchos de ellos terminen
muertos por el remordimiento de haber realizado actos tan
perturbadores a su sentido moral propio. Tan angustiosos, que ellos
mismos se sentencian a la penal capital.
Existe una superioridad arrogante en la forma como hablamos sobre
las bombas humanas suicidas y las culturas que las producen. Pero
también existe una perturbadora realidad. En el 2005, 6.256
veteranos estadounidenses se quitaron la vida. El mismo año hubo
*alrededor de 130 muertes documentadas de personas convertidas en
bombas humanas en Irak. Saque la cuenta. La proporción es de 50 a 1.
Entonces ¿quien es el que esta creando una cultura de suicidio y
mártires? Si George Bush está en lo correcto, que en realidad es la
desesperación, el abandono y la pobreza, lo que los lleva a realizar
esos actos, entonces ¿no valdría la pena destacar que somos nosotros
los que estamos realizando el mejor trabajo?
*Digo “alrededor” porque después de una explosión de ese tipo es
difícil determinar cuantos cuerpos han explotado en pedazos.
Penny Coleman es viuda de un veterano de Vietnam que se suicidó al
regresar de la guerra. Su mas reciente libro se titula en inglés
Flashback: Post Traumatic Stress Disorder, Suicide and the Lessons
of War. Este comentario en inglés se encuentra en
http://lists.portside.org/cgi-bin/listserv/wa?A2=ind0711D&L=PORTSIDE&P=R4617
De:
Tamarant
Asunto: En navidad todos somos iguales
En la tierra hay suficiente
para satisfacer las necesidades
de todos, pero no tanto como
para satisfacer la avaricia
de algunos.
Mahatma Gandhi
http://www.bentayga.org/
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