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El e-learning orientado a la mejora del servicio
Conseguir un cliente nuevo cuesta al menos cinco
veces más que mantener fiel a uno, la pérdida de clientes, en un 68%
de los casos se debe a una mala percepción del servicio, este
porcentaje puede variar en algunos otros países entre el 49% y el
72%.
Por: Ignasi Tebé Director de proyectos de
e-Learning de ISMI Consultores.
Clientes satisfechos no son garantía de fidelidad. ¡Pero
clientes insatisfechos nos abandonarán con total
seguridad!.
Empleados bien formados que generan Clientes más
satisfechos, que repiten y generan un boca oído positivo y…
¿por qué no?, son más felices.
El e-Learning dispone actualmente de metodologías adaptadas
a cada perfil, desde cursos y master completos impartidos en
plataformas LMS, hasta unidades didácticas (píldoras)
realizadas con elementos multimedia proactivos y con la
posibilidad de Vídeo streaming, todo un abanico de
posibilidades para todos los gustos y
necesidades. |
A finales de los 90, no había semana, por no decir
día en que en los principales periódicos económicos no se hablase de
las excelencias de aquella “nueva panacea para la formación de los
empleados”, la llamada inicialmente Formación OnLine y más tarde
e-Learning. Han transcurrido algunos años y, aunque queda mucho por
hacer, se ha avanzado razonablemente en ese terreno.
Todas las empresas, tanto las de productos como las
de servicios “puros” (hoy día “todas las empresas son empresas de
servicios”, según, por ejemplo, el profesor Horovitz), así como
las instituciones públicas, están, cada día, más orientadas hacia el
cliente y la excelencia del servicio a sus clientes; hemos visto
proliferar centros de atención al cliente, Call Centers,
departamentos de gestión de quejas y reclamaciones, Web’s
interactivas, Banca OnLine y un sinfín de servicios orientados a
ofrecer lo mejor a nuestros clientes, a superar sus
expectativas.
Y sin embargo, y lamentablemente, también podemos
constatar el escaso y a veces mal servicio que dichos
departamentos ofrecen, a causa de las deficientes actitudes y
aptitudes de las personas, provocando una colisión relevante entre
declaraciones de principios, inversiones tecnológicas y el impacto
en el usuario. A veces, no se satisfacen, ni siquiera lejanamente,
las expectativas del cliente, debido a deficientes procesos, más
deficiente gestión de los contactos y pésima gestión de las personas
que han de “prestar el servicio”, poco motivadas y deficientemente
instruidas.
Evidentemente la clave del problema inicialmente se
está enfocando correctamente, pero falla lo más importante, el
elemento nuclear: la formación y preparación que deben tener todas
las personas implicadas en los mencionados procesos. No falla tanto
la tecnología cuánto la Orientación al Cliente, la interiorización
de culturas y procedimientos que, poniendo al cliente en el centro,
están orientadas al resultado empresarial a largo plazo. ¡¡La
formación, la capacitación o instrucción, ya presencial, ya en línea
o mediante Blended Learning, se hace imprescindible en la
optimización de las inversiones en tecnología de servicio al
cliente!!
Los nuevos programas ERP ... y todas sus
aplicaciones CRM de poco sirven si previamente no hay un cambio de
mentalidad, una mayor orientación al cliente y el conocimiento de
las técnicas adecuadas para afrontar cualquier tipo de relación con
el usuario, consumidor y con la sociedad toda; además sabemos que de
la satisfacción de los mismos dependerá su grado de fidelidad.
Clientes satisfechos no son garantía de fidelidad. ¡Pero
clientes insatisfechos nos abandonarán con total seguridad!.
La formación tiene impacto comercial: es marketing
conseguir que toda la compañía esté orientada al cliente, como diría
“San” Philip Kotler, cargado de razón.
Conseguir un cliente nuevo cuesta al menos cinco
veces más que mantener fiel a uno, la pérdida de clientes, en un 68%
de los casos se debe a una mala percepción del servicio, este
porcentaje puede variar en algunos otros países entre el 49% y el
72%. Los clientes, en los países más avanzados, son cada vez más
exigentes. ¡La formación en Servicio es rentable! ¡La no inversión
es suicida!
En relación con estos argumentos, es previsible una
evolución, en el corto plazo, de modelos de formación que, más
baratos (el e-learning, para plantillas grandes, es un clarísimo
reductor de la inversión en formación), permitan la asunción,
interiorización y puesta en práctica de programas de cultura de
servicio y fidelidad de clientes.La empresa que quiera
sobrevivir, literalmente sobrevivir, deberá tener un buen surtido de
contenidos-cursos de “sensibilización cliente” dirigidos a todos los
niveles, especialmente de empresas con gran implantación geográfica.
Empleados bien formados que generan Clientes más
satisfechos, que repiten y generan un boca oído positivo y… ¿por qué
no?, son más felices. Ese es el ciclo, inevitable ciclo de la
Calidad de Servicio. Vía formación, aunque no sólo formación,
la empresa consigue ganar dinero y ¡adeptos!
El e-Learning dispone actualmente de metodologías
adaptadas a cada perfil, desde cursos y master completos impartidos
en plataformas LMS, hasta unidades didácticas (píldoras) realizadas
con elementos multimedia proactivos y con la posibilidad de Vídeo
streaming, todo un abanico de posibilidades para todos los gustos y
necesidades. |
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