Tan valientes, constantes viajeros

aventurándose ante lo desconocido

bordando sueños frente

a un mundo repleto de diversidad.

Capitanes de su propio destino,

forjadores de esperanzas.

Explorando nuevas profundidades

¡vaya las sorpresas encontradas!

cuántas heridas causadas

por una ola inesperada,

alimentando el desánimo;

pero ustedes, navegantes, no desisten

sino que aprenden a remar con mayor fuerza.

Mantienen la vista fija en el ideal

de no ser uno más de los que transitan

por estas inquietas aguas.

Incansables, aún cuando la marea gira

en lado contrario;

porque nunca dejarán que su barca naufrague

perdiéndose sin dejar rastro alguno,

atravesando por el camino sin hacerse notables.

Mas ustedes, honorables navegantes,

van plasmando el amor en cada vuelta,

socorriendo las almas a punto de perecer

ante un naufragio sin igual.

Sonriendo al contemplar el avance

de sus compañeros de jornada.

Dándole méritos a la vida.

Valorando cada instante obsequiado.

Navegantes incansables manteniéndose a flote,

conservando el equilibrio.

Regresando al punto de partida

con la satisfacción

de haber cumplido su misión.

~ Dedicado a los que se inician

en esta travesía llamada internet.

A todos los que navegamos cada día

adquiriendo experiencias,

descubriendo verdades y también

recibiendo sorpresas,

que no siempre son agradables,

pero que nos hacen crecer.~

Lydia E. Martínez Santiago (eve)

15 de septiembre de 2001

Editado el 14 de octubre de 2001