Torneo Apertura 2003

¿Qué pasará cuando ya no esté Arellano?

 

Jesús Arellano se ha caracterizado por ser un jugador diferente, de características atrevidas y descaradas, un jugador de esos que no se ven muy seguido en nuestro futbol. Pero, ¿se han preguntado qué pasará cuando Arellano se retire o cambie de equipo? ¿Quién es el jugador de los Rayados que se perfila como el nuevo Jesús Arellano? ¿Habrá acaso alguien en la cantera con las suficientes condiciones? Se ve a Tomás Banda como uno de los posibles sucesores de “Chuy” Arellano, porque al igual que él, es un jugador descarado y encarador, pero aún le falta y mucho, para llegar a tener ese nivel que sólo tienen los jugadores grandes. A Banda le hace falta más fogueo, más actividad, porque confianza la tiene y no me vayan a decir que le hace falta cuerpo, porque Arellano no es precisamente una mole.

Durante los últimos años hemos tenido la suerte de tener jugadores de calidad, estilo Arellano, tal es el caso de Sergio Ariel Verdirame, Germán Ricardo Martelloto o el mismo Franco–que si bien no jugaban en la misma posición, si podemos decir que tenían la misma calidad–, ¿pero ahora? ¿Tendrá que venir un extranjero a cubrir la posición de Jesús? ¿O hay calidad en México?.

Supongamos que todos los juegos de Rayados fueran como fue el pasado contra Jaguares: Sin idea, sin creatividad ofensiva, sin esa mínima porción de inteligencia o chispa que necesita un mediocampista, sin desbordar, sin encarar, sin imaginación, sólo tocando la pelota de manera sosa y mecanizada. Ahora imagínate jugando contra Pumas, Toluca y Necaxa de visitante, no contra un equipo chico como Chiapas, que no trae nada, sino contra uno grande y en su casa. ¿Podrían al menos empatar? Lo dudo mucho.

No quiero decir que sin Arellano los Rayados sean un equipo malo, pero no se puede negar que siempre le hace falta a un equipo ese jugador diferente, que les inyecte a sus compañeros esa chispa de descaro y amor a la camiseta que siempre han caracterizado a “Chuy”.

 

 Hasta la próxima. ¡Arriba el Monterrey!


José de Jesús Arellano Alcocer.