¿Cómo puede haber demasiados niños? Es como decir que hay demasiadas flores.
¿Si una madre puede matar a su propio hijo en su seno, que nos impide a ti y a mi matarnos los unos a los otros?
Madre Teresa de Calcuta.
Santa Virgen de Guadalupe, rogad por nosotros
Una imagen es más valiosa que mil palabras
¡¡¡ATENCIÓN!!!
¡¡¡ATENCIÓN!!!
Fotos de bebés abortados
Madre Teresa de Calcuta:
"Pero yo siento que hoy en día el mayor destructor de la paz es el aborto, porque es una guerra en contra del niño, la muerte directa de un niño inocente, asesinado por la propia madre. Y si aceptamos que una madre puede matar hasta a su propio hijo, ¿cómo podemos decirle a otras gentes que no se maten unos a otros? ¿cómo persuadimos a una mujer de que no se haga un aborto? Como siempre,
debemos persuadirla con amor y debemos recordarnos a nosotros mismos que amor significa estar dispuestos a dar hasta que duela. Jesús dio hasta su vida para amarnos. Así, la madre que está pensando en el aborto, debe ser ayudada a amar, eso es, dar hasta que duela sus planes, o su tiempo libre, para respetar la vida de su hijo. El padre de ese hijo, quien quiera que sea, también debe dar hasta
que duela. Mediante el aborto la madre no aprende a amar, sino que mata hasta a su propio hijo para resolver sus problemas. Y, mediante el aborto, se le dice al padre que no tiene que tomar ninguna responsabilidad con el niño que ha traído al mundo. El padre probablemente ponga a otras mujeres en el mismo problema. De manera que al aborto solo conduce a más abortos. Cualquier país que
acepte el aborto no está enseñando a su gente a amar, sino a que use cualquier violencia para conseguir lo que quieren. Es por eso que le mayor destructor del amor y la paz es el aborto".
¿POR QUÉ DEBEMOS MOSTRAR LAS SANGRIENTAS FOTOGRAFIAS DE LOS CADÁVERES DE NIÑOS?
Una imagen vale más que mil palabras, y en este caso, muchísimo más.
En general, la prensa rechaza mostrar al pueblo a estos niños, como están muriendo en el vientre de sus madres. Lo que hacemos es tratar de sortear este bloqueo informativo de los medios de comunicación de masas y mostrar estas fotografías por medio de internet.
Muchos piensan que el aborto se limita a extraer del cuerpo de la mujer unas células de tejido benigno. Pero nada más alejado de la espantosa realidad. Estas fotografías exponen la falsedad de este mito. Estas imágenes revelan al mundo que un enorme holocausto tiene lugar en medio de nosotros, y que nuestra indiferencia hacia él debe cesar, que debemos actuar en auxilio de aquellos que están oprimidos.
El aborto se caracteriza por su barbarie. Varios métodos de aborto descuartizan el cuerpo del niño o lo queman tanto por su exterior como por sus órganos interiores. Se les corta la cabeza, se les trocea y se les aspira. Es sensible al dolor a partir de las seis semanas. Nunca se trataría a un animal de forma tan salvaje.
Hasta los años setenta, las diferentes civilizaciones del mundo habían prohibido el aborto. El juramento de Hipócrates, que debían prestar todos los médicos del mundo especificaba: "no daré a ninguna mujer producto abortivo alguno". Ahora este texto ha sido modificado y se ha convertido en un juramento de hipócritas.
El Concilio Vaticano II nos adivierte claramente sobre el aborto como un "crimen abominable".
Está científicamente -y filosóficamente- probado que la vida comienza a partir de la concepción. Desde la fecundación, el embrión es ya un ser humano completo. La fecundación da al embrión sus características genéticas propias, que hacen de él un ser único. A partir de la fecundación, el embrión humano no experimentará más etapas de evolución bruscas. No tiene más que necesidad de tiempo y
alimento para desarrollarse y nacer.
En muchos países está permitido abortar niños incluso hasta los nueve meses de gestacíón, como sucede en los Estados Unidos y en China. Ha sucedido en numerosas ocasiones que una mujer que fue a abortar, finalmente dá a luz al niño, y entonces el médico asesina fríamente al bebé delante de los ojos horrorizados de su madre.
Hoy en día un feto es viable a partir de las quince semanas. A los dieciocho días, el corazón humano se pone a latir. A las seis semanas, el pequeño ser se mueve y las actividades de su cerebro pueden ser registradas con un electroencefalograma.
El aborto es, pues, un atentado grave a la vida humana, al caracter sagrado de la vida del feto como de toda vida humana, en tanto que es un don de Dios.
«Cada año mueren en España por aborto químico más españoles que los caídos en los tres años Guerra Civil
Cada semana son asesinados por aborto quirúrgico en España 1000 españoles.
El aborto es legal en España, desde la Ley Orgánica 9/1985, aprobada por el Parlamento, ratificada por el Rey, y mantenida por los gobiernos del Sistema»
Por qué las imágenes de abortos
Como es cierto que esas terribles imágenes suponen para cualquier persona de bien una agresión visual, quisimos valorar la propuesta.
Al analizar los pros y los contras nos planteamos algunas consideraciones y también quisimos fijarnos que se hacía en casos similares de matanzas multitudinarias de inocentes
La realidad es que el aborto pretende situarse en el debate de la libertad de decisión de la mujer y se evita que se vea que el resultado es la muerte de un ser humano. Se busca establecer un conflicto de intereses (salud, economía, estabilidad emocional, etc...) frente al embarazo, evitándose mostrar que el embarazo es un ser humano, aunque todavía no nacido. Y por eso se procura impedir las
imágenes antropomórficas de los niños abortados, y las heridas sufridas, con resultado de muerte, como consecuencia de los métodos abortivos.
De ahí que cuando alguien se atreve a mostrar esas imágenes, como el caso famoso, que reflejo la prensa, del sacerdote toledano, que osó hacerlo, sea perseguido a través de todos los medios de la Administración.
Por otra parte nos fijamos en el otro ejemplo, que sin llegar ni a una mínima parte de vícitmas, es paradigmatico de matanza de inocentes: el genocidio de judios durante la segunda guerra mundial.
Desde que terminó la guerra, con constancia y periodicidad, sin necesidad de aniversarios ni conmemoraciones, se muestran constantemente, por todos los medios, imágenes donde se ven las terribles situaciones a los que se sometió a los judios.
Se muestran en la tv a cualquier hora, se enseñan a los escolares, incluso los más pequeños, etc..
Esas imágenes, donde se ven los cadáveres de los asesinados empujados por buldozers, amontonados o descuartizados, o donde se ven los supervivientes en pésimas condiciones físicas, podrían considerarse que vulneran la dignidad de las víctimas y agreden la sensibilidad de los espectadores
Sin embargo, como decíamos, continúan mostrandose periódicamente
Si quienes deciden la emisión de esas imágenes, si quienes producen los productos audiovisuales que tratan el tema, etc.. son los mayores expertos en cuestiones de comunicación, y si esa política de visibilidad del genocidio y sus consecuencias se viene llevando desde hace décadas, parece deducirse que será porque son efectivas
Si a eso añadimos que sistematicamente se censuran las imágenes de aborto en los media del sistema, habremos de concluir que mostrar la realidad del aborto, en una sociedad cada vez más dependiente de lo audiovisiual, cada vez menos racional y más emocional, es efectivo para concienciar sobre el principal problema de España: El asesinato anual de 80.000 españoles, con la complicidad del
Estado.
Esa es la razón que nos mueve a mostrar imágenes, que pueden ser desagradables pero que se producen 200 veces al día en nuestra nación.
Y pidiendo disculpas a quienes se sientan heridos invitamos a que se difundan para llevarlas a muchas personas que cuando las ven por primera vez tienen la oportunidad de conocer la cruel realidad en que consiste el eufemismo de "interrupción voluntaria del embarazo
ESTADÍSTICAS DEL ABORTO EN ESPAÑA
Total de abortos en España *
1990: 37.231
1995: 49.367
1996: 51.002
1997: 49.600
1998: 53.847
1999: 58.399
2000: 63.756
2001: 70.000
2002: 75.000
2003: 80.000
(*) Estadísticas oficiales de la Sanidad Pública. El aborto, "IVE" en España, (Interrupción Voluntaria del Embarazo), se liberalizó a partir de 1993. Desde entonces, ha crecido sostenidamente. Las cifras son oficiales, ya que hay que firmar un "consentimiento informado" y los médicos que aceptan efectuarlo reciben dinero del Estado por la práctica. Se trata de una práctica nomenclada.
En el informe no se incluyen los abortos químicos producidos tempranamente por la llamada "anticoncepción de emergencia" o "píldora del día después" que en la mayoría de los casos se efectúan privadamente.
El 95 % de las "IVE" registran como causal "peligro para la salud de la madre", entendiendo a este "peligro" razones o motivaciones psicológicas: depresión, angustia, etc.
Hoy el aborto es la primer causa de muerte infantil y primera también materna, a pesar de ser legal.
Al resultar, estadísticamente, tres veces más riesgoso para la mujer un aborto que un parto natural, han crecido las muertes maternas a causa del aborto.
También comienzan a visualizarse patologías asociadas como el llamado "Sindrome Post Aborto (SPA)" y un aumento considerable en el cáncer de seno en mujeres que han abortado.
Al momento se están efectuando estudios que relacionan la alta tasa de mujeres que han abortado con el suicidio.
Los juicios por daños o lesiones en el útero e infertilidades derivadas han crecido un 300 % durante el año 2003.
EEUU: el útero, más peligroso que las trincheras
Estados Unidos fue uno de los primeros países en legalizar el aborto, a comienzos de los años setenta. Y el balance al cabo de tres décadas es muy elocuente: más de 45 millones de fetos destruidos.
Un balance muy superior al de estadounidenses muertos en todas las guerras en las que ha intervenido la Unión (1.196.000), según el Elliot Institute News. Mientras, en nuestros días, la juez del Tribunal Supremo que votó para aprobar la ley del aborto, Sandra Day O'Conner, se retira.
La sustituye John G. Roberts, designado por el presidente Bush. De brillante trayectoria, Roberts es un defensor de la vida y su papel puede ser clave en esa decisiva batalla. El hecho de que los partidarios del aborto se muestren decepcionados ante esta elección resulta revelador.
Lo cierto es que los estragos producidos por la legislación abortista son un hecho en la sociedad norteamericana, superando a los producidos en todas las guerras de su historia.
La más cruenta fue la de Secesión (1861-1865), en la que perdieron la vida 558.052 personas (359.528 en el bando del Norte y 198.524 en el confederado); seguida de la Segunda Guerra Mundial, con 407.316 víctimas, a bastante distancia de la Primera -116.708 muertos-, debido a que en esta última los estadounidenses sólo participaron en el último año y medio de la contienda (1917 y 1918).
La de Vietnam (1962-1973), fue la guerra más impopular de la historia americana, debido a su larga duración (11 años), a que EE UU no consiguió ganar y al fuerte clima de contestación juvenil que provocó.
Se cobró más de 58.000 vidas. Una cifra superior a la de Corea (1950-1953), con 33.651 muertos. Pero aun con todo, se queda muy por debajo de la cifra de bajas causada por la legislación abortista en el seno materno.
La mentira es común en estas situaciones Lo que no pudieron los obuses, ametralladoras y bombas en casi 200 años de historia, desde la Guerra de la Independencia (1776-1782), lo ha conseguido el aborto legal en menos de tres décadas.
Mentira y manipulación
Todo comenzó en los primeros años setenta. El clamor a favor del amor libre, el sexo libre y la libertad individual se oía como un estruendo. Una joven del estado de Texas, llamada Norma McCorvey, denuncia que ha sido violada por un grupo de jóvenes. Se queda embarazada. Contrata a dos abogadas, Sarah Weddington y Linda Coffee, recién graduadas por la Facultad de Leyes de la
Universidad de Texas. Ambas salían de las aulas con ánimos de cambiar el mundo, con aspiraciones profesionales y secretas ambiciones...
Tantas como para querer atacar la ley que prohibía el aborto. ¿Qué necesitaban? Una clienta. Convencen a Norma (a la que llaman Roe) para que luche por abortar en vez de entregar a su bebé en adopción, que era lo que se venía haciendo antaño.
El caso fue llevado a juicio varias veces hasta llegar al Tribunal Supremo, donde se emite el fallo que legaliza el aborto en los 50 estados del país norteamericano. Mientras se litigaba el caso, la bebé que Norma McCorvey esperaba nació y fue entregada en adopción.
En 1987, la misma Norma admitió que no había sido violada y que el padre de su hija era una persona conocida. El relato sobre los pandilleros resultó ser una mentira. Igual que otros casos que han hecho que el aborto florezca en este país, como el Doe vs. Bolton.
La discusión sobre el aborto sigue causando polémica en Estados Unidos y promete ser uno de los temas calientes de los próximos años. Se considera que el próximo presidente tendrá la oportunidad de nombrar varios miembros de la Corte Suprema que puedan cambiar el rumbo de la ideología de este país.