Australopithecus

Los australopitecos fueron los primeros primates que lograron caminar en posición erecta y con sus manos libres. Literalmente, Australopiteco significa "simio austral", y ha sido el nombre que ha sido asociado a los primeros descubrimientos en el Africa austral (el primero proviene de Taung, en Sudafrica, en 1924).

Han sido identificados al menos 5 o 6 tipos distintos de australopitecos, han vivido al menos 2 millones y medio de años (de los 4 millones a los 1.5 millones de años). Los hay robustos, gráciles, altos, bajos.

Los Australopithecus Boisei - Robustus - Africanus

- miden entre 2 y 1 metro de alrura.

- más o menos 500 cm3 de tamaño cerebral.

- se especializan en dietas duras (semillas - frutos)

- desarrollo importante de sus músculos masticatorios: cresta discal, resultado del incremento muscular neceario para la acción masticatoria)

- arco zigomático más robusto.

Otras especies de Autralopitecos son más delgadas: son las especies "Gráciles". No tienen cresta, serían más carnívoros que los robustus. Arco zogomático menos robusto. La principal diferencia entre las dos formas de australopithecos es que los robustus llevaron su adaptación masticatoria hasta el extremo a comparación de las formas más gráciles, se transformaron en una verdadera máquina de moler.

Unas huellas dejadas hace en lava fresca pudieron constatar la asombrosamente humanoide manera bipedestre de caminar del Asutralopithecus. Esta huellas fueron descubiertas en Laetoli, en el norte de Tanzania. Fueron fechadas por el método de K-Ar y arrojaron una antigüedad entre 3,6 a 3,7 millones de años. Estos registros fósiles sólo pueden producirse en condiciones metereológicas especiales, como erupciones volcánicas. Primero cayeron varios centímetros de ceniza volcánica, compuesta por glóbulos de lava de carbonatita de sodio y melitita. Luego se produjo la huella del pie sobre la toba, que se solidificó rápidamente como consecuencia de una solución de carbonatos solubles provocada por la lluvia, los cuales cristalizaron en pocas horas bajo el calor del sol. Más tarde, una segunda erupción volcánica protegió estas huellas impresas en toba de la erosión y del desgaste durante millones de años.

El estudio detallado de estas huellas revelan un marcha bipedestre con una colocación normal del pie derecho e izquierdo y con unos dedos gordos parecidos a los de los humanos. La zancada corresponde a homínidos con una altura de 1,43 cm a 1,52 cm para los dos individuos más grandes. Un rasgo interesante es que uno de los individuos más grandes seguía al otro colocando los pies exactamente en las huellas del precedente. El tercer individuo era más pequeño y caminaba a la izquierda, siguiendo la marcha ligeramente sinuosa, lo que indica que era llevado de la mano.

Junto a la evolución del esqueleto se habría producido un cambio en los músculos de las extremidades, sobre todo en los que rodean la articulación de la cadera.

En contraste con el simio, los músculos de la cadera y los glúteos medio y mínimo estabilizan la cadera durante la marcha y limitan su balanceo con los movimientos de flexores y extensores. La función de extensor de la cadera es asumida en el humano por un glúteo máximo considerablemente mayor. Las inserciones musculares en la pelvis del A. Africanus confirman que ya se había llevado a cabo parcialmente este cambio en el músculo.

El paso del cuadrupedestrismo al bipedestrismo debe haber requerido un rediseño del sistema nervioso, pero nuestro conocimiento sobre la maquinaria neuronal implicada en la postura bípeda es limitada.

Lucy fue descubierta por Donald Johanson y Tom Gray en noviembre de 1974, en una región del Hadar llamada Afar. Durante una exploración de rutina, repasando zonas ya recorridas un par de veces, Johanson notó imprevistamente que algo sobresalía del suelo. Se trataba del esqueleto homínido más completo jamás hallado de una época tan antigua. En seguida se dieron cuenta que se trataba de una hembra y la llamaron "Lucy", en honor a la música que resonaba por el equipo de audio en el campamento: "Lucy in the sky with diamonds", de The Beatles.
Lucy ha permitido a la paleoantropología reconstruír una parte del mosaico de nuestra evolución. Fue denominada como perteneciente a una nueva especie: el Australopithecus Afarensis.

Hay diversas hipótesis con Lucy, ella es la antecesora de todos los homínidos, algunos sostienen que el Homo Habilis es descendiente directo del Afarensis, otros consideran al Africanus como antecesor del Habilis.

Lo cierto es que a partir de Lucy se producen dos cambios importantes, hace unos 2 millones de años:

- algunos homínidos van a desarrollar su capacidad bucal.

- otros van a desarrollar su capacidad craneal.

Los Megadontos van a desarrollar su capacidad masticatoria, mientras que las especies del género Homo van a desarrollar menos sus capacidades masticatorias, pero más su capacidad craneal: a través de los artefactos van a complementar la capacidad del aparato masticatorio de los megadontos.

Así, especies coetáneas como el Homo Habilis y el Australopithecus Robustus van a empezar a distanciarse cada vez más de su tronco común. El Habilis evolucionará hacia el Erectus, el Robustus y Boisei se extinguirán, presos de su mayor especialización en consumo de semillas.

La rama que conduce a los humanos desarrolla más su capacidad craneal, logra complejizarse y fabricar artefactos, la rama australopithecus especializa su aparato para su dieta y desaparece.

En septiembre de 1994 se halló en el desierto etíope el que hasta entonces era el ser más antiguo en la cedena evolutiva humana. Este homínido había vivido hace unos 4,4 millones de años atrás y se lo denominó en un principio como Australopithecus Ramidus.

En realidad, el primer diente de un Ramidus fue descubierto cerca de la aldea de Aramis en 1992, pero el hallazgo fue publicado algún tiempo después en la revista británica Nature.

Según los expertos, el menudo Ramidus se alimentaba con frutas y hojas de árboles, en los cuales probablemente vivía.

Fueron encontrados un cráneo y dientes que se asemejaban a los de un chimpancé, pero otros restos encontrados tenían una apariencia humanoide. En su momento, el paleontólogo Tim White, de la Universidad de California, dijo a la revista científica Nature que "se trata del ser más antiguo en la cadena evolutiva que nos liga con los monos y nos permitirá una mirada a la biología de un antepasado que se ubica en las raíces del árbol genealógico humano". Hoy en día, con las definiciones más rígidas, se lo considera un Ardipithecus, y nuevos hallazgos recientes lo han desplazado de su lugar como el "más antiguo de los homínidos jamás encontrados".

En septiembre de 1995 Meave Leakey (FOTO), esposa de Richard Leakey,
anunció a la comunidad académica el hallazgo de unos fósiles de hace 4,1 millones de años, que corresponderían a una nueva especie de homínidos. Esta nueva especie fue denominada Australopithecus Anamensis, y constituyó uno de los últimos grandes descubrimientos. El Anamensis ya andaba de pie, el hallazgo procedía de Kanapoi, en Kenya, a pocos kilómetros del Lago Turkana, escenario de hallazgos anteriores. El Anamensis demuestra que nuestros antepasados caminaban erguidos por lo menos 500.000 años antes de lo que se estimaba.

El Anamensis era vegetariano, caminaba semierguido. Todavía no fabricaba instrumentos y tampoco manejaba un lenguaje.

Tim White, más recientemente, fue protagonista de un nuevo hallazgo que completa la cadena evolutiva: el Autralopithecus Garhi ( MAS ADELANTE ENCONTRARAN INFORMACION SOBRE ESTA NUEVA ESPECIE).