LA DIVERSIDAD DE LA EXPERIENCIA HUMANA

Casi todas las sociedades humanas que colonizaron el mundo expandiéndose desde Africa, la cuna de la humanidad, pueden ser consideradas como sociedades cazadoras - recolectoras, compuestas por grupos relativamente pequeños, denominados a menudo como bandas. De hecho a los estudiantes de Antropología se les suele informar, ni bien comienzan la carrera, que en un 99 % de la historia humana, los hombres, fuimos cazadores - recolectores; sólo en el 1% restante se sucedieron todos los descubrimientos,
las grandes civilizaciones e imperios, la sociedad industrializada y este mundo de hoy globalizado.

Cuando se estudia la historia o la prehistoria a nivel global, uno de los acontecimientos más significativos es el comienzo de la producción de alimentos, basada en especies vegetales domésticas y también en especies animales domesticadas. Uno de los hechos más llamativos de la prehistoria mundial es que la transición desde la caza y la recolección a la producción de alimentos parece haberse producido de forma independiente en varias zonas y en todos los casos tras el término de la Era Glaciar, es decir, después de los 10.000 años antes del presente, aproximadamente.

En el Próximo Oriente, podemos rastrear los orígenes de la transición antes incluso de esa fecha. De todos modos, estaba en marcha en esa zona una agricultura estable, basada en el trigo y la cebada así como en las ovejas y cabras, en torno a los 8000 AC. La agricultura se había difundido a Europa en el 6500 AC y está documentada en el sur de Asia en torno a las mismas fechas.

En China, parece haberse producido un desarrollo independiente, basado en un principio en el cultivo del mijo, en torno a los 5000 AC y, casi al mismo tiempo, surgió un foco aislado al sureste de Asia, con la explotación del arroz. En Africa, el mijo y el sorgo ya se cultivaban en el tercer milenio AC. Mientras que en el Pacífico Occidental el cultivo de tubérculos y árboles ya se había desarrollado para esas fechas.

En América, se dispuso una gama diferente de cultivos. En Perú, el cultivo de judías, calabacines, pimientos y algunas hierbas pudo haber comenzado antes del 8000 AC. Otras especies como la mandioca y la papa, pronto se añadieron a la lista, pero la planta de mayor impacto en la agricultura americana fue el maíz, cultivado en México en torno a los 5000 AC.

Estas sociedades de agricultores primitivos eran sociedades "segmentarias", pequeñas comunidades sedentarias independientes, carentes de una organización fuertemente centralizada y relativamente igualitarias. En general, se relacionaban con sus vecinos mediante lazos tribales.

En muchos casos, la economía agrícola experimentó un proceso de intensificación, que derivó en un aumento de la producción y un aumento de la población. A menudo, estas unidades sociales se empezaron a hacer cada vez menos igualitarias, empezaron a aparecer diferencias de status y posicionamientos personales. Cada vez más empezaron a proliferar jerarquías dentro de las sociedades, que a veces daban como resultado jefaturas o comunidades lideradas por "grandes hombres".

La revolución urbana fue la siguiente gran transformación: no es sólo un cambio en el tipo de asentamiento, sino que refleja las profundas transformaciones sociales.
La primera de ellas es el nacimiento de las sociedades estatales, que presentan instituciones de gobierno mucho más diferenciadas que las jefaturas y que, a menudo, conocían ya la escritura.

Los primeros estados aparecen en el Próximo Oriente en torno a los 3500 AC, en Egipto sólo un poco más tarde y en el Valle del Indo hacia el 2500 AC. En el Cercano Oriente, el nacimiento de centros conocidos, como Ur, Uruk y más tarde Babilonia, señaló el período de las primeras ciudades - estado mesopotámicas y fue seguido en el primer milenio AC de una época de grandes imperios, sobre todo los de Asiria y la Persia Aqueménida. En Egipto, es posible seguir el continuo desarrollo de las tradiciones culturales y políticas durante más de 2000 años, desde la era de las pirámides del Imperio Antiguo hasta el poder imperial del Egipto del Imperio Nuevo.

En el límite occidental del Próximo Oriente, surgieron otras civilizaciones: la Minoica y la Micénica en Grecia y el Egeo durante el segundo milenio AC y la Etrusca y Romana en el primer milenio AC. En el extremo opuesto de Asia, surgen estados con centros urbanos en China, antes del 1500 AC, marcando los inicios de la civilización Shang. Casi al mismo tiempo, Mesoamérica presenció la aparición de los Olmecas, la primera de una larga serie de civilizaciones de la América Central, que incluye la Maya, la Zapoteca, la Tolteca y Azteca. En la costa sudamericana del Pacífico, las civilizaciones Chavín (desde el 900 AC), Moche y Chimú sentaron las bases del vasto y poderoso Imperio Inca, que floreció en el siglo XV DC.

El complejo siguiente es el más conocido de la historia escrita, con la aparición del mundo clásico de Grecia y Roma, así como de China y más tarde del Islam, el Renacimiento Europeo y la aparición de las potencias coloniales. Desde el s.XVIII se viene produciendo la independencia de las antiguas colonias, primero en América y después en Asia y Africa.