Consejos Para Dirigir La Alabanza
10 Consejos para dirigir La Alabanza
La
alabanza juega un papel muy importante en la propagación del
Evangelio así como en el crecimiento de los creyentes en la vida
cristiana. Esto sin mencionar el papel primordial de proclamar las
alabanzas a nuestro Dios. La iglesia y la alabanza deben proveer el
ambiente adecuado para que los creyentes e inconversos se acerquen
más Dios. La meta principal de la alabanza es preparar el corazón de
las personas para que el Espiritu Santo haga la obra en sus vidas a
través de la Palabra de Dios. Estos son algunos consejos que merecen
ser recordardos.
1.-
Ore
Si Jehová no edificare la casa en vano trabajan los edificadores, en
vano serán todos nuestros esfuerzos por mejorar la alabanza si antes
no buscamos la bendición y la dirección del Señor por medio de la
oración. "Todo lo que es valioso en el reino de Dios se inicia en la
oración y depende de ella". Debemos orar antes de comenzar el
programa poniéndonos en manos del Señor. Para que Él bendiga el
servicio y las personas que estarán en él. Si disponemos nuestro
corazones para buscar al Señor no solo cinco o diez minutos antes
del servicio sino unas semanas o meses antes de cada programa
estaremos mas receptivos a escuchar en nuestros corazón y en nuestro
espíritu la voz de su Espíritu Santo guiándonos, consolándonos, y
animándonos en la preciosa obra que Él nos ha encomendado.
Humillémonos en privado, cada uno de nosotros ante la presencia de
Dios y también juntos como grupo de alabanza en la iglesia, o algún
lugar apropiado para orar. La batallas espirituales se ganan primero
a través de la oración.
2.-
Tenga listo su instrumento
Es buena idea tener listo o preparado nuestros instrumentos antes de
que comience el programa. Es de muy mal gusto estar justo antes de
comenzar el periodo de alabanza afinando las guitarras o ajustando o
golpeando los tambores. Es de esperarse que cuando lleguen los
hermanos de la congregación al servicio todos los pequeños detalles
de sincronización de tonos entre las guitarras, pianos o teclados
estén ya preparados y acordados entre todos los musicos. En el caso
de los cantantes su instrumento es su propia voz igualmente deben
tener su voz lista antes de pasar al pulpito. No podemos pensar que
por tener una bonita voz ésta está siempre lista a dar su mejor
esfuerzo. Especialmente los domingos por la mañana despues de mas
ocho horas de sueño. Todo deportista sabe que para correr una
carrera es necesario pasar por un período de calentamiento antes de
adentrarse en la tarea. De la misma manera un cantante, guitarrista,
baterista o pianista debe tener listo su instrumento así como su
cuerpo fisico por medio de un calentamiento previo. Como guitarrista,
baterista o cantante debe hacer ciertos ejercicios previos antes de
comenzar su tarea.
3.-
Prepare el repertorio
Haga una lista de los cantos a entonar en el periodo de alabanza.
Escriba la secuencia u orden de los cantos. Cada uno de ellos con
sus respectivos tonos. Diriga cantos que usted conozca bien, si
usted está inseguro transmitirá su inseguridad a la congregación a
la hora de cantar. A la hora de escoger cantos escoja cantos con los
que usted se siente cómodo cantando. No escoja cantos demasiados
complicados para usted, es mejor cantar un canto sencillo bien
entonado que uno díficil mal entonado.
4.-
Memorice los cantos
En cuanto sea posible no mire las partituras, acordes o letras de
los cantos. Mejor dirija su mirada a la congregación. Vealos por que
usted desea y necesita comunicarse con ellos. Mire a la congregación
en general no a un hermano(a) o grupo de hermanos fijamente lo que
logrará con eso es hacerlos sentir incomodos. Las notas musicales
saltan del pentagrama a su vista, pero cuando usted las tiene
memorizadas saltarán de su mente por doquier. Si no sabe la letra o
acordes de un canto usted tiene que ver sus partituras pero hágalo
fugazmente. Como lo haría un reportero frente a una camara de
televisión. Ellos casi o memorizan las temporales noticias. Entonces
por que no memorizar las alabanzas eternas a nuestro Dios. Esto le
dará confianza técnica y musical en el púlpito a la hora de dirigir
los cantos.
5.-
Cuide su presentación
"Todo entra por la vista". "Mira siempre la meta" son las palabras
de mi entrenador de atletismo. Tenga siempre presente que a la
congregación vendrán hermanos(as) o visitas que son más sensibles o
conservadores en cuanto a la imagen de una persona. En nuestro caso
como líderes espirituales tengamos siempre en cuenta nuestra
vestimenta. Evitemos el uso de ropas demasiados casuales o
informales. Asi como ropa sexi, atrévida, provocativa o ajustadas
que pueda distraer la atención de los hermanos(as) del objetivo por
el cual usted está en el púlpito. Recuerde siempre que la idea es
edificar y no destruir.
6.-
Cuide la presentación del escenario
La alabanza debe proveer el ambiente necesario para que los
creyentes y no creyentes se acerquen a Dios. Y "Donde esta Dios hay
orden". No importa si la congregación es muy humilde y no tiene los
recursos para proveer el púlpito de una buena ornamentación que no
distraiga la atención a puntos equivocados. Siempre se pueden
realizar pequeños ajustes para que la atención de los oyentes se
centre en la Palabra de Dios y en las alabanzas a El. Es buena idea
mantener el púlpito o atrio bien ordenado y limpio. Donde cada
integrante del grupo de alabanza este confortable y no todos
agrupados o escondidos detrás de una gran cantidad de
bocinas(parlantes) o cables todos retorcidos. Esmeremónos por tener
todo bien ordenado y bonito. El Invitado Principal se complacerá en
nuestra obra.
7.-
Haga suaves transiciones de un elemento a otro
Planee para que no hayan espacios muertos dentro de la alabanza. El
silencio es muy provechoso cuando tiene un próposito determinado
pero NO cuando es fortuito e involuntario. Es lo que algunos llaman
matar el espíritu o romper el hilo. Esto da preciosos segundos para
que algunos comiencen a susurrar ¿que pasa?, ¿que sigue? O para que
otros comiencen a hablar del fin de semana. Que todos los
integrantes del grupo de alabanza sepan o tengan escrito cual canto
va despues de cual y en que tono va a ser cantado. Otro asunto muy
importante es que la secuencia de la alabanza(cantos) sea uniforme
no a saltos. Esto significa que agrupelos cantos similares en tono,
ritmo y velocidad en grupos. Que no sea la alabanza una "montaña
rusa" en donde nadie sabe en que momento la ondasube o baja. Es algo
así como taquicardia musical.
8.-
Memorice las escrituras
Cuando motive a los hermanos es mejor que sea sabios con las
palabras que salen de su boca. Siempre es bueno planear con
anterioridad que palabras usará para animar a los hermanos. Y en
todo caso es mucho mejor animar con las palabras de la Biblia. Por
eso es bueno que memorice la Palabra, "de la abundancia del corazón
habla la boca", recuerda?. Muchos directores de alabanza fallan o
cometen errores cuando motivan a la congregación por que dicen lo
primero que les viene a la cabeza. Otros tratan de ir un poquito mas
allá citando frases de la Biblia pero fallan citando frases
tergiversadas o medio dudosas. O diciendo en el micrófono (conectado
y con buen volumen):
"Hermanos cantemos al Señor con gozo por que así dice ….Salm….",
Uj.. Uj.. …¿donde está?…Perdonen hermanos ahorita lo encuentro.
9.-
No improvise, planee
Por supuesto que no me estoy refiriendo a la improvisación musical
donde unos pocos buenos musicos hacen arreglos nuevos en el "aire o
la carrera" a una pieza musical que está siendo tocada. Me refiero
al hecho de arodillarse a orar, y sentarse a planear lo que Dios
quiere que nosotros hagamos durante el servicio de alabanza. Hay que
tener presente que la rígidez de un programa puede matar lo que el
Espíritu Santo quiere hacer en determinado momento del servicio. No
es conveniente pasar al púlpito esperando que todos los cantos y el
orden de ellos bajen del cielo por inspiración divina. Si queremos
ser directores de cantos primero debemos saber cantar. Si queremos
guiar a las personas que vienen a adorar a Dios debemos aprender a
adorar Y esto solo se logra adorando al Señor en espíritu y verdad
en la hermosura de la santidad. Con las puertas de nuestro
dormitorio cerradas y a solas con Dios. Así aprenderemos a oir la
voz de Dios y estaremos dispuestos a hacer lo que nos susurre
mientras dirigimos los cantos.
10.- Sincronice los cantos con el mensaje del predicador.
Asi como todos los instrumentos deben estar sincronizados en el
tono. Asi la música debe estar sincronizada con el mensaje del
pastor. Que difícil es para un líder de alabanza preparar un buen
periodo de alabanza a ciegas del tema del cual se va a predicar, que
difícil es complementar cuando no se sabe que va a compementar.
Acérquese al pastor hable con él, pídale que ore por usted y usted
ore por él. Comprenda que los dos están ahí para ayudarse
mutuamente. Solicitele con humildad y sabiduría que le informe con
anticipación de que va a predicar en el servicio. Asi se evitarán
estar hablando uno de la resurrección y el otro de navidad.
Complemente el sermón con cantos que sean acordes al sermón.
Recuerde donde no hay comunicación hay separación.
Conclusion:
El ministerio de la alabanza es un llamado de Dios y el ha elegido a
determinados hombres y mujeres para realizar esta preciosa tarea
dándoles los talentos musicales y dones espirituales para la
edificación de la Iglesia y su propio crecimiento espiritual. El nos
ha dado dones; a unos pocos o otros muchos y nuestra tarea es igual
para todos: "no descuides el don que hay en ti" (1Ti. 5:14).
Esforcemos por alabar a Dios cada vez mejor con nuestro espíritu y
con nuestro entendimiento.
Busquemos siempre formas de mejorar nuestra relación con Dios y de
mejorar en el conocimiento de nuestro instrumento. Y entonces
oiremos en el dia final:
"Bien, buen siervo y fiel; sobre poco
has sido fiel, sobre mucho te pondré;
entra en el gozo de tu señor."
Mateo 25:21
Title: "10 Consejos para
dirigir la alabanza"
Publication Date: Junio 19, 2002