La música Rock
es el fenómeno cultural más popular de la segunda mitad del siglo
veinte, influenciando toda nuestra cultura. Es el más grande
propagador de la revolución moral, social, y estética que nosotros
estamos experimentando hoy. El sonido y la filosofía de la música rock
penetran virtualmente cada área de la actividad diaria. Su insistente
golpe pulsátil puede oírse en casas, oficinas, lugares de negocios, e
incluso iglesias. La música Rock ha penetrado cada aspecto de vida.
La música Rock ha llegado a ser una manera eficaz de comunicar un
nuevo juego de valores y producir una nueva experiencia religiosa en
una generación emergente. Antes de la música rock, la familia disfrutó
en conjunto de la música como una forma sana de entretención. La
antigua música europea influenció la música de la primera mitad del
siglo veinte y se consideró "buena para los niños."
Un cambio radical empezó en los años 1950s con la introducción de la
música rock, que ha creado una grieta entre la generación más vieja y
la más joven. Nada excita tanto las pasiones de las personas jóvenes
hoy como lo hace la música rock. Como señala Allan Bloom de la
Universidad de Chicago, "Hoy, una proporción muy grande de personas
jóvenes entre las edades de diez y veinte años vive para la música
rock. . . . Cuando ellos están en la escuela y con su familia, ellos
anhelan enchufarse de nuevo en su música. Nada de lo que los rodea -la
escuela, la familia, la iglesia -tiene algo que ver con su "mundo
musical". (1)
¿Qué es lo que hace a la música rock tan atractiva, una afición
irresistible para muchas personas, a pesar de su naturaleza
revolucionaria anti-cristiana y contracultural? ¿Por qué es que
incluso las iglesias cristianas están adoptando más y más formas
cristianizadas de música rock para su servicio de culto y proclamación
evangelística? ¿Hay algo único en la estructura de la música rock y/o
en sus letras que hacen de esta música algo substancialmente diferente
de cualquier otra forma de música? Quentin Schultze señala que "Los
musicólogos han ponderado los enigmas de la atracción del rock y
generalmente se han alejado envueltos en el misterio, pues el rock
difícilmente encaja en la definición formal de alta cultura de
ejecución musical".(2)
Objetivos de este capítulo. Sería presuntuoso decir que este capítulo
resuelve el enigma de la atracción del rock al identificar todos los
factores que contribuyen a su popularidad sin precedentes. Cualquier
esfuerzo por ser comprehensivo en el análisis de tan complejo fenómeno
social arriesga el peligro de ser superficial.
Este capítulo busca entender las razones de la popularidad duradera y
aplastante de la música rock al continuar la investigación efectuada
en los tres capítulos anteriores respecto de la naturaleza de la
música rock. La suposición subyacente de este simposio es que los
cristianos y el pueblo secular son atraídos por la música rock debido
a lo que les ofrece en términos de excitación, visión mundial, sistema
de valores, y experiencia religiosa.
Hasta ahora nuestra investigación se ha enfocado en la visión mundial
de la música rock, su desarrollo ideológico, y la experiencia
religiosa. En el Capítulo 2 nosotros encontramos que la música rock
refleja una concepción panteísta de Dios como un poder sobrenatural
impersonal inmanente que el individuo puede experimentar a través del
ritmo hipnótico de la música rock y drogas. La concepción panteísta de
Dios ha facilitado la aceptación de la música rock tanto entre los
cristianos como entre las personas de mente secular, porque ambos
grupos buscan completar la urgencia interior de contar con una
experiencia agradable de lo sobrenatural a través de los efectos
hipnóticos de la música rock.
En el Capítulo 3 nosotros rastreamos la evolución ideológica de la
música rock enfocando los valores que han surgido durante el curso de
su historia. Nosotros encontramos que la música rock ha atravesado por
un proceso fácilmente discernible de endurecimiento desde el rock 'n'
roll, rock acido, heavy metal rock, rap rock, thrash rock, etc.
Constantemente están apareciendo nuevos tipos de música rock, porque
los entusiastas del rock constantemente exigen algo más fuerte y más
fuerte para satisfacer su sed insaciable
.
En el Capitulo 4 nosotros encontramos que la visión mundial panteísta
promovida por la música rock ha dado lugar eventualmente al rechazo de
la fe cristiana y a la aceptación de un nuevo tipo de experiencia
religiosa. Esta última involucra el uso de música rock, sexo, drogas,
y baile para trascender la limitación de tiempo y espacio y conectarse
con lo sobrenatural.
Este capítulo continúa y completa la investigación respecto de la
naturaleza de la música rock, al mirar de cerca sus características
definitorias, a saber, su ritmo. Nos referiremos a estudios
científicos que indican que el golpe rítmico del rock afecta el cuerpo
en una forma tan distinta a cualquier otro tipo de música. Altera la
mente y causa varias reacciones físicas, incluso la excitación sexual.
Esta mirada más íntima a la naturaleza de música rock entrega una base
para discutir la pregunta sobresaliente de este simposio - ¿puede la
música rock legítimamente ser transformada en un medio digno de adorar
a Dios y proclamar el mensaje del Evangelio? Este capítulo está
diseñado para ayudar en la formulación de una respuesta final a esta
pregunta ofreciendo una comprensión de la estructura de la música rock
y sus efectos.
Este capítulo está dividido en dos partes. La primera parte examina la
estructura de la música rock en sí misma, sobre todo su ritmo y latido
pulsante característico. Se dará especial consideración a los efectos
de la música rock en la mente, músculos, y excitación sexual. La
segunda parte discute cómo la iglesia debiera responder ante la música
rock escogiendo a cambio música que respeta el equilibrio apropiado
entre la melodía, armonía, y ritmo. Tal equilibrio refleja y fomenta
el orden y equilibrio en nuestra vida cristiana entre los componentes
espirituales, mentales, y físicos de nuestros seres. El capítulo
termina ofreciendo algunas sugerencias prácticas de cómo hacer revivir
el canto de himnos tradicionales e introducir nuevos himnos a la
congregación.
PARTE 1
LA ESTRUCTURA DE LA MÚSICA ROCK
La característica definitoria de la buena música es un equilibrio
entre tres elementos básicos: la melodía, la armonía, y el ritmo.
Otros elementos como la forma, la dinámica, el texto, y las prácticas
de la actuación, podrían listarse, pero para el propósito de nuestro
estudio, limitamos nuestra discusión a los tres elementos antedichos.
La música Rock invierte este orden haciendo del ritmo su elemento
dominante, luego la armonía, y finalmente la melodía.
Antes de mirar el papel que el ritmo juega en la música rock y su
efecto en el cuerpo humano, podría ser útil para aquellos menos
versados en la música, explicar cómo se integran la melodía, la
armonía, y el ritmo en la buena música .
La Melodía. La melodía es la parte más prominente de la música. Es la
"línea del relato " de una pieza musical y consiste en el arreglo
horizontal de notas que primero se reconocen cuando cantamos una
canción como "Salvador a tí me rindo." Aquellos que cantan lo que se
llama la armonía, en las partes del contralto, tenor o bajo, están
cantando una melodía que "armoniza" con las otras tres partes.
Aaron Copland que es considerado como el decano de los compositores
norteamericanos, hace esta observación sobre una buena melodía : "El
por qué una buena melodía debiera tener el poder de movernos ha
desafiado largamente todo análisis. . . Aunque no seamos capaces de
definir lo que es una buena melodía de antemano, ciertamente podemos
hacer algunas generalizaciones sobre melodías que ya sabemos que son
buenas ". (3)
Según Copland una buena melodía tiene las siguientes características
generales:
"Debe tener alzas y bajas (es decir, los tonos suben y bajan). Una
melodía que permanece estática (en el mismo tono) puede a través de la
repetición producir un efecto hipnótico. . . .
"Debe tener proporciones satisfactorias (es decir, un principio, una
parte media, y un final) y dar un sentido de integridad. La melodía
cuenta la historia de la pieza.
"Debe en algún punto (normalmente cerca del fin) llegar a un clímax y
entonces a una resolución. Todo buen arte tendrá un clímax.
"Se escribirá de tal manera de tener una respuesta emocional por parte
del oyente". (4) A la música Rock, como veremos, le faltan varias de
estas características esenciales de la buena música.
La Armonía. La armonía se produce por los acordes que encajan con la
estructura principal en que la melodía está escrita. Es el sonido que
nosotros oímos cuando las distintas partes coinciden. "Cuando una
melodía proporciona 'el perfil' para una pieza de música, la armonía
es su 'personalidad. ''(5)
"Los acordes pueden proporcionar tanto descanso (consonancia) como
inquietud (disonancia) en la música. La buena música tendrá un
equilibrio de descanso e inquietud. Los acordes armónicos también
pueden colorear nuestra disposición de ánimo como oyentes. Por
ejemplo, ¿que pasaría si cada canción fuera escrita con armonización
en un tono menor? Eso afectaría definidamente nuestra disposición de
animo. Este aspecto de la música puede ser difícil de comprender para
quien no es músico. Usted lo sabe cuando usted lo oye, pero usted no
puede estar seguro de cómo definirlo". (6)
El Ritmo. El ritmo es lo que hace que la música se mueva. Sin el
ritmo, la música se vuelve un sonido continuo, aburrido, y poco
interesante. "El ritmo es el movimiento ordenado de la música a través
del tiempo. Así como el latido del corazón es la vida del cuerpo, el
ritmo es la vida de la música y proporciona su energía esencial. Sin
el ritmo, la música está muerta. La melodía y la armonía deben
desplegarse juntas, y el ritmo hace posible este despliegue simultáneo
". (7)
Todo en la naturaleza, incluso el cuerpo humano, tiene ritmo. Hay un
ritmo para el latido del corazón, la respiración, y el habla. Los
científicos han descubierto que aún el cerebro funciona en ritmo.(8)
Las ondas cerebrales tienen frecuencias que son influenciadas por
estados físicos y mentales.
Lo mismo es cierto en la música dónde el ritmo es organizado en golpes
regularmente repetitivos que constituyen lo que está conocido como
"métrica". Normalmente el grupo de golpes viene en pautas de dos,
tres, o cuatro. "La repetición de estas pautas en la música se divide
por medidas. En cualquier buen trozo de música, el golpe más fuerte en
una pauta ( medida) es el primer golpe en la pauta (downbeat). Si una
pauta tiene cuatro golpes, el golpe más fuerte es el primero, y el
segundo golpe más fuerte es el tercero, como se ejemplifica en la
medida que sigue:
/ UNO, dos, TRES, cuatro/(9),
El ritmo en la Música Rock. La música Rock invierte el orden común del
golpe poniendo el énfasis en lo que se conoce como no-golpe. En el
no-golpe, el énfasis principal cae en el golpe cuatro y el golpe
secundario está en el golpe dos como se ejemplifica en la medida que
sigue:
/ uno, DOS, tres, CUATRO /
El problema fundamental con la música rock es su golpe sin cesar que
domina la música y produce un efecto hipnótico. Bob Larson cuya
carrera como un popular músico rock le dio una experiencia de primera
mano de la escena rock, señala que "el problema mayor para la
consideración desde un punto de vista moral y espiritual es hasta qué
punto un golpe pulsante o sincopado atropella los otros elementos
musicales en una canción para que el nivel de comunicación sea
primordialmente un despertar sexual y físico". (10)
En la buena música, como Tim Fisher explica, "el orden correcto es una
buena melodía, apoyada por la armonía equilibrada, ceñido de un ritmo
firme y consistente. La música de conciertos (por ejemplo, una
sinfonía u otro trozo instrumental de música) a veces variará de este
orden debido a un deseo de mostrar los talentos del compositor o la
destreza del artista. Sin embargo, nuestro tema aquí es la música
cristiana en cuanto tiene que ver con la comunicación de la palabra
hablada. Si usted desea comunicar un texto con música, el orden está
claro: melodía, armonía, luego el ritmo". (11). Debiera clarificarse
que "un ritmo consistente y firme", no significa un ritmo
sobreacentuado como se encuentre en la música rock.
La música Rock invierte el orden de la buena música haciendo del ritmo
la parte más importante del sonido. Larson explica: "A diferencia de
otras formas de música que pueden revelar inventiva melódica, el
enfoque del rock normalmente está en el golpe. Es la fiesta de un
tamborilero. . . El jazz tiene un balance rítmico. Fluye con un
sentimiento excitante pero finalmente liberador. Pero el rock está
construído en base a un ritmo duro, que sube y baja fuertemente y que
produce energía frustrada. Algunos sonidos del rock dan énfasis a los
golpes alternos, en tanto otros tipos de rock sintonizan en parte o
todo con el martilleo de cada golpe básico. Aunque puede agregar
rellenos (breves arranques percusionados), es trabajo del tambor el
guardar la fuerza del rock al darle incesantemente con el golpe
pulsante y sincopado ". (12)
El Golpe impulsor (directriz). El fuerte énfasis en el golpe rìtmico
es lo que distingue al rock de cualquier otro tipo de música. Quentin
Schultze señala: "El corazón del rock and roll es el ritmo y golpe -
esas dos fuerzas gemelas dan al rock su energía y propulsan su
intencionalmente simple armonía y melodía. La atracción no yace en la
armonía, porque la mayoría de la música rock and roll consiste en no
más de cuatro o cinco acordes simples en una clave muy claramente
definida. Tampoco la atracción está en la melodía, ya que el vocalista
de la música rock no canta tanto como lo que grita y se lamenta".
(13)
La primera característica de la música rock y la más importante,
definitoria y que la distingue es su implacable, impulsor y fuerte
golpe. En su libro, The art of rock and roll (El Arte del Rock and
roll), Charles Brown discute los varios tipos de música rock que han
evolucionado desde los días de Elvis Presley. Él encuentra que el
común denominador de todos los tipos de música rock es su golpe:
"Quizás la cualidad más importante para definir el rock and roll es el
golpe. . . El Rock and roll es diferente de otras músicas
principalmente debido al golpe". (14)
Es sumamente importante entender que la música rock es diferente de
toda otra música debido a su fuerte énfasis en el golpe implacable.
Este hecho es reconocido por los músicos rockeros. En su libro A
conceptual approach to rock music (Un acercamiento conceptual a la
música rock), Gene Grier dice que "el ritmo es el elemento más
importante y básico de la música rock debido a la manera en que
nosotros nos relacionamos con él". (15) Él instruye a los lectores
cómo escribir una buena canción rock tomando en cuenta los siguientes
cuatro pasos:
"1. Decida una forma de tiempo.
2. Decida una progresión de acordes. . . .
3. Escriba la melodía.
4. Escriba las letras". (16)
Esta declaración está totalmente clara. El rock invierte el orden
correcto de los elementos de la música normal haciendo del ritmo y la
armonía más importante que la melodía y las letras.
Bob Larson quien antes de su conversión fue un exitoso actor rockero
en los shows de televisión y entretuvo a audiencias repletas en el
Convention Hall, Atlantic City, explica que "el golpe pulsante y el
ritmo rápido identificarán sin duda alguna la música rock. . . . Ya
que el rock es un sonido híbrido de tradiciones completas de música
(jazz, negro spiritual, country y western, blues), es difícil
asignarle algún sonido como típico. Se ha vuelto un crisol musical
para muchos estilos, todos centrados en el golpe implacable". (17)
El papel definitorio del golpe implacable en la música rock explica
por qué su impacto es musicalmente en lugar de líricamente. Como
señala el sociólogo Simón Frith señala en su libro Sound efffects,
youth, leisure, and the politics of rock 'n' roll (Los efecto de
sonido, juventud, ocio y las polìticas del rock 'n' roll ), "Una
aproximación basada en palabras no es útil para explicar el
significado del rock. . . . Las palabras, si se llegan a reconocer,
son absorbidas luego de que la música ha dejado su marca". (18)
En un estudio mayor que aparece en Neurophysiology of Rock,(Neurofisiología
del rock) los investigadores científicos Daniel y Bernadette Skubik
dan énfasis con la claridad asombrosa (para científicos!) el impacto
musical del golpe del rock. "La conclusión de estos estudios es doble.
Primero, las letras son de importancia menor aquí. Ya sea que las
palabras sean diabólicas, inocuas, o basadas en las Sagradas
Escrituras, los efectos neurofisiológicos globales generados por la
música rock son los mismos. Simplemente no hay tal cosa como que el
rock cristiano es substantivamente diferente en su impacto. Segundo,
las implicaciones a corto plazo involucran una disminución en la
receptividad de la comunicación discursiva, en tanto las implicaciones
a largo plazo presentan serias interrogantes respecto de la
rehabilitación de las degradadas habilidades cognoscitivas del
hemisferio izquierdo. En jerga menos técnica y en un contexto
específico, nosotros debiéramos esperar que las habilidades para
recibir y entregar el evangelio, para orar discursivamente, y para
estudiar las Escrituras están comprometidas [por la música rock].
"(19)
Este hecho científico "no hay tal cosa como que el rock cristiano es
substantivamente diferente en su impacto" es obviamente ignorado por
aquellos que sostienen que la música rock puede ser legítimamente
adoptada para la adoración cristiana cambiando sus letras. El hecho es
que el cambiar las letras no afecta el impacto mental-físico del rock
en el funcionamiento de la mente, los músculos, y la producción de
hormonas, porque el golpe rítmico todavía está allí.
Un golpe más gentil, impulsor, también está presente en el rock suave,
dónde el golpe es muy sutil y menos "hostil" a los nervios. Pero, ya
sea suave o duro, finalmente un ritmo sobre -acentuado tiene el mismo
efecto.
Los efectos del golpe rockero. Una riqueza de investigación científica
existe sobre los varios efectos negativos psicológicos, fisiológicos,
y sociales del golpe rítmico del rock en los humanos y animales. Los
expertos han examinado la música rock, no como una experiencia
espiritual o religiosa, sino como un fenómeno social, psicológico, y
fisiológico. Ya que el Capítulo 8 trata específicamente con los
efectos de la música rock, sólo se citan algunos estudios en este
contexto.
Una razón importante del por qué la música rock afecta el cuerpo en
una forma distinta a cualquier otro tipo de música es el carácter
único del golpe rítmico del rock, normalmente llamado "no golpe." El
no golpe de la música rock consiste, como se ha dicho previamente, en
una secuencia de sonidos débil-fuerte. Este no golpe se detiene al fin
de cada grupo de compases, como si la música se detuviera y entonces
empieza de nuevo. Esto causa que inconscientemente el oyente tenga una
detención al final de cada grupo de compases. Ésto es lo opuesto al
golpe rítmico dactilico o waltz, que refleja el latido del corazón y
otros ritmos del cuerpo.
El psiquiatra Verle Bell ofrece una explicación gráfica de cómo el
golpe rítmico del rock causa adicción: "Una de las emisiones más
poderosas de adrenalina en ocasiones de lucha-escape es ante la música
que es discordante en sus golpes o acordes. La buena música sigue
exactas reglas matemáticas, que resultan en que la mente se siente
confortada, animada, y 'segura.' Los músicos han encontrado que cuando
ellos van contra estas reglas, el oyente experimenta una alta
adicción.
"Como doctores "dietòlogos" inescrupulosos que adiccionan a sus
clientes a las anfetaminas para asegurar su continuada dependencia,
los músicos saben que la música discordante vende y vende. Como en
toda adicción, las víctimas llegan a ser tolerantes. La misma música
que una vez creó una comezón agradable de excitación ya no satisface.
La música debe ponerse más trepidante, más ruidosa, y más discordante.
Uno empieza con el rock suave, luego el rock 'n' roll, luego aumenta a
música heavy metal. (20)
Los neurocientíficos Daniel y Bernadette Skubik proporcionan una
explicación concisa de cómo el golpe rítmico del rock afecta los
músculos, la mente, y los niveles hormonales. "El ritmo para el que
los tambores proporcionan o generan el golpe básico, produce
respuestas medibles en el sistema muscular del cuerpo, en los modelos
de ondas cerebrales y niveles hormonales. Brevemente, (1) la
coordinación muscular y el control se sincronizan con el golpe rítmico
básico; (2) la actividad de las ondas cerebrales se alinea con el
ritmo así generado; y (3) varias hormonas (específicamente, opiatos y
hormonas sexuales) son liberadas como resultado de la sincronización
electrofisiológica con el ritmo. Estos resultados han sido
documentados regularmente por varios investigadores, y aunque los
individuos pueden variar en su respuesta en márgenes estrechos ante
ingresos controlados, todos los sujetos normales han reaccionado como
se ha indicado cuando el ritmo excede de 3-4 golpes por segundo - un
ritmo que excede la proporción media de los latidos del corazón" (21)
El efecto del golpe rítmico del Rock en los Músculos. John Diamond es
un médico respetado que ha dirigido extensas investigaciones respecto
del impacto de la música en el cuerpo humano. Su libro Your body
doesn't lie (Su Cuerpo no Miente) contiene una riqueza de información
en este asunto. Después de un estudio de más de 20,000 archivos, él
encontró que el rock afecta el cuerpo negativamente de varias maneras.
Por ejemplo, él encontró que el contrapunto que se detiene debilita el
cuerpo porque va contra el ritmo normal de la fisiología humana,
afectando así al corazón y tensión arterial . El ritmo del rock pone
en movimiento una respuesta automática de pelea-y-huye que causa una
secreción hormonal, efinefrina.(22). El cuerpo reacciona al golpe con
debilidad muscular, ansiedad, y conducta agresiva.
Diamond cuenta la manera inesperada cómo él entró a investigar los
efectos del golpe del rock."Varios años atrás mi investigación sobre
el efecto de la música tomó un giro inesperado. Yendo de compras en
el departamento de grabaciones musicales de una gran tienda de Nueva
York , me sentí débil e inquieto y totalmente enfermo. El lugar
estaba vibrando con la música rock. Después yo hice lo obvio - probé
el efecto de esta música. . . . Utilizando a cientos de temas,
encontré que escuchando frecuentemente música rock causaba que todos
los músculos del cuerpo se debiliten. La presión normal exigida para
doblegar un poderoso músculo deltoide en un varón adulto es
aproximadamente de 18 a 20 kilos. Cuando se toca música rock, se
necesitan sólo 4,5 a 7 kilos.(23)
En su libro Tuning the Human instrument (Sintonizando el Instrumento
Humano), Steven Halpern señala varios estudios sobre cómo el ritmo del
rock afecta la mente y el cuerpo. Uno de ellos es similar al estudio
del Dr. Diamond. Él escribió: "El Dr. Sheldon Deal, un quiropráctico y
autor conocido a través del país, y de ningún modo un viejo embustero
que categóricamente hace callar todo lo que sea rock and roll sólo por
el hecho de serlo, demostró el efecto del golpe standard del rock 'n
roll sobre la fuerza muscular del cuerpo. Usando pruebas bàsicas
kinesiológicas [es decir, el movimiento depende del estímulo], mostró
que el arreglo rítmico que nosotros oímos todo el tiempo en la música
pop tiene un definido efecto debilitador sobre la fuerza del sujeto
analizado . . . Este efecto es verdadero tanto si al sujeto le gusta
el estilo de música o no. En otros términos, el cómo uno 'se sentía'
con la música, estar a gusto, era irrelevante en términos de cómo el
cuerpo "sentía" . . un común denominador que atraviesa la mayoría de
las reacciones subjetivas que es la excitación sexual".( 24)
Otros estudios científicos han producido resultados similares.
"Investigadores en la Universidad estatal de Louisiana encontraron que
escuchar música rock a todo volumen aumentaba los latidos del
corazón y disminuía la calidad de los resultados (del trabajo) en un
grupo de veinticuatro adultos jóvenes. En contraste, la música
agradable de oir o más suave bajó el ritmo del corazón y permitió
sesiones de entrenamiento más prolongadas" (25) Experimentos similares
se citan en el Capítulo 8. Uno de ellos fue dirigido por el autor del
capítulo, Tore Sognefest, un profesor de música noruego y autor del
libro The power of music (El Poder de la Música).
En otro estudio sobre los efectos de la música rock, "Investigadores
en la Universidad Temple encontraron que los estudiantes de la
universidad expuestos a las grabaciones de los Beatles, Jimi Hendrix,
los Rolling Stones, Led Zeppelin, y otras bandas similares, respiraban
más rápidamente, mostraron resistencia reducida en la piel a los
estímulos, y tenían pulsaciones crecientes del corazón comparadas con
aquellos expuestos a sonido de backround aleatorio. (26)
El ritmo del Rock y la respuesta Sexual. Uno de los efectos mas
conocidos del ritmo rock es la excitación sexual. Los músicos rockeros
son bien conscientes de este hecho y lo aprovechan a su ventaja. Se
le preguntó a Gene Simmons del grupo rockero KISS en el programa
televisivo Entertainment Tonight (Entretencion esta noche) si los
padres debieran preocuparse de que los adolescentes escucharan su
música. Con una franqueza llana Simmons contestó: "Ellos debieran
preocuparse pues estamos yendo hacia las chicas -eso es de lo único
que trata el rock - sexo con una bomba de 100-megatones, el golpe
rítmico". (27)
Aquí, sin comentarios, hay algunos otros testimonios de estrellas del
rock. Mick Jagger dijo: "Usted puede sentir la adrenalina que fluye a
través del cuerpo. Es algo sexual. Yo incito a mi público. Lo que yo
hago se parece mucho a una danza desnudista (streptease) de una chica
".(28) Jim Morrison declaró: "Yo me siento elevado espiritualmente a
allí. Pienso como si fueramos políticos eróticos".(29) Richard Oldham,
manager de los Rolling Stones, dijo: "La música Rock es sexo y tienes
que golpearles [a los adolescentes] en la cara con él". (30) John
Taylor, contrabajista de Duran Duran, declaró: "Cuando la música
trabaja, el público y el actor a menudo sienten como si ellos
estuvieran teniendo un orgasmo juntos".(31) Estos comentarios hechos
por las estrellas del rock dejan muy en claro que el rock está
diseñado para estimular a las personas sexualmente.
¿Cómo el golpe rítmico del rock estimula la excitación sexual? Daniel
y Bernadette Skubik explican el proceso: "Cuando el golpe genera
niveles altos de excitación sensorial (es decir, cuando debido al
ritmo e intensidad de la música el impacto al auditorio se acerca a la
recepción máxima), el cerebro se pone en un estado de tensión. Este
estado de tensión es mensurable en una actividad cerebral 'que maneja
la situación'. Esta actividad motora ocurre en todas las personas
cuando son fuertemente estimuladas; la evaluación subjetiva de lo que
entra -tal como si a uno le gusta o detesta la música- no es un
factor. Para reducir forzadamente sus niveles de actividad y lograr la
homeostasis, el cerebro emite opiaceos naturales del cuerpo. Estos
opiaceos son elementos producidos naturalmente y químicamente
similares a drogas como la morfina. Ellos se usan para controlar la
sensibilidad del cuerpo hacia el dolor. . . .
Evidencia considerable confirma que la música rock genera o refuerza
la excitación sexual por vía de este mismo proceso. Es decir, ante el
estímulo sensorial elevado, el cuerpo responde con descarga de
gonadotrofinas tanto como de opiaceos. El resultado es una conexión
fuerte forjada entre un estado estresante de manejo de lucha-o-huye y
el manejo sexual en desarrollo de la persona joven, que entonces
invariablemente une la excitación sexual con la agresión. . . . Cuando
la música rock se ha apartado de sus raíces históricas y medio (por
ej.- la música folk), causa y expresa tanto una asociación creciente
de abierta agresión unida a la sexualidad". (32)
Una explicación similar y sin embargo más simple la da Anne Rosenfeld
en su artículo "Music, The Beautiful disturber" (La música, el bello
perturbador), publicado en Psicology today (Sicología hoy). Ella
explica que la música despierta "un rango de sentimientos agitados, -
tensiòn, excitación, a veces sexual -a través de ritmos pronunciados e
insistentes. . . diestramente usados para elevar la tensión sexual. .
. el tamborileo puede producir estos efectos poderosos al manejar los
ritmos eléctricos del cerebro".( 33)
La secreción de hormonas, causada por el estímulo anormal del golpe
rítmico del rock, resulta en una sobre estimulación de las glándulas
del sexo sin una descarga normal. Bob Larson señala que éste es "el
preludio de la descarga que puede ocurrir en el automóvil estacionado
después del baile, y es una causa directa de la obscenidad corporal
que ocurre en la sala de baile. Yo no sólo hablo desde el punto de
vista del consejo médico, pero también de la observación personal
cuando declaro que muchachas que eróticamente entregan sus cuerpos a
los giros frenéticos que acompañan los ritmos del rock pueden estar
pasando por una condición sexualmente culminante. . . . Nosotros
también debemos comprender que la emoción inconsciente, debido a su
naturaleza, es influenciada por muchos factores, uno de los cuales son
las vibraciones (ej, el grave sonido profundo que se encuentra en la
música rock)... Las emociones relacionadas con el sexo generadas por
las vibraciones en el subconsciente buscan expresión en el pensamiento
y actividad consciente. Yo he observado a parejas que realmente pasan
por un acto sexual imaginario en sus mentes y cuerpos mientras bailan.
Este orgasmo simulado en forma anormal, musicalmente inducido, es
psicológicamente y fisiológicamente destructivo. La neurosis es el
resultado directo. También es pecado! "(34)
La Música de la Iglesia orientada hacia el placer. La capacidad del
golpe rítmico del rock para causar una respuesta sexual es un factor
muy importante a ser considerado por aquellos que desean transformar
la música rock en un medio digno del culto cristiano y evangelización.
El cambiar las letras no elimina el efecto del golpe rítmico del rock
porque su impacto es físico, pasando por encima del cerebro principal.
Finalmente la pregunta es: ¿Debiera la música de la iglesia estimular
a las personas físicamente o debe elevarlos espiritualmente?
La respuesta a esta pregunta depende grandemente de la comprensión que
uno tenga de la naturaleza de Dios y la adoración que debe dársele.
Aquellos que ven a Dios como un amigo especial, un tipo de amante,
con quien pueden divertirse, no ven ningún problema en adorarle por
medio de música físicamente estimulante. Por otro lado, aquellos que
perciben a Dios como un Ser majestuoso, santo, y omnipotente a quien
debe aproximársele con temor y reverencia usarán sólo la música que
los eleva espiritualmente.
Nosotros vivimos en una sociedad orientada al placer y muchos desean
tener una experiencia agradable, que les satisfaga a sí mismos, de la
música de la iglesia. Calvin Johansson, una autoridad en música de la
iglesia que ha contribuido con los Capítulos 10 y 11 de este simposio,
observa correctamente que "cuando el criterio principal para escoger
la música usada en el culto es el placer, entonces la música diseñada
específicamente para ese propósito se vuelve la opción lógica. En
nuestra cultura, eso significa que la música pop, con su melodía,
ritmo, y armonía tiene sólo una meta, la fácil satisfacción propia. Ya
sea si es rock 'n' roll, rock, country, música cristiana
contemporánea, heavy metal, nueva ola (new wave), gospel, rock
country, swing, o rap, el pop es la música preferida de la mayoría de
las personas". (35)
Cuando nuestra cultura se preocupa en forma creciente por cumplir los
deseos personales placenteros, la iglesia está buscando llenar la
contrapartida religiosa proporcionando formas cristianizadas de música
rock. Johansson advierte correctamente que "el resultado de usar rock
religioso en el culto es peligroso: los servicios de la iglesia se
vuelven una creíble fantasía mundana utilizada para satisfacer los
rasgos menos nobles de la naturaleza adánica". (36)
La música rock religiosa, o como se le nombre, es hedonista, y la
música hedonista difícilmente puede contribuir a construir una
espiritualidad fuerte. "No importa cómo uno lo pueda intentar, o qué
uno cree, la inmadurez musical no produce madurez cristiana integral".
(37)
Los Efectos del Rock en la Mente. La música Rock no sólo afecta el
proceso físico sino también los procesos mentales del cuerpo. Antes de
mencionar unos cuantos estudios significativos sobre los efectos
mentales del golpe rítmico del rock, permítanme compartir una
experiencia personal. Yo fui invitado a hablar en una iglesia dónde
una banda de rock dirigió el canto del querido himno "Amazing Grace"
(Gracia admirable) con un fuerte ritmo de rock. No pasó mucho antes
que la congregación entera estuviera balanceándose, en un ambiente de
baile. El golpe rítmico del rock había causado que las personas
olvidaran el ambiente original y mensaje de la canción no nos invita a
bailar por diversión, sino a contemplar la gracia admirable de Dios:
"Yo estaba una vez perdido pero ahora he sido hallado, Fui ciego, pero
ahora veo."
La razón por la cual las personas se olvidaron de la disposición de
ánimo y mensaje de la canción simplemente es porque el golpe rìtmico
del rock impactó su cuerpo, pasando por encima de sus procesos
mentales. Como cristianos, necesitamos estar conscientes del hecho de
que la música se percibe a través de la porción del cerebro que recibe
los estímulos para las sensaciones y sentimientos, sin que sea primero
analizada por los centros del cerebro que involucran la razón e
inteligencia.
Este descubrimiento, hecho más de cincuenta años atrás y que ha sido
desde entonces confirmado por numerosos científicos, (38) ha
contribuido al desarrollo de la terapia musical. "La música, que no
depende del cerebro principal para ganar la entrada en el organismo,
puede aún hacer su efecto por vía del tálamo - la estación de parada
de todas las emociones, sensaciones, y sentimientos. Una vez que un
estímulo ha podido alcanzar el tálamo, el cerebro principal es
invadido automáticamente. (39)
Dos científicos alemanes, G. Harrer y H. Harrer, dirigieron
experimentos con el objeto de determinar el efecto de la música en el
cuerpo. Ellos encontraron que aun cuando la atención del oyente estaba
intencionalmente llevada lejos de la música, una respuesta fuerte,
emocional era registrada en los instrumentos que medían los cambios en
el pulso y ritmo respiratorio, así como en los reflejos sicogalvánicos
(eléctricos) de la piel .(40)
Bob Larson que estudió medicina antes de llegar a ser un popular
músico rock, explica este punto con considerable claridad: "La
palabra hablada debe atravesar el cerebro principal para ser
interpretada, traducida, y analizada en busca de contenido moral. No
es así con la música - sobre todo con la música rock. Tal furia
resonante puede pasar por encima de esta pantalla protectora y causar
que una persona no haga en absoluto ningún juicio de valores respecto
de lo que él está oyendo". (41)
Joseph Crow, investigador en la Universidad de Seattle, dirigió un
estudio interesante de la cultura rock y su música. Él encontró que
"el Rock es una utilización de música basada en formulas matemáticas
para condicionar la mente a través de frecuencias calculadas (las
vibraciones), y se usa para modificar la química del cuerpo haciendo
la mente susceptible a modificación y adoctrinamiento. La música Rock
puede ser (y es) empleada para manejo mental, reeducación, y
re-organización. "(42)
Varios estudios científicos han establecido los efectos negativos de
la música rock en la mente. En su estudio de "Kinesiologia Conductual"
[es decir, movimiento dependiente del estímulo], Diamond encontró que
el rock suave causa un pensar "desviado" en el cerebro. "Usando los
principios y técnicas de Kinesología conductual, yo también he
demostrado que cuando se escucha rock suave, ocurre el fenòmeno
llamado switching (desvío), esto es, la simetría entre los dos
hemisferios cerebrales se pierde, introduciendo sutiles dificultades
perceptuales y un montón de otras manifestaciones tempranas de
tensión. El cuerpo entero es puesto en un estado de alarma".(43)
Diamond continúa explicando en forma completa los efectos de la música
rock en la mente. "Los cambios perceptuales que ocurren pueden
manifestarse ya sea en los niños como una actuación disminuida en la
escuela, hiperactividad, e inquietud; en los adultos, como un
disminuido rendimiento de trabajo, aumento de errores, ineficacia
general, reducida capacidad de efectuar decisiones en el trabajo, y un
sentimiento de regaño que siente que las cosas no están bien - en
pocas palabras, pérdida de energía sin razones aparentes. Esto se ha
observado clínicamente cientos de veces. En mi práctica he encontrado
que los archivos académicos de muchos niños en edad escolar mejoran
considerable después de que dejan de escuchar música rock mientras
estudian ". (44)
A conclusiones similares han llegado otros estudios científicos
respecto de los efectos de la música rock en la mente. El psicólogo
Jeffery Arnett encontró que las personas jóvenes que escuchaban rock
metálico "informaron una proporción más alta de una amplia gama de
conductas temerarias, incluso conductas de manejo de vehiculos,
conducta sexual, y uso de droga. Ellos también estaban menos
satisfechos con sus relaciones familiares. Muchachas a quienes les
gustaba la música heavy-metal eran más temerarias en las áreas de
ratería, vandalismo, conducta sexual, uso de droga, e informaban más
baja autoestima. "(45)
En su libro Rock Music (Música Rock), William Shafer, un académico no
opuesto a la música rock, reconoce que "el rock es una herramienta
para alterar la conciencia. . . . Asociado con el rock, por ejemplo,
existe un culto a la irracionalidad, una reverencia por lo
instintivo, lo visceral - y una desconfianza hacia la razón y la
lógica; esta forma de anti-intelectualismo puede ser muy peligrosa,
puede llevar a los modos totalitarios de pensamiento y acción. Unido
con este anti-intelectualismo hay un interés en lo oculto: magia,
superstición, pensamiento religioso exótico, cualquier cosa contraria
a la corriente principal del pensamiento Occidental". (46)
La Musica Rock y la conversión de Patty Hearst. Uno de los ejemplos
más aterradores del terrible poder de la música rock para alterar la
mente es la conversión de Patty Hearst. En febrero de 1974, Patty
Hearst fue secuestrada por el Ejército simbionés de Liberación. Poco
después del secuestro, Patty fue vista en cámaras de video cuando
ayudaba al SLA en el robo de bancos. Usted se pregunta ¿cómo ellos la
convirtieron? William Sargant, uno de los expertos pioneros de Bretaña
en el lavado de cerebro, examinó a Patty Hearst.
Las conclusiones alarmantes de Sargant se publicaron en Newsweek:
"Ella fue una víctima involuntaria de una 'conversión forzada' o
lavado de cerebro. Según Sargant, una persona cuyo sistema nervioso
está bajo presión constante puede 'inhibirse' y 'exhibir actividad
cerebral paradójica -lo malo se pone bueno y viceversa.' Y eso, arguye
Sargant, precisamente es lo que pasó con Patty Hearst. Su sistema
nervioso fue puesto en tensión máxima por la reproducción continua de
fuerte música rock.(47)
La capacidad de la música rock de alterar el proceso de pensamiento de
una persona como Patty Hearst, haciéndola "una víctima involuntaria de
una conversión forzada", ejemplifica el peligro de exponerse a sí
mismo a tal música. En su libro Tuning the human instrument (
Sintonizanto el instrumento humano), Steven Halpern nos advierte de
este peligro con estas notables palabras: "Las estrellas del Rock
están haciendo malabares con material fisionable que podría explotar
en cualquier momento". (48)
Los músicos rockeros han reconocido por mucho tiempo el poder
psicodélico de su música. Timothy Leary, el psicólogo de Harvard que
terminó cumpliendo una pena en una cárcel californiana por posesión de
marihuana, lo dice en su canción, "Turn on, tune in, drop out" (Enchùfate,
sintonìzate, desaparécete) que se transformó en motete para
millones. En su libro, Politics of exstasy (Política de Éxtasis),
Leary declara: "No preste atención a las palabras, es la música la que
tiene su propio mensaje. . . . Yo he estado pegado a la música muchas
veces. . . . La música es lo que le permitirá continuar." (49)
De una forma similar, Mick Jagger dijo: "Nosotros estamos yendo más
allá de las mentes y así sucede con la mayoría de los nuevos grupos."
(50) .En Melody maker (Fabricante de Melodías) él dijo: "La
comunicación es la respuesta a todos los problemas del mundo y la
música es la llave para ello pues la música abre la puerta de la mente
de todos." (51) Graham Nash declaró en forma semejante: "La música pop
es el medio masivo para condicionar la forma en que las personas
piensan ".(52)
La música Rock se Siente, no se escucha. La música Rock tiene un único
poder de alterar la mente porque, como Bob Larson explica con claridad
envidiable, contrariamente a otras formas de música, "se escribe para
ser sentida en lugar de oída. Es ejecutada para embotar la atención
del oyente. No es la inventiva melódica o el arreglo cromático de los
acordes lo que interesa al adolescente promedio. Los cantantes de
Rock intentan producir un 'sonido' con el golpe semi amortiguado,
embotador, directo, pesado y palpitante. Y es este golpe rítmico el
que está cautivando a tantas personas jóvenes, haciéndoles presa
fácil de sus letras. Otros tipos de música podrían encontrarse
culpables o errados también, pero en la actualidad la música rock es
la más perjudicial para el contingente joven de americanos que se
están preparando para tomar el liderazgo del país en años venideros".
(53)
La subordinación de la línea melódica en la música rock a un ritmo
pulsante, implacable, tiene un efecto hipnótico que causa que las
personas pierdan el contacto con la realidad. Bob Larson declara: "Los
fuertes golpes pueden causar que la mente entre en un estado de soñar
despierto en que pierde el contacto con la realidad. Esto a su tiempo
causa que el bailarín o el oyente pierda el contacto con el sistema de
valores relacionado con la realidad. Cualquier sonido monótono, largo,
rítmico induce varias fases de catalepsias. Es bastante obvio para
cualquier observador calificado y objetivo, que los adolescentes que
bailan rock a menudo entran en catalepsias hipnóticas. Cuando el
control de la mente se debilita o pierde, las influencias satánicas
pueden tomar a menudo posesión. La pérdida de autodominio es peligrosa
y pecaminosa. En un estado de hipnosis la mente del oyente puede
responder a casi cualquier sugerencia dada. Tal conducta compulsiva se
demuestra por la marea creciente de promiscuidad y por la rebeldía
creciente de la juventud moderna". (54)
Janis Joplin, una cantante popular de rock que se suicidó, describió
el tremendo poder de la música rock que ella experimentó luego de su
primera aparición en el Avalon, un salón de baile de San Francisco.
"Yo no podía creerlo, todo ese ritmo y poder. Me sentí apabullada al
darme cuenta que era la mejor droga en el mundo. Era tan sensual, tan
vibrante, fuerte, loco. Yo no podía quedarme tranquila ; yo nunca he
bailado cuando canto, pero allí me estaba moviendo y saltando. Yo no
podía escuchar lo que cantaba, así que canté más y más fuerte. Al
terminar estaba hecha una salvaje". (55)
No hay ninguna manera de aislar las respuestas corporales del poder
pulsante y golpeador de la música rock, porque impacta directamente
en el cuerpo, pasando por alto la mente. Marye Mannes es citada por el
Washington Post al decir que la música rock es "el nuevo
analfabetismo, y los jóvenes lo aman. Ellos lo aman porque ellos más
bien lo sienten que lo piensan. Es más fácil. Es más fácil para
aquéllos que proveen por ellos. Pues, para destruir los sentidos, para
reventar la mente -usted no necesita entrenamiento. Usted no necesita
conocimiento. Usted no necesita ni siquiera talento. Todo lo que usted
necesita es un ego ilimitado, un temperamento maníaco, y el equipo
amplificador más poderoso que usted pueda conseguir. Entonces usted
puede hacer su propia cosa." Ella concluye: "Si la esencia de la
expresión creativa es traer significado y belleza a la vida, entonces
el sonido y la furia del nuevo analfabetismo están dirigidas a
destruir a ambos". (56)
El daño físico a los tímpanos causado por el rock escuchado con
volumen excesivo se trata en el Capítulo 8 por Tore Sognefest. Los
estudios sobre pérdida auditiva indican que escuchar rock, a través de
los walkman, discotecas, o conciertos, se ha vuelto un riesgo
extendido. El problema ha asumido tales proporciones alarmantes que
los activistas del consumidor y audiólogos han propuesto que los
gobiernos locales deben fijar un nivel de 100-decibeles al rock
ejecutado en los clubs.(57)
La capacidad de
la música rock de alterar la mente y causar varias reacciones físicas,
incluyendo la excitación sexual, debiera ser de gran preocupación para
los cristianos. Después de todo, el cristianismo trae consigo una
respuesta holística hacia Dios a través de la consagración de nuestra
mente, cuerpo, y alma a Él (1 Cor 6:19; 1 Tes 5:23; Rom 12:2). Es a
través de la mente que nosotros ofrecemos a Dios "un culto racional" (Rom
12:1; en el griego logike) y tomamos decisiones morales, responsables.
Las Escrituras nos amonestan a abstenernos de todo lo que daña a
nuestra mente (1 Ped 1:13; 4:7; Efe 5:18), pues a través de la
"renovación diaria de la mente", nosotros nos "vestimos del nuevo
hombre,.creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad "
(Efe 4:24; cf. Col 3:10; Rom 12:2).
La música Rock en gran medida sin contradicciones. ¿Cuál ha sido la
respuesta de la iglesia al desafío presentado por los problemas
físicos y psicológicos causados por la música rock? Insignificante.
¿Por qué? Calvin Johansson explica la razón con inusual visión. "La
razón del porqué la música [rock] ha pasado sin contradicciones es la
noción subjetiva de que las notas, armonía, y ritmo de tales canciones
no contienen ninguna visión mundial, ética moral, o perspectiva de
vida. Se percibe que la música no refleja una posición moral,
filosófica, o teológica. De allí, que la iglesia ingenuamente y
simplisticamente haya separado en dos partes el medio (la música) y el
mensaje (el texto). Algunos cristianos han abrazado la música rock (o
una versión derivada de él) en tanto repudian el texto! "(58)
¿Tal separación es factible? La respuesta es NO, por tres grandes
razones. Primero, como hemos visto, la música rock hace su impacto
musicalmente mas bien que líricamente. Esto significa que en cualquier
versión de la música rock que se escuche, ésta altera la mente y
estimula el cuerpo a través de su golpe hipnótico. El veneno mata no
importa la forma como se administra. De la misma manera, el golpe
rítmico del rock impacta la mente y el cuerpo no importa si las letras
son sagradas o seculares.
Segundo, como lo señala Johansson, "el rock cristiano de cualquier
categoría es todavía rock ya que su mensaje permanece el mismo,
habiéndose ahora movido desde los bares, salones de baile, y clubes al
presbiterio. Nosotros no sólo hemos dado un foro a los rockeros
nihilistas para vender de puerta en puerta sus mercancías, sino que
nosotros lo hacemos por ellos". (59) Si una banda de rock cristiano se
parece y suena como su contraparte secular, su música puede
difícilmente ser una alternativa porque el sonido es el mismo. En
realidad, la banda cristiana está promoviendo el rock secular al
exponer a las personas a una versión modificada de él.
Tercero, la música y letras del rock son el producto de la misma
visión mundial, sistema de valores, y experiencia religiosa panteísta.
La ética del rock comunicada a través de la música es apoyada por el
texto, y viceversa. "No hay ninguna regla, no hay ninguna ley",
declara Jim Morrison.(60) "Yo soy un anti-Cristo, yo soy un
anarquista", afirma Johnny.(61) El famoso historiador de arte H. R.
Rookmaaker señala que la música rock ha surgido "con un ritmo golpeado
y voces gritonas, cada línea y cada golpe rítmico lleno de un odioso
insulto a todos los valores Occidentales". (62) Esto significa que la
adopción de la música rock en cualquier forma representa un endoso de
los valores sociales y religiosos asociado con tal música.
Una Alianza Impía. Hay hoy una alianza impía entre el cristianismo y
las bandas seculares de rock. No son sólo actores cristianos que se
pasan al mercado secular, sino que las así llamadas revistas
cristianas están listando y promoviendo los nombres de los grupos
cristianos que se ven y suenan como su contraparte secular.
Group, (Grupo) que se llama a si mismo The Youth Ministry Magazine (La
revista del ministerio joven) a menudo lleva una sección conocida como
"CCM: A sound alternative" (Música cristiana contemporánea : una
alternativa en sonido). Enumera los nombres de los grupos de rock
populares, seculares, junto con los nombres de las bandas cristianas
que suenan en forma similar. El subtítulo dice: "Si le gusta
escucharlas - entonces usted probablemente lo disfrutará -. "
En un artículo, Group puso en primer lugar de la lista a un grupo de
rock secular clasificado como Punk/Trash Music (música punk/basura).
El nombre en sí indica el tipo de música ejecutado por ese grupo. Se
listan varias bandas cristianas "con sonido similar a la música
cristiana contemporánea (CCM) " en este grupo aberrante. Vea lo que
Newsweek tiene que decir sobre las bandas que suenan "como las
cristianas": "Ellos tocan el tipo de música que a los padres les
gusta odiar. Es fuerte, hastiador, sin mérito social alguno. No hay
ninguna melodía, ninguna armonía, nada de canto -sólo un diluvio
implacable de letras groseras, zahirientes, dando puñetazos al hogar
con una cortina concentrada de guitarras gritonas y golpes rítmicos
sintetizados ". (63)
¿Puede esta banda que parece y se comporta como su colega secular, ser
considerada legítimamente "una alternativa cristiana"? La alternativa
cristiana es confrontar el mundo con la pureza y poder del Evangelio,
no conformarse a sus valores y prácticas.
Cuando los aprehensores babilónicos le pidieron a los Israelitas que
los entretuvieran, diciéndoles: "Cantadnos algunos de los cánticos de
Sion! " (Sal 137:3), el pueblo respondió: "¿Cómo cantaremos cántico de
Jehová en tierra de extraños? " (Sal 137:4). Observa que los
israelitas no dijeron, "Permítanos cantarles una de nuestras canciones
sagradas en el estilo de la música babilónica para que nosotros
podamos convertirlos al Señor! " No, su respuesta fue que ellos no
podían cantar el canto del Señor para entretener al impío. "Los
israelitas sabían que era un error tomar lo que pertenecía al Señor y
profanarlo entreteniendo a los incrédulos. Hoy, no sólo los cantos del
Señor son utilizados para entretener a los paganos, sino la música de
los paganos está siendo empleada como el canto del Señor [para
entretener a los cristianos]. "(64)
Conociendo a nuestro Enemigo. Para enfrentar exitosamente el desafío
de las influencias seculares como la música rock, es indispensable
para la iglesia saber contra qué está luchando. El juego sabio en los
deportes siempre se vincula con el conocimiento de las fuerzas y
debilidades de los competidores.
Los profetas del Antiguo Testamento conocían a sus opositores. Ellos
entendieron cómo la influencia cultural de las naciones paganas
circundantes había llevado al pueblo de Dios a la apostasía y ellos
audazmente llamaron al pueblo a arrepentirse, porque Dios no toleraría
su desobediencia. En forma semejante, el Nuevo Testamento abunda con
advertencias "a no ser conformados a este mundo" (Rom 12:2; Efe 6:12;
2 Ped 1 y 2). Juan nos amonesta a "no amar el mundo o las cosas que
están en el mundo" (1 Juan 2:15).
Para resistir eficazmente la presión cultural de nuestros tiempos y
retener nuestra identidad cristiana, nosotros, como las personas
piadosas de los tiempos bíblicos, debemos entender los valores
pervertidos y prácticas de nuestra cultura. En el contexto de este
estudio, nosotros debemos entender la verdadera naturaleza de la
música rock -una música que, como hemos visto, incluye un espíritu de
rebelión contra Dios y los principios morales que Él ha revelado para
nuestras vidas hoy.
Las razones para evitar la música Rock. La razón fundamental para que
la iglesia evite la música rock en cualquier versión es su poder para
alterar la mente. Nosotros hemos encontrado que la música rock,
separada de sus letras, puede alterar la mente a través de su golpe
rítmico implacable. Un estilo de vida cristiano disciplinado requiere
evitar la música que altera la mente o drogas que dañan el juicio
mental, favoreciendo así la conducta irresponsable .
En su libro A return to christian culture (Un retorno a la cultura
cristiana), Richard S. Taylor ofrece una perspectiva sensata respecto
de la elección cristiana de la música: "Hay formas musicales, tanto
seculares o sagradas, que crean estados de ánimo melancólicos,
idealistas, de conocimiento de lo que es bello, de aspiración, y de
alegría santa. Hay otras formas musicales que crean estados de ánimo
de atolondramiento y excitación sensual. Ciertamente no es necesario
tener mucho juicio para saber qué formas son mas apropiadas para las
funciones religiosas". (65)
Es infortunado que el buen juicio esté faltando a menudo en aquellos
que promueven la adopción de tipos rockeros de música, incluso para el
culto cristiano. Es más probable que estas personas no sean
conscientes del impacto mental y físico de la música rock. Ellos
ignoran que las letras cristianas no neutralizan el efecto sensual del
golpe rítmico del rock
.
Cuando los cantantes cristianos utilizan para sus canciones los
métodos empleados por los músicos rockeros, hacer que el sonido sea
sensual, ellos "no comprenden o deliberadamente ignoran el hecho que
éste no es más ministerio, sino entretenimiento puro, sensual, y
satisfaciente de la carne ". (66) "Cuando los himnos son tan
rítmicamente irresistibles que el palmoteo, el baile, o los cocteles
son la respuesta rutinaria, nosotros podemos estar divirtiéndonos,
pero tales canciones son finalmente contraproducentes. Cualquier
música que tenga una dirección rítmica dominante que induzca al exceso
y a una respuesta corporal sin restricciones agrada al ego. "Me" da
una oportunidad de travesuras. Pero falta la disciplina necesaria
para madurar. Cuando la atención se dirige a la respuesta carnal,
entonces la música de la iglesia ha sucumbido a un egocentrismo
infantil. "(67)
El problema con los Artistas "que cruzan al otro lado" (crossover) La
falta de madurez espiritual promovida por la música rock en sus
distintas versiones, puede ser en parte debida a esos artistas
cristianos que cruzan al lado del rock secular. Éste es un paso fácil
de tomar para esos artistas que ya han estado tocando la misma música
rock, aunque con palabras diferentes.
El compromiso cristiano con Cristo no deja lugar a los artistas
cristianos para pasarse al escenario del rock secular. Es simplemente
una cuestión de escoger a quien ellos quieren servir. Algunos creen
equivocadamente que ellos pueden adorar al dios del rock en el
concierto y a la Roca de la Eternidad en la iglesia. Ralph Novak, un
comentarista de música, nos ofrece un ejemplo que se encuadra en esta
tendencia. Él escribe para la revista People la siguiente descripción
perceptiva de una artista popular cristiana que cruza al otro lado:
"Ella ha hecho una suave transición de un evangelio teñido de rock a
un rock teñido de evangelio. Ella se ve segura y vibrante. Para
aquellos que gustan bailar y orar al mismo tiempo, su producción no
puede ser mejor ". (68)
¿Puede un cristiano ocuparse de bailar eròticamente y orar al mismo
tiempo? Tal mezcla de lo bueno y lo malo está llegando en forma
creciente a ser común hoy. No debemos olvidarnos que ésta fue la
estrategia usada por Satanás para causar la caída del hombre. Hablando
de la caída de Adán, Elena G. de White escribe: "Al mezclarse el mal
con el bien, su mente se tornó confusa, y se entorpecieron sus
facultades mentales y espirituales. Ya no pudo apreciar el bien que
Dios le había otorgado tan generosamente". (69)
La presión para aceptar la mezcla bueno-malo se siente sobre todo hoy
en el campo de la música religiosa. Lloyd Leno que hasta su muerte
intempestiva sirvió como profesor de música en la Universidad de Walla
Walla, escribió: "Los medios de comunicación de masa han condicionado
tan completamente las masas con una dieta de música bailable orientada
al ritmo, que cualquier cosa distinta parece blanda e insípida. Esto
ha producido algo semejante a una obsesión entre muchos compositores y
artistas de música "gospel" Adventistas del Séptimo día de vestir toda
la música "gospel" con algún tipo de ritmo bailable. Aunque algunos
grupos son más cautos o 'conservadores', el repertorio normal de
muchos grupos incluye formas híbridas débilmente enmascaradas de
estilos de baile como el vals, swing(fox trot), country western, rock
suave, y rock folklòrico. . . . Es bastante obvio que estos grupos
están usando modelos cuyas metas no son compatibles con los principios
cristianos". (70)
Si Leno estuviera vivo hoy para observar el escenario de la música en
algunas iglesias Adventistas, él agregaría el "hard rock" a la lista.
En mi ministerio itinerante alrededor del mundo, me he confrontado en
varias ocasiones con bandas adventistas de rock tocando el tipo de
música que uno esperaría oír en clubes nocturnos o discotecas, pero no
en una iglesia. Tal música habría sido condenada fuertemente hace
treinta años en todas las iglesias Adventistas, pero hoy algunos
miembros no ven nada malo con ella. ¿Por qué? Simplemente porque su
sensibilidad moral se ha embotado por la música rock que está sonando
(reverberando) por todas partes en nuestra sociedad. Es como una rana
puesta en agua que gradualmente es calentada. Eventualmente ella será
hervida hasta morir sin darse cuenta del peligro.
Algunas Iglesias reconocen el problema. Mientras algunos cristianos
están comprometidos adoptando versiones modificadas de música rock,
otros reconocen el problema y se alejan de él. Es animador leer sobre
el número creciente de iglesias cristianas y artistas magnetofónicos
que reconocen que alguna Música cristiana Contemporánea (CCM)
representa mal a Cristo en su sonido y letras. En su libro, At the
cross road (En el cruce de caminos), Charlie Peacock, artista
magnetofónico galardonado, productor, y cantante de CCM, entrega una
excitante cuenta de algunas iglesias y artistas que han cortado
recientemente su conexión con la CCM porque ellos ya no pueden más
comprometer sus principios.
En noviembre de 1997, la People's church (Iglesia de la Gente) de
Salem, Oregón, anunció sus planes de terminar el festival de música
cristiana, conocida como "Jesús del Noroeste" que ha atraído
muchedumbres que colman sus aposentadurías durante los últimos 21
años. El anuncio llegó como una sorpresa en forma de una carta de
arrepentimiento escrita por el Rev. Randy Campbell, pastor de la
Iglesia de la Gente (People's church) y director del festival. Él
escribió: "Nos arrepentimos humildemente ante el Señor y pedimos
perdón al cuerpo de Cristo por representar inadecuadamente a Cristo en
nuestro ministerio, mensaje, y métodos". (71) La carta reconoce que
mucho de lo que se hace dentro de la industria de la música cristiana
contemporánea "(por ejemplo, dirección del ministerio, métodos de toma
de decisiones, incluso el propio mensaje) se maneja a menudo por
técnicas de mercado -no por voluntad del Señor". (72)
El 31 de octubre de 1997, el veterano artista de grabaciones de CCM
Steve Camp declaró estar "abrumado y desalentado por el estado actual
de la CCM" y emitió un ensayo en tamaño poster acompañado por 107
tesis titulado "Un llamado a la reforma en la industria de la música
cristiana contemporánea". Él concluye su ensayo instando a los
lectores a "salir de una industria que tiene todo pero ha abandonado a
Cristo y forjar, por la gracia de Dios, lo que siempre quiso ser. . .
un ministerio. Oren por esto". (73)
En la iglesia Adventista del Séptimo día hemos tenido varios exitosos
actores rockeros que han abandonado también el escenario del rock
después de unirse a la iglesia. Dos de ellos, Louis Torres de Estados
Unidos y Brian Neumann de Sudáfrica, antes de su conversión, tocaron
en bandas populares de rock que realizaron actuaciones dentro y fuera
de sus países de origen. Usted puede leer la historia de la conversión
conmovedora de David Neumann en el Capítulo 11 de este simposio. Usted
será grandemente inspirado al leer cómo el Espíritu Santo convenció
su corazón y lo llevó de la afición a la música rock a adorar a la
Roca de la eternidad
.
Otro actor es Rick Shorter, quién fuera ex-director del show de
Broadway "Hair". Cuando él llegó a ser un Adventista del Séptimo-día,
él enfrentó la tentación de componer. Como vocalista profesional y
guitarrista, él sentía que podía usar sus talentos convirtiendo
antiguas canciones rockeras en nuevas canciones "gospel". Pero él
decidió lo contrario. Rick declaró: "Al principio pensé que podía
refundir algunas viejas canciones de rock y soul y transformarlas en
música "gospel". Pero ahora comprendo que no puede haber ningún
compromiso con el mundo-su música, su entretención, o sus filosofías".
(74)
Al reflexionar en su vida anterior que incluyó actuaciones con
estrellas populares del rock tales como Janis Joplin, Jimmy Hendrix, y
Jim Morrison, él dio esta advertencia a los jóvenes: "No hay
absolutamente nada en ese tipo de vida. Solo deseo que pueda comunicar
el mensaje a los niños cuyas cabezas están en el Rock. Ellos ven
relucir la superficie, no el vacío que está adentro ". (75)
Una respuesta cristiana a la música Rock. Al formular una respuesta
cristiana a la música rock, es importante recordar lo que nosotros
declaramos en la introducción, a saber, que las características
definitorias de la buena música son el equilibrio entre tres elementos
básicos: la melodía, la armonía, y el ritmo. Nosotros hemos encontrado
que la música rock invierte este orden, haciendo del ritmo su elemento
dominante que hace sombra a la armonía y la melodía.
Los cristianos debieran responder a la música rock escogiendo a cambio
la buena música que respeta el equilibrio apropiado entre la melodía,
la armonía, y el ritmo. El equilibrio apropiado entre estos tres puede
bien corresponder al equilibrio apropiado en nuestra vida entre el
espíritu, la mente, y el cuerpo.
En su libro Music in the Balance (Música en equilibrio), Frank Garlock
y Kurt Woetzel presentan un concepto que era nuevo para mí, pero que
encuentro valioso de considerar. Ellos explican gráficamente que
La MELODÍA responde al ESPÍRITU
La ARMONÍA responde a la MENTE
El RITMO responde al CUERPO(76)
La parte de la música a la que el Espíritu responde es la melodía.
Esto se sugiere en Efesios 5:18-19 donde Pablo amonesta a los
creyentes a ser "llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con
salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al
Señor en vuestros corazones" (en versión inglesa el último párrafo
indica ......."cantando y haciendo una melodía") El paralelismo
sugiere que "haciendo una melodía" es equivalente a cantar salmos,
himnos, y canciones espirituales. Cantando la melodía (la tonalidad)
de una canción religiosa, no sólo en la iglesia, pero también mientras
conducimos un vehículo, trabajando, caminando, o incluso tomando una
ducha, expresa nuestra alegría y alaba al Señor que nos llena de Su
Espíritu.
La parte de la música a la que nuestra mente responde es la armonía.
Esto es porque la armonía es la parte intelectual de la música.
Virtualmente cualquiera puede producir una melodía simple, pero toma
entrenamiento musical extenso el poder escribir y entender los
diversos acordes (las partes). Una armonía de buen sonido sólo puede
ser arreglada por un músico especializado. La armonía, como es
sugerido por el significado de la palabra, armoniza la melodía y
ritmo.
La parte de la música a la que el cuerpo responde es el ritmo. La
palabra "ritmo" deriva de la palabra griega reo que significa "fluir"
o "pulsar" (Juan 7:38). El ritmo es el pulso de la música que
encuentra una correspondencia análoga al pulso del latido del
corazón.
El Pulso del Corazón y el Ritmo de la Música. Garlock y Woetzel
sugieren perceptivamente que "la analogía entre el pulso [del cuerpo]
y el ritmo [de la música] ayudará a cualquier cristiano deseoso en
obtener discernimiento en su elección musical ". (77) Para ilustrar
este concepto ellos entregan esta útil carta:
"Demasiado (o errático) pulso...........El cuerpo está
enfermo
Demasiado (o errático) ritmo.............La música está enferma
Nada de pulso......................................El cuerpo está
muerto
Nada de ritmo.......................................La música está
muerta
Pulso bajo control................................El cuerpo está bien
Ritmo bajo control ..............................La música está 'bien'
"(78)
La analogía entre el pulso de nuestro cuerpo y el ritmo de la música
es reconocido por autoridades médicas. John Diamond, un médico citado
anteriormente, escribió: "Nuestros cuerpos tienen un pulso, y así
también con la música. En un estado saludable, nosotros estamos en
comunicación con nuestro ' pulso interno', el que el Dr. Manfred
Clynes describe tan bien como 'la llave a la empatía que nosotros
experimentamos con un compositor.' . . El fenómeno del pulso interno.
. . es en efecto un golpe rítmico internamente dirigido". (79)
El ritmo, como se ha señalado antes, es la parte física de la música.
Así como en el cuerpo humano la pulsación del latido del corazón debe
estar dentro de un rango normal para que el cuerpo esté bien, así en
la música el ritmo debe ser equilibrado para que la música sea buena.
El problema con la música rock es que el ritmo o el golpe rítmico
domina para llamar la atención principalmente hacia el aspecto físico
y sensual de la naturaleza humana.
Este impacto físico, sensual del ritmo del rock es reconocido
ampliamente por los estudiosos. En su libro Sound effects, Youth,
Leisure and the Politics of Rock 'n' Roll (Los efectos del sonido,
Juventud, Ocio, y las Políticas del Rock 'n' Roll), el sociólogo
inglés Simón Frith enfáticamente declara: "Usualmente se refiere a la
sexualidad de la música en términos del ritmo - es el golpe rítmico el
que requiere una respuesta física directa".(80) El mismo punto de
vista se expresa claramente en el libro de David Tame, The secret
power of music (El poder secreto de la música),: "Cuando la pulsación
y la síncopa son el fundamento rítmico de la música en un salón de
baile, invariablemente puede verse que los movimientos de los
bailarines llegan a ser muy sensuales". (81)
Orden en la Vida cristiana. Al estimular el aspecto físico, sensual
del cuerpo, la música rock saca del equilibrio al orden de la vida
cristiana. Tame a menudo se refiere a lo que él llama "un axioma
eterno. . . como en la música, así en la vida". (82) Como cristianos
nosotros podemos invertir el axioma y decir: "Como en la vida, así en
la música." En otros términos, el orden de prioridades de la vida
cristiana con lo espiritual primero, segundo lo mental, y tercero lo
físico, debiera reflejarse en la música.
"El cristiano que está preocupado con lo físico y gasta la mayoría de
sus esfuerzos en ello (el cuerpo) es sensual en lugar de espiritual.
El hijo de Dios que gasta la mayoría de su energías en mejorar la
mente, en desmedro de sus necesidades espirituales y físicas, coloca
un énfasis indebido en la actividades intelectuales. El cristiano con
un orden bíblico y equilibrado en su vida da énfasis a lo espiritual
primero (Mateo 6:33), lo intelectual o emocional en segundo lugar (2
Cor 10:5), y lo físico al último (Rom 13:14). "(83)
El orden apropiado entre los aspectos espirituales, mentales, y
físicos de nuestra vida cristiana debe reflejarse en la música
cristiana. Garlock y Woetzel desarrollan esta correlación muy
poderosamente: "Así como las consideraciones espirituales de la vida
reciben prioridad por parte del cristiano equilibrado, así la melodía
(esa parte de la música a la que el espíritu responde) debe dominar la
música en la vida del cristiano. En forma similar, la armonía (esa
parte de la música a la que la mente y las emociones responden)
necesita tener un papel de apoyo en la música, así como la mente y
emociones juegan un papel secundario en la experiencia cristiana. Por
último, y más obvio, el ritmo (esa parte de la música a la que el
cuerpo responde) debe estar bajo control estricto en la música, así
como el cuerpo y sus deseos necesitan ser disciplinados en la vida del
cristiano." (84)
El desafío al que todos nos enfrentamos en nuestra vida cristiana es
guardar nuestro cuerpo en relación apropiada con la mente y el
espíritu. Pablo se refiere a esta lucha cuando dijo: "Sino que
disciplino mi cuerpo y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo
sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado " (1 Cor 9:27;
). Como Pablo, nosotros necesitamos disciplinar nuestro cuerpo
evitando esas cosas que alimentan sólo nuestra naturaleza carnal.
Nosotros necesitamos cultivar un gusto por el tipo correcto de música
que respeta el equilibrio apropiado entre la melodía, la armonía, y el
ritmo. Tal música refuerza el orden apropiado de la vida cristiana
entre lo espiritual, mental, y físico.
Haciendo que los himnos sean significativos. Hay suficientes himnos
tradicionales y contemporáneos que respetan el equilibrio apropiado y
refuerzan nuestros valores cristianos. Pero, algunas personas se
quejan de que los himnos son insípidos y aburridos. ¿Pudiera ser que
el problema yace, no con los himnos, sino con el nuevo apetito que
algunos han desarrollado por la música pop? ¿Pudiera ser que tal
apetito ha embotado la sensibilidad musical de algunas personas de
forma tal que no están ya más capacitados para apreciar la música
sagrada? Un apetito espiritual debe desarrollarse antes de que uno
pueda disfrutar la música espiritual, pero esto no sucede de la noche
a la mañana.
El problema, sin embargo, no siempre se debe a un apetito pervertido.
A veces los himnos tradicionales parecen insípidos porque el cantar
colectivo es inanimado. La solución a este problema debe hallarse no
en la adopción del sonido de la música secular, sino en encontrar a un
líder de cantos dinámico y espiritual que pueda inspirar a la
congregación a cantar sinceramente de corazón. El mismo himno que
parece insípido cuando es cantado de una manera monótona se vuelve
vibrante e inspirador cuando es cantado con entusiasmo.
Los himnos han llegado a ser significativos para la congregación
cuando todos los participantes -el director de cantos, el ministro, el
organista, y, por supuesto, la congregación- despiertan a la bendición
enorme que los espera cuando ellos cantan desde el corazón con gran
dedicación y concentración.(85)
Para ayudar en este proceso, puede llamarse la atención al autor de
las palabras del himno, o al compositor de su música. Algunos aspectos
significativos del mensaje del himno pueden traerse a colación;
entonces uno puede invitar a la congregación a cantar el himno con
significado fresco y comprensible.
Los cambios imaginativos en la forma de cantar pueden hacer aún de las
canciones familiares algo más interesante. A veces el director de
cantos puede invitar a la congregación a cantar acapella. Un verso
puede cantarse por las mujeres y otro por los hombres. En otros casos
la congregación puede acompañar al coro, al grupo (conjunto vocal) que
está cantando, o al solista. Hay maneras interminables de cantar los
antiguos himnos con nuevo fervor y excitación.
Un brotamiento de Himnos Contemporáneos. A aquellos que se quejan que
el himnario de iglesia está viejo, y quieren cantar nuevas canciones,
les agradará saber que durante las últimas décadas ha habido un brotar
de escritura de himnos en los Estados Unidos, Bretaña, y otros países
alrededor del mundo.(86) Los escritores de himnos y compositores de
melodías para himnos de nuestros tiempos son hombres y mujeres de
talento, compromiso, y dedicación. Ellos representan distintas
denominaciones cristianas, y sus canciones llenan nuevos himnarios que
pueden enriquecer la experiencia del culto de todos los cristianos.
Mención debe hacerse de La Sociedad Himnológica de los Estados Unidos
y Canada (87) que fue fundada en 1922. Desde entonces, la Sociedad ha
estado activamente involucrada promoviendo la composición de nuevos
himnos que se publican en su revista llamada The Hymn (El Himno). Su
reunión anual se efectúa cada verano en partes distintas de
Norteamérica y atrae a escritores de himnos y compositores de melodías
para himnos de muchos países y de denominaciones cristianas
diferentes.
La Hope Publishing Company (Casa publicadora Esperanza) (88) merece
alabanza especial por alentar a los escritores de himnos a someter sus
nuevas canciones para publicación. Estas nuevas colecciones se
publican cada año y son asequibles al público general.
Para introducir nuevos himnos y aprender a apreciar los más antiguos
en mejor forma, se puede organizar un Festival de Himnos. Éste puede
ser un momento de gran inspiración y alegre celebración cuando puede
redescubrirse la importancia de los himnos para la vida de la iglesia
y de eventos nacionales como el día de Acción de gracias. En 1999 un
Festival especial de Himnos fue organizado en la Universidad Andrews
para celebrar el último día de Acción de gracias del siglo. Fue en
verdad un servicio de gran belleza y gratitud por los regalos
indecibles de Dios de misericordia, amor, y alegría para Sus hijos e
hijas.
CONCLUSIÓN
En su libro The Secret Power of Music (El secreto Poder de la
Música), David Tame concluye su análisis de la música rock con
palabras que expresan apropiadamente la conclusión del presente
estudio. Él escribió: "El Rock ha afectado indiscutiblemente la
filosofía y estilo de vida de millones. Es un fenómeno global; un
resonante, resonante golpe rítmico destructivo que se oye desde
América y Europa Occidental a Africa y Asia. Sus efectos en el alma
son hacer casi imposible el verdadero silencio interior y la paz
necesaria para la contemplación de las verdades eternas. Su 'fans' son
adictos, aunque ellos no lo saben, a los efectos parahipnóticos de su
golpe insistente que se traduce en el 'siéntete bien', reforzador
del egocentrismo. (89)
Tame no es un educador religioso, pero un musicólogo que traza de una
forma erudita la influencia de la música en el hombre y la sociedad
desde los tiempos de la civilización antigua al presente. Sin embargo
él cree fuertemente que la música rock es una amenaza seria a la misma
supervivencia de nuestra civilización. "Yo creo firmemente que el rock
en todas sus formas es un problema crítico que nuestra civilización
debe agarrar de alguna manera genuinamente eficaz, y sin demora, si
desea sobrevivir por largo tiempo". (90)
De muchas maneras la valoración que hace Tame de la música rock está
de acuerdo perfectamente con las conclusiones que han surgido durante
el curso de nuestra investigación efectuada en los anteriores cuatro
capítulos sobre los aspectos filosóficos, históricos, religiosos, y
musicales de la música rock.
Filosóficamente, encontramos en el Capítulo 2 que la música rock
rechaza la visión bíblica trascendental de Dios, promoviendo a cambio
una concepción panteísta de lo sobrenatural como un poder impersonal
que el individuo puede experimentar a través del ritmo hipnótico de la
música rock, drogas, y sexo.
Históricamente, nosotros notamos en el Capítulo 3 que la música rock
ha ido a través de un proceso fácilmente discernible de
endurecimiento, promoviendo descaradamente, entre otras cosas, una
visión mundial panteísta/hedonista, un rechazo abierto de la fe y
valores cristianos, perversión sexual, desobediencia civil, violencia,
satanismo, ocultismo, homosexualidad, y masoquismo.
Religiosamente, nosotros vimos en el Capítulo 4 que la música rock ha
llevado al rechazo de la fe cristiana y a la aceptación de un nuevo
tipo de experiencia religiosa. Lo último involucra el uso de la música
rock, sexo, drogas, y baile para trascender la limitación de tiempo y
espacio y conectarse con lo sobrenatural.
Musicalmente, nosotros hemos mostrado en este capítulo que la música
rock difiere de todas las otras formas de música debido a su golpe
rítmico directriz, fuerte, implacable. Estudios científicos han
mostrado que el golpe del rock puede alterar la mente y causar varias
reacciones físicas, incluyendo la excitación sexual.
La verdadera información que nosotros hemos recogido sobre la
naturaleza de la música rock durante el curso de esta investigación
deja abundantemente claro que tal música no puede transformarse
legítimamente en música cristiana cambiando sus letras. En cualquier
versión, la música rock está y sigue siendo una música que incluye un
espíritu de rebelión contra Dios y los principios morales que él ha
revelado para nuestras vidas.
Al estimular el aspecto físico, sensual de la naturaleza humana, la
música rock saca fuera de equilibrio al orden de la vida cristiana.
Hace de la gratificación de la naturaleza carnal más importante que la
cultivación del aspecto espiritual de nuestra
vida.
Al esforzarse conscientemente por causar un impacto físico, el rock
"cristiano" reduce las verdades espirituales a una experiencia física.
Se engañan los oyentes en creer que ellos tuvieron un encuentro
espiritual con el Señor, cuando en realidad la experiencia fue sólo
excitación física.
Los cristianos debieran responder a la música rock escogiendo a cambio
buena música que respete el equilibrio apropiado entre la melodía,
armonía, y ritmo. El equilibrio apropiado entre estos tres refleja y
fomenta el orden y equilibrio en nuestra vida cristiana entre los
componentes espirituales, mentales, y físicos de nuestros seres. La
buena música y equilibrada puede y contribuirá a guardar nuestro
"espíritu, alma y cuerpo. . .irreprensible y sin mácula para la venida
de nuestro Señor Jesucristo" (1 Tes 5:23).
Al umbral de un nuevo siglo y un nuevo milenio, los cristianos tienen
una oportunidad sin precedentes de construir sobre su rica herencia
musical. En tiempos cuando la tendencia es reemplazar los sagrados
himnos con canciones seculares que estimulan físicamente a las
personas en lugar de elevarlas espiritualmente, es bueno recordar que
Dios nos emplaza a adorarle en "la belleza de la santidad" (1 Cron
16:20; cf. Salmo 29:2; 96:9).
La santidad en la adoración evita la repetición trivial en sonido y
palabras. La santidad en la adoración evita el golpe rítmico
degenerado y el estilo canturreado de artistas pop. La santidad en la
adoración requiere comprometerse con las mas elevadas normas
razonables de actuación. La santidad en la adoración es verdaderamente
rendir culto al Señor con nuestra mayor reverencia y respeto.
Nuestra música en el culto de adoración debiera reflejar la música que
esperamos cantar en compañía del Padre e Hijo en el mundo por venir.
¿Son el Padre, el Hijo, y el Espíritu santo honrados por nuestra
música? ¿Refleja nuestra música la paz, la pureza, y la majestad de
nuestro Dios? ¿Podemos imaginarnos cantando un día la música de
nuestra iglesia cuándo estemos de pie ante la majestad indescriptible
del triuno Dios? Pablo nos recuerda que "Nuestra ciudadanía está en
los cielos" (Fil 3:20). Esto significa que cada aspecto de nuestras
vidas, incluyendo nuestra música, debiera verse como una preparación
para esa experiencia gloriosa en la Nueva Tierra dónde "un ritmo de
armonía y alegría late a lo largo de la vasta creación".
(92)
NOTAS AL PIE
1. Allan Bloom, The Closing of the American Mind (New York, 1987), p.
69.
2. Quentin J. Schultze, Dancing in the Dark (Grand Rapids,MI, 1991),
p. 151.
3. Aaron Copland, What to Listen for Music (New York, 1957), p. 40.
4. Ibid., p. 46.
5. Jay Cannon, Striving for Excellence (Oakbrook, IL, 1989), p. 5.
6. Tim Fisher, The Battle for Christian Music (Greenville, SC, 1992),
p. 68.
7. Jay Cannon (nota 5), p. 10.
8. Ver Lawrence Walters, "How Music Produces Its Effects on the Brain
and Mind," Music Therapy (New York, 1954), p. 38.
9. Tim Fisher (nota 6), p. 79.
10. Bob Larson, The Day Music Died (Carol Stream, IL, 1972), p. 15.
11. Tim Fisher (nota 6), p. 69.
12. Bob Larson (nota 10), p. 16.
13. Quentin J. Schultze (nota 2), p. 151.
14. Charles T. Brown, The Art of Rock and Roll (Englewood Cliffs, NJ,
1983), p. 42.
15. Gene Grier, A Conceptual Approach to Rock Music (Valley Forge, PA,
1976), p 30.
16. Ibid., p. 61.
17. Bob Larson, (nota 10), pp. 9,12. enfasis del autor.
18. Simon Frith, Sound Effects, Youth, Leisure, and the Politics of
Rock 'n' Roll (New York, 1981), p. 14.
19. Daniel and Bernardette Skubik, The Neurophysiology of Rock,
publicado separadamente como apendice en John Blanchard, Pop Goes the
Gospel: Rock in the Church (Durham, England, 1991), p. 191.
20. Verle L. Bell, "How the Rock Beat Creates an Addiction," in How to
Conquer the Addiction to Rock Music (Oakbrook, IL, 1993), p. 82.
21. Daniel and Bernardette Skubik (nota 19), p. 187.
22. John Diamond, Your Body Doesn't Lie (New York, 1979), p. 101.
23. Ibid., pp. 159-160.
24. Stephen Halpern, Tuning the Human Instrument (Belmont, CA, 1978),
p. 45.
25. Don Campbell, The Mozart Effect. Tapping the Power of Music to
Heal the Body, Strengthen the Mind, and Unlock the Creative Spirit
(New York, 1997), p. 67.
26. Ibid.
27. Interview, Entertainment Tonight, ABC, December 10, 1987. Citado
en Leonard Seidel, Face the Music (Springfield, VA, 1988), p. 26.
28. Interview in Newsweek (January 4, 1971), p. 25.
29. Fort Lauderdale News (March 6, 1969), p. 14.
30. Rolling Stones (January 7, 1971), p. 12.
31. U. S. A. Today (January 13, 1984), p. 35.
32. Daniel and Bernardette Skubik (nota 19), pp. 187-188, 32.
33. Anne H. Rosenfeld, "Music, the Beautiful Disturber," Psychology
Today (December 1985), p. 54.
34. Bob Larson (nota 10), p. 123.
35. Calvin M. Johansson, Discipling Music Ministry: Twenty-first
Century Directions (Peabody, MA, 1992), pp. 50-51.
36. Ibid.
37. Ibid., p. 52.
38. Ver Lawrence Walters, "How Music Produces Its Effects on the Brain
and Mind," in Music Therapy (New York, 1954), p. 38; Arthur Winter, M.
D., and Ruth Winter, Build Your Brain Power (New York, 1986),
pp.79-80.
39. Ira A. Altshuler, A Psychiatrist's Experiences With Music as a
Therapeutic Agent: Music and Medicine (New York, 1948), pp. 270-271.
40. G. Harrer and H. Harrer, "Musik, Emotion und Vegetativum," Wiener
Medizinische Wochenschrift 45/46 (1968).
41. Bob Larson (nota 10), p. 110.
42. Quoted in Leonard Seidel, Face the Music (Springfield, VA, 1988),
p. 64.
43. John
Diamond (nota 22), p. 164. enfasis del autor.
44. Ibid. enfasis del autor.
45.
Jeffery Arnett, "Heavy Metal and Reckless Behavior Among Adolescents,"
Journal of Youth and Adolescents (1991), p. 6.
46. William J. Schafer, Rock Music (Minneapolis, MN, 1972), p.76. Ver
también C. H. Hansen and R. D. Hansen, "Rock Music Videos and
Antisocial Behavior," Basic and Applied Social Psychology, 2:4 (1990),
pp. 357-370; Phyllis Lee Levine, "The Sound of Music," New York Times
Magazine (March 14, 1965), p. 72.
47. Newsweek (February 16, 1976), p. 24. enfasis del autor.
48. Stephen Halpern (nota 24), p. 103.
49. Timothy Leary, Politics of Ecstasy (New York, 1965), p. 165.
50. Hit Parader (January 1968), p. 12.
51. Melody Maker (October 7, 1967), p. 9.
52. Hit Parader Yearbook, No. 6 (1967).
53. Bob Larson (nota 10), p. 111.
54. Ibid.
55. Quoted by Joel Dreyfuss, "Janis Joplin Followed the Script,"
Wichita Eagle (October 6, 1970), p. 7A.
56. Quoted by Lawrence Laurent, "ABC New Format Proves Successful,"
The Washington Post (July 19, 1968), p. C7.
57. Ralph Rupp, an audiologist at the University of Michigan Speech
Clinic, proposed that local governments should enforce a 100-decibel
level on rock played in clubs. (Cited by Jeff Ward, "Cum On Kill the
Noize!" Melody Maker 48 [December 8, 1973], p. 3.) See also "Nader
Sees Deaf Generation from Excessive Rock 'n' Roll," New York Times
(June 2, 1969), p. 53.
58. Calvin M. Johansson (note 35), p. 25.
59. Ibid.
60. David A. Noebel, Rock 'n' Toll: A Prerevolutionary Form of
Cultural Subversion (Tulsa, OK, n.d.), p. 3.
61. Ibid., p. 10.
62. R. H. Rookmaaker, Modern Art and the Death of a Culture (Downers
Grove, IL, 1970), p. 188.
63. Jim Miller, "Hymning the Joys of Girls, Gunplay and Getting High,"
Newsweek (February 2, 1987), p. 70. enfasis del autor.
64. Frank Garlock and Kurt Woetzel, Music in the Balance (Greenville,
SC, 1992), p. 108.
65. Richard S. Taylor, A Return to Christian Culture (Minneapolis,MN,
1973), p.
66. Frank Garlock and Kurt Woetzel (nota 64), p. 93.
67. Calvin M. Johansson (nota 35), p. 73.
68. Ralph Novak, "Peoples Picks & Pans," People (24 June, 1985), p.
20.
69. Elena G. White, Educacion ( ACES, Argentina, 1964), p. 22.
70. H. Lloyd Leno, "Music and Morality," Adventist Review (February
26, 1976), pp. 7-8.
71. Charlie Peacock, At the Crossroad: An Insider's Look at the Past,
Present, and Future of Contemporary Christian Music (Nashville, TN,
1999), p. 15.
72. Ibid.
73. Ibid., p. 16.
74. Jiggs Gallager, Insight, special editon.
75. Ibid.
76. Frank Garlock and Kurt Woetzel (nota 64), p. 57.
77. Ibid., p. 59.
78. Ibid.
79. John Diamond (nota 22), p. 156.
80. Simon Frith (nota 18), p. 240.
81. David Tame, The Secret Power of Music (New York, 1984), p. 199.
82. Ibid., p. 15.
83. Frank Garlock and Kurt Woetzel (nota 64), p. 62.
84. Ibid., p. 63.
85. El
material para esta seccion, "Haciendo los himnos significativos" es
adaptado de un ensayo "The Music of Worship (La música de adoración)"
preparado by Elsie Buck, quien al momento de editar este libro es la
Presidenta de la Asociación Internacional de Músicos Adventistas.
86. Ibid.
87. La dirección de la Sociedad himnologica de Estados Unidos y Canada
es: Boston School of Theology, 745 Commonwealth Avenue, MA 02215-1401.
88.
Hope Publishing Company, 380 South Main Place, Carol Stream, IL 60188.
89. David Tame, The Secret Power of Music (Rochester, VT, 1984), p.
204.
90. Ibid.
91. Ibid.
92. Ellen G. White, The Great Controversy Between Christ and Satan
(Mountain View, CA, 1950), p. 678.
______________
Este es un capítulo del libro "EL CRISTIANO Y LA MUSICA ROCK" UN
ESTUDIO DE LOS PRINCIPIOS BÍBLICOS DE LA MÚSICA. Editado por Samuele
Bacchiocchi
(http://www.biblicalperspectives.com)/
Traducido en Chile por Rolf Baier (http://www.tagnet.org/adventistaflorida)