ABC de la espiritualidad -1
Temas de esta charla:
-El Om
-Aspecto de Dios de cada día de la semana
-Karma
-Realidad
-La Paz Perfecta
-El karma que ata y el karma que libera
-Pecado
-Evolución: piedra, vegetal, animal, humano.
-Aceleración karmica
-Tres clases de karmas:
pasado, presente y futuro.
-Cuatro clases de seres
humanos
-Dedicarle todo a Dios
-Plegaria de la mañana y de la noche
-La gracia de Dios
-Fuerza de voluntad
-Como se genera amor
-Libre albedrío
-El porque de un OM y tres Shanti al final
EL Om es la vibración de Dios, cuando Dios decide
manifestarse, Su voluntad, Su energía genera una vibración. El sonido de esa
vibración es el Om, por eso es considerado el sonido primordial, se llama el
Pranava, el primer sonido, de este sonido derivan todos los otros sonidos, y
por eso también quedó como la palabra sagrada de todas las religiones, en el
Islam Amin, Amén en el cristianismo.
Se entona tres veces el Om, porque está dicho con la
conciencia mundana, entonces nuestra percepción es todavía triple, saludamos al
aspecto de Dios Creador, Preservador y Destructor; al Padre, al Hijo y al
Espíritu Santo; a Brahma, Vishnú y Shiva; es nuestra forma
respetuosa de comenzar toda reunión espiritual, con este saludo a Dios. El Om
tiene que comunicar, tiene dos formas de repetirse el Om, hay que pensar en dos
cosas: por un lado el Om, el sonido nace en el fondo de la garganta y
va creciendo como si llegara a un pico en el paladar, y después baja cuando
viene a los labios, y la parte más importante del Om es el silencio que
continua después de repetirlo.
El Om tiene que comenzar entonces en el fondo de la
garganta, crecer hasta el pico del paladar, pasar a los labios y ahí tenemos
que escuchar el momento de silencio que sigue. Pero ésta es la parte auditiva,
verbal, en el sentimiento el Om tiene que nacer del corazón, tiene que salir
del corazón al mundo, esa es la sensación que hay que tener, cuando uno busca a
Dios dice: “Señor, Señor, dónde estás?”
al mundo y en el mundo te buscamos y en mi corazón te encuentro. Entonces
tengan esta sensación que el Om nace del corazón y en sanscrito el Om se escribe
AUM, que tiene que ver con los tres
estados de existencia: despierto, vigilia y sueño profundo, también Satvas,
Rajas y Tamas, los tres gunas, las tres cualidades, y también Brahma, Vishnu y
Shiva.
Cada día de la semana está presidido por un aspecto de
Dios. El día martes está presidido por el aspecto llamado Ganesha, es el
aspecto que destruye todas las dificultades. El color de Ganesha es el rojo,
cada día corresponde a una Deidad y su color, una vez que lo sepan pueden
conectarse a la mañana y si es posible, al mediodía y a la noche, con este
aspecto de Dios, esta Deidad, que la
invoquen y la saluden y cuando la
invoquen piensen en la vibración del color de esa Deidad y otro consejo es que
ese día lleven algo del color de esa Deidad. De esta manera, uno está
invocando, propiciando esa Deidad, es el Deidad está más atenta a las
invocaciones y a todos los actos
propiciatorios que hacemos y atraemos entonces su Gracia.
Karma y Reencarnación son
las dos leyes fundamentales de la creación, son también las dos leyes
fundamentales para comprender si uno quiere saber algo más del camino
espiritual, si uno quiere comprender la
estructura de este universo y las leyes de este universo y si uno quiere en
última instancia saber quién soy y cómo
debo vivir para realizar mi destino.
Sai Baba cuando anunció
lo que iba a sucederle a la humanidad, al planeta tierra, habló de un enorme
salto cualitativo en la conciencia de la humanidad, del que nosotros vamos a
ser testigos, y una consecuencia o una causa de este salto de conciencia, en
realidad va a ser que la humanidad toda va a saber, conocer y creer en la
realidad de estas leyes, el Karma y la reencarnación. Y si uno realmente cree
en la ley del Karma y la reencarnación no tiene otra alternativa que vivir de
otra manera, a menos que sea un necio total. Si uno realmente cree que toda
acción tiene una consecuencia, se cuidaría de sus acciones. Nosotros “creemos”
porque intelectualmente los que estamos hoy en este salón creemos en esta ley
del karma, porque ya estamos en el
camino espiritual, pero creer no implica realmente CREER con mayúsculas, porque
CREER con mayúsculas implica aplicar esa creencia a nuestra vida, y si
pudiéramos aplicarla impecablemente a nuestra vida seríamos casi santos, no
haría falta estar acá.
¿Que es el Karma? La
gente cree que karma es la ley de causa y efecto, cree que es el destino, la
fatalidad. El karma no es nada de esto.
Karma significa
concretamente, literalmente Acción, más concretamente significa Trabajo. Toda
acción es un trabajo.
¿Qué es el karma? Vamos a
ver que es primero Realidad. La realidad, no lo que nosotros estamos viendo, es
un lago de una calma perfecta donde no hay una sola onda en ese lago, no hay
una sola olita, la calma del lago es absolutamente perfecta. Esa es la realidad.
Oh, casualidad, uno de los nombres más importantes de Dios es Narayana.
Narayana es “El que está en el lago”. Imagínense la realidad como si todo este Universo manifestado e
inmanifestado fuera un lago perfecto de una calma impecable. Es el cuerpo infinito
de Dios. Y de repente en ese cuerpo perfecto de una paz absoluta
aparecemos nosotros y pensamos, ni
hablemos de actuamos, tan solo pensamos. El pensamiento genera una onda en este
lago perfecto, esto es karma, el pensamiento, la respiración generó una onda en
ese lago perfecto de calma. Esta onda tiene una consecuencia, hay una ley
física: toda acción tiene una reacción, pero el verdadero sentido del Karma no
es, si yo hago el bien, cosecho el bien, y si hago el mal cosecho el mal, antes
que esto tengo que pensar que el Universo es sabio y perfecto, no trata Dios,
hace. Dios ante toda alteración de la paz perfecta, recupera la paz. La ley de
Dios es que Yo soy Paz, y todo lo que sea ajeno a mi, tiene que cambiar y
volver a ser paz, esa es la ley. Toda perturbación de la paz en mi lago, tarde
o temprano tiene que, de una manera u otra, calmarse y volver a la quietud.
Entonces karma es esa ley donde se recupera la calma del lago. Es una ley
Divina, cuando uno hace un edificio, el arquitecto, el ingeniero firma un
esquema de construcción, tiene leyes de construcción. La primera ley de
construcción de este universo es la paz del lago tiene que ser recuperada. Todo
lo que Dios genera para recuperar la paz de este lago perfecto, eso es karma.
Karma es el pensamiento que rompió la paz y lo que a continuación va a venir
para traer la paz de nuevo. Esa ley del Karma es una ley Divina, por lo tanto
es imposible que sea alterada y modificada, está más allá del “poder
humano”alterarla. Es la Ley de Dios, por la cual, toda alteración de la paz
tiene que ser resuelta, hay esta acción y reacción necesaria para recuperar la
paz perfecta. Todo acto, pensamiento, palabra, acción, sentimiento, es un
karma. Es una acción vibratoria que altera la paz perfecta.
Una vez había una Sra. en
el Ashram, hace muchos años, que vivía en un estado de Paz perfecta, esta Sra.
no pensaba, no tenía pensamientos en su mente, pueden comprender esta idea de
no tener pensamientos en la mente? Ella por su estado evolutivo había llegado a
lo que todos vamos a llegar, a un estado de paz perfecta, entonces simplemente
actuaba espontáneamente ante lo que tenía que hacer, no tenía pensamientos que
circulaban por el campo mental, y no estaba afectada, estaba todo el día en
paz. Esa persona no asimilaba karma, todos nosotros generamos karma, pero, ¿que
clases de karma hay?
Hay dos clases de karma:
el bueno y el malo, se clasifica en Vishaya
karma y preyo karma. El karma que
ata y el karma que libera. Todo lo tienen que pensar, no desde la inmediatez de
hoy, mañana o pasado, piensen siempre en el bien más alto de ustedes: la
felicidad completa eternamente. Alguno por ejemplo, puede decir, yo tengo
hambre, quiero una comida, pero yo más que una comida hoy que no tengo como
conseguir la comida, quisiera un trabajo que me garantice comer todos los días,
tres veces por día, toda mi vida. El
pensamiento corto mío, busca la comida de ahora, el pensamiento espiritual,
busca satisfacer la forma de comer todos
los días, ese es el pensamiento más alto. Espiritualmente nuestro mayor
beneficio es no sufrir más, nosotros vamos a sufrir cada vez que encarnemos,
porque encarnar ser humano, significa alegría, sufrimiento, alegría,
sufrimiento, sufrimiento, sufrimiento, alegría, entonces la manera de ser
perfectamente felices es no encarnar más, despertarnos, si nosotros somos Dios
y hoy estamos creyéndonos humanos, la solución sería recuperar la memoria, este
es el objetivo más alto. El otro objetivo, los karmas que atan, llamados karmas
materiales, lokika karma, loka por
plano material, o vishaya karma,
karma que ata, porque nos atan a la rueda de nacimiento y muerte, son karmas en
donde tratamos de satisfacer deseos materiales y buscamos felicidad material,
como esa acción es una trampa, nos está atando a la rueda de nacimientos y
muertes. Por otro lado está el karma que libera, se llama vaigita karma, de veda, preyo
karma, el karma que da la verdadera felicidad, que libera. Son todos los
karmas, todas las acciones encaminadas a la elevación espiritual. Los karmas
que atan, intensifican y desarrollan el concepto del yo y lo mío. El karma que
libera intensifica la conciencia del tu, primero nosotros, y después Tu, Señor,
solo Tu Madre Divina. Entonces, karmas que atan, karmas que liberan.
¿Que es el pecado? Pecado
es toda acción que aleja nuestra conciencia de la conciencia de Dios. Si a lo
que se ata es al mal karma, es porque estamos alejando nuestra conciencia de
Dios. Todas las acciones que nos atan son pecaminosas, porque alejan nuestra
conciencia de Dios. Cuando quieran evaluar si una acción es pecaminosa o no,
tienen simplemente que pensar: ¿esta acción va a alejar mi conciencia de Dios o
la va a acercar? Toda acción que acerque mi conciencia a Dios es una acción
meritoria, toda acción que postergue mi conciencia o la conciencia de mi
prójimo en su avance a Dios, es un pecado.
Nosotros somos Dios, pero
Dios un día quiso sentirse a sí mismo,
porque estaba solo, entonces, como no había ningún otro, puso un espejo
para verse, el hizo como si se separara, como si apareciera El uno como muchos,
y ver como esos muchos, Él desde la inconciencia y el olvido total, se
reencontraban consigo mismo y se veían. Esa experiencia de reencontrarse,
decían: Que lindo que soy! En cada reencuentro. Lo que hizo Él, fue hacer que
una parte de sí se olvidara quien era él y empezara a vivir como si, fuera una
piedra, un mineral, un vegetal, un animal, un humano, un ángel, hasta que de
repente, se recuperaba la memoria, se iba la amnesia y decía ¡soy yo! Y en ese
momento el Señor se veía a Sí mismo. Y jugó de esta manera, se llama la Lila de
Dios. Nosotros cuando estamos en la Conciencia de nuestra realidad no generábamos ningún karma porque Dios es
Perfección Absoluta, no hay nada que perturbe su paz porque Él es Él.
Entonces todo empezó
cuando despertamos como piedra. Nosotros creemos que la piedra no tiene
conciencia pero sí, tiene conciencia. A Swami un día yo le pregunté y me dijo
que sí, que tienen conciencia, que nosotros no lo podamos comprender no quiere
decir que no la tenga. Así como tiene vida, como tiene átomos, electrones en
movimiento, tiene una forma de conciencia incomprensible para nosotros pero la
tiene, por eso traten con cariño a todas las piedras, traten con cariño a todo
lo que existe porque todo es Dios, y tratándolo con cariño ese objeto
aparentemente inanimado es el secreto de todos los altares. Uno le proyecta amor al altar, uno reconoce
en el objeto del altar una forma de Dios, y a esa forma, esa energía que le
enviamos es aceptada por esa forma de vida que sabe como madera de sándalo
allí. Y se llena de esa vibración, por eso estos objetos se transforman en sankus, en la India lo llaman en
sánscrito sankus, objetos de poder
espiritual, tienen luz, tienen aura, tienen energía, que cuando uno se conecta
con esa energía que tienen, salen como rayos y lo envuelven a uno y derraman
gracia de Dios a través de esta energía. Por eso miren con atención las fotos
que están acá, todos los objetos del altar, porque todos tienen energía, todos
tiene aura, y eso que decía Shirdi Sai Baba “Tu me miras a mi yo te miro a ti”,
la energía está aquí, la tenemos que mirar, convocar, esa energía nos envuelve
y nos purifica. Si gente que viene acá no mira, no se concentra en esa energía,
no la recibe, pero la energía está.
Entonces empezamos como
piedras a hacer macanas, seguimos como vegetales, después como animales,
después caímos como humanos, como humanos pero animales, porque cuanto más
conciencia, cuando uno actúa mal con conciencia el castigo el doble.
¿Que le pasa a los
aspirantes espirituales? ¿Que le pasa a la gente cuando va a ver a Sai Baba?
Olvídense de Sai Baba como avatar, piensen en Sai Baba como Maestro Verdadero
Espiritual.
¿Que hace el Maestro
Espiritual? El Maestro Espiritual es una energía de amor que está encarnada
para ayudarnos a despertar y a avanzar en nuestra conciencia. Lo que hace es
remover nuestro sueño. Cuando quieren despertarnos lo primero que tienen que
hacer es sacudirnos, estamos dormidos. Entonces viene y nos sacude. Uno va a
ver a Sai Baba, vuelve de un viaje de la India y una revolución tras otra,
aparecen enfermedades, erupciones, caos, en todos los niveles de la vida, y uno
dice: “fui y en vez de estar bien, estoy peor que antes”, es terapia disfrazada,
es pura Gracia. Sai Baba dice: “Ustedes son como vasos de agua, con mucha
suciedad en el fondo. Viven creyendo que están limpios, pero el fondo del vaso
está tremendamente sucio, vengan a mi”, uno se acerca a Él y empieza a remover
el fondo del vaso, y empieza a salir esa suciedad para arriba, y uno la ve y
dice: “Mi Dios! Que tengo yo?”
En mi primer viaje a
India fui a Arunachala, me acuerdo un
momento exacto que me quería cortar la cabeza por los pensamientos que me
surgían, claro, Arunachala tiene
tanta energía y yo caminaba alrededor y era una revolución tremenda, porque
toda la suciedad del fondo del vaso salía. Eso es aceleración karmica, la suciedad que ibas a limpiarla en 20 vidas, a
través de 20 toneladas de sufrimiento, el Señor vino y la revolvió. Pasan 2
meses, un año de tremendos caos, purificación, purificación, purificación. La
persona tiene cada vez más conciencia.
Una persona que no está
en un camino espiritual actúa mal, su acción incorrecta va a tener una
consecuencia, si o si, en algún momento de esa vida, o en la vida próxima. Un
Devoto de Dios actúa mal y lo más probable es que en los próximos 5 minutos
tenga la consecuencia, la consecuencia viene mucho más rápido, eso es Gracia de
Dios, viene, pero atenuada a lo que hubiéramos recibido, viene rápido, porque
nosotros éramos conscientes, tenemos más conciencia que la persona que no sabe
de la ley del Karma o que está hoy haciendo cosas incorrectas. De repente hay
una persona que va a cazar, está en el mundo lo mundano, va a cazar animales.
No tiene la menor conciencia de lo que significa, su karma no es tan negativo
como si alguno de nosotros fuera a cazar. Para esa persona, ese karma no es tan
negativo como lo sería para un aspirante espiritual. Cuando uno está en un
camino espiritual, como tiene más conocimiento y conciencia, las consecuencias
son más rápidas y más graves.
Una historia que cuenta
Sai Baba: una vez estaban Krishna y Arjuna caminando, entonces llegaron a un
lugar y los recibieron. En la India, el que llega a un lugar es como Dios que
llega, es una costumbre en la India, el huésped es Dios. Pero en ésta casa, los
trataron súper mal, no les dieron ni agua, ni comida, ni una buena recepción.
Krishna se va, los mira y les dice: los bendigo para que tengan muchísimas riquezas
y todo el bienestar. Y se van. Llegan a otra casa muy pobre, gente muy, muy
pobre, que le dan la poca comida que tenían, se desviven por atenderlos. Cuando
se van Krishna los mira y les dice: los bendigo para que pierdan todo lo que
tienen.
Entonces Arjuna quedó muy
sorprendido y le dijo: “¿como es esto? ¿Porqué tienes un corazón tan duro?”
“A los que nos trataron
mal les diste tu bendición para que tengan toda la riqueza, y ellos que no
tenían nada, y nos dieron todo lo que
tenían, lo poco que tenían, tu los bendices para que pierdan todo”. Krishna lo
mira y le dice: “Yo quiero su bien más alto, quiero que ya se realicen en esta
vida”.
Todo hay que mirarlo
desde la óptica de Dios, no desde la óptica mundana.
Toda acción tiene que
tener ineludiblemente una reacción. Les cuento cuanto van a vivir ustedes. Van
a vivir exactamente, número de años, días y vidas necesarias, para que paguen
todo el karma que generaron desde que aparecieron como piedras.
Si nosotros tenemos que
vivir una encarnación tras otra hasta pagar todo el karma que hicimos, todos
los pensamientos, las acciones, caminamos, matamos una hormiga, respiramos, y
nos respiramos un montón de microbios que había en el aire y los matamos. Los
jainistas viven con un barbijo para no matar, el jainismo es la religión más
alta de la no violencia y ellos usan barbijo para no matar ningún microbio que
entre en sus fosas nasales.
¿Como es posible? ¿Como se puede pagar esto? Todo lo
que hicimos en cientos y cientos de vidas humanas y las anteriores como
animales, como plantas. Supongamos que yo tengo un millón quinientos mil
karmas, como los puedo tener, para colmo sigo haciendo karma cada día, cada día
sigo respirando, pensando, actuando, es de nunca acabar, cual es la solución a
este problema? La solución de este problema es muy fácil decirla y muy difícil
aplicarla. Primero vamos a hablar de tres tipos de Karma:
Todo lo que hicimos desde
que aparecimos como piedra hasta el día de hoy. Eso se llama sanchita karma, el karma del pasado. Les
voy a dar una analogía que se usa en el camino espiritual. Imagínense un
depósito de paja, cada pajita en un depósito que es grande como toda esta
manzana, y hay parvas de paja. Cada pajita que hay en este depósito es un karma
que hicimos. Toda una manzana de fardos y fardos y fardos, todas nuestras vidas
pasadas hasta el día de hoy.
También está el ejemplo
de un carcaj de flechas, todas las flechas que venimos nosotros cargando en
nuestra espalda y de repente nos toca nacer y ¿que karma vamos a tener en esta
vida? De todo este carcaj de flechas, se saca una flecha para esta vida. De
todo ese depósito de heno, de paja, se saca un pedazo para esta vida. Dice el
Señor, los 4 Señores del karma: “esa alma va a encarnar en Argentina, con tal
sexo, en tal año, en tales condiciones, con tal familia, se va a reunir con tal
persona y tal otra”.
¿Que está determinado?
Está todo determinado, saca y dice, a ver, va a ser en Argentina, en tal año,
va a ser hombre o mujer, de tales
padres, va a tener tal hermano, hermana, te vas a casar tal día, vas a tener
tales hijos y vas a morir en tal fecha. Entonces de todas las flechas, se saca
una flecha, ese karma, se llama prarabdha karma. Y se dice en el camino
espiritual, yo tengo flechas acá atrás y agarro una de esas flechas y la disparo,
es la flecha de disparada, una flecha que ya fue lanzada en esta vida, e
ineludiblemente va a llegar al blanco.
Y después está el tercer
karma, el karma que generamos en esta vida, llamado karma futuro agama karma. Lo que yo hago ahora, si yo
ahora me porto bien, genero buen karma para el futuro, para esta vida o para
alguna otra. Si me porto mal voy a generar karma para el futuro y no hay
escapatoria.
Entonces tres karmas:
pasado, presente y futuro.
Está por un lado la gran
clasificación de Karma: Vijaya y Preyo, el que ata y el que libera. Y después
tres karmas, el de todas las vidas pasadas, el de esta vida y el karma futuro,
el que genero en esta vida para el futuro. Lo generamos hoy ahora, con lo que
hago ahora, puede ser positivo o negativo. Puede atar o liberar, lo podes pagar
en esta vida o en otra vida, que lo vamos a pagar, lo vamos a pagar, no hay
salida. El aspirante espiritual lo paga más rápido que otro, se paga
ineludiblemente.
El avatar no tiene karma,
y lo más importante no genera karma.
Los grandes sabios de
India que se dedicaban a los espiritual, decían todo está determinado por Dios.
¿Existe karma futuro
determinado por el hombre? Si yo en esta vida vengo determinado, lo que voy a hacer
me lo determinó Dios. ¿No estaba determinado lo que iba a hacer? ¿Hay libre
albedrío?
La respuesta correcta es:
hay pero no hay.
Si la liberación es
calmar todas las ondas, la liberación es no generar más ondas, porque nos vamos
a liberar cuando no tenemos más deudas, cuando no quede una sola deuda
pendiente, vamos tener que nacer todas las veces que haga falta, hasta que
paguemos todo el mal que hicimos y cosechemos todo el bien que hicimos. Nos ata
el mal y nos ata el bien, todo nos ata para nacer. Si yo a ustedes les hago el
bien voy a tener que nacer, para recibirlo. Si hoy algo les sirve de lo que
digo, me están condenando a renacer, para recibir el bien. Pero ¿como puedo
hacer para tratar de ayudarlos, sin encadenarme?
Toda la creación es
primero uno, Dios, y después tres. Uno, tres, siete, nueve, son esquemas de
Dios. Uno es Dios, uno es el objetivo que no quiero tener más deudas, solamente
voy a estar en paz, solamente voy a ser feliz, cuando esté en paz, solamente
voy a estar en paz, cuando mi lago esté totalmente quieto, cuando no haya más
deudas, ni dolores que me aquejen, ni
felicidad que me exalte, Paz.
Samadhi: Sama es igual y dhi es intelecto, buddhi. Mi intelecto está siempre igual;, no hay una onda en la
conciencia superior. Samadhi es el
estado de quietud, paz absoluta, bienaventuranza, ninguna perturbación.
Primer problema, todas
las cosas malas que hice, las quiero cancelar, ¿como las cancelo? Haciendo
cosas buenas. Todo el camino espiritual habla de Karma, Bhakti y jñana. El camino de la acción, el camino
de la devoción y el camino del conocimiento. Todos nosotros vamos a pasar por
estas tres etapas. En esta vida hay gente que está más inclinada a la acción,
viene al centro, hace servicio, hay otra que está más inclinada para venir a cantar
y hay otra que está más inclinada a los círculos de estudio, a leer
intelectualmente, meditar. Son tres caminos. Están más o menos mezclados en
todos nosotros, pero toda la evolución espiritual pasa por Acción, Devoción y
conocimiento y es en este orden, tarde o temprano todos vamos a llegar al
conocimiento supremo como última etapa y ahí nos liberamos.
La primera etapa: Acción.
Hice macanas y macanas.
Encarno, vivo y digo: -“Señor, quiero dos cosas, quiero pagar mis errores de
vidas pasadas, y quiero, en esta vida no
hacer más daño a nadie. Entonces yo voy a lograr actuar bien”.
Dice Sai Baba que hay
cuatro clases de seres humanos considerado desde la perspectiva del karma.
Está el athita karma, el ser liberado en vida, una persona que está
totalmente realizada en Dios, es un liberado, un Jivanmukta, un liberado en vida, un ser realizado que vive, no genera karma, como la mujer que les comenté
antes. Está fundida en la conciencia de Dios, y todo lo que hace es la voluntad
de Dios. No piensa en hacer una cosa u otra, actúa espontáneamente y todas sus
acciones son en beneficio de la humanidad. Los verdaderos liberados en vida no
son gente conocida, viven en el anonimato, no tiene ego, actúan en el mundo,
hay muchos en el mundo actuando en forma totalmente anónima haciendo bien al
mundo. Están en cuevas en los Himalayas, meditando, en algún Ashram, o haciendo
servicio en la sociedad en forma totalmente anónima y su ejemplo y su vida son
una radiación o una irradiación de luz, o una acción, que es un ejemplo para
los demás. No generan Karma, están fundidos en Dios.
La Segunda clase de
personas, son las que buscan la liberación, se llaman (mumoksha),
son personas que actúan de tal manera que sus acciones sean buenas, sin esperar
resultado.
No esperan resultado de
sus acciones. Esperan un resultado, pero espiritual, la liberación. Es el karma
que libera, lo que quieren es liberarse y no quieren fruto de sus acciones, es
la clave del segundo estado, que no espera resultado de sus acciones. La
segunda clase también se llama Nishkama
Karma.
La tercera clase espera
el fruto, actúa bien para tener un buen resultado, quiere ir al cielo, no quiere
sufrir, entonces todo lo que hace, lo hace con una expectativa de resultados
buenos. Son personas inteligentes que no quieren sufrir y dicen: yo voy a
actuar bien para que me vaya bien.
La cuarta clase, que se
llama (vraksa karma), son personas que no tiene
ningún control, ninguna restricción, no les importa nada de nada y viven como se
les canta, para tener placeres sensoriales. Cuanto más placeres sensoriales,
mejor, y más, y más felicidad mundana. No tienen restricciones, no tienen
control de sus sentidos. La mayoría de la humanidad.
Entonces ¿como salimos
del laberinto? Primer paso, actuamos bien para cancelar karma negativo, y
generar karma positivo. Segundo paso, yo no quiero generar más karma. ¿Como se
puede vivir sin generar karma? Hay dos maneras: la primera es no considerarse
el hacedor de la acción, yo actúo pero no me considero el hacedor. Digo:
“-Señor, no yo sino tu. Que seas tu el que habla, el que piensa, el que actúa”. Todos los días de mi vida tengo
que decir al levantarme: “que seas tú quien hable, piense, actúe, a través de tu
instrumento”. Sentirse un instrumento en las manos de Dios, yo no, Él.
Por ejemplo, si yo no me
considero el hacedor de algo, no voy a reclamar los frutos porque no fui yo el
que lo hizo, no me pertenece. Entonces la segunda forma de no generar más karma
es dedicarle a Dios las acciones. De esto trata todo el Bhagavad Gita, de no
sentirse el hacedor, y de la dedicación.
¿Que es dedicarle a Dios?
Dedicarle a Dios es un concepto muy especial. Si ustedes van a ofrecerle algo a
Dios, primero se lo dan de todo corazón y después el corazón se lo pide de
vuelta. Si yo hago un regalo, yo vengo y les regalo a ustedes plata, después no
les puedo decir denme los intereses de esa plata, devuelvanmela. Si se las
regalé, se las regalé, se terminó la historia.
Después yo voy a
ofrecerle a Dios algo agradable para Dios, aquello de lo que considere que a
Dios más le va a gustar. Yo no puedo decirle Señor, voy a robar un banco, te
ofrezco y te dedico este robo, que el karma no me ate, porque yo te lo ofrecí a
ti. Esto Dios no lo acepta. La ofrenda a Dios es aquello que Dios va a aceptar
porque le va a agradar, lo que dice Sai Baba de la Devoción:
El Devoto no es aquella
persona que ama a Dios, sino que es aquella persona que merece el amor de Dios.
Entonces si yo le voy a ofrecer algo a Dios tengo que ofrecerle aquello que sea
lo más lindo que me salga, se lo ofrezco y se lo entrego y le digo: Señor esto
es tuyo. Si yo me levanto todos los días y digo: Señor, que cada palabra,
pensamiento y acción te la dedico a ti, te las ofrezco a ti, que seas tu el que
hable, piense y actúe a través de este cuerpo.
La plegaria de Sai Baba
de la mañana: “Señor, acabo de nacer de la matriz del sueño, estoy decidido a
cumplir las tareas de este día como una
ofrenda para ti, haz tu que mis palabras, pensamientos y acciones (yo no soy el
hacedor, tu eres el hacedor) sean sagradas y puras, guíame en este día (guíame
a mi, guíame tu), dirígeme”
Y a la noche: “Señor, las
tareas que te encomendé y te entregué este día se han terminado (yo soy
consciente de las tareas que te entregué este día).Tu me hiciste caminar,
hablar, pensar y actuar, recíbeme, estoy regresando a ti.”
Esa conciencia de la
mañana tiene que durar todo el día, y a la noche recordarla, entonces uno, si actúa
con impecabilidad, de esta manera no genera karma. La primera acción es karma, la segunda es bhakti, porque con devoción le dedico
todo a Dios.
Yo, para dedicarle todo a
Dios, tengo que tener la conciencia de la omnipresencia de Dios. La clave para
esto es recordar que Dios es Omnipresente, Dios está todo el tiempo al lado
nuestro.
Como aspirantes
espirituales, el ejercicio es clave para vivir bien, es pensar que Dios está a
nuestro lado todo el tiempo, está aquí al lado, mirándome, que es omniconsciente
y omnipresente, sabe todo lo que hago y mira todo lo que hago, y yo actúo en su
presencia. Entonces digo: “Señor, ya que estás al lado mío, dirígeme vos”.
En ésta acción, yo tengo
que recordar la omnipresencia de Dios, un ejercicio muy, muy importante, es
estar todo el día imaginando que Dios está presente delante mío. Como está
delante mío: “Ya que estás acá, Señor, hace vos, yo me quedo tranquilo, soy un
instrumento, vos dirigí mi mano como si yo fuera una marioneta”, y siento que
Él, esa energía, es la que actúa a través mío, y yo me entrego a su dirección.
Entonces de ésta manera, yo no genero karma, porque si yo le dedico a Él todo
lo que hago, viene acá aquella persona y le digo: “Señores, lo lamento mucho,
fue Él el que lo hizo, y yo se lo dediqué a Él, así que no es mío eso”.
Entonces aquel que va a anotar, los Señores del Karma dicen: “No, no se lo
anoten a Leonardo, anótenselo a Sai Baba”
Y no genero más karma,
pero, ¿que hago con el depósito de karma que tenía del pasado? Tenía un granero
de paja de 115 encarnaciones humanas, y no sé cuántas como animales, ¿que hago
con todo eso? Ahí viene la tercera etapa, del conocimiento.
¿Cual es el símbolo del
conocimiento? El símbolo del conocimiento es el fuego sagrado. El fuego, en
toda la literatura espiritual es el símbolo de: “se despertó el fuego sagrado,
se iluminó el conocimiento” La condición del fuego es Luz y calor. El fuego
sagrado es la representación del conocimiento, entonces, yo despierto el fuego
sagrado, prendo un fósforo, y lo tiro al pajar. Enseguida se quema todo, no
queda ningún karma pendiente. Entonces la solución definitiva para este
problema llega porque es una consecuencia, primero actúo bien, después le
dedico todo a Dios con amor y por último como consecuencia se va despertando el
conocimiento, la sabiduría en mi y de repente se enciende el fósforo y se quema
todo. Pero acá vienen dos temas: la relación con el Maestro y la Gracia de
Dios. Nosotros podemos tener el mejor fósforo, pero hay que encenderlo. El
fósforo se enciende solo con la Gracia de Dios. Sin la Gracia de Dios no hay
liberación, no existe liberación.
¿Como ganar la Gracia de
Dios? La voluntad es clave. Primero, ¿que hace el maestro espiritual? Nosotros
tenemos Karma, entramos en un camino espiritual, y en ese camino espiritual,
vivimos de tal manera que nos hacemos merecedores de la Gracia de Dios,
entonces el karma se tiene que cumplir. La ley Universal era que la ola que se
generó tiene que volver el lago a su paz. ¿Como se cumple? Ustedes vieron que a
veces Sai Baba asume la enfermedad de un devoto. Una vez se rompió la cadera y
sin embargo siguió como si nada, porque el devoto que tenía que romperse la
cadera, no hubiera sobrevivido. Una vez a Sai Baba le dieron no se cuantos
ataques de corazón con hemiplejia, los médicos dijeron que tenía segundos de
vida, porque no podía sobrevivir con lo que le había pasado. Sai Baba había
anunciado cuanto tiempo iba a estar así, que no se preocupen que después iba a
recuperarse y los médicos que lo vieron dijeron que era físicamente imposible,
y Sai Baba, cuando se cumplió el plazo que el dijo, volvió a su estado normal.
¿Que hizo? Asumió Karma. El karma se tiene que cumplir, pero cuando aparece la
gracia de Dios, suceden dos fenómenos: uno es que la acción que se tenía que cumplir
se atenúa por la gracia de Dios.
El ejemplo de la bala, el
karma presente es como el disparo de una bala que salió, la bala salió y tiene
que llegar al blanco si o si, entonces el karma que teníamos que vivir en esta
vida nos va a pegar y nos va a pegar en esta vida. ¿Que hace la gracia de Dios?
La Gracia de Dios nos pone el chaleco antibala, la bala nos pega, pero no nos
mata. Sai Baba siempre da el ejemplo que nosotros tenemos en esta vida que
tomar un remedio que nos va a hacer muy mal, muy mal, y va a dar tantas
complicaciones que a lo mejor nos mata. Que hace la Gracia de Dios? El remedio
lo tenemos que tomar, pero la Gracia de Dios va a hacer que el remedio que
tomemos se venza, entonces no nos pase nada. Cuando uno está en un camino
espiritual, le pasan cosas, pero lo que le pasa es una forma atenuada de lo que
nos tenía que pasar. No es que uno deja de sufrir, yo recuerdo cuando empezó la
Organización Sai, uno de los primeros devotos que había acá fue a india en un
viaje y le agarró epilepsis y depresión.
Es un psiquiatra, le agarró una depresión tremenda que estuvo al borde de
querer suicidarse, le agarró en india, se volvió y al poco tiempo de volver, se
le pasó todo. Después, me comentó otra persona, que él en esta vida estaba
destinado a suicidarse por esa depresión, estuvo en la India, Sai Baba se la
activó se la hizo cruzar en forma muy atenuada a lo que hubiera sido y terminó
ese karma. Una visión mundana hubiera dicho: “Fue a India y mirá lo que le
pasó”, y una visión que conoce más el pasado, presente y futuro, dice: “no, le
salvó la vida, pasó el karma totalmente atenuado”. Y así es la realidad del
camino espiritual, que no solamente dice Sai Baba, sino todos los grandes
maestros. El Maestro asume el karma del Devoto. Jesús, ese símbolo de Jesús
asumiendo el karma de la humanidad, asume el karma de todos aquellos que se
entregan a Jesús, no es que Jesús va a asumir el karma de aquel que está
matando, del que está robando, que es impune, porque Jesús estuvo en la tierra,
esa es una forma infantil de considerar la realidad. El espíritu de Jesús, el
espíritu de la fuerza de la entidad espiritual que encarnó como ese maestro
espiritual, como avatar, asume el karma de todos a aquellos que se entregan
como discípulos a El y que hace una relación profunda la de discípulo- maestro.
El maestro dice: Yo te acepto como discípulo, y en esa relación el maestro
derrama su Gracia, atenúa el karma, lo modifica o lo asume Él. La flecha va a
salir disparada, pero se atenúa, por eso un aspirante espiritual a lo mejor en
una vida vive lo que le correspondería vivir en diez vidas siguientes, en forma
más atenuada, Dios aprieta pero no ahorca, Dios jamás ahorca, puede apretar
mucho, pero Él sabe cuando nos vamos a asfixiar y va a largar unos segundos
antes. A lo mejor en ese sufrimiento de asfixia, pagamos un montón de karma que
teníamos por pagar, a lo mejor en esta vida por largo tiempo, y si se va
cumpliendo la ley.
Todas las disciplinas
espirituales están con el objetivo de despertar nuestra conciencia. No quiere
decir que uno entró en un camino espiritual y entró en la era del sufrimiento,
todo lo contrario, entró en la solución del sufrimiento. Estoy aclarando esto
para la fantasía que tiene mucha gente, que entró en el camino espiritual y ya
no le tiene que pasar nada. No, va a pasar lo que le tenía que pasar, pero les
puedo asegurar, totalmente atenuado.
Es muy difícil para
nosotros evaluar, para un discípulo espiritual, un aspirante espiritual, lo que
hubiera sido su vida con Baba o sin Baba, o con Jesús y sin Jesús, ¿como puede
uno comparar?
Pero les puedo asegurar,
porque lo dicen todos los grandes maestros, que hay una enorme diferencia en lo
que hubiera sido la vida de cada una de esas personas, porque está ahí la
Gracia de Dios. La Gracia de Dios es esa energía que derrama Dios, que tiene el
propósito de acelerar el despertar espiritual, que tiene el propósito de
atenuar el Karma negativo, esta es la Gracia de Dios en la vida de los
discípulos. Aceleran el despertar y modifica el karma negativo.
¿Como se gana la Gracia
de Dios? La Gracia de Dios es la unión del polo positivo y del polo negativo,
la Gracia de Dios es el polo positivo, la acción que recibió de ella es el polo
negativo. Justamente en la práctica espiritual se llama en Sánscrito Sadhana. Sadhana significa esfuerzo espiritual. Ese esfuerzo es lo que Dios
recompensa con su Gracia. Dios es omnisciente y a Él no se le puede engañar,
por lo tanto en su omnisciencia el sabe si estamos realmente portándonos o no.
Siempre doy el ejemplo del gimnasio. Yo voy al gimnasio y agarro una pesa, si
agarro una pesa de dos kilos y yo tengo fuerza, esa pesa de dos kilos no me
genera ningún esfuerzo a mí, y no voy a desarrollar ningún músculo. Para poder
desarrollar músculo tengo que agarrar una pesa de 10 kilos y a la semana
siguiente de 12 kilos, y al tiempo de 14. Yo no puedo decirle: -Señor, yo fui
al gimnasio y agarré la pesa de 5 kilos, y ahí estuve, así que dame tu Gracia.
Él va a decir: - no, tiene que ser esfuerzo. Esfuerzo es un poco más de fuerza de
lo que no nos cuesta, algo que nos
cueste un poquito. No tengo que agarrar una de 30 kilos. Por ejemplo en
la literatura espiritual significa que se mortifica, agarro un látigo y se
pega: -Señor, yo pecador. Ese no es el camino espiritual, es el camino del
ayuno mortificante, no es el camino. El camino es un esfuerzo de despertar
conciencia de purificación, de lograr realmente, si yo quiero desarrollar un
cuerpo físico voluminoso, voy a hacer
gimnasia con una periodicidad y cada vez aumentando el peso, para que cada vez mi cuerpo vaya creciendo. El cuerpo espiritual, de la misma
manera crece en base al alimento de la disciplina espiritual. Si uno se levanta
y dice: “OM SAI RAM, OM SAI RAM, OM SAI
RAM, ya está, terminé mi disciplina espiritual hoy” si, la terminó, pero no
logró nada. Si a lo mejor esa persona repite el OM SAI RAM, 108 veces con
concentración y logró algo, esa persona no se tiene que conformar con decir:
“repetí OM SAI RAM 108 veces con
concentración y pensé en Dios, ya está”. Esa persona, el objetivo que tiene es despertarse y darse
cuenta que es Dios. Cualquier cosa menos de eso, es conformarse con muy poco.
Uno se puede conformar con lo que quiera, si quieren no hagan ninguna
disciplina espiritual y de acá salimos y nos vamos a un boliche a bailar. Es
una alternativa, pero si querés recuperar la conciencia, somos Dios, nos
metieron una droga y nos durmieron y nos están diciendo cual es el antídoto
para despertar. Yo me quiero despertar, no quiero quedarme más dormido. El
objetivo es despertar y volver a saber quien soy. El que se quiera despertar
acá debe continuar hasta que despierte, antes de despertarse, se dice: todavía
falta, entonces la disciplina espiritual hay que continuarla e ir gradualmente
aumentándola para que nos despierte. Cada uno va a cosechar lo que siembre. Si
ustedes quieren despertarse en alguna vida les puedo asegurar, se van a querer
despertar del todo, es inevitable. Todos los seres de este universo,
gradualmente van a ir evolucionando y madurando hasta que en una vida se
quieran despertar y no acepten nada más
que despertar. Nosotros podemos estar ya en esta vida, en este estado o todavía
no, más adelante tener este deseo, o a lo mejor ese deseo tan intenso lo
tenemos en la próxima. La disciplina espiritual debe ser realizada de tal
manera que nos acerque cada día más a despertarnos, y debe continuar hasta que
nos despertemos. Cualquier otra cosa es engañarnos. Si yo soy Dios y Dios es
todo, ¿porqué me voy a conformar con ser un ser humano? Si yo digo: “estoy conforme con ser humano” bueno, quedate ahí como ser
humano. En alguna vida me voy a dar cuenta que un ser humano sufre mucho, que
su felicidad es limitada y voy a querer más niveles de felicidad y más niveles
de conciencia.
La clave: todo pasa por
la fuerza de voluntad, aunque parezca mentira, todo en el camino espiritual es
en relación directa a la fuerza de voluntad. Cuando empecé en el camino
espiritual estaba en una organización de Raja Yoga, me dieron una práctica que
tenía que meditar 90 días seguidos entonces un día meditaba, y al otro día no,
y otro día tampoco, y después volvía a meditar y tenía que empezar a partir de
ese día de nuevo. Me costó un año y pico estar en ese estado de poder llegar a
meditar. Porque no llegué a meditar todo el tiempo? Porque mi fuerza de
voluntad no era suficiente, no tenía conciencia para tener fuerza de voluntad o
no había asimilado es fuerza de voluntad y me apareció la respuesta que tenía
que meditar. Cualquier excusa era buena y siempre surgen motivos por los cuales
no medito. La cuestión es: ¿como desarrollo la fuerza de voluntad? ¿Como se
genera la fuerza de voluntad? Hay una acción que genera fuerza de voluntad. Dos cosas les voy a
decir, como se genera la fuerza de voluntad y como se genera el amor. Van a
cerrar los ojos un segundo, van a pensar en algo que deben modificar en sus
vidas, algo negativo que deben modificar y se lo van a entregar al Señor, le
van a decir: “Señor, por lo menos durante una semana voy a vencer eso negativo,
voy a vencer esa negatividad”, hagan este compromiso interior y después les
cuento la solución...
La respuesta es la
siguiente, cada segundo que se repriman de esa acción negativa, aumenta la
fuerza de voluntad, la fuerza de voluntad es una energía que se acumula con la
no energía gastada en las acciones negativas. Una persona fuma, un aspirante
espiritual fuma y sabe que fumar está mal, cada cigarrillo que no prenda, la
energía que se iba a consumir en ese cigarrillo incrementa la fuerza de
voluntad, entonces la no realización de acciones negativas incrementa el caudal
de la fuerza de voluntad, Así como la persona que tenía que meditar todos los
días, el día que hizo el esfuerzo de meditar y meditó, esa acción positiva
incrementa el caudal de la fuerza de voluntad. Cada vez que ustedes hacen algo,
porque dieron su palabra y la están cumpliendo día a día aunque les cueste, esa
energía que iba a ser canalizada en esa acción, aumenta la fuerza de voluntad y
así se va aumentando y aumentando.
¿Como se tiene amor? Sai
Baba dice que el amor surge cuando uno sigue impecablemente tres acciones:
-La primera tiene que
pensar en las faltas propias como insignificantes que sean como enormes, tiene
que ser una lupa con la que uno se mira y no se perdona ninguna falta, la
considera grave y dice: La voy a cambiar, porque esto no me lo puedo perdonar.
No es permisivo con sus faltas.
-La segunda acción es
considerar las faltas de los demás por enormes que sean como insignificantes.
No mirar y no pensar en las faltas de los demás.
-Y el tercer requisito es
recordar siempre la omnipresencia de Dios.
La persona que vive de
esta manera, día a día va generando amor en su corazón y va aumentando el amor
por Dios, con la bondad todo el tiempo. Entonces su corazón y su amor van
creciendo, creciendo y creciendo. Esta es la fórmula que dice Sai Baba que en
esta vida aumenta el amor en nuestros corazones.
Sin fuerza de voluntad no
se puede entrar al reino de los cielos, el camino espiritual es mucho más
difícil que ir al gimnasio a levantar pesas, es un camino de auto
transformación, es un camino realmente de luchar contra vidas y vidas y vidas,
contra tendencias acumuladas en muchísimas vidas. Se llaman ankaras y vasanas, son esas tendencias
que fueron creando nuestro inconsciente, nuestros genes kármicos, por decirlo
de alguna manera, de vidas y vidas que
nos determinan a ser como somos, esas predisposiciones que tenemos, la
predisposiciones de actuar de tal manera se modifican con fuerza de voluntad.
¿Que es fuerza de
voluntad? Atrae y gana la fuerza de Dios. Sai Baba siempre da el ejemplo de un
barco velero que está listo para salir y tiene que levantar la vela para que el
viento le pegue y lo lleve para adelante. Levantar la vela es el esfuerzo de
voluntad, es la acción que va a permitir que la Gracia de Dios que es el viento, empuje nuestro barco hacia delante.
¿Existe o no existe el
libre albedrío?
La respuesta correcta es:
¿Quien somos nosotros?
Libre albedrío es una
palabra cercana a independencia. Independencia es depender de lo interno, el
que depende de lo interno, lo interno es Dios, es independiente. El que depende
de lo externo es un esclavo.
Swami siempre dice: la
mente es como una llave: das vuelta hacia el mundo, la esclavitud, el caos, el
sufrimiento; das vuelta hacia Dios y es la libertad y la felicidad.
¿Existe el libre albedrío
o no?
“No se mueve una brizna
de hierba sin mi voluntad”.
Si Jesús no mentía,
quiere decir que no se mueve una brizna de hierba sin la voluntad de Dios. El
único ser que tiene libre albedrío es Dios, hace lo que se le canta. Dios es
totalmente libre de escribir, borrar y volver a escribir.
(Anécdota de Michael
Goldstein en el avión)
Swami le dijo que él
tenía que morir en ese vuelo y que después le cambió el karma, Dios es el único
libre.
Ahora, nosotros como somos
Dios, somos libres, pero solamente cuando estamos con la conciencia completa de
Dios, sin esa conciencia, no somos libres, estamos condicionados.
Estamos condicionados por
la mente, por los padres, el ambiente en que nacimos, los condicionamientos psicológicos
y mentales, genéticos, la historia del inconsciente colectivo de la humanidad,
lo que traemos de karmas de vidas pasadas, y todos los condicionamientos que
nos hacen hablar de una manera, reaccionar de otra. Quien habla de libertad?
Donde está la libertad? Pero olvídense de todo lo que les dije, porque para los
términos concretos en el plan de Dios, en la voluntad de Dios, tenemos que
creer que si existe el libre albedrío y tenemos que actuar como si existiera. Y
el plan de Dios es lo que dijo Jesús: “Ganarás el pan con el sudor de tu
frente”. Miren esta aparente contradicción: “No se mueve una brizna de hierba
sin su voluntad” entonces uno puede decir: -bueno, me quedo acá sentado y el
pan me lo va a dar el Señor si es su
voluntad, y si el no tiene voluntad de darme pan, no tendré pan. Pero Jesús
después dijo: “Ganarás el pan con el sudor de tu frente”, quiere decir,
vas a evolucionar con los esfuerzos que
hagas consciente para transformarte y cambiar, para ir de lo que menos te
conviene a lo que mas te conviene y te voy a dar discernimiento para que puedas
discernir entre lo permanente, lo eterno y lo transitorio, y tu vida va a ser
una permanente elección, vas a estar sometido a pruebas todo el tiempo, entre vishaya y preya, entre aquello que agrade a tus sentidos y aquello que agrade
a tu alma. Permanentemente vas a estar sometido a estas elecciones y
permanentemente vas a tener que hacerte tuyo los dos caminos y vas a tener que
elegir el que me lleva a evolucionar o el que me da gratificación sensorial y
mental, y esta elección es la elección del libre albedrío.
La realidad pasa por
estos dos extremos: el saber que el libre albedrío en el plano humano no
existe, solamente en el plano Divino existe, pero también que la ley de Dios y
la estructura de la realidad que Dios generó es que tenemos que vivir como si
existiera y usar nuestro discernimiento para elegir aquello que nos va a
liberar. Esa elección tiene que ser diaria, no es una elección que vamos a
hacer dentro de 20 años, cuando un día nos sentemos y hagamos la gran decisión
de nuestra vida. Lo que va a decidir quienes vamos a ser en la vida siguiente y
lo que nos va a pasar en la vida siguiente o en esta, van a ser esas decisiones
diarias que tomamos segundo a segundo. Entre lo menos significativo y lo más
significativo, en detalles insignificantes, como que clase de torta comer,
hasta detalles muy grandes, que tienen que ver con nuestro trabajo, nuestra
familia, nuestra elección de vida, y en cada uno de esos niveles está la
elección y cada elección tiene que ser siempre aquello que nos libere, aquello
que haga crecer nuestra conciencia. Porque nosotros hemos nacido muchas veces
hemos tenido muchísimas vidas, hemos tenido muchísimos placeres sensoriales que
hoy no nos sirven de nada, y lo que va a determinar nuestra felicidad y la de
nuestros seres queridos es la elección hacia la libertad que hagamos nosotros.
El karma no es solo
individual. Así como nacimos en una familia, las acciones positivas nuestras,
influyen también a nuestros familiares, así como las negativas influyen en
ellos, o sea que nosotros cuando atraemos con nuestras acciones la gracia de
Dios, esa Gracia de Dios abarca a toda nuestra familia y la envuelve.
Nosotros estamos en la
medida en que crecemos, trascendiendo el efecto de nuestras acciones a nuestra
familia y se acerca a círculos cada vez mas amplias, a la ciudad al país, por
eso los grandes seres, athita karma,
seres liberados en vida, ayudan a tantos, tantos miles de seres humanos con su
presencia. En la medida que avanzamos sin saberlo, estamos ayudando y siendo
una fuente de luz para el planeta. Primero en la medida que tenemos menos
conciencia, pero algo de conciencia tenemos y elegimos siempre lo que libera,
la acción correcta para nuestro propio desarrollo, estamos ayudando en forma
inmediata al circulo de nuestra familia, porque son aquellos beneficiados
aunque no sepan de todas las acciones y todas las elecciones correctas que
ustedes hagan.
¿Saben por qué un OM al
final y no tres? Porque al principio como venimos del mundo, nuestra conciencia
está totalmente dispersa en el mundo y consideramos que está el Padre, el Hijo
y el Espíritu Santo, Materia, Energía, la Voluntad Divina. Pero después de
hablar tenemos conciencia un poco más que todo es Dios, por eso saludamos con
un solo OM.
Repetimos SHANTI tres
veces porque en realidad Dios no necesita paz, está en paz todo el tiempo, la
paz se la deseamos a aquellos que todavía no realizaron a Dios, que tienen que
quedar en paz, entonces extendemos la paz a los tres planos de la manifestación
para que abarque a todos los que todavía no están despiertos.
Volver a “ABC de la Espiritualidad”