Forman
el segundo suborden de los saurisquios. Se dividen en prosaurópodos
y saurópodos. Los primeros vivieron en el Triásico
superior y Jurásico inferior. Los segundos vivieron en
el Jurásico y el Cretáceo. Eran los dinosaurios
más grandes y fueron especialmente prósperos durante
el Jurásico. El registro fósil parece indicar que
en su origen proceden del supercontinente Gondwana. Tan sólo
se conoce un género de saurópodos del Jurásico
inferior en el hemisferio norte, Ohmdenosaurus, procedente del
sur de Alemania, mientras que en el hemisferio sur se conocen
dos géneros, Barapasaurus, de la India, y Amygdalodon,
de Argentina. Del Jurásico medio se conoce un único
género en el norte, el Cetiosaurus europeo, mientras que
en Gondwana se conocen hasta el momento cinco géneros:
Cetiosaurus en Marruecos, Rhoetosaurus, en Australia, Bothriospondylus,
en Madagascar, y Patagosaurus y Volkheimeria, en Argentina. Además,
en el sur de África se ha encontrado el esqueleto incompleto
de una especie del Jurásico inferior a la cual se denominó
Vulcanodon y que presenta caracteres de prosaurópodos y
saurópodos. Su apogeo se dio durante el Jurásico
superior, siendo abundantes en ambos hemisferios. Se mantuvieron
como grupo importante de herbívoros durante el Cretáceo
en Sudamérica, Europa y la India.
Todos
los saurópodos eran animales herbívoros y se caracterizaban
por tener la cabeza pequeña, con un cerebro muy pequeño
en relación al tamaño del resto del cuerpo, el cuello
y la cola largos, los huesos de la columna ahuecados para aligerarlos,
fuertes extremidades, los pies anteriores con una gran garra y
los posteriores con garras en los tres primeros dedos.