Entre
el agua y el bosque
Las
lluvias que se pronosticaron para esta semana cayeron puntuales,
y comienzan a provocar alerta por el descontrol sobre obras
civiles en varios puntos del departamento, incluyendo la zona de
San Lorenzo; pero esa agua es también germen de vida de este
valle, y de nuevas experiencias que no dañen su medioambiente.
Sólo hace falta ver las cosas desde un punto de vista algo por
encima del resto.
Nelson
Peñaherrera C. nelsonpenaherrera@journalist.com
Malingas,
Tambogrande
|
La primera lluvia fuerte caída sobre Malingas, el
martes, luego que desde el lunes otras más leves
comenzaran a precipitarse sobre la zona, provocando la
algarabía de la gente, o la curiosidad de este niño. |
Con
las lluvias que han comenzado a caer desde el lunes –70 litros
por metro cuadrado es el primer registro para San Lorenzo—el
problema que se presentará es la dificultad en los accesos a
los diferentes caseríos del valle, especialmente de la parte
alta.
Muchas
instituciones y empresas que trabajan en la zona ven los eventos
climáticos como una gran dificultad, y hasta una amenaza, ya
que las corrientes que usualmente se mantienen pocas de agua a
lo largo del año, esta temporada dejarán de murmurar
solamente.
Los
agricultores si bien necesitan el agua para asegurar la siembra
de la llamada “campaña grande” (donde usualmente se
siembran arroz, algodón y marigold), saben que estas lluvias
marcan el fin del periodo de cosecha.
La
algarroba que comenzó a producir desde hace tres semanas, se
quedará en el suelo, pues la humedad comenzará a deteriorarla,
afectando a los procesadores artesanales de algarrobina, una
pasta negruzca a la que se atribuyen propiedades energizantes si
se le combina en jugos y otras recetas domésticas, muy bien
cotizada en Lima, donde un frasco de medio kilogramo, puede
costar hasta cuatro dólares.
|
Desde el miércoles, la quebrada de San Francisco ya
no puede ser cruzada por autos, sino por grandes
camiones. Si lloviera con mayor intensidad, el tránsito
entre Tambogrande y Chulucanas se interrumpiría. |
La
quebrada San Francisco que prácticamente divide en dos la
ribera oriental del río Piura ha crecido e interrumpido
parcialmente el tránsito de vehículos entre Tambogrande y
Chulucanas.
Sólo
los camiones transportando mango aún pueden cruzar la quebrada,
aunque conductores inexpertos ya están pasando el trance de
quedarse atascados en algunos huecos que la corriente ha labrado
en el lecho fangoso.
El
agua que corre en San Francisco es clara y transparente, algo
raro, teniendo en cuenta el grado de contaminación en las
ciudades que la enturbia al instante, y se ha convertido en el
lugar de veraneo diario de la gente de Malingas y las
comunidades más cercanas como Cruce de Vega, Palominos o Pueblo
Libre.
Por
fortuna, el agua apenas si llega a las pantorrillas y no tiene
mucha corriente como para cruzarla y sentir su frescura como
compensación al inclemente sol que en esta zona, por ser
transición entre la costa y los Andes, abrasa más.
La
sensación térmica en Malingas ha sido estimada en 35 grados
Celsius a la sombra. Si atendemos a los estudios publicados por
Fidel Torres hace dos años, debemos estar agradecidos con la
cubierta vegetal circundante –algarrobos, overales, palo
santos—, pues de desaparecer, se incrementaría la temperatura
dramáticamente.
|
La vida del valle de San Lorenzo depende de la
vegetación que se ha ido formando estos años. Buena
parte de las actividades adicionales a la agricultura se
desarrollan gracias a esta cubierta verde. |
La
mejor manera de comprender la importancia de la cubierta arbórea
es verla desde arriba.
Es
una lástima que no tuviéramos a disposición una avioneta o un
helicóptero como las empresas dedicada a actividades
extractivas, con capital suficiente para pagar a 300 personas
que se dedicarán a boicotear la intención del pueblo de
Tambogrande de deshacerse de una actividad económica que no le
dejará dividendos beneficiosos.
Todas
estas personas –la mayoría de las cuales son tenientes
gobernadores, según una lista que uno de los investigadores de NPC
factortierra sólo pudo ver la semana pasada—dependen de
ese bosque directamente, pues se proveen de alimentos o trabajan
allí, en colmenares principalmente.
Así
que antes que confiar en la billetera, lo hicimos en nuestras
piernas, y elegimos un cerro de regular altura para vivir la
experiencia, de paso que hacíamos un poco de deporte.
Los
cerros de San Lorenzo tienen una configuración pedregosa en
gran parte, reminiscencia de la actividad volcánica de hace 40
millones de años, que modeló el accidentado relieve de la
zona. Hemos elegido el cerro que la gente llama de Chicha Fría,
en cuya base se ubica el caserío de Pueblo Libre.
|
¿Una actividad económica que no contamine? El
eco-turismo o el turismo de aventura tienen como premisa
principal no dañar el medioambiente. Faltan recursos,
pero lo que no faltan son paradisiacas vistas. Puede
solicitarlas en NPC NewsSupply |
Mientras
subimos a nuestras espaldas se ubica el cerro de Malingas, un
macizo cuya cota de 300 metros sobre el nivel del mar, no logra
ser remontada por el cerro que nosotros subimos que apenas si le
llega a la mitad, pero que tiene la altura suficiente para
mostrarnos la magnificencia de San Lorenzo y el Medio Piura,
girando a voluntad sobre nuestras plantas.
Hay
que llegar allí para convencerse de lo que representa en
realidad ese valle para nuestra gente, y no sólo eso, lo que en
actividades conexas, como el eco-turismo puede significar.
Alguna vez, el alcalde Alfredo Rengifo, propulsor ejecutivo de
la consulta distrital, me dijo que era posible realizar ese tipo
de actividades pero requería de inversión.
Bueno,
de pronto, nuestra pequeña excursión pudo significar algo de
lo que se llama turismo de aventura al menos.
Gente
que conoce el valle asegura que hay más cosas por descubrir en
el resto de las casi 60 mil hectáreas de bosque y área
cultivable, incluyendo ruinas pre-incas cerca del reservorio de
San Lorenzo.
Tenemos
fe de que la minería nunca prosperará en el valle; pero si
llegara lo irremediable, por ahora, gozaremos al máximo de este
paisaje, que no estamos seguros si también servirá de recreo
para las generaciones que ya abrieron los ojos en esta zona.
©2002
NPC www.oocities.org/NPCcomunicaciones/NewsSupply
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