Proporcionado por Oxfam
America
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SECCIONES:
PRÓLOGO /
RESUMEN
EJECUTIVO / INTRODUCCIÓN
/ HALLAZGOS
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RELACIONADAS / RECOMENDACIONES
/ REFERENCIAS |
PRÓLOGO |
Nota Editorial:
Este informe se refiere a la ciudad de Tambogrande en Perú. Sin
embargo, el nombre del proyecto minero, que se deriva del nombre de
la ciudad, utiliza otra forma de escritura, Tambo Grande. En este
informe se usa "Tambogrande" para referirnos a la ciudad y
"Tambo Grande" para referirnos al proyecto minero.
El proyecto minero propuesto Tambo Grande, en el
norte del Perú, ofrece una ilustración
completa de los problemas asociados con las operaciones mineras a
gran escala en una era de desregulación y
globalización. La ciudad de Tambogrande
–pobre, aislada y en el corazón de la zona de "El
Niño" en el Perú- se encuentra
ubicada sobre grandes depósitos de oro, zinc y cobre, que "Manhattan
Minerals" una pequeña multinacional minera canadiense está
buscando explotar en forma de mina a tajo
abierto. Los impactos que se proyectan por
la explotación de la mina son graves. La construcción de la mina
requerirá la reubicación de aproximadamente
8.000 habitantes de una población de
entre 14.000 a 16.000 personas y la desviación del cauce de un
río. El proyecto podría tener también
impactos significativos en la producción agrícola de
la zona –los agricultores de Tambogrande son los principales
exportadores de mango del Perú y el area
se ha convertido en uno de los mayores centros agrícolas
del Perú, gracias a una inversion considerable en sistemas de
irrigación, parte de la
cual se hizo con fondos del Banco Mundial.
Preocupadas por la propuesta de reubicación y por
las amenazas a sus formas de
sustento que se basan en la agricultura, las poblaciones locales se
han opuesto significativamente al
proyecto. El 27 y 28 de febrero, aproximadamente 10,000
personas participaron en el bloqueo de una vía de acceso al sitio
de exploración. Una iniciativa reciente
logró recoger 28,000 firmas de personas en el
distrito de Tambogrande (de aproximadamente 37.000 posibles
votantes) que se oponen a la construcción
de la mina. El Alcalde de Tambogrande y el Arzobispo
de Piura han hecho un llamado para que el proyecto no avance,
citando no solamente los efectos potenciales
sobre el medio ambiente, sino también los
perturbadores impactos sociales, ya evidentes en la fase de exploración,
debido al tenso ambiente de desconfianza y conflicto que existe en
el área. El Arzobispo ha
llamado al proyecto "socialmente inviable".
La empresa Manhattan, una empresa
"jóven" en minería, sin experiencia previa
en operaciones mineras de esta escala y sin
ningún otro proyecto en operación actualmente
llegó al Perú en la onda del reciente "boom" minero del
país. Con la privatización del sector
minero en el Perú a principios de los 90s, la inversión extranjera
en el sector ha crecido significativamente en la pasada década. De
1992 a 1997, el volumen de las operaciones
mineras en el Perú se triplicó de 30.000
a 100.000 toneladas métricas de minerales por día. El área
dedicada a la exploración y extracción
se incrementó de 4 millones a 18 millones de hectáreas entre
1992 y 1998. De acuerdo al Financial
Times, el Perú ha tenido la tasa de
exploración exitosa más alta de Sudamérica en
los últimos años, llevando a Latinoamérica
a emerger como la región más popular para nuevos proyectos mineros.
El proyecto de Tambo Grande está localizado en el departamento de
Piura, un departamento que hasta ahora no había
sido conocido por su minería, sino más bien por su agricultura.
Las operaciones de Manhattan pueden abrir la puerta
para la explotación de cientos de miles de hectáreas actualmente
en concesión en Piura. El impacto para la
forma tradicional de sustento agrícola, de la
cual una vasta mayoría de piuranos obtienen sus ingresos, puede ser
grande.
La legislación peruana adoptada en diciembre de
1998, prohibe específicamente la
exploración o la producción minera en área urbanas, tales como la
ciudad de Tambogrande. Bajo esta
legislación, los actuales propietarios de las concesiones
de tierras tuvieron un período de dos años para solicitar una
excepción, siempre que pudieran demostrar que
tenían derechos sobre la superficie y que
remitieran un estudio de impacto ambiental a satisfacción del
Ministerio Peruano de
Energía y Minas.
La compañía Manhattan recibió una extensión de
ese plazo como parte de un Decreto
Supremo del gobierno del entonces Presidente Alberto Fujimori. Desde
entonces, la empresa Manhattan ha aplazado
repetidamente la fecha para completar
el estudio de impacto ambiental.
A pesar que las comunidades locales poseen un
sólido y detallado conocimiento de
su medio ambiente, a veces les falta la competencia científica
necesaria para evaluar y responder
efectivamente a los estudios técnicos y a las afirmaciones expuestas
por los proponentes del proyecto minero. Esto es particularmente
cierto en Tambogrande, donde no ha habido
antecedentes de una historia minera.
Para apoyar la capacidad de las comunidades
locales para medir los impactos potenciales
de la mina Tambogrande en sus aguas, tierras y sus medios de sustento,
Oxfam América, el Centro de Política Mineral (Mineral Policy
Center) y el Concejo de Minería del Medio
Ambiente de Columbia Británica (Environmental Mining
Council of British Columbia) apoyaron la visita al área del Dr.
Robert Moran, un hidrólogo y experto
reconocido internacionalmente en el campo de los estudios
de los impactos ambientales de la minería. El objetivo del trabajo
del Dr. Moran fue proveer un estudio
independiente de los impactos potenciales en la
calidad y cantidad del agua en la región –un tema de particular
preocupación dada
la importancia de la producción agrícola en la economía regional.
Los resultados de la investigación del Dr. Moran
se presentan en este informe. Entre
las conclusiones del Dr. Moran se encuentra que los estudios
ambientales presentados hasta ahora por
Manhattan Minerals son inadecuados en aspectos fundamentales.
La información [presentada en este tipo de estudios] es esencial
para diseñar adecuadamente las medidas de
prevención de los impactos y reparación
de los mismos. Adicionalmente, el Dr. Moran concluye que dadas la
geografía y geología del sitio propuesto para
la mina y teniendo en cuenta la historia
de explotación minera a tajo abierto, los impactos ambientales
negativos son inevitables en la región de
Tambogrande, a pesar de las afirmaciones en contrario
vertidas por la empresa Manhattan y los reguladores del gobierno
peruano. Debido al potential de contaminación del agua, el suelo y
las cosechas, el Dr. Moran duda que la
producción minera y agrícola puedan operar una junto a
la otra, como lo afirma la empresa.
El gobierno peruano y la empresa Manhattan han
dicho ambos públicamente que
no procederán con el proyecto si la población local se opone.
Nosotros estamos de acuerdo que el
proyecto no debe seguir sin el consentimiento informado
de la comunidad. Tal consentimiento y una revisión rigurosa medioambiental
son condiciones previas esenciales para cualquier proyecto minero,
ya sea en Norteamérica o Perú. El estudio del Dr. Moran, además
de la oposición al proyecto demostrada
por miles de ciudadanos locales, sus representantes
electos y sus autoridades religiosas, indica que en Tambogrande
existen razones para dudar que, al menos, una de
estas condiciones se pueda cumplir.
Oxfam America |
Centro de Política Minera |
Concejo de Minería
Medioambiental de Columbia Británica |
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Robert
E. Moran, Ph.D. Water
Quality/Hydrogeology/Geochemistry, 501 Hess Ave., Golden, CO 80401
U.S.A., Phone: (303) 526-1405, Fax: (303) 526-2678, Internet: remoran@aol.com
©Agosto de 2001 por Robert Moran para Oxfam America, Mineral Policy
Center y Environmental Mining Council of British Columbia. |
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